Nerta Haddok

-Helios! Maldita sea.....Helios!-

Exclamó furiosa y alzando la voz una mujer joven con la piel pálida y el cabello largo, semi ondulado, que pisaba con fuerza cada escalón de ese castillo dorado, hasta llegar a la cima.

-Oh Selene que 'grata' sorpresa que estes por aquí-

-ahorrate tu formalidad barata, ¿me podrías explicar por qué mi dulce creación está congelando medio planeta?! Sé que tuviste algo que ver, Tot se ha estado moviendo mucho últimamente y no ha sido por ordenes mías-

Levantando sus manos en son de inocencia y miró divertido a su compañera. La sonrisa de Helios se tornaba burlona y esto hizo que el ceño fruncido de la mujer se hundiera más en sus finas pestañas.

-No tomé acción directamente, mi amor. Solo arreglé tú desastre, mira que crear el invierno para que vague solo por todo el mundo ¿Esperas qué las cosas que mueran por su culpa revivan solas?-

- Primero, no soy nada tuya. Segundo, tenía todo un plan para crear espíritus en apoyo de Jack..¡no tienes ningún derecho a tomar a un niño humano que cree....!-

- ¿Qué? ¿Esperanzas y sueños? Ese niño vivía en la realidad: monstruos, miedo y desprecio. Era demasiado como para caer en tus manos ¿Te recuerdo a cierto espíritu oscuro que ahora atormenta niños? Él es como yo, brilla con luz propia... ¿Será qué tienes miedo de que yo gane está guerra? La primavera vence al invierno, es decir que te voy ganando princesa-

-Ni un poco.... sabes que siempre creerán en mi como su creadora... no me quitaras eso-

Se dio la vuelta y se alejó del rubio. Creyó que tal vez romper las escaleras del castillo en finas capas de cristal sería suficiente castigo para el dueño de sus lamentos.

***

"Al despertar lo primero que vi fue el sol. Sentía mi cuerpo arder y mi corazón palpitar con fuerza.... ¿Qué hacia yo en aquel lugar tan gélido e inhóspito? ¿Quién era yo? No había respuesta. Necesitaba algo...pero no sabía qué. ¿Por qué nadie me daba una respuesta?¿Qué se supone que debo hacer aquí?"

Se levantó con cuidado. Sus pies descalzos chocaron contra el piso muerto y congelado y este comenzó a revivir, produciendo hierbas pequeñas. Sus ojos por fin se aclararon y pudo observar con detenimiento su alrededor, también lo que llevaba puesto en ese momento, su ropa estaba hecha pedazos, apenas tenía con que cubrirse, y en sus manos un anillo negro muy detallado, que le causaba un poco de nostalgia sin saber el porqué. A pesar del frío constante, su piel se mantenía cálida y esto le resulto.... interesante.

Notó rápidamente que cada que daba un paso el hielo y el frío se alejaban y empezaban a brotar pequeños brotes de hierba. Y por este motivo, el aburrimiento provocó que su actividad durante todo el transcurso de las semanas sea el de caminar y quitar el frío del pequeño lugar, una isla al parecer, y reemplazarlo por un diminuto bosque naciente.

Eso hasta que el territorio se acabó. Ya no había ningún punto blanco en aquel pedazo de tierra y Hiccup quedo arrinconado en un pequeño sector sin vegetación, el lugar donde despertó.

-y ahora qué?-

-Joven Nerta-

El castaño se puso alerta. Detrás de él un hombre con una túnica y un libro se hizo presente mostrándole una cara de compasión. El mayor suspiró algo decaído, sin lugar a dudas el trato su hizo con el castaño era el asunto a tratar.

-¿Quién er...-

-Si!...te interrumpiré porque ya tuvimos esta conversación joven, al parecer nuestro trato se cumplió con todas las condiciones... me alegro y me entristece-

-No entiendo-

-Intercambiar tú alma por amor es de valientes joven; sin embargo, ahora debes cumplir tú parte del trato-

Sus ojos empezaron a quemar y su cuerpo se encendió por completo: alas y apéndices extraños comenzaron a aparecer en su cuerpo.

-¿Qué es lo que me estas haciendo?!-

***

Los años pasaron en un abrir y cerrar de ojos. La melena castaña surcaba los aires extendiendo sus alas y estirando su cola, se sentía libre al volar por todo el mundo. Pero aún había algo que lo ataba y, en ocasiones, atormentaba y no sabía que era. Y haría cualquier cosa para averiguar que le falta.

***

-Habla ahora Pitch-

-nnnghh deahgg-

Debajo de la tierra en una prisión hecha con sombras y polvo negro El Coco era severamente ahorcado por una mano delgada y pequeña.

El castaño mantenía sus ojos verdes amenazantes frente al "amo de las pesadillas" y luego de un chasquido de su lengua lo soltó.

-¿Tú, quién rayos eres?!-

-Nerta, un simple espíritu-

-¿Nerta? Diablos eres uno de los cuatro, debí suponerlo...despues de todo Frost fue un dolor en el trasero-

-¿Me conoces?-

-Claro que si....lo juro..-

-Si no hablas, te prometo que no quedará nada de ti-

Con solo dos movimientos de la mano del castaño las cadenas de pesadillas que ataban a Black desaparecieron. Este cayó al suelo, y luego de sobarse los nudillos se levantó para encarar al castaño.

-Bien...supongo que sabes lo básico-

El de ojos esmeralda asintió en afirmación y esperó a que el pelinegro continuara.

-Escuché algunos rumores.. antes de que fueras un espiritu se rumoreaba que conocías a un miembro de los guardianes-

-¿Eso es todo?-

-si..bueno solo quería que me liberaras... ¿sin rencores, verdad?-

Pitch camino unos cuantos pasos tratando de escapar de esa prisión subterránea que su vieja amiga Luna le construyó. Pero unas cuantas raíces lo tomaron del tobillo y lo sujetaban con fuerza, así mismo también lo sujetaron del cuello y de los brazos casi arrancándole las extremidades.

-Si... respecto a liberarte....yo nunca lo hice en verdad solo reemplace tus cadenas por unas más resistentes. Así los guardianes tal vez me deban un favor-

Con una sonrisa maliciosa el castaño salio de ese lugar mientras el espíritu corrupto gritaba furioso el nombre de su nuevo carcelero. Y antes de alejarse por completo una raíz tapó la boca del prisionero, inmovilizándolo por completo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top