La desigualdad del mundo era subjetiva, para las personas privilegiadas de la sociedad era algo que ya no existía, aunque en términos simples era algo relativamente cierto, el clasismo era algo complicado de ver en estos días, la xenofobia era algo controlado y, por ende, ya no era muy vista tampoco, el racismo desapareció con el tiempo, con la guerra que hubo por la aceptación de los dones lo menos que tenían para preocuparse era el color de piel de otra persona.

Pero... ¿Qué opinan las personas que están debajo de aquellos que piensan que ya no existe la discriminación? para otras personas esta era la época más racista de la especie humana, tu status en la vida dependía de tu suerte al nacer, las personas con un quirk o familia fuerte podían aspirar a grandes cosas, prácticamente tenían la vida en modo fácil, las personas con un quirk de tipo mutante eran discriminadas a más no poder, muchos se veían obligados a esconderse de la sociedad, las personas con un quirk débil eran constantemente rebajadas, sus oprtunidades se veían opacadas por las personas con quirk fuerte, con pocas oportunidades de salir adelante, la sociedad ahora no se separaba en raza, sexo o ideologías, no, ahora tu nivel en la sociedad era determinado por el valor de tu quirk, entonces...¿Qué pasaba si no tenías uno?

Este factor se le conoce como "quirkless" el estado más bajo de la sociedad, no importa si es fuerte o débil, si una persona tiene un quirk y tu no, casi siempre seras juzgado y rebajado por ellos, el no tener quirk era sin dudas una maldición, tu progreso en la vida se veía completamente frenando desde los 4 años, condenados a una vida miserable y llena de rechazo, ese era el destino de los quirkless, esas fueron las conclusiones que alcanzó por si mismo Izuku Midoriya, el protagonista de esta historia.

El peliverde se encontraba caminando devuelta hacia su hogar, había tomado un atajo para llegar más rápido y evitar encontrase con bakugo por si este lo seguía, Golden Experience lo seguía de cerca, curioso por su actitud, hace tan solo unos minutos había demostrado una valentía y determinación excepcionales, además de una admiración enternecedora por los heroes cuando vio como detenian a un villano por una avenida cercana, ahora el chico se encontraba bastante nervioso, repitiendo constantemente en su cabeza- Kacchan va a matarme...- parecía bastante asustado por lo que se decía a si mismo, aterrado por su propio pensamiento, no se percató de lo que había salido de una alcantarilla y se aproximaba a él.

-Maldición, no esperaba que alguien como el estuviera aqui, tendre que usarte a ti para huir, lo siento chico- ahi fue cuando el pecoso se percató de que estaba en peligro, rápidamente esquivó un tentaculo de una sustancia liquida que se dirigía hacia el de frente, pero no pudo esquivar el segundo ataque que vino desde su izquierda, tras esto fue envuelto en más liquido viscoso que rodeó su cuerpo con excepción de su cabeza- gracias por esto, eres mi heroe- la sonrisa que le dedicaba era repugnante, cada segundo iba perdiendo más aire mientras el liquido verdoso ingresaba por los orificios de su craneó.

-(¡Maldición! estoy empezando a perder la conciencia, piensa en algo izuku)- el agarre del liquido sobre su cuerpo se hizo más intenso-(no puedo morir aquí, ¡Tengo un sueño que cumplir!)- aunque el aire le faltaba logró golpear un ojo del villano baboso, un grito de su parte no se hizo a esperar, el villano se retorció y lo soltó por un instante, instante que aprovechó para tomar distancia del moco, estaba listo para escaparse hasta que escuchó un grito que lo alivió y emocionó al mismo tiempo 

-No temas joven, ya todo esta bien ¡¿Sabes por qué?! ¡Por que yo estoy aquí!- ante el peliverde y el villano se posaba un hombre rubio, una altura imponente y una musculatura prominente, una sonrisa en su cara, y 2 mechones rubios que parecían antenas en su cabeza- ¡Texas...-

-¡Maldición!- el villano intentó huir y, al mismo tiempo, atraer al peliverde para usarlo como rehén en caso de no poder escapar- ¡No me atraparás maldito heroe!- gritó con miedo el baboso

-¡Smash!- De un golpe instantaneo, la presión del aire dispersó al villano en muchas partes, la fuerza que desprendía el hombre con su mera presencia era, entre otras cosas, aterradora

-¡All Might!- la fascinación del oji verde era clara al ver a este hombre, el stand pudo entender el por que perfectamente, se notaba claramente que el chico admiraba a los heroes, y el ente dorado conocía a este hombre, era el simbolo de la paz, Toshinori Yagi- Oh dios no puedo creer esto, ¡¡estoy frente al heroe número 1!!- el peliverde se veía dichoso, a pesar de haber sido atacado hace prácticamente unos instantes, no podía estar más feliz al ver a su ídolo de toda la vida.

El recién nombrado estaba recogiendo los restos de baba que estaban regados por el suelo y almacenandolos todos en una botella de plastico, después procedió a mirar al chico con su caracteristica sonrisa- JA, da gusto ver a un joven fanático tan entusiasta-le dio un ligero empujon en la espalda como una forma de mostrarse amigable- bueno tengo que ir retirandome chico, el crimen no descansa, y yo tampoco- el rubio se preparó para saltar e irse del lugar, pero fue interrumpido

-¡Espera All Might! yo...- el pecoso fue interrumpido abruptamente

-No te preocupes joven, ya firmé uno de tus cuadernos, pero en serio debo irme- nuevamente fue interrumpido y tomado del hombro, se giró con molestia, de verdad tenía que irse rápido antes de verse envuelto en más problemas

-¡No me interesa! no me importa nada de eso, por favor, solo quiero que me respondas una pregunta...- su mano fue apartada con violencia, el simbolo de la paz parecía bastante irritado con esta situación

-¡No! lo siento, pero no puedo hablar- el heroe se despidio bruscamente y saltó, creyendo que por fin se había librado de esa situación tan peligrosa, no podía arriesgarse a que un joven descubriera su secreto y lo revelara al mundo, los villanos ahora podrían crear metodos de ataque para cuando el no pudiera actuar, después de todo, su tiempo como heroe era muy limitado 

-(No me rendiré, no puedo quedarme con esta duda en mi corazón) fue lo que pensó el peliverde antes de aferrarse a la pierna del rubio antes de que saltara, ahora se encontraba surcando los cielos junto al heroe número 1, seguramente de la forma más incomoda posible, Golden Experience se vio obligado a emprender vuelo junto a los otros 2, esta historia se volvía cada vez más intrigante y el peliverde le recordaba cada vez más a su viejo amigo.

-¡No voy a ser derrotado tan fácil!- el viento le golpeaba casi corrosivamente la cara, la altura a la que se encontraba era bastante intimidante, un solo desliz y todos sus sueños terminarían ahí mismo

-¡¿Sigues aquí?!- 

Tras ver la situación el heroe se vio obligado a aterrizar en una azotea del primer edificio que enfocó, ya no le quedaba tiempo, tendría que explicarle al joven la situación y rezar por que su secreto permanezca como lo que es, un secreto. El humo lo envolvió tras unos segundos de aterrizar, no tenía escapatoria.

El brocoli viviente observó como de entre el humo empezaba a aparecer la figura de un hombre excesivamente flaco y consumido, parecía el simbolo de la anorexia y las adicciones más que el simbolo de la paz, por lo que pudo deducir 2 cosas, la primera, el flacucho frente a el era el mismisimo All Might, la segunda, el heroe que todos conocían como All Might no era más que una transformación de este hombre, aun así, con la esperanza de que estuviera equivocado, se atrevió a preguntar- All Might es... ¿Una transformación?-

Al rubio lo sorprendió un poco que pudiera deducir eso- más o menos... sera mejor que tomes asiento, tengo mucho que explicarte- así el simbolo de la paz procedió a explicarle como en antaño lucho contra un muy peligroso enemigo que se vio obligado a matar, pero el villano fue lo suficientemente fuerte o astuto para ocasionarle dicha herida- Perdí varios organos y parte de mi sistema digestivo, debido a esto mi tiempo como heroe esta limitado a solo 3 horas al día, te pido por favor que guardes mi secreto, no sabría que hacer si esto sale a la luz.

-No se preocupe, su secreto está a salvo conmigo, nada de eso afecta mi imagen de usted, después de todo, musculoso o anorexico no quita que usted fue el que realizó todos los actos heroicos de su carrera- el peliverde le sonrió al hombre, la sonrisa fue correspondida- así que a cambio de mi silencio, le pido que responda una simple pregunta.

-¿La cuál es...?- el rubio continuó sonriendo, nada de lo que dijera este chico podría ser tan malo (o eso creyó)

- ...¿Puede alguien como yo... un simple chico sin quirk... ser un heroe?- lo miró con suma espectación, el tiempo para el chico estaba congelado, nada importaba más que este momento para el

-...- La sonrisa del simbolo de la paz desapareció en un instante, de todas las cosas que podía preguntar este chico, tenía que decir la única con la cual el tendría que acabar con sus ilusiones para evitar que se lastime-...No- casi pudo escuchar como el alma del chico flaqueó por un instante- No puedo darte palabras de animo chico, sin un quirk estarías expuesto a crimenes demasiado grandes para lidiar solo con habilidades básicas, el mundo de los heroes es un lugar cruel, un lugar al cuál alguien como tu no debería entrar- ya no podía verlo a la cara, pero de reojo observó como el peliverde también agachó la mirada- Si aun asi deseas ayudar a los demás, puedes ser un policia o doctor, puede que su trabajo no sea tan aclamado, pero son igual de importantes que los heroes, lo siento, pero no puedes ser un heroe-

-Ya... veo- el peliverde levantó la mirada con una sonrisa de suficiencia en su rostro- Así que ni el heroe número 1 está excento del racismo de la sociedad ¿eh? está bien, no me importa, con o sin quirk, cumplire mi sueño y cambiaré este mundo- All Might abrió los ojos impresionado, no esperaba esto, esperaba una reacción violenta o lastimera, no esto, aunque la sonrisa era claramente forzada ya que el peliverde ni siquiera se atrevia a mirarlo a los ojos, le impacto lo que dijo el joven, supuso que quizás había usado las palabras equivocadas para explicar su punto.

-Joven yo n- el peliverde levantó la mano para indicarle que se detuviera 

-Vayase- el peliverde aun sonreía a la nada, no quería verlo, dudaba de poder mantener su acto mucho tiempo- Por favor...-

El simbolo de la paz no dijo nada más, esperaba poder encontrarlo después cuando estuviera más tranquilo y aclarar mejor las cosas

-Así que el también...- se acercó a la varanda de la azotea, a pesar de que seguía sonriendo, ahora mirando al cielo, ya no podía frenar las lagrimas que amenazaban con salir de sus ojos- Mantente determinado Izuku Midoriya, tu serás quien cambie este mundo-Ahora miraba hacia abajo, estaba bastante alto, las lagrimas empezaron a caer hacia ese abismo, reproduciendo en su mente las palabras que tanto le dolieron "no puedes ser un heroe"- ...Mantente determinado- las palabras de Bakugo empezaban a hacer eco en su mente, lanzarse de donde estaba no sonaba tan mal ahora mismo-...Mantente determinado...-las lágrimas no cesaban, su determinación estaba flaqueando, dudas de su camino empezaban a formarse en su mente y corazón, la sola idea de ser rechazado incluso por su más grande idolo lo dolía intensamente.

Sin darse cuenta pasó un pie por encima de la varandilla, su cuerpo traicionaba la convicción de su alma, el viento soplaba cortantemente, haciendo que cerrara los ojos mientras su cabeza estaba gacha, todo el resentimiento que sentía invadía sus pensamientos -¿será que me equivoqué? alguien sin quirk no puede cambiar este podrido mundo...- pasó la segunda pierna por la varandilla, ahora solo sus talones estaban apoyados en algo solido, mientras con ambas manos sostenía la varandilla detras de el- quizás el tenga razón, y lo mejor es acabar con todo esto...

Sabía que era hora de intervenir, el stand tenía que hacer algo por este chico, toda esa resiliencia que demostró anteriormente había desaparecido para dar paso a un joven roto, no permitiría presenciar el suicidio de alguien tan joven, aun tenía mucho por lo que vivir, con decisión apoyo su mano sobre la cabeza del peliverde, el de orbes morados nuevamente pudo sentir las emociones de a quien tocaba, lo que fuera a decir no se lo diría al chico, se lo diría directamente a su alma-Mantente determinado Izuku Midoriya, tienes un sueño que cumplir ¿no?- fue lo unico que necesitó el peliverde para reaccionar, ¿Qué diablos estaba haciendo?

Sintió como una subida de motivación se introducía en si mismo, con emoción renovada se secó las lágrimas y miró al cielo- Solo espera mundo, seré el heroe capaz de cambiar esta sociedad y corregir sus errores- sus labios se torcieron en una leve sonrisa que se dedicó a si mismo- ¿Qué importa lo que piense el simbolo de la paz? solo es un viejo decrepito, yo soy quien decide si puedo o no ser un heroe- Rápidamente retrocedió lo poco que podía, estaba a punto de darse la vuelta para cruzar nuevamente la varandilla y salir del techo, ahora con la intención de planear como salir del edificio sin ser sospechoso, o al menos esa era su intención, hasta que...

...Fue empujado de la azotea...

El tiempo se detuvo para el, ¿De verdad el mundo era tan cruel? ¿No tenía ni siquiera el derecho a soñar? ¿Este sería su castigo por querer cambiar al mundo? Ni siquiera logró ver quien o que lo había empujado, solo podía mirar hacia abajo, el suelo y su final se acercaban, no quería morir, no debía morir, ¿Qué sentiría su madre al pensar que se suicido? no deseaba imaginar ese caso, Izuku Midoriya no podía terminar su historia aquí...

Golden Experience se encontraba en un estado similar al peliverde, para ellos el tiempo iba tan lento que parecía no moverse en lo más minímo, a una velocidad alucinante apareció en el suelo donde iba a caer el peliverde ¿Qué podía hacer? su cuerpo no podía tocar nada, atrapar al peliverde solo sería el como tragicomicamente lo atravesaba para que el suelo se encargara de recibirlo, decirle algo a su alma no serviría tampoco, ¿De que servían palabras de animo cuando estas cayendo al vacio? ¿Le despertaría poderes a base de elogios en plena caída?... Eso era lo que tenía que hacer...

Voló rápido y se posiciono al lado del peliverde, Su cuerpo dorado temblaba, casi vibrando, por primera vez sintió algo en su frente, sentía que podía retirarla de su cuerpo por fin, era consciente de que posiblemente desaparecería de la existencia después de esto, pero no importaba, sabía que si podía hacer lo que estaba a punto de hacer, es que esta era la voluntad de la flecha, la voluntad del deseo de Giorno...

Se arrancó la flecha de la frente sin cuidado alguno, la sostuvo entre su mano izquierda con cautela de no incrustarsela otra vez, o volvería a ser Requiem. Pensó en Giorno, su amigo, esperaba que donde sea que estuviera, no tenga ningún problema con esto, pensó en todos estos años que pasó completamente solo sin ningún tipo de interacción, ¿todo había sido para este momento? esperaba que si, ahora le confiaría la voluntad de Giorno a alguien más, todos estos años le hicieron darse cuenta de que el no podía salvar este mundo, el solo era el mediador para que ese deseo se cumpliera, la flecha también lo sabía, por eso pudo quitarsela del cuerpo, ahora estaba claro para el, este era el principio de todo.

-¡¿Estás viendo, Giorno?!- se preparó para lanzar, la distancia era tan corta que no podía fallar, la voluntad con la que cargó todos estos años pasaría a manos de alguien más, este también era el final de todo- ¡Tu deseo no fue inútil! ¡Ahora todo queda en manos de este chico!- lanzó la flecha, se incrustó en el pecho del chico, ahora todo estaría bien, sabía que iba a sobrevivir, por fin podría detener su existencia sin proposito, quizás después de todo esto vuelva a ver a sus amigos, aunque ellos no lo recuerden a el.

Todo esto sucedió en menos de 3 segundos, el chico no sintió el corte de la flecha, después de todo estaba preocupado por su propia muerte, estaba a menos de 6 metros del suelo, cerró los ojos con tristeza y decepción de si mismo, confiaría en que  alguien más cambiara el mundo, ahora el no podría...

El impacto nunca llegó, al abrir los ojos vio que el suelo estaba hundido en un punto pequeño y el, estaba sentado sobre el suelo, a un lado del punto de impacto, no tenía idea de que estaba pasando, estaba seguro de que estaba cayendo y que, con suerte, su cuerpo quedaría en minímo 2 piezas diferentes, alzó la vista, el edificio era tan alto que no podía ni ver donde terminaba, no tenía el más minímo sentido que siguiera con vida, al girar su cabeza se topó con un ser completamente dorado que lo miraba fijamente, el ente se acercó a el y le habló-Izuku Midoriya... has sido bendecido con un poder especial llamado stand, no me queda mucho tiempo como para explicarte, pero quiero que sepas qu- su monólogo fue cortado por distintas grietas que empezaban a aparecer por su cuerpo-...Que nada de lo que has hecho hasta ahora ha sido inútil, ahora cargas con la voluntad de un viejo amigo mio, asi que, por favor...- las grietas ahora se formaban en su cabeza, no habia extremidad que no estuviera resquebrajada, el tiempo se terminaba- Por favor cambia este mundo, tienes la determinación y ahora, el poder necesario para ello, debes vivir, tu vida no es solo tuya, muchos dependen y dependeran de ti, no lo olvides, serás aquel que cambie este podrido mundo...

El peliverde se abstrajo de decir cualquier cosa, se notaba que lo que sea que le este hablando estaba en las ultimas, no tenía el valor ni el descaro para negarle a alguien sus ultimas palabras, la mitad de cosas que dijo el ser dorado no tenían ningún significado claro para el, pero estaba claro que lo que intentaba era informarle algo y motivarlo, el mensaje, aunque confuso, estaba claro como el agua- ...Gracias por salvarme- fue lo único que atino a decir el pecoso, aún era dificil de procesar todo lo que esta pasando.

El ente asintió a lo antes mencionado, se giró hacia el cielo y avanzó tranquilamente- Una cosa más,guarda esa flecha con tu vida, no dejes que nadie nunca la toque, será algo que quizás te sirva después- sin darle oportunidad al pecoso de hablar, se elevó aún más hacia el cielo- ¡Adiós Izuku Midoriya! ¡Espero que seas el número 1!

-¡Espera! ¡¿Qué se supone que tengo que hacer ahora?!- el pelos de brocoli fue ignorado olimpicamente

El ser dorado se alejo tanto que ahora solo se podía distinguir una silueta oscura frente al sol, a pesar de la luz cegadora del mismo, no apartó la mirada en ningún momento de la estrella "Frente a el"- Finalmente descansaré, jeje aunque en realidad no hice nada- pasó algo que ni siquiera sabía que era posible, sintió humedad recorrer su cara, al tocar sus facciones, se encontró con que estaba llorando, no pudo evitar ver como su mano estaba llena de grietas y se empezaban a ir con el viento, como si fueran polvo- Supongo que soy más que una simple marioneta para pelear ¿Quién lo diría?- Volvió a sonreirle al sol con nostalgia- aunque no hice mucho por este mundo como tu hubieras querido, me siento satisfecho- su cuerpo se estaba haciendo polvo a una velocidad alarmante, ya no le quedaban piernas, y la punta de sus dedos también habían sido arrastradas por el viento, solo le quedaban segundos en este plano, aunque eso al dorado no podía importarle menos- Oye Giorno... ¿Crees que lo hice bien...?- preguntó al sol, sin esperar ninguna respuesta en particular, solo sonrió, sonrió como nunca antes lo había hecho, la fragmentación no tardó en consumir su cabeza, y con eso, consumió también su existencia.

El fin de Golden Experience fue recibido con una sonrisa de suficiencia en su rostro, si es que llegaba a ver a sus amigos a donde sea que fuera a parar, tendría mucho que contarles...

Izuku Midoriya, el joven peliverde de 15 años de edad, miro callado la escena frente a sus ojos, lo que sea que fuera ese misterioso ser sacrificó su vida para que el viviera, ese ser tenía razón en una cosa, su vida ya no solo le pertenecía a el, tomaría las palabras de ese ser dorado y las cargaría sobre su espalda, por él, por su madre, por todos los que algunas vez le han importado y, por Golden Experience, que aunque desconocía que ese era su nombre, por ellos, Izuku sería el mejor...