Cierto hombre había entrado a un callejón sin salida, sin saber que su vida cambiaría después de ese encuentro.

-¿Quién eres y por qué me buscas?

Un adolescente de cabellera verdosa con ojos del mismo color, fruncía el ceño, mientras levantaba sus cuchillas para atacar, en cualquier momento, a la persona que lo venía siguiendo desde que salió de su guarida.

-Vengo a hablar con usted, joven. -Dijo con una gran sonrisa.

El verdoso se impresionó al darse cuenta que no estaba frente a un humano, más bien, parecía ser la combinación de oso con ratón. Creyó haberlo visto antes, ya que alguien como él sería difícil de olvidar, más por su forma que por otra cosa.

-Debe haber dinero de por medio si quiere mantener cuatro oraciones completas conmigo.

-Lo hay. -De la nada, una maleta rectangular cayó del cielo, cosa que sorprendió al joven.

-Pensé que éramos solo tú, yo y ese par de atrás que creen que no los vi. -De pronto, agachó la cabeza, a la vez que daba una sonrisa maniática-. Me duele esa falta de confianza.

-No soy tonto, sé de buena fuente que con un par de héroes no sería capaz de detenerte. -El mitad roedor imitó la acción, generando que ambos reventaran en carcajadas.

-Entonces... -Dio un vistazo a las filas de dólares que estaban en el maletín-. ¿A quién debo matar?

-No busco tus servicios de asesino.

-¿Qué? -Para él, algo olía mal-. Creo que no se informó del todo bien. -Lanzó una de sus cuchillas que pasó rozando el rostro del roedor-. Mi fama viene por la sangre que derramo. -Agregó-. También por el mito que me acosté con casi todas las prostitutas de la ciudad sin haber pagado un puto dólar, pero eso es aparte.

-Créeme que lo sé. -Seguía sonriendo-. Sé como operas y cuáles son tus objetivos preferidos.

-Si lo sabes, repito, ¿a quién debo matar?

-No sé trata solo de asesinar a villanos o falsos héroes a diestra y siniestra. -El tipo se acercó dando pasos cortos hacia donde estaba el adolescente-. Lo que yo te ofrezco es algo mucho más grande, algo que hará que todo Japón esté fuera de peligro y tú puedas descansar.

El ambiente se puso tenso, más por la mirada seria que el adolescente mostraba. Los héroes escondidos dudaron varios segundos entre salir y atacar o quedarse quietos, el aura que sentían solo les generaba miedo, que si ni hacían nada, morirían de una manera cruel.

Por otro lado, el mitad roedor no borraba su sonrisa. Él sabía algo de él, algo que haría que el adolescente no se descontrole y los mate en menos de un parpadeo. Esto, aunque sea poco, los tranquilizaba.

-Si vas a decir lo que pienso... -Nadie se dio cuenta cuando varias sombras se expandían y llegaban a sus pies-. Y si es de coña... -Se relamió el labio, mientras que los guardianes de su futuro contratista temblaban de miedo al verse en peligro-. Los mataré.

-Devil Shadow. -Pero el mitad roedor ni se inmuta-. Te ofrezco acabar de una vez por todas con All For One.

-Y yo aceptaría. -El maletín lo tiró hacia otro lado-. Si usted no fuera el maldito director de la Academia UA, señor Nezu. -Al final, reconoció al espécimen.

-Sé todo de ti, señor Yuudai Takeo y créeme, tengo los medios para detenerte, pero te estoy ofreciendo un trato que nos beneficia a ambos.

-Que sorpresa que sepas mi nombre. -Dijo con sarcasmo. -Ah, sabe qué, haré que esta conversación nunca pasó y me iré, ya que fue el único que ni sudó cuando emití mi aura. -Se dio la vuelta-. Así que puedes irte.

-¿Qué puedo hacer para que aceptes trabajar para mí?

-Si empieza a llover dólares en la autopista, lo pensaría.

-No sé diga más.

Takeo solo escuchaba los gritos sorprendidos y eufóricos que provenían fuera del callejón.

-¡Cariño, baja a la bebé del coche, no habrá espacio para ella cuando recojamos todos estos billetes! -Un hombre gritó.

Nezu rio y el tal Takeo, en su mente, se sorprendió de lo serio que Nezu iba.

-Dije que lo pensaría.

-¿Qué más quieres? -Volvió a preguntar.

-Que lluevan más de esas maletas con fajos de dinero ahora mismo. -Y otra vez, de la nada, varias maletas cayeron al suelo. Alguna que otra iba con dirección al adolescente.

-¿Algo más, señor Yuudai?

-No me provoques. -Chistó molesto. No iba a aceptar, pero le pareció admirable la forma en la que Nezu se había preparado para enfrentarlo-. Si llueve, escucharé su plan y si me gusta aceptaré.

No obstante, no tenía ganas de involucrarse con él. Es más, si lo hacía, algo le decía que se volvería vulnerable hacia él mismo.

Pero eso era lejano, ya que es una noche de verano, en una ciudad donde no ha llovido en más de dos meses.

-¿Qué puede malir sal? -Takeo susurró.

-Tú lo pediste.

Y de la nada, gotas de agua caían en toda la ciudad, empapando a toda persona que no estuviera debajo de un techo.

-¡Qué puta broma de mierda es esta!

-Bueno, eso no estaba en mis planes. -Confesó Nezu-. Bueno, Yuudai Takeo, te quiero hablar de la iniciativa Libertadores.

-Directo al grano, por favor.

-Como gustes. -Asintió-. Durante mucho tiempo he buscado la manera de eliminar a All For One, tanto así que hubo muchas bajas como Nana Shimura, hasta el mismo All Might, que tú, más que nadie sabe sobre su estado.

-Era solo un rumor, pero me lo acabas de confirmar idiota.

-Lo ibas a saber de todas formas. -Le restó importancia-. El caso es que él está planeado algo, algo muy grande que podría acabar con la sociedad y para eso necesitamos tu ayuda.

-¿Cómo lo saben?

-Tenemos un informante con ellos. -Nezu recordó al héroe número tres, su ex alumno plumífero-. Es de confianza.

-¿Y qué quieren que haga?

-Tu sola fuerza no es suficiente, necesitamos todo de ti.

-Las putas están a la vuelta, mis servicios no son sexuales. -Se sentó en el mojado suelo-. Si dice que viene de mi parte, le darán un descuento.

-Que gracioso. -Nezu se reía, aunque parecía que lo hacía a propósito-. Cuando me refiero que necesitamos todo de ti, me refiero a tu mente.

-¿Usted no era el hombre más listo del país?

-Lo soy, pero por mis obligaciones fuera de la institución no me permiten enfocarme al cien por ciento de los alumnos.

-Carajo, me quiere como niñera. -El peliverde se lamentó de haber considerado aceptar. Su trabajo iba a ser cuidar de niños con aires de héroes-. No gracias, pero le recomiendo a Susan del prostíbulo del frente, ella no discrimina el sexo y cuida bien de niños y niñas por igual.

-Necesito que nos ayudes a formar mejores héroes en esta generación. -Nezu fingió no haber escuchado lo anterior-. Por eso quiero que ayudes implícitamente a hacer que esta generación ponga fin al villano más grande de Japón.

-¿Yo qué gano? -Respondió

-¿Las treinta maletas con millón de dólares en cada una no es suficiente?

-Está pidiendo que entrene a futuros héroes que se seguro usarán para detenerme cuando no les sea útil. -Su cara molesta se hizo presente-. No completé la primaria, pero no soy estúpido.

-Eso lo tengo bien en claro, ¿qué más quiere?

-Mi expediente criminal limpió, una casa en sus paraísos fiscales con todas las comodidades, junto a viajes que me permitan conocer el mundo.

-¿Algo más?

-Una hamburguesa en mi mano en menos de cinco seg... -Por arte de magia, la hamburguesa apareció en su mano-. Ag, tiene ketchup. -La botó-. Que mal servicio.

-¿Es un trato?

-Quiero que Luka tenga su propia casa en los dormitorios de la UA.

-Veo que estás a diez pasos delante de la prensa. ¿Y quién es Luka?

De la nada, del cielo apareció un perro grisáceo grande.

-¿Luka es un perro? -Nezu preguntó.

-Vuelve a decirle perro y ni yo podré detener que él te arranque la cabeza.

-Que buena broma. -Volvió a reír.

-No bromeo. -Respondió, imitando las risas del director, a la vez que él, paraba su acto.

-Jum. -Tosió para recomponer su compostura-. Tendrá todo lo que pidió. Así que, sin más que decir, ¿es un trato?

-Advierto que mataré a a cualquiera que sea un inconveniente en mi misión.

-Siempre y cuando no sea alguien relacionado a la academia, el resto, lo dejo a tu criterio.

-¿Cuál es mi primera tarea? -Takeo cerró los ojos, Nezu había ganado.

-Lo dividí en tres fases.

De pronto, Nezu tomó la mano del peliverde, para darle un boleto. Tal acción, Luka no lo pasó por alto, dando un gruñido en señal de que iba a atacar, cosa que Takeo lo detuvo con una sola señal.

«Al parecer es el líder de la manada.» -Pensó Nezu, mientras que le sacaba el dedo medio al gran lobo.

-¿Esto qué es?

-Su entrada para el examen de admisión de la Academia UA. Usted tomará el examen práctico y se encargará de ver quiénes podrán ser útiles para esta misión.

-¿Fase de reclutamiento?

-Cerca, fase de reclutamiento e infiltración.

-¿Inflitrarme en dónde?

-A la Liga de Villanos.

Nezu sentenció, pero tal revelación no asustó a Takeo, él planeaba hacerlo de todas formas para hacer más fáciles las cosas.

-Está bien. Usaré mi contacto para unirme momentáneamente a esas escorias. -El adolescente recordó a su querido casi amigo Deadpool de la salada.

-Sobre lo del reclutamiento, confío en su juicio para elegir a posibles candidatos para héroes.

-¿Y si elijo a un soberbio hijo de puta porque quiero perjudicar a la academia? -Takeo le pareció raro la fe ciega que Nezu le tenía.

-No lo hará. Sé que tu mentalidad es la de cualquier verdadero héroe, aunque sus acciones no tanto.

Mostró una mirada suave, cosa que Takeo le pareció extraño. Es la primera vez que su presencia parecía ser agradable para otras personas, en otras ocasiones, solo con estar presente, era blanco de actitudes detestables hacia su persona.

-No confíe mucho en mí. -Intentando estar estoico ante la actitud del mitad roedor, prosiguió.

-Ya es tarde para esa advertencia. El examen es en tres días, llegue temprano. ¿Tiene alguna duda? -Nezu se disponía a irse.

-¿Quién más sabe de esto?

-Solo usted, esos cuatro héroes escondidos y yo. Es una misión ultra secreta, ya sabe a lo que me refiero.

-Está bien. -Retomó su sonrisa altanera-. Va a ser grandioso ser parte de la Liga de Villanos y de la Academia UA al mismo tiempo como espía.

-Viendo que no hay más detalles, por ahora, de los cuales hablar, me retiro.

-Adiós, Nezu-sensei. -Dijo el peliverde, obviamente en son de burla.

-Un placer hacer tratos con usted, señor Yuudai Takeo. Sé de la misma fuente que usted le desagrada romper una promesa. -Se volteó para irse-. Aunque sigo pensando que Midoriya Izuku es un mejor nombre para usted. -Soltó de repente en el oído del pecoso, evitando así que los demás oyeran.

-¿Cómo dijo?

El peliverde pasó de estar navegando en los miles de planes que usará para concretar su plan a abrir los ojos sorprendido que el director de la UA conociera su verdadera identidad. Esa que tanto luchó por dejar atrás al comenzar su nueva vida de Vigilante y asesino.

-Ya lo dije, investigué todo de usted, no se sorprenda por una simple trivialidad.

Yuudai Takeo, quién es en realidad Midoriya Izuku, quedó parado en su lugar, sin poder decir alguna palabra o realizar cualquier acción. Ese nombre le traía buenos recuerdos que lo atormentaban hasta el día de hoy.

-Uno no puede escapar de su pasado solo porque quiere. -Nezu, de sonreír en toda la conversación, esta vez su semblante era la de una persona mayor seria, dando un consejo de vida a un niño descarriado-. Tiene que enfrentarlo y superarlo. El dinero del mundo no compra la paz que ganará en su corazón si decide hacerlo.

Sin más que decir, el directo de la UA se fue en un carro negro, dejando a Izuku con la mirada perdida y lamentándose, interiormente, de no haberse negado cuando tuvo la oportunidad.

-Qué mierda he hecho.

Esa decisión le traería problemas, ya que estaba de aliado con el mismo diablo.