Adán se encontraba en la oscuridad misma, él flotaba o ¿acaso el caía? Realmente ya no lo sabía el sentía que había pasado mucho tiempo e igualmente no sabía cuántas veces ya había gritado el nombre de su amada con el fin de encontrarla.

Su garganta estaba irritada por tantos gritos exhalados en su búsqueda. El intento correr, pero su cuerpo no le respondió movió sus ojos en busca de luz, pero tampoco le sirvió, esto era malo....

En la oscuridad en la actualmente estaba no era como cuando perdió la vista esto era diferente por primera vez en mucho tiempo volvió a sentir aquella sensación que experimento cuando vivió en el edén sin Eva.

El volvió a sentirse solo...

O eso pensó ya que de repente una voz le hablo, una voz que había olvidado...

-Adán...-Dijo la voz de una niña, una voz que Adam logro reconocer.

-Reginleif...? -Adam pregunto con duda y dolor por su herida en el pecho.

-Si soy yo Adán . -Dijo la valkiria chiquita

-Reginleif! ¡¿Sabes dónde está Eva?!-Pregunto inmediatamente ignorando el dolor que sentía por un momento.

-No, no se dónde está, ahora soy parte de ti, si no lo sabes tú yo tampoco lo sabre...

-Maldición...-se lamentó nuestro querido padre-Donde estoy siquiera? ¿Porque no puedo verte? ¿Estamos muertos?

-Con respecto a la primera pregunta...como dije antes, si no lo sabes tú no lo sé yo, pero sobre las otras dos si tengo una respuesta. La segunda es una simple palabra "Volund".

-Cierto...-Dijo nuestro padre

-Y sobre la última pregunta no creo que estemos muertos. Si lo estuviéramos ni siquiera estaríamos teniendo esta conversación. Lo que quiero decir es que nos hubiéramos convertido en polvo...

-Cierto otra vez....

-Seguimos vivos debido a que aun siento el latir de tu corazón eso y que tu arma sigue intacta. -dijo refiriéndose a la forma en la que se encontraba.

Los dos seres iban a seguir con la conversación que tenían, pero nuestro padre alcanzo el límite...al parecer si estaba cayendo de una gran altura debido a que impacto con el suelo.

-Ouch...-los dos dijeron al mismo tiempo.

-Bueno esto también confirma que estamos vivos. -Dijo Adán.

-Como lo haría? -Dijo Reginleif

-El dolor indica que estamos vivos...-Dijo con una sonrisa.

Reginleif sabia a lo que se refería a nuestro padre, A él le dolía todo...sus pies, sus brazos, su cara, pero sobre todo sus ojos y torso le dolían.

Aún con todo ese dolor trato de checar el área donde se encontraba, pero se le dificultaba debido que aun solo lograba ver oscuridad.

Pero entre tanta oscuridad el padre de la humanidad escucho un llanto....

Un llanto de un niño para ser específico.

Eso despertó su sentido paternal y se levantó sin importarle nada fue en la búsqueda de aquel niño él había tomado una decisión. Adam a protegerlo.

-Adán que haces?!-Reginleif le reclamo

-Un niño...no...un hijo mío está llorando...-dijo poniéndose de pie, aunque con mucho dolor-Puede que Eva este con el también...- trato de avanzar un poco.

Lastimosamente nuestro padre se volvió a caer debido a que su cuerpo estaba malherido.

-Adán pero que crees que haces!? ¡Debes descansar! ¡No está llorando nadie! -Reginleif le dijo en tono de exigencia.

Pero simplemente Adán la ignoro...

Como nuestro padre no podía ver debido a la oscuridad que lo rodeaba decidió usar los otros sentidos que se le habían otorgado.

Sacando aún más fuerza de voluntad se logró parar nuevamente y aguando su oído lo máximo que pudo emprendió su búsqueda.

Los pasos que Adán daba le dolían cada vez más, su cuerpo le suplicaba que parara que descansara, pero el trataba de hacer caso omiso a estas suplicas...

Mientras más se acercaba cada vez más al llanto, más se incrementaba su dolor, sus espasmos, sus calambres musculares y "el regalo de despedida de Zeus" estaba haciendo que todo su sistema nervioso colapsara....

Como su cuerpo no pudo convencerlo, Reginleif trato de hacerlo.

-ADÁN PARÁ! ¡DEBES PARAR! ¡NADIE ESTA EN PELIGRO MAS QUE TU! ¡NADIE ESTA LLORANDO! ¡PUEDES MORIR SI SIGUES ASI!

Adán no respondió.

-MALDITA SEA ADÁN! PODRIAS ESCUCHAR A ALGUIEN MAS POR PRIMERA VEZ EN TU....

-Reginleif....

-QUE?!

-No me pidas que deje de ser un hombre...-dijo nuestro padre mientras caminaba hacia el llanto

Reginleif se quería responderle, pero se quedó callada al por fin escuchar el llanto de un niño, aunque para ella un llanto casi imperceptible

-Acaso es...? -Dijo Reginleif

-Ahí estas...-Dijo nuestro padre con una sonrisa paternal.

Una tenue luz de color verde esmeralda se veía en la distancia era tan pequeña que parecía una estrella en el oscuro cielo de la noche. Nuestro padre avanzo hacia ella con la esperanza de encontrar a Eva o aquel hijo suyo que lloraba y así fue...

Adán se encontraba enfrente de esa luz verde esmeralda, sus ojos por fin podían ver algo...

Era un niño recién nacido el que estaba llorando y sorprendentemente estaba envuelto en una toalla de color azul.

Adán recogió al bebe como solo un padre puede hacer y lo acerco a su pecho para

-No llores...Papá está aquí para protegerte...

Y como si fuera un hechizo o una orden el recién nacido paro de llorar. Adán se sorprendió debió a la acción de su pequeño hijo, pero le alegro que le escuchara, pero lo que le sorprendió aún más fue lo que el pequeño niño abrió sus ojos

Los ojos del niño eran iguales a la luz que lo guio hacia él, sus ojos eran de color verde esmeralda.

Adán esbozo una sonrisa por ver que su pequeño hijo lo veía, de repente el pequeño niño alzo su también pequeño brazo

Adán conmovido movió su dedo que sorpresivamente no le dolía de hecho el dolor que su cuerpo sentía desapareció en cuanto alzo al niño en brazos, pero eso no detuvo su acción.

Adán dejo su dedo cerca para que el niño lo agarrara. El niño logro su cometido logro agarrar el dedo de su padre, pero algo extraño sucedió...

Adán tuvo unas visiones sobre el pequeño que tenía en brazos, vio como convivía con lo que parecía ser su madre, cuando fueron con un hombre con lentes verde y le dijeron una mala noticia, después como el niño lloraba junto a su madre en una silla, de cómo trato de proteger a un niño de otros 3 pero en el proceso lo lastimaron, cuando lo molestaban/golpeaban/maltrataban en lo que parecía ser una "escuela".

Para pasar al estar en el techo de un edificio y acercarse al borde de este...

Adán comenzó a sentir miedo...no por el sino por lo que sentía que el chico estaba por hacer.

-No lo hagas...-Adán dijo en voz baja

El chico se puso en el borde.

-No lo hagas! -Adán grito esta vez

El ahora joven chico solo volteo y susurro algo imperceptible para el oído común, pero para el oído del padre de la humanidad fue como si fuera un grito.

-Quiero morirme...-dijo mientras saltaba del último piso.

-NOOOOOOOOOOO! -Adán grito con impotencia

Cuando Adán grito la visión se había terminado, había vuelto al lugar oscuro únicamente iluminado por la luz que emanaba su hijo que por cierto se encontraba llorando por el grito que dio su padre.

-Reginleif...dime que tú también lo viste...-Dijo nuestro padre mientras temblaba un poco

Reginleif no contesto.

-Reginleif...! -Dijo Adán con un grito ahogado.

-No...no fuiste el único. -Dijo Reginleif con tristeza en su voz mientras se aguantaba los sollozos.

Adán volvió a calmar a su hijo que tenía en sus brazos, pidiéndole perdón por haberle asustado.

-Que haremos ahora? -Dijo nuestro loli valquiria

-Yo lo protegeré...-Adán dijo con determinación-no me importa de que sea yo lo protegerlo entrenare, lo hare fuerte, haré todo lo posible para evitar que eso pase...

Cuando nuestro padre dijo esas palabras el comenzó a emanar una luz azul con dorado desde su pecho y su hijo en brazos hizo lo mismo, pero con la luz verde que el emanaba.

Las luces comenzaron a salir de los pechos de los mencionados y se comenzaron a acercar la una a la otra...

-Adán que esta pasando?!-Reginleif le grito

-No lo sé! ¡Pero no abandonare a mi hijo! -Dijo acercando al niño a su pecho lo más que podía.

¡PROTEJERE A MI HIJO, AUNQUE SEA LO ULTIMO QUE HAGA! -Dijo en tono serio

Al hacer eso las luces de ambos seres se tocaron y comenzaron a unirse como una sola, Reginleif solo pudo observar cómo se fusionaban los colores de cada ser.

Una explosión de los colores antes mencionados sucedió, los colores iluminaron el lugar donde se encontraban.

Y de un momento a otro Adán , Reiginleif y aquel niño habían desaparecido de aquella oscuridad dejando en cambio un lugar con vividos colores...era tan hermoso el lugar que habían dejado atrás que podría compararse con la belleza del edén.

Las palabras que dijo Adán antes de desaparecer retumbaron por todo el lugar....

¡PROTEJERE A MI HIJO, AUNQUE SEA LO ULTIMO QUE HAGA!