Mientras miraba aquellos profundos ojos marrones, Hyungwon sintió que de alguna forma se sentían familiares, que probablemente ya los habría visto antes y ya habría escuchado ese nombre antes, pero por más que indagaba en su mente no había ningún recuerdo claro de ello, y ya había hecho enojar demasiado a ese ser sobrenatural que no sabía exactamente lo que era o lo que quería, pero de todas formas eligió ser sincero.

—Lo siento, aunque digas que nos conocemos yo no me acuerdo de ti. —dijo apartando la mirada. —Quizá si nos hayamos encontrado antes pero, no lo recuerdo y ahora mismo mi cabeza duele mucho.

Al expresar su dolor se llevó una mano a la cabeza justo en la zona donde se había golpeado al caer e inesperadamente recibió una mirada que de no ser porque duró solo un par de segundos, juraría que era de preocupación.

El ser sobrenatural llamado Wonho se alejó de su rostro y miró a su alrededor, y fue en ese momento que Hyungwon se dio cuenta que en algún punto de su conversación, la tormenta había cesado.

—Será mejor que vuelvas a dormir. —dijo con desinterés volviendo al armario como si quisiera revisar que todo estuviera en orden.

Hyungwon lo miró pasearse por el lugar y claramente tenía de todo menos sueño al ver a un ser sobrenatural andando tan tranquilamente por su casa mientras le pide dormir, para hacerle sabrá Dios qué.

—Yo... Ya casi no tengo sueño. —mintió. —En realidad preferiría que me dijeras más acerca de cómo nos conocimos.

Wonho detuvo sus movimientos y lentamente se dio la vuelta para mirar el rostro curioso pero adolorido del chico y caminó hacia él.

—Dormirás. —susurró mientras tocaba la frente de Hyungwon con dos de sus dedos e inmediatamente el delgado cuerpo se desplomó en sus brazos, profundamente dormido.

Con facilidad lo cargó al estilo nupcial y lo depositó con cuidado sobre su cama para finalmente dejarlo dormir.

Para cuando Hyungwon se despertó, los pajaros trinaban fuera de su ventana y los rayos del sol ya se sentían con intensidad. Era un alivio saber que no tendría que trabajar en ese día ya que su cuerpo se sentía un poco pesado, como si hubiera tomado algún narcótico para dormir o como si tuviera una resaca que no recordaba.

Entonces se levantó a hacer su rutina mañanera, a alimentar al gato y a revisar la alacena para hacer desayuno, pero mientras todavía estaba tratando de despertar y de decidir qué desayunar, escuchó el timbre de la puerta. Frunciendo el ceño se acercó sabiendo que no estaba esperando ninguna visita ni ningún paquete, pero antes de que pudiera siquiera revisar de quien se trataba, escuchó el conocido pitido que emitía el cerrojo al poner el código de seguridad para abrir la puerta, y en cuanto dio un paso atrás, la puerta se abrió.

Por un momento le faltó el aire por la sorpresa, pero al ver el rostro conocido trató de recobrar su postura y fingir calma.

—Hyungwon... —le saludó su compañero de trabajo y pretendiente, o más bien, amigo con derecho.

—HyunBae... —dijo fingiendo una sonrisa. —¿Qué te trae por aquí tan temprano? —preguntó mientras miraba al hombre quitarse los zapatos y entrar.

—¿Qué no es obvio? —preguntó levantando unas bolsas con platos desechables dentro. —He traído el desayuno. —dijo con una sonrisa. —Quedamos en salir anoche pero no contestaste a mis llamadas, así que me tomé la libertad de visitarte hoy, desayunar y pasar el día juntos ya que mañana tenemos que volver al trabajo.

Hyungwon asintió con calma.

—Ah sí, tus llamadas... —mencionó sin recordar nada. —Anoche no pude. No me sentía bien.

El hombre puso las bolsas sobre la encimera de la cocina y rápidamente acunó el rostro de Hyungwon.

—¿Qué ocurre? —cuestionó. —¿Estás enfermo?

Hyungwon apartó sus manos con cuidado y negó.

—No, en realidad yo... —de repente los recuerdos de la noche anterior se agolparon en su mente y la presencia del ser sobrenatural apareció en su memoria. —Anoche bebí un poco. Así que no podía salir. —mintió.

El hombre miró a su alrededor.

—¿Bebiste aquí? —preguntó alzando una ceja.

Hyungwon no sabía qué contestar, HyunBae claramente sabía que él era sólo un bebedor social, jamás tenía alcohol en casa, pero decir que no simplemente daría lugar a que pensara que salió a beber con alguien más y no quería malentendidos.

—Sólo fue una cerveza o dos. —mintió. —Me sentía un poco frustrado por el nuevo proyecto, así que bebí un poco y ya sabes que soy muy débil para esas cosas, así que me quedé dormido muy pronto.

El hombre asintió con un poco de duda.

—No importa. —dijo con una sonrisa. —Si no te sientes muy bien, entonces deberíamos quedarnos hoy aquí, voy a cuidar muy bien de ti. —dijo acercándose peligrosamente y rodeando su cintura con un brazo.

Hyungwon miró la acción que de cierta forma era familiar, pero en ese momento estaba tan nervioso y alerta que prefería no tener contacto después de lo que vivió la noche anterior.

—Ya me siento mejor... —dijo entre risas tratando de apartar al hombre suavemente. —Quizá podríamos salir a dar un paseo y volver temprano, ya que tenemos que trabajar mañana temprano y...

HyunBae metió sus manos por debajo del suéter de su pijama y se acercó a sus labios.

—Yo sigo pensando que quedarnos es una mejor idea... —susurró mientras obligaba al menor a retroceder hasta chocar con la encimera. —Después de todo fue tu culpa que no nos vieramos anoche... ¿No deberías enmendar tu falta?

El hombre comenzó a besar su cuello con lujuria y aunque no quisiera, de cierta forma su cuerpo estaba reaccionando a los estímulos, pero su mente estaba intranquila y confusa.

—HyunBae... —le llamó tratando de apartarlo.

—¿Qué ocurre? —preguntó él. —Me seduces, me pides que sea tu compañero sexual pero ahora que quiero follarte, ¿te opones? —sonrió con un poco de sarcasmo. —¿Qué te ocurre, Hyungwon?

El menor miró a HyunBae con los ojos cristalizados y negó.

—No es nada. —respondió bajando la mirada. —Prosigue.

Al recibir el “consentimiento” HyunBae continuó con la tarea que había empezado y comenzó a besar a Hyungwon de forma feroz, mientras lo levantaba para irse a la habitación del delgado, pero justo cuando iba ingresando por la puerta escuchó el gruñido molesto de un gato y los ataques de arañazos que siguieron, sin ser capaz de librarse de ninguno.

Inmediatamente gritó adolorido y bajó a Hyungwon.

—¡Maldito gato! —dijo al ver su pierna con unos arañazos feroces que fueron dados en su desnuda piel, ya que vestía pantalones cortos.

Hyungwon miró las heridas con preocupación y corrió a sus gavetas en busca de lo necesario para curarlo.

—Seguramente pisaste su cola. —dijo con pesar. —Ya me ha pasado un par de veces porque su lugar favorito para dormir es la puerta de la habitación o la cama.

HyunBae miró a Hyungwon e ignoró sus palabras que trataban de identificar la causa del ataque, lo único que sabía es que su piel ardía y sangraba, el maldito gato le daba igual.

El delgado buscó y rebuscó en todos lados, pero apenas pudo encontrar un poco de algodón.

—Lo siento, no tengo nada para curarlo. El gato suele arañarme mucho así que me quedé sin alcohol y gasas. —dijo apenado y asustado. —Si me esperas puedo bajar a la farmacia que queda a una cuadra y...

—No, no importa. —dijo tomando un poco de papel higiénico y limpiando la sangre que salía de sus heridas. —Me voy a casa. Cuídate.

Al oirlo Hyungwon se sintió todavía más asustado y apenado por la situación ya que de cierta forma era su culpa.

—Pero, HyunBae... —le llamó, pero el hombre salió del apartamento mucho antes de que pudiera decir algo más.

Entonces soltó un largo suspiro, pero cuando se dio la vuelta se encontró frente a frente con Wonho, quien estaba apoyado en una pared cercana a su posición.

—¿Quien era? —preguntó con la mirada seria clavada en la puerta, sorprendiendo al delgado.

Al verlo Hyungwon ni siquiera pudo pensar en responder a su pregunta, todo lo que podía pensar era: "¡¿Estuve a punto de tener sexo con HyunBae frente a este tipo?!"

Parecía que su vida nunca más sería normal.

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Resultados de la votación anterior

Opción elegida: #1

Consecuencia:
Mejora de la confianza de los personajes.

Relación de los personajes:
moderadamente buena

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⚠️Sección de votación⚠️

¿Cuál debería ser la respuesta de Hyungwon?

#1) Es simplemente un amigo,
pero ¿qué importa eso?

#2) Es un compañero de trabajo,
nada importante.

#3) Eso no es importante, dime...
¿Por qué sigues aquí y qué quieres de mí?

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¡Cada opción de hoy es una mentira porque nuestro Hyungwon no está preparado para revelar su vida personal a una entidad!
Elijan sabiamente
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