Severus estaba en búsqueda de sangre
Severus esta arreglando sus cosas para la clase del día siguiente cuando un pulso mágico lo hizo detenerse ¿alguna broma salida de control? No entendía porque Dumbledore no le dejaba expulsar a esos gemelos cuando eran claramente un peligro para la escuela y todos en ella.
— Severus. — Le llamó la profesora McGonagall con ligera preocupación en su voz y dejó de hacer lo que estaba haciendo enseguida, tenía un mal presentimiento.
.
Lentamente Draco comenzó a despertar debido a los gritos silenciosos a su alrededor, al abrir los ojos le costó un segundo darse cuenta de dónde estaba, reconocía el techo pero el resto era difícil de decir, habían camillas así que ¿la enfermería? ¿Como llegó aquí? Intento recordar pero pronto un dolor de cabeza la hizo cerrar los ojos.
Lo último que recordaba, era una sombra negra, y antes de eso...
Dolor, miedo.
Por reflejo llevo sus manos a su garganta y se sentó en la cama comenzando a llorar en silencio abrazándo sus piernas.
Ella no podía hacerle daño, no aquí, tan solo fue un mal recuerdo, nada más, otra vida.
— ¿Draco? — Le costó darse cuenta en un principio que le hablaban a él pero al darse cuenta giro la mirada viendo a su tío Sev con el director detrás.
Los gritos debieron ser suyos entonces.
Quiso hablar y decir que estaba bien, pero estaba aterrado de intentar hablar y de que su voz no estuviera de nuevo, por lo que tan solo dejó escapar un sollozo ahogado de nuevo con más lágrimas cayendo por sus mejillas asustando notablemente a su tío
— Oh Draco ¿que paso? ¿Quien te hizo esto? — El pequeño en lugar de responder extendió sus brazos y el mayor pareció entender porque pronto le estaba abrazándo, y aún temblando un poco Draco le abrazo como si la vída le fuera en ello.
Estaba bien, su tío Sev era una prueba de que ya no estaba en ese lugar, de que ella ya no estaba, y de que alguien le quería.
Estaba bien.
O al menos lo estaría.
.
Severus no fue capaz de moverse de su lugar, demasiado asustado de que cualquier movimiento despertará a Draco después de finalmente lograr que se calmara y durmiera un poco. Jamás había visto a Draco llorar de esa forma, de forma tan silenciosa y desesperada como si tuviera miedo de hacer ruido y recibir un castigo, el solo pensamiento de aquello hacía su sangre hervir, de que alguien aterrorizo al pequeño al punto de tener miedo de hacer sonidos al llorar.
Lo peor de todo es que aun ni siquiera sabía que ocasionó tal reacción de su ahijado.
— ¿Que sucedió? — Demandó saber nuevamente Severus viendo al director que fue el primero en llegar a la escena.
— Es difícil saber, para cuando llegue el joven Malfoy estaba inconsciente entre los escombros de un armario. — Contestó el director parecíendo pensar en algo. — Severus, necesito que seas honesto conmigo, ¿Como ha sido criado hasta ahora en lo que respecta a su magia?
— ¿Que? — Pregunto confundido. — Se le ha enseñado lo básico y se ha nutrido como cualquier otro niño pura sangre ¿Porque preguntas?
— Es solo. — Murmuró meditando lo un poco. — Creí ver una sombra, un humo dejando su cuerpo cuando llegue.
— ¿Una sombra? — Arrugó el entrecejo pensando. Sombra, magia, niño mágico y su crianza. — ¿No estarás pensando...? ¡Están extintos! — Grito en voz baja.
— Lo sé, sin mencionar que el joven Malfoy tiene más de 10 años, aunque hubo un caso...
— Hace décadas, Draco ha sido protegido toda su vid—y entonces le pego. En esta vida Draco fue protegido en toda forma posible, pero en la otra.
La incómodidad que tenía durante su pequeña reunión, lo que no podía recordar, esa forma de llorar que Severus nunca le vio antes.
Apretó a su ahijado con más seguridad contra su cuerpo, tenía una teoría que no le gustaba nada.
— Parece que recordaste algo. — Mencionó Dumbledore y Severus se debatió entre decir lo que sabía sobre Draco y su conocimiento de su vida anterior, o averiguar más por su cuenta.
Draco se removió en sus brazos un poco, debía hacer lo mejor para él.
— Draco tiene recuerdos de una vida pasada. — Dijo suspirando un poco. — Por eso habla en lenguaje de señas, y toca el piano, antes solía ser mudo, y hasta donde se, un pianista Muggle.
— Eso es bastante peculiar e impresionante. — Murmuró el mayor. — Debe tener un peso bastante considerable sobre sus hombros.
— Hasta ahora todas sus memorias eran positivas.
— ¿y crees que memorias menos felices pudieron causar esto? — Interrogó con curiosidad.
— No lo sé, tal vez. — Dijo sintiendo se cansado con toda la situación.
— Entiendo, por ahora deberías tranquilizar al joven Malfoy y averiguar de él que sucedió, yo iré a avisar a su jefa de casa que no volverá por al menos un día, y me contactaré con un viejo conocido para hablar sobre lo otro. — Informó y Severus Asintió con la cabeza.
.
La próxima vez que Draco abrió los ojos estaba acostado en la camilla pero su tío está vez estaba durmiendo a su lado sentado en una silla junto a su camilla.
Sus ojos ardían un poco, y se sentía cansado de seguro por llorar tanto, era un sentimiento extraño, nunca fue bueno para llorar y lo evitaba de ser posible, pero quizás Papi tenía razón y a veces no podías evitar hacerlo.
Eso no significaba que se sintiera bien al respecto.
— Tio Sev. — Llamó suavemente sintiendo una ola de alivio al poder escuchar el sonido de su propia voz.
— ¿Draco? — Pregunto despertando rápidamente para sentarse derecho. — ¿como te sientes?—Dijo con una suave voz intentando no alterar lo.
— Cansado. — Admitió haciendo una pequeña mueca pasando una mano por sus ojos.
— Es entendible. — Dijo viéndole con atención. — Se que puede ser algo... Delicado, pero me gustaría saber que sucedió después de que dejaste mi oficina. — Pidió de la forma más amable que pudo.
— El piso estaba sucio, me hizo sentir ansioso, así que entre al closet en busca de un trapeador. — Murmuró intentando concentrarse en los hechos, y dejar el resto en un lugar muy oscuro y lejano en su mente. — La puerta se cerró y alguien me llamó... — Trago salíva mirando sus manos. — Un fenómeno... Y... Recordé. — Prácticamente Susurro lo último mordiendo su labio.
— ¿Que fue lo que recordaste? — Dijo notando la mirada ligeramente vacía de su ahijado y tomó su mano lo que hizo parpadear y prestarle atención.
— Como perdí la voz. — Contestó llevando una mano a su garganta.
— ¿Recuerdas algo más? — Estaba sinceramente preguntando si es que recordaba lo sucedido con el armario.
— ¿Una sombra? No estoy seguro. — Murmuró parecíendo confundido. — ¿como salí del armario?
— El director te encontró y trajo a la enfermería, hoy puedes quedarte aquí o volver a tu dormitorio, no tienes que ir a tu clases mañana si no quieres, y puedo lla—
— ¿Me puedo quedar contigo? — Pregunto de forma tímida.
— Yo... Algo puede arreglarse ¿hay algo más que quieras decirme? — Dijo viéndole con atención y el niño negó.
— Sólo quiero dormir. — Respondió acercándose para abrazarlo y aunque ya estaba grande para esto Severus lo cargo de todas formas, después de un día como este, Draco merecía ser consentido un poco, y luego, Severus iba a cazar al desgraciado que se atrevió atacar a su ahijado.
.
Nota: Volví gente me extrañaron? Yo lo extrañé! Y ya en el próximo capítulo tenemos algo de tejones siendo tejones así que no se preocupen por nuestro pequeño Dragon~ gracias por leer y espero que les haya gustado
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top