Para ser honestos Draco nunca fue bueno siendo un niño, ni en su vida pasada, así que no era ninguna sorpresa que en cuanto terminarán de almorzar y fueron libres para jugar, Draco no tenía idea de a qué jugar.

— ¿Que haces en tu casa? — Pregunto Ron luego de sugerir varios juegos que el rubio no conocía o al menos eso decía, Ron estaba seguro que tan solo no quería jugar con ellos, no que le importara el tampoco quería jugar con un niño con cara de niña, pero su Mamá se enojaria si al menos no hacía el intento y esa mujer podía ser aterradora cuando se lo proponía.

— Estudiar, hablar con los elfos, pasear, y tocar el piano. — Contestó siendo honesto, sabía que para cualquiera de su edad eso podía sonar aburrido, pero Draco realmente era feliz solo haciendo esas cosas y lo sería más si pudiera reducir el tiempo de estudio por más de piano, estaba seguro que ninguno de sus padres lo aceptaría pero hey un niño podía soñar.

— ¿No haces nada más? — Pregunto elevando una ceja, no esperaba mucho de él pero eso sonaba sinceramente triste, Ron al menos podía jugar con Ginny y con los gemelos cuando no estaban en Hogwarts.

Draco esta vez pareció pensarlo mejor, algo que pudiera hacer con estos niños que fuera divertido para los tres o que al menos mantuviera ocupado al par mientras él hacía otra cosa...

— ¿Quieren jugar a Guillermo Tell? — Pregunto y ambos niños le vieron con curiosidad.

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Papá siempre decía que pasaba demasiado tiempo dentro de la casa y que necesitaba más aventuras y aire fresco, por eso fue que tras un año de convencer a Papi, logró que la incluyeran en el viaje anual que realizaba con sus hermanos a un bosque en medio de la nada —Lo que gritaba película de horror si le preguntaban a él —para ir de cacería, y por supuesto Papi convenientemente tenía un compromiso previo por lo que quedó a la merced de sus tíos y Papá.

Si tenía que ser honesto —cosa que nunca fue con su Papá y Tios, Dios sabía a cuántos viajes más le hubieran llevado de saber la verdad — no fue tan horrible como creyó que sería y de hecho aprendió varias cosas sobre cómo sobrevivir en la naturaleza, pero lo que aprendió y se quedó con ella por más tiempo fue la arqueria.

Originalmente solo le llamó la atención, y luego se convirtió en un reto personal cuando su Papá dijo que sí lograba darle al blanco tres veces seguida no tendría que unirse a otro viaje de este tipo si no quería. Paso los siguientes días  después de la apuesta tan solo observando a su tío usar el arco, considerando todos los detalles en su postura, el viento, fuerza y todo lo que pudiera ser un factor que influyera en la trayectoria de la flecha, y al terminar no sólo dio tres veces en el mismo lugar, lo hizo diez veces, esa fue la primera vez que vio a su Papá y tíos abrir tanto la boca cuando no había un pedazo de carne involucrado.

Pero volviendo al presente.

— Esto es imposible. — Se quejo Ronald bajando el arco que Draco hizo con algunas ramas y un cordel que encontraron, era bastante rudimentario, pero hey, estaba trabajando con lo que tenía.

— ¿Me puedes decir de nuevo como era? — Pregunto Ginny tímida y porque Draco estaba aburrido de quedarse a un lado viéndolos fallar fue a ayudarle.

— No veo porque lo intentan, no hay forma de que estos den el blanco, es tonto. — Se quejo el pelirrojo, y Draco Rodó los ojos tomando un segundo el arco de Ginny junto la flecha que eran de ramitas bastante improvisadas.

— Postura, viento, mira. — Les recordó viendo el objetivo que era una manzana no muy lejos de donde se encontraban y disparo atravesando la manzana al primer intento.

—¡Wow! ¡Eso fue increíble! — Celebró Ginny y Ronald se quedó en silencio un segundo antes de preguntar.

— ¿Que tan lejos puedes disparar? — interrogó Ron con interés y Draco elevó una ceja, bueno al parecer si encontró algo que hacer con los niños.

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Si Narcissa debía ser honesta no espero tener mucho de que conversar con la señora Weasley por eso se sorprendió gratamente cuando después de unos segundos de incomodo silencio comenzaron a conversar de forma animada al darse cuenta que ambas sólo querían lo mismo, que sus hijos tuvieran nuevos amigos, y estuvieran seguros.

—¡Mamá! ¡Mamá! Ven tienes que ver esto — Le apuro Ginny tomando su mano para llevarla al patio.

— ¿está todo bien? ¿Alguien está herido? — Pregunto rápido Molly sabiendo que sus hijos tendían a jugar rudo y probablemente el pequeño Draco pudo terminar lastimado por eso.

—¿que? No ¡Draco y Ron están jugando a Guillermo Tell! — Respondió con ambas mujeres compartiendo una mirada.

— ¿Guillermo Tell? — Contestaron ambas sin entender de qué hablaba hasta que llegaron al patio y vieron a Draco con arco en mano y Ron a varios metros de distancia con una manzana en la cabeza.

— Oh por Merlín ¿que están haciendo? — Pregunto escandalizada Molly, pero no interrumpió el juego es decir, Ron estaba al menos unos 20 metros de distancia no había forma en que la flecha de Draco pudiera darle, no con el arco de ramitas que tenía.

—¡Jugando Guillermo Tell! — Respondió Ginny como si debería ser la respuesta más obvia del mundo.

— ¿Ustedes saben arqueria? — Murmuró confundida Narcissa.

— Nop, Draco nos enseñó. — Contestó Ginny y muy bien, esa era nueva información, si era algo que le gustaba a Draco quizás deberían consegu—

La flecha salió disparada derribando la manzana de la cabeza de Ron y las madres se quedaron mudas.

— ¡Te dije que me avisaras cuando fueras a disparar! — Se quejo Ron y Draco solo se bajó de hombros. — ¡Vayamos con 30 ahora! — Dijo dándose la vuelta para tomar la manzana del suelo quitándole la flecha para volver a caminar.

— ¡Oh Merlín Ron! —Grito Molly finalmente saliendo de su sorpresa y aquello pareció tomar la atención de los niños, quien se giraron a ver a sus respectivas madres.

— ¡Hola Mamá! ¿Viste eso? ¡No me moví ni un centímetro! — Dijo como si fuera una gran hazaña mientras Molly corría hasta su hijo para asegurarse de que estuviera bien.

— Draco, me alegra que hayas querido jugar, pero esto me parece un poco... Peligroso. — Advirtió Narcissa mientras Molly revisaba cada centímetro de su hijo en busca de heridas.

— No lo es, no iba a fallar. — Respondió con calma.

— ¿La flecha está encantada? — Pregunto viendo el arco, tal vez Severus le en—

— ¿puedes encantar las flechas? — Respondió con sincera curiosidad y Narcissa se tomó un segundo para ver a su hijo quien al parecer era un prodigio en la arqueria.

Ah... Eso era interesante y... Podía llegar a ser útil.

Por su parte Draco tan solo miró el arco, para ser honestos si extrañaba la arqueria, cuando llegara a su casa le pediría un arco a su Padre, después de todo el bastardo se lo debía por abandonarlo con los Weasley.

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Cuando el día comenzó a terminar todos dijeron sus despedidas y prometieron quedar en contacto, lamentablemente debido a lo cansado que fue jugar con un par de niños Draco se quedó dormido antes de llegar al cine, pero estaba bien, ir con los Weasley no fue tan horrible como creyó que sería y no necesitaba una película para olvidar a los pelirrojos, de hecho fue un buen día... Los Weasley no eran los peores niños que había conocido y tal vez en un par de años podrían llegar a ser conocidos que se saludaran en los pasillos de Hogwarts al pasar junto al otro, aunque no podía evitar sentir que había algo importante que estaba olvidando, oh bueno con su memoria solo era cuestión de tiempo.

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Nota: Aparece un Ron salvaje, y Draco desbloquea una habilidad nueva, que puede o no puede que le ayude en el futuro.

Ya pronto se viene Hogwarts! Y creo que no mencioné esto antes pero Draco no será parte del trío dorado, y aunque estarán haciendo de las suyas este libro esta desde la perspectiva de Draco por lo que lo seguiremos a él.

Ohh y Draco no será una serpiente ¿teorías?