6.

— ¿Seguro que no nos vamos a meter en problemas? —Harry pregunta, bajando la voz con temor. Ambos se encuentran en la parte trasera del colegio, mientras todos están en clases y en el receso. Sentados contra una muralla, cerca del estacionamiento de los profesores, Louis quita su caja de cigarrillos, mirando hacia su compañero, quien tiene las cejas alzadas y los ojos verdes le brillan con un brillo de temor. Louis sonríe con los labios apretados, tratando de no reír.

Después de todo, él posiblemente se veía igual que Harry la primera vez que llegó allí junto a Zayn, el moreno le había dicho que sería divertido, y que nadie les vería porque al parecer ya había estado allí antes, a lo que Louis se había realmente sorprendido de aquello porque para ese entonces Zayn no mentía, al menos, eso creía, y aquello era sólo el comienzo.

De todos modos, la cosa es que Louis comprende a Harry y su temor, no se ve como un chico que fuma a escondidas, pero lo que no te mata, te hace más fuerte ¿no? Si nadie ve, nada pasa. Simple.

—No te preocupes, Harry —él le pasa un cigarrillo. Harry no duda en cogerlo, pero sigue teniendo una línea fantasma que pronto que podría convertirse en una mueca en los labios—. He venido aquí antes ¿bien? Además, no será por mucho tiempo.

— ¿Entonces eres un fumador constante? —Harry pregunta, sin parecer realmente afectado por el comentario anterior, la mueca está allí entonces—. Quiero decir, tú… ¿fumas mucho?

Louis se encoge de hombros, encendiendo el cigarrillo y dando una rápida calada—. Solo cuando estoy estresado, o nervioso —admite, el humo saliendo de sus labios. Observa como Harry hace lo mismo, tranquilo, entornando los ojos con su cabeza ladeada—. ¿Y tú?

—No lo sé —responde, suave—. Supongo que no, pero no puedo dejarlo del todo, tampoco —Harry voltea y lo mira ahora, con la misma expresión—. ¿Te sientes estresado, Louis?

Louis no responde de inmediato, pero en su mente aparece Zayn, su constante problema. Sería tan fácil si Louis sólo tirara la toalla al suelo y renunciara, si se alejara de Zayn y todas sus cosas jodidas; Zayn y sus capas, Zayn y su rabia. Sería fácil, Louis lo sabe, pero simplemente no puede no estar allí para su amigo, porque es eso, después de todo, su amigo, su mejor amigo. Y aunque es un imbécil, y está jodido, es una de las personas que Louis más ama, y no lo puede dejar ir, aunque lo intente.

—Me siento jodido, en realidad —se encuentra diciendo, perdido, olvidando que Harry está realmente a su lado, hasta que éste toca su mano, haciendo que se sobresalte. Se aclara la garganta, sacudiendo la cabeza—. Todos nos sentimos estresados en ocasiones, Harry Styles. Porque somos adolescentes y nuestros problemas suelen sentirse el triple de horribles de lo que en realidad son.

—Sutil —Harry sonríe, casi con admiración. Se vuelven a quedar callados unos segundos hasta que el rizado vuelve a hablar—. Recuerdo que la primera vez que comencé a fumar fue en el último año de secundaria…

Louis no sabe de lo que Harry está hablando ahora, pero lo escucha, casi olvidándose del cigarrillo entre sus dedos.

—Era un año bastante estresante para mí, mis padres no estaban del todo bien y a veces me sentía como una carga constante en sus vidas, parecía como si cualquier cosa hubiera sido mejor que yo. Era un chiquillo, empezaba a besarme con miles de chicas y me escaba en las tardes para encontrarme con mis amigos que eran mayores que yo. Creía que eso era genial, hacer de todo un problema parecía un deber. Estaba tan perdido, ahora que lo pienso, puedo recordar sentarme junto a esos muchachos grandes y sentir el temblor en mis piernas. Aunque era valiente, al parecer, y entonces ellos me decían que cosas como la bebida y el cigarrillo te hacían sentir mejor porque constantemente les hacía saber que odiaba mi vida o algo así, y entonces comencé a fumar y se volvió algo jodido que no pude controlar. Dejé de tener amigos mayores, y me encerré en mi mundo, escondiéndome de mis padres y teniendo sentimientos suicidas, fue una etapa algo abrumadora.

Louis termina su cigarrillo cuando Harry se detiene, tiene un nudo en la garganta ahora, porque nunca pensó que pudiera conocer a chicos como Harry, que contaran historias de su vida como si nada, y aunque Louis no tiene mucha historia, es difícil lograr quitarle información muy fácilmente, pero supone que Harry es así, no teme que la gente opine de su vida.

Harry desliza la punta del cigarrillo por el suelo, apagando el pequeño fuego que aún queda en él, no dicen nada porque no lo necesitan, y por el hecho de que Louis no sabe exactamente qué decir. Otra vez sus pensamientos van en Zayn, y aunque está seguro que su amigo no tiene pensamientos suicidas, aun no ha salido de esa etapa abrumadora de la que Harry habló hace tan solo unos segundos.

— ¿Y luego? —habla, de pronto quiere saber más, y si Harry no quiere hacerlo, él lo va entender, pero aun así se permite aventurar un poco en el tema. El rizado frunce el ceño, pero sabe exactamente a que se refiere Louis.

— ¿Luego de esa horrible etapa donde creía que era el ser humano mas sufrido del mundo? —Harry sonríe al ver que Louis solo ladea la cabeza—. Nada, lo superé. Mis padres volvieron a estar juntos, hacen terapia de parejas y todo eso, están llevándolo bien, al menos no intentan matarse el uno al otro. No volví a tener los mismos amigos, seguí fumando, pero nada que me pueda llevar a un pozo del que no podré salir.

— ¿Lo superaste, eh? —repite, casi ilusionado—. ¿Entonces crees que eso de estar siempre en un universo inexistente es sólo una etapa?

—Para mí lo fue —Harry susurra, alzando las cejas—. Quiero decir, no para todos es así, supongo.

Louis mira sus manos, y espera que lo de Zayn sea simplemente una etapa abrumadora.

— ¿Por qué lo dices? —Harry insiste, jugando con los rizos de su frente un segundo. Louis lo mira atónito, nunca había visto unos ojos tan verdes y brillantes.

—Por nada en especial, Harry Styles —responde, sonriéndole—. Curiosidad.

Se despiden luego, cada uno yendo a su clase para no perder más horas. Louis le envía un mensaje a Zayn simplemente para verificar que todo esté bien, él le responde que se ha ido a su casa y que no se preocupe. Louis sabe que Zayn odia cuando le ponen demasiada atención innecesaria, es por eso que le da una respuesta corta antes de bloquear su teléfono e ir a la clase del Señor Marcos para dos horas interminables de español.

***

Eleanor se vuelve a acercar en el segundo receso. Ella tiene el cabello alzado gloriosamente en una coleta alta y lleva el uniforme de las animadoras. Louis está distraído enviándose mensajes con Liam quien se encuentra en clase de Química.

Eleanor lo saluda con una exclamación para que Louis pueda poner su atención en ella.

—Hola, El —dice finalmente, alzando sus ojos en la muchacha, quien le sonríe ampliamente.

—Oí que Bárbara hará una fiesta ¿vendrás? —ella está haciendo esa cosa de aletear sus pestañas para lucir de algún modo más inocente y bonita. Louis sonríe sin mostrar los dientes, realmente quería quedarse en casa tirado en el sillón mientras no hacia particularmente nada. Pero una fiesta no está mal, quizás pueda distraerse de Zayn, es mas, quizás pueda distraer a Zayn.

—Claro —le responde, indiferente—. Llevaré a Zayn ¿suena bien?

—Suena genial —Eleanor se inclina para colocar un beso sonoro en sus labios—. Tengo ensayo ahora mismo ¿quieres venir?

Louis sabe que si un chico va a los ensayos de las porristas solo es para dos cosas: Una, mirar traseros. Dos, mirar a su novia. Y Louis no quiere ver traseros por ahora, y Eleanor no es su novia, así que sacude la cabeza como si realmente estuviera apenado y Eleanor simplemente hace un mohín con los labios.

—Bien —dice, rendida, con tono de niña—. Pero prométeme que vendrás en la noche.

—Es una promesa —exclama con una sonrisa que desaparece cuando Eleanor se da la vuelta casi saltando y se aleja de la mesa en donde Louis se encuentra sentado.

No es que Louis no soporte a Eleanor; ella es genial, en ocasiones sabe escuchar, se ríe de sus chistes, es bonita, besa bien. Okey, tiene bastantes cualidades y Louis realmente quisiera tener algo más con ella si no fuera porque realmente no tiene ganas de tener una novia que sabe que no durara más de dos meses, con suerte. Así que se conforma con tenerla en ocasiones, y Eleanor parece bastante contenta con eso, también. Y todos felices.

O casi.

***

Harry está refrescando su rostro con agua fría mientras pequeñas gotas salpican su reflejo. Ha salido de la clase con la excusa de no sentirse tan bien, pero la verdad simplemente necesitaba unos minutos fuera de tantos números absorbiendo su cabeza. Piensa por un momento en quitar un cigarrillo, pero se dice a si mismo que uno en la mañana ya es suficiente, no quiere volverse el irritable fumador de hace unos meses atrás.

Está a punto de volverse cuando hay un fuerte ruido que lo sobresalta, es un golpe seco contra la puerta del baño, hace que todos sus sentidos se pongan en alerta. Trastabilla un poco a su derecha, observando como la puerta se abre y un cuerpo se abalanza hacia adelante, no sabe que es lo que piensa en ese momento, está muy confundido y su corazón casi sale de su pecho por el susto.

El chico que entra se detiene frente al lavabo, escupe algo de sangre allí, y entonces comienza a toser en seco. Harry ve como la sangre salpica el lavabo y se le forma una bilis en la garganta. Sin embargo, vacilada y lentamente se acerca al chico, cogiéndolo del hombro para ayudarlo.

El chico se sacude violentamente, apartándolo con brusquedad. Harry hace una mueca.

—Oye, te voy a ayudar —susurra, para mostrar que no es una amenaza. El chico gruñe, levantando la cabeza. Sus ojos azules parecen de hielo un instante. Harry frunce el ceño—. ¿Louis? Jesús, qué demonios…

—Estoy bien —le dice, sin embargo su voz se escucha pequeña y adolorida—, yo solo… quería ayudar…

— ¿Eh? —Harry sacude la cabeza, sin entender absolutamente nada. Louis parece algo mareado, así que lo coge de los hombros y lo ayuda a sentarse en el suelo. Louis se desliza lentamente hasta sentarse por completo, tiene una herida recta en la ceja que está sangrando lentamente, al igual que su labio inferior—. Dios, ¿Qué diablos, Louis? ¿Te atropellaron o qué?

Él intenta reír pero todo lo que sale es un sollozo ahogado. Harry se levanta y va hacia los cubículos, buscando papel higiénico, cuando lo obtiene, se vuelve a sentar junto al castaño y se lo pasa. Louis dice algo inentendible entre dientes, cogiendo una tira de papel y colocándolo en la herida de su ceja, y mandando su cabeza hacia atrás, contra los azulejos.

—Mm, yo hice algo que no debía, Harry Styles —dice, y entonces está sonriendo, como si la situación fuera graciosa—. Estaba por ir a clases y entonces… uh —Louis hace una mueca, Harry vuelve a cortar un pedazo de papel y se lo pasa, Louis lo coge y vuelve a ponerlo contra su herida—. No importa, no es algo de tu incumbencia.

Harry levanta las cejas por la forma en que la voz de Louis cambia, más grave. Y es obvio que va a estar confundido si él malditamente entra de esa forma en el baño vomitando sangre o lo que sea. Dios, ¿quién no lo estaría?

—Alguien te ha dado tu merecido, al parecer —escupe, con el mismo tono frio que uso Louis con él—. Y por lo que veo, te ha regalado unos golpes muy feos.

—Gracias por decir lo obvio —Louis rueda los ojos, cansado—. No fue mi culpa… además, ¿Por qué te tengo que dar explicaciones?

—No tienes que dármelas —Harry se encoge de hombros, una mueca en sus labios—. Es que cualquiera te preguntaría si te viera en esta situación, hace unas horas no parecías a punto de fallecer.

—Fue una pelea ¿vale? —El castaño vuelve a quitar el papel, la sangre ha cesado un poco, sin embargo su ojo está algo hinchado y Harry sabe que para mañana allí habrá un color azulado no muy bonito.

—Dijiste que no eras un chico malo —Harry dice, intentando suavizar la tención que tiembla en todo el cuerpo de Louis. Él rueda los ojos otra vez, pero sonríe un poco.

—Cierra la boca, estoy muriéndome aquí —Se apunta a sí mismo, bajando sus hombros—. Yo no empecé la pelea, de todos modos.

—Deberíamos ir a la enfermería —Harry ya se está levantando, con la línea de preocupación en su frente. Louis niega con la cabeza con rapidez, cogiendo al rizado de la mano tan rápido que hace que éste se siente con brusquedad en el suelo—. ¿Qué? ¿No quieres ir?

— ¿Tú no eres muy inteligente, no? —casi le regaña—. ¿Tú qué crees que pensaran si me ven en estas condiciones? Me iré a casa.

—Pero aun falta una hora para que la campana… —comienza a decirle, inocente. Observa como Louis lo mira, con una expresión de: ¿Estás hablando en serio? Harry se sonroja, sacudiendo la cabeza—. Bien. Te vas a escapar ¿no?

—Exacto. Puedes venir, si quieres.

—No, yo… —Louis intenta levantarse. Harry lo hace fácilmente, extendiendo una mano para que el castaño lo tome, sin embargo, solo obtiene que los ojos azules de éste lo miren con frialdad, apartando la mano y levantándose con tosquedad. Harry suspira, sabe que Louis no irá a ninguna parte en esas condiciones—. Iré contigo.

Louis levanta las cejas, sorprendido, sus ojos brillan un segundo.

—Oh, ¿probando el lado oscuro, eh, Harry Styles? —Le da una sonrisa amarga de medio lado, ladeando la cabeza—. Vamos, entonces.

Harry no conoce a Louis aun, sin embargo allí esta, escapándose con un extraño. Qué demonios, es todo lo que piensa, y está sonriendo mientras salen del baño con prisa.