Michael
Teo no contesta, le escribí, lo llamé y dejé mensajes de voz pero nada. Al menos sé que ve mis mensajes pero necesito que conteste. No puedo irme de aquí, dejarlo todo por él porque mi expediente quedaría manchado y no podría volver a trabajar en otra empresa.

Lo extraño tanto, lo amo y a la vez lo odio, pero lo que siento por él es tan fuerte y puedo perdonar cualquier cosa... si me lástima o hiere, nunca lo dejaré de hacerlo.

Flashback...
Mi pequeño y yo nos encontrábamos en mi casa mirando películas de lo más bien hasta que a Teo le llegó un mensaje, y cuando lo ve su cara se ilumina.

-Awww ¡Mikey, mira esto! -Me enseña su celular y de la pantalla se puede ver una foto de Jess abrazando a Ian, lo gracioso era que él esta usando un traje de pikachu.

-Vaya, que bajo has caído hermano. -Murmuro mirando a Ian. Esto es obra de Jessica y su obsesión por esa rata amarilla.

-¡No digas eso! -chilla Teo dándome un golpecito en el brazo -Es un gesto muy tierno. Jess hace mucho quiere un peluche de Pikachu, y como no lo consiguió Ian se disfrazó como él para hacerla feliz.

Yo me quedo mirando a mi pequeño un buen rato, admirando lo feliz que esta por nuestros amigos, y eso me hace sentir un poco celoso. Quiero decir, fue algo estúpido, pero un lindo gesto de parte de Ian. Y aunque sé que he hecho muchas cosas para que mi pequeño sea feliz... Ahora me siento un tanto inútil.

-¿Amor? -Habla Teo sacandome de mis pensamientos -¿Qué te pasa?

-¿Ummm? -Suelto sin comprender por qué me mira preocupado.

-¿Estas bien? Te ves un poco... Triste... -susurra inclinando su cabeza hacia un lado. Dios, parece un gatito ¿Por qué es tan precioso?

-N-No es nada bebé. -contesto intentando sonreír.

Teo entrecierra los ojos -Bueno, haré como que te creo. No importa, mmm... ya sé que te hará sonreír.

-¿Si? ¿Qué cosa?

-Cierra los ojos. -susurra y le hago caso.

Y a pesar de que pienso que me hará una mamada, o cuando me diga que los abra estará desnudo frente a mi, lo que pasa es completamente diferente a mis fantasías. Teo pide que abra los ojos y cuando lo hago lo veo (Para mi mala suerte) vestido y abrazando un oso.

-¡Sorpresa!

-¿Y eso? -pregunto frunciendo el ceño.

-Un osito, tonto. Lo compré para ti, héroe. -murmura sonrojado mientras me lo pasa. Lo tomo y al tocar sus orejas e inspeccionarlo no puedo evitar sonreír -¡Siiii! ¡Logre hacerte sonreír! -Exclama feliz agitando los brazos.

-Te amo tanto, mi pequeño. -murmuro acercándolo a mi para besarlo.

Soy tan afortunado de tenerlo.
Fin flashback...

-Sabía que lo necesitaría. -pienso y busco entre mis maletas, saco toda mi ropa, unos papeles, objetos personales y eso.

Quito una chaqueta de cuero y al fin lo encuentro -Eres un recuerdo de mi pequeño. -murmuro y abrazo con fuerza el mismo oso.

Esa noche dormí en el sofá abrazando al oso de peluche, imaginando que era mi pequeño.

De repente mi celular comienza a sonar haciendo que me despierte a media noche, abro mis ojos como puedo y tomo el aparato.

Mi pequeño Teo
-Hola.