Jésica
-Yo sobro en su vida. -llego a esa conclusión porque... Ian hubiera sido felíz si nunca me hubiera conocido.

-No, no, no, no. No puedes decir eso. -habla alguien a mis espaldas y me sorprendo un poco porque creí que estaba sola en mi departamento -Conozco su historia y es hermosa. Hasta me hizo llorar. -habla Iván desesperado ¿Qué está haciendo aquí? Mierda, él me vio llorando.
-Iván...

-No puedes rendirte, lucha por tu amor bueno... no debes luchar por nada, es Ian quién debe hacerlo y no fue su culpa lo que pasó porque yo fui quién acechaba a Teito. Él es tan lindo y tierno, no tuve control de mi mismo y ahora también esta ese muchacho Michael que es todo un potrazo y se me hace agua la boca. Además esta la maldita sanguijuela de mi madre que sólo apareció para andar detrás de mi fortuna, pero de eso ya me encargué. -él no para de hablar y esta es otra diferencia que tiene con Ian. Iván se sienta a mi lado en el sillón y me da un tierno abrazo -Ustedes son mis amigos y lo más cercano que tengo a una familia. Todo es un mal entendido y no todo es culpa de Ian. Si ustedes se separan yo me moriría porque soy JessIan shipper. -murmura sobre mi hombro y me separo de él.

-Si es culpa del chico basura porque me mintió. Eso es lo que me duele. -digo pero mi voz se quiebra ante el llanto -Quisiera que se disculpara.

Iván vuelve a abrazarme con más fuerza -Descuida, yo haré que lo haga. -me promete serio.

Ian
-Tengo algo que decirte Teo. -hablo pero el pequeño me interrumpe.

-Espera lo que yo tengo para decir es muy importante. -murmura con la cabeza agachada.

-De acuerdo, habla tú primero. -yo me siento a los pies de la escalera y él copia mi acción.

-Escucha Ian. -comienza mientras frota uno de sus brazos -Lo que pasó entre nosotros fue muy lindo, los besos y eso...

-Ay Díos, tírame un rayo para que esto termine, ahora sé que Teo y yo nunca debimos ser amigos. -pienso estando muy apenado, ni siquiera puedo mirarlo a los ojos.

-Pero en el momento que estuvimos juntos me di cuenta que... somos muy diferentes. Querías que cocinara, que te diera un masaje pero no sé hacerlo. Además soy un poco concentido y, ante todo esto, creo que sólo deberíamos ser amigos como siempre lo fuimos. Perdón por querer más de esta amistad. -continúa hablando. Él me deja sin palabras mientras me mira tímidamente.

No soy capaz de pronunciar o formular una palabra en este momento. No puedo hablar pero decido hacer algo más. Avanzo y abrazo a Teo con cuidado y cariño, lo logré, no puedo creerlo.

-Ian, no llores, es lo mejor. -intenta consolarme pero no tienen idea que estoy rebosante de alegría -Debes ir con Jess, en serio. -murmura correspondiendo el abrazo, luego de unos minutos nos sepasamos y sonrío mientras limpio mis lágrimas, él también tiene sus ojos llorosos y me da mucha ternura.

-Tienes razón pequeño. -asiento -Pero tú debes ir con Michael. -cuando mensiono ese nombre, el rostro de Teo cambia repentinamente a una expresión de rabia.

-Lo mío con él se terminó. -me aclara haciendo que trague saliva, realmente esta molesto con Mike.

-Fue un idiota pero cuando intentó arreglarlo te negaste, ni siquiera quieres verlo y menos escucharlo. -intento ser delicado con este asunto pero con la simple mención de Michael, Teo enloquece.

-Ya no quiero saber de él, no me lo recuerdes por favor. -murmura mirando a un lado a la vez que cruza los brazos.

Michael
-Mi pequeño ya no quiere saber nada de mí. -pienso estando tirado en mi departamento, alquilé uno en el mismo edificio en dónde vive Jésica. Ahora sólo la tengo a ella.

No tengo idea de cuánto tiempo pasé sobre la cama mirando el techo, no como ni duermo, mi vida no tiene sentido sin Teo.

Muevo mi mano y tomo mi celular para enviar unos mensajes.

Hombre destruido
 

      -Hey, podemos ir a un lugar?

-No quiero pasarme todo el tiempo llorando por Teo. Necesito olvidarlo.

Viuda negra
-Claro, lo que sea por ti Mike.
-También necesito salir.
-A un bar?

Hombre destruido
-No, quiero ir a nuestro lugar especial.
-En donde siempre nos encontrábamos de pequeños.

Viuda negra
-Está bien, nos vemos allá en media hora.

Hombre destruido
-Bien.
-Realmente necesito hacerlo contigo.

No esperé respuesta y me levanto de la cama para darme un baño, aunque esté muy deprimido voy a arreglar mi aspecto para disimularlo.

Me despojo de toda mi ropa y me coloco bajo la ducha, mientras el agua recorre todo mi cuerpo lentamente haciendo que dé profundas respiraciones. En ese momento se me viene a la cabeza un recuerdo sobre Teo, nada sexual, de hecho, fue cuando nos conocimos.

Flashback...
-Hey... ¿Estás bien pequeño? -digo acercándome para inspeccionarlo luego de haberlo salvado de dos sujetos que querían robarle.

¡Es muy tierno y pequeño! 

Sus mejillas son tan rosas.

Bueno... calmate, ni siquiera lo conoces.

Estoy seguro que daría buenas mamadas. ¡Tranquilo Mike!

-Si, si. Estoy... lo siento. Sólo estoy algo... -dice confundido y agacha la mirada. Sonrío cuando lo escucho tartamudear.

-Shockeado. -confirmo -Entiendo, es normal. Seguro es la primera vez que te pasa ¿No?

-La verdad sí. -sonríe avergonzado.

-Tranquilo pequeño, ¿Y se puede saber que hacías en un lugar como este? -pregunto volviendo a llamarlo así. Porque ahora él es mi pequeño.
Fin Flashback...

-Más bien... lo era. -murmuro agachando la cabeza.