Capítulo 3. I Really Like You

» Ranpo / Poe «

•I really like you – Carly Rae Jepsen •

No importa cuántas veces se hallan reunido ya, ni cuanto hayan avanzado, incluso el mejor detective del mundo tenía su límite, y es que Edgar Allan Poe en verdad que... ¡Era un tipo nervioso! Ranpo lo sabía, él sabía que sabía pero ¡¿Por qué RAYOS NO DECÍA NADA?! Era más que decir que hasta Dazai sabía.

Aquel día estaban en el parque, Edgar miraba unas notas de sus libros mientras Ranpo comía un algodón de azúcar y una barra de chocolate. Ranpo suspiro – creo que lograre volar antes de que logres decirlo

― ¿e-eh?

― ¿quieres venir está noche a mi casa?

― Ran-Ranpo-kun, ¿pu-puedo?

― Si, necesito resolverlo

Edgar y Ranpo se dirigieron a la casa del menor, allí, Edgar entro temeroso y lleno de admiración, probablemente moriría de la emoción pero no podía evitarlo, el en verdad admiraba a Ranpo y le apreciaba en gran manera - ¿Dónde está Karl? – pregunto Ranpo buscándolo bajo la mesa

― Se quedó afuera, Ranpo-kun ¿no lo notó? – pregunto sonrojando al castaño

― Ah, no estaba prestando atención, en mi mente había algo más...

― Bueno, ha estado distraído Ranpo-kun, ¿ocurre algo? ¿pasa algo que no puede hablar fácilmente?

― Es lo mismo que te pasa a ti

― ¿A mí?

― Es que ya sé lo que tú sabes, y que sabes que debes decir pero no lo haces

― ¿Ranpo-kun?

― Ponme atención, así que mírame, he esperado esto tanto tiempo... siento que moriré

― ¡Ranpo-kun! ¿deberíamos ir a un hospital?

― Nooo – se sintió agotado y suspiro – juguemos un juego de mesa... necesito relajarme primero

― Claro Ranpo-san

Ranpo se estaba dando auto golpes en la cabeza, como él, "el más grande detective de todos los tiempos" ¿se sintió nervioso frente a dar su confesión? Como... ¿así es como se sentía Edgar también? Perdidos en un nerviosismo pero... él sabe que le gusta y a él le gusta, entonces... ¿Por qué los nervios? No iba a ser rechazado pero el hecho de decirlo, sí que le daba vergüenza.

Llevaban toda la tarde y parte de la noche jugando scrabble mientras Ranpo comía dulces a pontón y papas fritas.

― Ranpo-kun creo que estas comiendo muchos dulces hoy. ¿ocurre algo?

― ¡nada me ocurre! – grito nervioso – na-nada me ocurre

― Incluso ha perdido varias veces

― ¡te digo que no pasa nada!

― Ranpo-kun... ¡Ranpo-kun sé que algo pasa! Por favor ¡digamelo!

Ranpo se sorprendió, Edgar se sorprendió, ¡Karl se sorprendió! Pues nadie sabía de donde Poe había sacado el coraje para gritarle a Ranpo que le dijera algo, todos estaban callados, nerviosos, Ranpo se sonrojo y trago saliva – Poe-kun

― ¿si?

― No sé cómo ya decirlo...

― Puedes confiarlo

― Esto es muy pronto

― No hay nada pronto entre nosotros

― Sé que no es amor...

― ¿eh?

― Pero tengo algo que decirte...

Karl trago saliva, el escurridizo aprovechar para tomar la amada azúcar de Ranpo y como todo el mapache que era escapo del lugar, colocándose en primera fila para el show con todo y botanas.

― Realmente, realmente, realmente, realmente, realmente... me gustas, yo te quiero ¿tú me quieres? Si me quieras, ahora dímelo

― ¡Ra-R-R-R-R-R-R-Ra-npo-kun!

Ambos chicos estaban completamente rojos, Karl devoraba los dulces por la tensión del momento pero sin esperarlo. Poe se desmayó - ¡Poe-kun! – Grito nervioso Ranpo - ¿Cómo no pensé que esto pasaría? Aah eres un idiota, me haces dejar de pensar y... - trago saliva mientras su rubor se hacía cálido y sus lágrimas aparecían – no importa como lo vea, todo lo resuelto... todo es fácil, pero... a tu lado siento... que puedo resolverlo, no que debo de resolverlo... Poe-kun, por favor... despierta y dime que también te gustó. Ranpo miro al mapache - ¿hable de más no? Es que en mi mente está y... - soltó a Poe y señalo a Karl - ¡KARL CUANDO TOMASTE MIS DULCES!

La nueva persecución en constancia comenzó entre Karl y Ranpo, pues el chico a sus 26 años no permitiría que un animal le quitará sus dulces. No era como robarle el dulce a un bebe

A los minutos Poe logró despertar, estaba casi en las nubes por decirlo así, estaba feliz de lo que escucho más, sabía que debía dar respuesta y eso lo ponía nervioso. Miro a Karl y a Ranpo pelear, sonrió por verlos llevarse bien. Ranpo se dio cuenta de que Poe despertó y se quedó quieto como estatua mientras miraba al chico sonreírle – Ranpo-kun, mereces una respuesta de primera como el mayor agente que eres

― E-e-eso es obvio

― Lamentablemente no puedo ahora

― ¡¿eh?!

― Espera aquí unos minutos, regresaré

― Es-espera Poe-kun ¿A dónde vas?

― A mi casa, regresaré pronto ¿está bien?

― Pe-pero

Así fue, como Edgar salió de la casa, y Ranpo volteo a ver a Karl, el mapache sintió su piel estremecer, algo malo ocurriría.

Para la sorpresa de Karl, Poe lo abrazaba con fuerza, se había montado con el mapache y no pretendía soltarlo - ¿Qué debo hacer Karl? Jamás me había sentido tan indefenso. ¿Por qué tarda tanto? ¡Karl di algo! – Ranpo miro al mapache y suspiro – estoy enloqueciendo...

Minutos después con conversaciones largas y un mapache mareado por escuchar tanto a Ranpo, Edgar volvió a casa del castaño, al escuchar la puerta, Ranpo dio un gran salto hasta la entrada y lo miro llegar con una maleta enorme de ruegas – Ranpo-kun, he regresado

― Bi-bienvenido – expreso mirando la maleta - ¿esa maleta?

― ¿puedes descifrar que tiene?

― Estoy sinceramente nervioso, dudo de mi capacidad en este instante

― ¿quieres intentarlo?

― No, quiero escuchar tu respuesta - pidió serio el castaño

― Bien

Edgar abrió la maleta y como una avalancha, cientos de sobres cayeron para tirar a Ranpo al suelo de la sorpresa, el castaño tomo uno, todo otro y otro, y así sucesivamente, todos iban dirigidos a él - ¿cartas?

― Son las miles de veces que intente decirte mis sentimientos Ranpo-kun, si no era está forma era llamándote o

― ¿eras el estalker que llamaba a la agencia preguntando por mí y luego colgaban?

― Estaba nervioso

― Bueno... no puedo quejarme

― Lo lamento, quería ser valiente y ser el primero...

― Pero puedes decirlo ahora, sin ataduras ¿verdad?

― Todo lo que dices en mi corazón lo tengo, y quiero estar siempre en tu mente

― E-eso ya lo haces...

― Quiero que tú y yo estemos en un momento... teniendo tus labios, Ranpo-kun

― ¿Mi-mis labios? – pregunto nervioso mientras tocaba sus propios labios

― Si, los labios de Ranpo-kun, deben ser tan dulces, no, el mayor dulce de todos

― Po-Poe-kun... es-estas siendo

Edgar trago saliva, no podía pensar del todo pero ahora estaban allí, frente a frente, tomo los hombros de Ranpo mientras se acercaba lento, se miraban a los ojos, tragaron saliva – no sé de donde sacaste tan bellos ojos... pero, ¿podrías dejarme ser egoísta? Y solamente... deberías mirarme a mí. Ranpo-kun, no sé cómo actuar o si debería estar haciendo esto... me estoy quedando sin tiempo, mi razonamiento vuelve, mi vergüenza es enorme y necesito decirte algo, si necesito decirte algo realmente importante – lo miro serio a los ojos – estoy tan nervioso y eso es porque tu realmente, realmente, realmente, realmente, realmente... me gustas, yo te quiero ¿tú me quieres? Si me quieras, ahora dímelo

― ¡s-si me gustas! Me gustas mucho, mucho, mucho

Ambos chicos se miraron, estaban sonrojados pero sabían que continuar era lo mejor entre ellos. Se acercaron, cerraron sus ojos, se besaron tiernamente mientras Karl aplaudía desde la cocina, ambos mayores sonrieron, por fin habían podido decir lo que sentían. – Ahora – dijo Ranpo retomando su confianza – leamos tus cartitas

― Es-e-s-espera Ranpo-kun, no es necesario y son

― Basta de eso – dijo serio – ve por unos dulces – ordeno y sonrió a Edgar – leeré cada uno de tus sentimientos Poe-kun

― Si – sonrió Poe mientras iba a la cocina

La noche sería dulce de diferentes maneras. 

...

No soy buena con el RanPoe... pero... realmente, realmente, realmente, realmente ¡me gusta! >///<

Estoy trabajando en uno de Atsushi y Dark Atsushi, podría ser el siguiente.

¡Gracias por leer!