El Amor Prohibido.

Alianza.

Ha pasado un día completo en que Darth Sidious se enfrentó a Xenovia e Irina. Por sugerencia de este primero, convenció a los demonios de que trabajaran en conjunto con sus enemigos de la iglesia. Pero hay un único problema.

Issei y Kiba se encuentran en el centro de entrenamiento de la mansión Hyodo.

¿Por qué me citas solo a mí a este lugar? – pregunta Kiba.

Veo mucho conflicto en tu mente. Tienes ganas de vengarte por lo que te hicieron. Y eso es algo que no me puedo permitir en lo absoluto. – menciona Sidious.

Eso es algo que no debe de importarte. Tu que sabes de perder a todos tus amigos y de que traten como un experimento. – expuso Kiba.

Tal vez tengas razón. Debes pensar en las personas que te aprecian ahora. Koneko se pondría triste si te fueras. El tener esta clase de sentimientos te hace vulnerable a que te utilicen. Te lo digo por experiencia propia. En mi otra vida, existía un Jedi con nobles valores llamado Dooku, que un día fue mandado a una misión para defender al gobernador del planeta Galidraan en la que murieron varios de sus compañeros, tiempo después, se dio cuenta de que nomás fue utilizado. Haciéndose desilusionarse de la orden Jedi. La gota que derramo el vaso, fue la muerte de su aprendiz Qui-Gon Jinn a manos de Darth Maul. Fue tanta su molestia que finalmente dejo de ser lo que era. Tenía sentimientos de venganza, al igual que tú. Que no pasó desapercibida por mí, convirtiéndose en Darth Tyranus.

No logro comprender esto y que me une esto a mí. – indico Kiba.

Obi Wan Kenobi se aparece y dice lo siguiente: Qui-Gon Jinn era mi maestro. Yo derrote a Darth Maul cuando era joven. Dooku fue seducido al lado oscuro con la esperanza de hacerse más fuerte, acabar con la corrupción de la república y de vengar la muerte de su aprendiz. En su lugar, se convirtió en todo lo que no quería ser, siendo uno de los responsables de una horrible guerra en la que muchas personas perdieron la vida. Utilizado por el autor intelectual de esa perdida, asesinado por Anakin Skywalker sin llegar a cumplir su cometido.

Abandonar los sentimientos de vendetta, debes. Causar dolor y sufrimiento a Rias si terminas como Dooku. Ella te aprecia mucho. – dijo Yoda manifestándose.

Todos los Gremory te estiman. Tus antiguos camaradas no desearían que tu estés triste por ellos. Se feliz. Puedes contar conmigo, te considero mi amigo. Después de todo, en la línea de tiempo original lo somos. – añadió Ise.

Bueno, tienen razón. Dejare este asunto y me enfocare en el presente. – comento Kiba.

Primeras Pistas.

Varias Horas Después.

Issei va dirigiendo la operación de búsqueda de espadas, se han dividido en equipos para su pronta localización. Guiándose por la fuerza.

El equipo de Issei conformado por Saji, Koneko y Kiba.

Siento una perturbación en la fuerza, justo en este lugar. – comento Ise.

Miren arriba. – expuso Koneko.

Así que aquí está mi novio. Es un gusto volverte a ver, querido Issei. – dijo Raynare.

Sigue soñando. No tengo idea de cómo escapaste de tu encierro. Pero me asegurare de que no ocasiones problemas. Ahora entiendo porque mi contraparte maligna te mató. – menciona Sidious.

Luego después me encargo de ti, mi amor. Ahora tengo que estrenar el nuevo juguete que me han dado. – añadió Raynare haciendo un círculo mágico en el que sale un espada Ex Calibur.

Déjenme esto a mí, cualquiera que tenga ese sable es oficialmente mi enemigo. – Sumo Kiba sacando un espadín.

Así que un chico guapo quiere atacarme, eres muy interesante. Lamento decirte que no eres el tipo de hombre que busco. Ven con todo y demuéstrame de que eres capaz de hacer. – sugirió Raynare.

Raynare y Kiba con sus respectivas espadas, empiezan a chocarlas uno contra el otro, ninguno de los cuales, cediendo ni un momento.

Nada mal, pero te falta mucho por mejorar, niño bonito. - Añadió Raynare.

Rayos, es fuerte. – comenta Kiba.

Saji, con tu Sacred Gear, inmoviliza a Raynare por un momento. Le doy a dar un poquito de mi energía a Kiba. – ordeno Issei.

Está bien. – contesto Saji sacando su aparato y dejando inmóvil a la enemiga de una mano.

Bien hecho. No la vayas a arruinar por favor. – indico Hyodo sacando su Boosted Gear, empezando a cargar la habilidad de transferencia de poder.

Raynare con su otra mano, hace una lanza de luz que le arroja a su contrario, mientras trata de zafarse de su enemigo.

Kiba logra esquivarlo por completo por muy poco.

Koneko viendo que Yuuto se encuentra en problemas, usa sus alas y procede a tratar de golpear al ángel caído.

En todo este alboroto, se aparece de repente un sacerdote que ve en problemas a su aliada.

Ayúdame Valper, tengo problemas para deshacerme de lo que me tiene retenida. – comenta Raynare luchando con Yuuto y Koneko.

Kiba, la fuerza me dice que este padre es el responsable de tu desgracia. – Grita Darth Sidious.

Lo que dice el joven, es cierto. Me sorprende que hayas sobrevivido. Pero lo que más me impresiona es que no puedas deshacerte del conflicto que tienes, Raynare. Aunque no es difícil quitarse de esa cosa, solo canaliza tu energía en la espada y asunto arreglado. – sugirió Valper.

Issei se da cuenta de que Raynare va a escapar con la sugerencia de Valper, así que se sube de inmediato al techo y enciende su sable de luz, atravesando a la caída por la espalda con su arma antes de que tenga alguna oportunidad de huir.

Valper dándose cuenta de que no puede enfrentar a todos y de que Xenovia e Irina están llegando al lugar, se escapa del sitio de inmediato. Logrando su objetivo con éxito.

Buen trabajo, chicos, tenemos un prisionero. No importa Valper, la fuerza me dice que no será la última vez que lo veamos. – dijo Issei apagando su sable de luz y cargando a una inconsciente Raynare.

El sujeto bajito de verde, nos informó de que te alcanzáramos. – Dijeron Xenovia e Irina.

Ese alienígena, fue alguna vez mi rival, uno de los líderes de la orden Jedi. Se llama Yoda. No olviden como se llama. Siendo un fantasma de la fuerza, lo hace uno de los sujetos más fuertes en mi galaxia de origen. – expreso Ise.

Nos llevaremos a la caída y la interrogaremos. Así obtendremos más información de los responsables de las espadas pertenecientes a Ex Calibur. – Finalizo Irina.

En Una Galaxia Muy, Muy, Muy Lejana.

Una joven Nekomata, en un planeta desértico. Conocido como Korriban. La aprendiz Sith ha completado su entrenamiento con la tutela de los antiguos Sith, principalmente por lo que quedaba de su esencia en la tumba en el planeta, siendo su maestro nada menos que Naga Sadow.

Por fin, he podido hacerlo. La tormenta de la fuerza ya es mía. Voy a matar a mi padre por lo que hizo con mi querida madre. Toda mi vida ha sido arruinada, por culpa de él. He vivido en este asqueroso planeta, con nadie que me dé una vida digna y sin amor. Solo la logro recordar por mis poderes de la fuerza. Basta de cháchara. – dijo la Nekomata.

Que la fuerza te acompañe. Darth Shadow. – Menciona Naga despidiéndose de su alumna.

Darth Shadow abre la tormenta de la fuerza y se avienta de ella, guiándose por el lado oscuro para buscar a su progenitor.

Estuvo viajando por la tormenta de la fuerza por varios minutos, hasta que logra dar con un planeta, siendo el lugar, Tatooine, el sitio de aterrizaje.

La Nekomata cierra su tormenta y mira al cielo, dándose cuenta de que su padre no está en el planeta, pero que debe estar en un sistema estelar cercano. Ya que lo siente no muy lejano de por ahí.

Maldita sea, donde estás. – pronuncio Darth Shadow.

Cerca de ella, pasa un destructor estelar.

Lo que me faltaba, pero espera un momento, tal vez tenga las respuestas de ese lugar, la fuerza me dice que esa nave está siendo dirigida por un militar muy importante de mi progenitor, no tengo idea de quien se trate, lo único seguro en esta vida, es que la fuerza siempre ha sido una poderosa aliada. – comento Darth Shadow.

Ella saca sus dos colas y orejas de gato, se concentra en observar la nave. Con sus manos la empieza a atraer para llamar la atención del soldado de alto rango del imperio.

Teniente, que demonios está pasando aquí. – ordena Tarkin.

No tengo idea señor, estamos siendo atraídos rápidamente hacia la superficie del planeta, las causas exactas del suceso, no tengo ni idea, señor. – contesto el teniente.

Al parecer el rumor de que un sujeto atrajo con la fuerza un destructor y lo hizo pedazos es cierto. Me pareció al principio solo un chiste de muy mal gusto. Al mirar con detalle las hazañas del emperador en persona, no me resulta algo muy descabellado de hacer. Alguien bien entrenado en la fuerza, podría conseguir emular el suceso que realizo Starkiller. – Pensó el gobernador Tarkin.

Ya sé lo que está pasando, saquen todos los cazas TIE y vayan a disparar a cualquier sujeto que esté haciendo cosas raras con las manos. – expreso Tarkin.

Sí señor. – respondió el teniente.

Mientras en la superficie varios Cazas TIE se aproximan a la posición de Darth Shadow, ella al ver que se acercan las naves para arruinar sus planes, con una de sus colas, toma un sable de luz y con la otra, hace una poderosa bola de fuego con su poder Nekomata que tiene por defecto.

Uno de los cazas le empieza a disparar, ella con su cola, desvía el disparo y lo destruye por completo.

Otro se acerca, pero antes de que tuviera la oportunidad de dar en el blanco, es quemado por completo por una bola de fuego que lo deja fuera de combate.

Con el tiempo, todos los cazas TIE sufren la misma suerte de sus predecesores, siendo incapaces de detener el avance de Darth Shadow.

Gobernador Tarkin, todos los pilotos que hemos enviado han muerto, lo que nos está atrayendo no ha podido ser detenido de ninguna manera. Lo siento por mi falla. – menciona el teniente.

No te preocupes por ello. Normalmente te mandaría a que te castigaran, pero siendo sincero, es difícil parar a un usuario de la fuerza sin la preparación adecuada, dile a toda la tripulación que se preparen para el aterrizaje y que estén todos alerta. – ordeno Tarkin.

Sí, señor. Contesto el teniente retirándose del camarote de Tarkin.

Finalmente, la chica después de unos minutos, logra bajar por completo el destructor estelar. Dañándolo en el proceso.

Mi objetivo ya está hecho, es hora de que vaya a por lo que vine, el soldado imperial tiene que darme muchas explicaciones. – pensó la joven Nekomata.

Toma su sable de luz negro con su mano, abre una abertura en la nave espacial, al hacerlo, es recibida por decenas de disparos de pistolas, logrando esquivarlos con gran agilidad, devolviendo los tiros a través de su dominio con la espada.

¿Eso es todo lo que tienen? – pregunta Darth Shadow.

Al terminar de decir eso, se aparece un enorme robot araña que le lanza un gigantesco laser, ella con una de sus manos, consigue absórbelo y con su otra mano, canalizarlo en un poderoso rayo positrónico, que poco a poco daña al robot hasta dejarlo inútil en unos pocos minutos.

Chatarra inservible, ya veo porque el imperio no usa droides como ejercito principal, al menos algo ha hecho bien el estúpido de mi padre. – Cavilo la Nekomata.

Por lo que veo, el oficial a cargo de este lugar, debe de estar en el puente de mando, que es la parte de arriba del destructor, así que no debo perder mi tiempo, creo que haré un atajo para llegar más rápido, ¡un momento! Como no lo pensé antes, mi madre era Nekomata, pero también un demonio, con lo poco que logro recordar, ella sabía volar gracias a que fue añadida a esa facción, naturalmente yo herede esa habilidad. – Dijo Darth Shadow.

Ella se sale del destructor volando con sus alas demoniacas por donde entro originalmente y sube hasta el lugar de mando, donde abre una entrada con su espada. Donde varios soldados con su bláster la están esperando.

Darth Shadow se da cuenta de que la quieren emboscar, así que, con la fuerza, les arroja el pedazo de metal que corto con su sable. Haciendo que los militares a cargo de Tarkin no puedan hacerle nada en lo absoluto.

Varios guardias llegan al sitio y le disparan a su enemigo, devolviendo la Sith sus tiros, donde Tarkin intenta escapar, pero es detenido por la fuerza de Darth Shadow.

Usted no va a ir a ninguna parte, la fuerza me dice que sabe mucho sobre el emperador y va a decirme todo lo que necesito saber. Darth Shadow se lo ordena si no quiere pasar al mundo de los no vivos.

Tarkin piensa lo siguiente: le voy a responder sus preguntas para distraerla, mientras presiono mi botón secreto en los bolsillos detrás de mi pantalón para que vengan a auxiliarme.

No necesita amenazarme señorita, Así que la hija perdida de Palpatine está aquí, Kimberly Toujou, ese es el nombre que te puso tu madre antes de que fuera capturada por majestad, me temo que ella ya no está con los vivos, pereció con Rias Gremory, tu pudiste escapar gracias a que dos fantasmas de la fuerza te ayudaron. – dijo Tarkin.

Interesante, no tengo idea de quién es esa mujer, pero eventualmente lo averiguare, Wilhuff Tarkin, así que este es tu nombre, tu mente es un libro abierto. Te preguntare una cosa, ¿Quiénes fueron esos dos fantasmas de la fuerza? – Menciona Kimberly.

Eso es sencillo de contestar, son, Obi Wan Kenobi y Yoda, le han dado muchísimos problemas a Palpatine. De seguro que te escondieron en un planeta en el cual no puedes ser detectada con rotunda facilidad. – comento Wilhuff.

Si, en el mundo de Korriban. Pero no es algo que le importe, creo que no me di cuenta de que está distrayéndome para que lo rescaten. Si no quiere que le arranque la cabeza en este momento, le viene una última cuestión a continuación: ¿Dónde está mi padre? – pregunta Darth Shadow.

Eso es demasiado sencillo de saber, en su mundo natal, donde proviene la familia Palpatine, de donde eventualmente se encuentra parte de tus orígenes. Espero que te sirva la información que te di. – añadió Tarkin.

Eso servirá por ahora, matarte no vale la pena, nos vemos en la próxima. – Finalizo Darth Shadow abriendo una tormenta de la fuerza y saltando de ella.

Pasa por la tormenta de la fuerza por varios minutos, hasta que sale de ella, estaba tan concentrada en buscar en su padre que no hizo de manera correcta su habilidad. Cayendo en un árbol de la entrada de la academia Kuoh.

Es una mierda que haya terminado de esta manera, pero que se le puede hacer. – menciona Kimberly bajándose del árbol sosteniéndose por la cola.

Ve que Issei va con sus chicas y siente su poder, así que prepara su sable para encararlo por lo que hizo, tomando velocidad, pero una chiquilla de cabello blanco alcanza a Hyodo, haciendo que Shadow se detenga de atacar.

No puede ser, no debería estar pasando, se supone que mi madre está muerta, donde podría estar, claramente la fuerza me dice que ese chico es Ise, pero no entiendo lo que está pasando. - Piensa Kimberly.

Issei se voltea y mira a Darth Shadow, pareciéndole muy hermosa al momento de mirarla, ella hace lo mismo que su progenitor, gustándole al instante.

Parece que te equivocaste con el uso de la tormenta de la fuerza. – menciona un enano verde.

¿Quién eres tú? – pregunta sorprendida Kimberly.

Yo ser, el maestro Yoda, muchacha.

Puedes explicarme que está pasando, no comprendo que sucede aquí. – menciona Shadow.

Entraste en una línea de tiempo paralela en la que tu padre no asesino a tu madre y se redimió de todo lo que hizo. Eso fue con ayuda de Yoda y mía también, no me preguntes mi nombre, llámame Obi Wan Kenobi.

Así que mi padre no siguió con sus antiguas prácticas, por algún motivo que no me puedo explicar, tengo ganas de abrazarlo y besarlo, hacer cosas de adulto con él. – expresa Kimberly.

Normal, eso es. – indica Yoda.

Eso es algo muy mal visto, en los humanos existe este fenómeno cuando no conviven con sus padres y conocen a sus progenitores cuando es adulto. Te recomiendo que sigas a la fuerza y evites un montón de problemas, en los demonios el incesto es considerado algo natural y nada repulsivo, en el mundo humano, es otra historia. – añadió Obi Wan Kenobi.

Voy a seguir su consejo, y gracias por salvarme la vida y dejarme en un lugar donde nadie me hace daño. – Agradeció Darth Shadow.

Dos Días Después.

Han pasado dos días desde que la hija de Issei llegara a este mundo, no hay pistas de los ángeles caídos por el momento, pudiendo la chica adaptarse rápidamente al entorno y quedándose a vivir en la ciudad con la ayuda de los fantasmas Jedi. Pero el asunto de su sucesora en otra línea de tiempo no es algo que deja tranquilo a Darth Sidious.

Según las tradiciones Sith, puedo hacerlo. Controlar mis impulsos ante Kimberly me está costando más de lo que me imagine. Con los Jedi está mal, y ni hablar de la sociedad humana, eso está súper prohibido. No sé qué hacer, la fuerza solo me está troleando. – menciona Hyodo en su meditación.

Alguien toca la puerta y dice lo siguiente: ¿puedo pasar?

Adelante, Sona. – contesto Ise.

Sona abre el portón, entra y la cierra.

Sé que estas sufriendo del problema de la atracción sexual genética, en el inframundo tomar como dama a tu hija eso es algo extremadamente normal. Eso sucedió con mi tío y mi prima, recuerda que ya no eres un humano precisamente. – menciona Sona.

Pero que va a pasar si lo descubre alguien más si hago eso. – indico Ise dejando de meditar.

Puedes hacer tus trucos mentales, estoy segura de que eres capaz de manipular la mente de las personas con mucha facilidad. Te aseguro que en el infierno nadie te dirá nada al respecto, es más, me atrevo a decir que hasta te felicitaran por eso. En cuanto a mi opinión de esto, no tengo problemas de que la tomes como tu mujer. Recuerda que los demonios somos más liberales que el mundo humano y el cielo. – sugirió Sona.

Me falta mucho por conocer la sociedad demoniaca, esto explica en parte de que la tasa de natalidad de los demontres sea tan baja. – Pensó Sidious.

Está bien, tomare tu consejo, no veo otra solución al problema que sea más efectiva que asesinarla, algo que no quiero. La fuerza me dice cosas como rómpele el himen, embarázala, hazle hijos. Nunca había estado antes en un gran dilema. Así que resolveré este asunto de una buena vez. – expreso Hyodo.

Escuchaste todo. – dijo Sona.

Kimberly entra y abraza a Issei, Sona hace un círculo mágico de teletransporte y menciona esto a continuación: los dejo, tortolitos.

La señorita Sitri se desaparece y se asegura de que nadie interrumpa el momento.

Issei empieza a besar a Darth Shadow y después...

Avances Del Próximo Capítulo.

Hola, soy Issei. Ya resolví mi problema y ahora Kimberly ya es mi dama. Kokabiel ya está atacando la academia, por lo que los dos clanes demoniacos, Sitri y Gremory lo vamos a detener. No te pierdas el siguiente capítulo que se titula: El Fin Del Plan Caído. Hasta La Próxima.