Lost in the Liminal Spaces (Parte III)
El ambiente que los rodeó y dio la bienvenida se asemejaba al una zona de Suburbios de noche, repleta de casas bonitas, sumamente decorativas pero bajo una atmósfera sumamente tétrica por la densa capa de niebla que cubría los alrededores, dando una especie de sensación gélida que les impedía ver más allá de donde estaban. Kuzuki pudo sentir su aliento salir, en forma de vaho blanco, desde su boca hasta perderse en el aire. Aquello se podía sentir también en la gélida humedad que les recibía, dando a entender que era como ser empapados por un balde de agua. Rem, ya recuperada, caminó, en compañía de Yunyun y Dante, para ver qué clase de lugar era ese.
- ¿Pudiste ver algo en esa carpeta, Fran?.- Preguntó la peli celeste.- Si quieres te ayudo.
- No, no, no, vos tranquila, Rem, no pasa nada.- Tranquilizó el chico de Uruguay, mientras que buscaba la información y de ahí dio con lo que buscaba al tener una foto de ese lugar complementarte aterrador.- La puta que lo parió.- Advirtió el joven, sintiendo que se le helaban las manos.
- ¿Qué pasó?.- Quiso saber Dante.- Decime que este sitio es seguro.
- No, no lo es.- Respondió y mostró la información en la carpeta.
"Suburbios Oscuros"
Nivel 5.
Inseguro.
Infestación de Entidades".
- Pero ¿dónde?.- Quiso saber Yunyun.- Yo no las veo pero sí observo que hay calles que están abandonadas, destruido su pavimento y las casas dan un aspecto un tanto tétrico pero otras no.
- Tal vez tengamos que ser muy cuidadosos. No sabemos con qué clase de peligros nos toparemos aquí.- Sugirió Dante la propuesta y apoyando lo que su novia había dicho.
- Esperen un momento.- Pidió Lutza, quien dio un paso al frente, alejándose unos metros, caminando y examinando la zona. Podía sentirse el aire pesado, húmedo y frío, el vaho que abandonaba su boca y convertido en vapor blanco espeso, solamente flotando hasta desaparecer en la Nada misma. Las luces de los faroles encendidos, trazando perfectos haces luminosos y arcos que proyectaban aquellos resplandores sobre la zona, a la espera de que alguien pasara, aunque fuera un simple desconocido.
Lutza se detuvo, a unos 10 metros de distancia y encendió su "Luz Sagrada", conformando un brillo dorado que parecía ser un "Sol" en miniatura pero con ello notó algo que se movía, entre los arbustos y zonas oscuras. Algo que corría a toda prisa y se sentía afectado por la presencia de ese resplandor y que fue atestiguado por Lúckacs y Fran.
- Decime que es una joda.- Pidió el uruguayo.- ¿Lo vieron?. Yo les juro que lo vi y estoy helado del miedo.
- No estás solo, amigo.- Le apoyó Dante, mientras que él se volteaba para ver a Yunyun.- ¿Estás bien? ¿Qué pasó?.- Preguntó y de ahí ella, pálida y temblando del miedo, apuntó hacia la lontananza, en donde se veía una especie de criatura, de características humanoides, viéndolos a la distancia e incluso parecía que les "saludaba" con la mano en alto.
Souichirou abrazó a Caster con fuerza, mientras que Petra iba hacia donde estaban Fran, Frederica, Rem y Subaru, asustada por lo que veía.
- Hagan lo que hagan. Pase lo que pase, no se vayan a alejar de la "Luz Sagrada" que encendí.- Les informó Lutza, yendo hacia ellos.- Esas criaturas le temen a su resplandor, por eso se escabullen entre los matorrales y arbustos junto a los callejones oscuros pero algo me dice de que este "Nivel" no es peligroso por sus entendidas, sino por el frío mismo. ¿Lo sienten?.
- Ahora que lo dices...Yo...- En ese momento, Rem comenzó a sentir que su cuerpo le estaba fallando, perdía el conocimiento y Subaru la agarraba entre sus brazos, acurrucándola contra su pecho para darle de su calor corporal.
- Este frío me está afectando a mí también.- Relató Lúckacs, quien utilizaba su "Fuego Elemental" para tratar de calentar a los presentes pero éste se iba convirtiendo en pequeñas ascuas, flamitas que desaparecían al entrar en contacto con esa atmósfera gélida.
- Entonces busquemos un refugio, vayamos hasta alguna de las casas y nos refugiamos allí mismo o nos congelaremos.- Ordenó el peli negro.
- Yo no lo veo tan fácil.- Advirtió Yunyun.- No quiero sonar pesimista pero mira a tu alrededor. Muchas dan escalofríos, son tétricas. Parece una escena sacada de esas películas de terror que miro con Dante.-
- No nos quedan más opciones, Yunyun.- Intervino Kuzuki.- Caster también está sufriendo los efectos de las bajas temperaturas. Lo mismo yo. Hay que salir de aquí, ahora.- Impartió esa orden, por lo que no hubo más charla ni debate.
- Que sea lo que los Dioses quieran.- Alegó Lúckacs.- ¡Vamos!.- Al momento de decir eso, Subaru se adelantó, corriendo y llevando a Rem consigo y su espada desenvainada.- ¡Pero qué...!.
- Olvídalo.- Le aconsejó Fran.- Dejalo, él está pasando por un momento jodido, uno del que se quiere recuperar.- Contó y después de que el rubio lanzara un suspiro, intentó crear un nuevo "Campo de Fuego" para calentarlos pero resultó en vano.
Fueron corriendo, con el aliento convertido, cada vez más, en vaho espeso, por lo que las temperaturas se iban desplomando a más no poder, llevando a que Subaru trastabillara y cayera de rodillas contra el piso, sujetando a Rem con todas sus fuerzas. La "Luz Sagrada" que empleaba Lutza también se iba agotando, perdía fuerza, calor, luminosidad y brillo, por lo que podía ser el momento ideal para las Entidades con el fin de lanzarse contra ellos, sorprenderlos y emboscarlos. Las temperaturas, al seguir cayendo, impedían razonar, moverse con facilidad y en el peor de los casos agotaba las fuerzas tanto físicas como mágicas de los presentes. Frederica había caído contra el piso y se movía con dificultad, casi arañando la piedra y haciendo un máximo esfuerzo para levantarse, por lo que quedó atrás de los demás.
- ¡Paren, paren!.- Pidió Fran, quien se volteó y miró hacia donde se hallaba la Maid rubia.- ¡Frederica!.
Corrió y se arrodilló a su lado.
- Déjame, ya no puedo más.- Le decía la chica.
- No, no, no digas eso, no te podes morir. Te voy a sacar de acá. Me prometiste que estamos juntos en esto. No me dejes, te lo pido, por favor.- Le rogó, tomándola de las manos, intentando darle un poco de su calor pero éste también se hallaba apagándose, cada vez más, por lo que la chica le sonrió y tomó su rostro, acurrucándose contra su cuerpo.
- Este "Nivel", Fran, es como lo que nos contaba Subaru de aquella vez...el frío...el frío que cala hondo los huesos, impide moverse, detiene todas las funciones que uno posee e...incluso hablar...me cuesta pronunciar palabra para describir este momento.- La pobre rubia le costaba efectuar una oración por completo debido al frío que le invadía por dentro, sin embargo, Fran no pensaba lo mismo.
- Vos sos de las más fuertes, ¿te pensas que te vas a rendir tan fácilmente y más aquí?. No. Si no puedes seguir adelante, déjame que te lleve en mis brazos y llegaremos a un refugio donde podremos recuperar el calor.- Prometió éste, haciendo el mayor esfuerzo y tomándola en sus brazos, partiendo con los otros, los cuales les esperaban.
Kuzuki, teniendo sus manos pálidas y con Caster al borde del desmayo, notó que una luz, desde el interior de una casa, estaba encendida, por lo que procedió a patear la puerta, abriéndola y de ahí sintió que un calor, proveniente de una chimenea, le fue devolviendo la vida.
- ¡Amigos, vengan aquí, ahora!.- Les animó, por lo que entraron Petra, Fran con Francesca en sus brazos, Lúckacs, Lutza, quien ya no tenía más fuerzas para seguir empleando la "Luz Sagrada", así como también entraron Yunyun, Dante, mientras que los últimos eran Subaru y Rem.
El chico de cabello negro apenas podía moverse, sus piernas ya no le respondían y cuando el camino quedó a oscuras, una serie de Entidades fueron emergiendo, hambrientas y listas para entrar en combate, por lo que éste, utilizando su espada, se hallaba preparado para combatirlos pero ya no podía mantenerse en pie.
- Ya no puedo más...pero...al menos...moriré sabiendo que tú estarás bien, Rem...No voy a cometer el mismo error que en el Pasado.- Le hablaba a la Maid Oni inconsciente en sus brazos, dormida, casi al borde de la Muerte, por lo que la abrazó con todas sus fuerzas, sin soltarse por ningún momento de ella y así brindarle las pocas energías físicas que le quedaban. Unas lágrimas de impotencia cayeron contra el suelo, reflejando que, al menos, ella viviría pero quedaría sola sin él pero, aún así, éste fue encarando a los enemigos.- ¡Vengan, malditos, aquí les espero!.- Gritó, enfurecido, casi colérico, mientras que un "Smiler" aparecía, listo para destrozarlo junto a un "Sabueso".
El segundo fue contra Rem pero Subaru le dio un mandoble con su espada, haciendo que éste girara por el suelo hasta quedar alejado de su posición, sin embargo, eso lo hizo enfurecer aún más, por lo que se preparó para saltar y matarlo.
- ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!.- Con un rápido movimiento, Subaru le enterró la punta de la espada en el abdomen a la criatura, partiéndola a la mitad y regando el suelo con su sangre.
Un segundo "Sabueso", al ver morir a su compañero, quiso atacarlo a traición pero el chico volvió a defenderse, dándole otro golpe, ésta vez con la parte de bronce, justo en la cabeza, matándolo al instante, así como también le daba a un tercero que le quebró el cuello pero aún quedaba aquel "Smiler", el cual no se movía de allí, los quería a ambos y más cuando Subaru cayó de rodillas al piso, producto de la falta de fuerzas y el frío tenaz que aumentaba hasta alcanzar unas temperaturas extremadamente bajas.
- Vive...Vive...Rem...- Le pidió, como último deseo a ella, besándola en los labios y más cuando miró al "Smiler" que lo iba a matar. Cerró sus ojos y esperó su momento pero no llegó.
Hubo un fogonazo, un resplandor tan fuerte como el Sol mismo que salía, por lo que el "Smiler" emitió un grito de desesperación y dolor al ser tocado por esos rayos. Ese brillo llamó su atención y se topó con que era Lúckacs el que lo estaba protegiendo con su "Fuego Elemental".
- ¡"ELEMENTAL DE PIROTECNIA"! ¡VOY A EXPLOTAR!.- Exclamaba el rubio a todo pulmón y al ser visto por Dante, éste corrió para socorrer a Subaru.
- ¡Arriba, amigo, arriba que podes!.- Le animaba el peli negro, arrastrándolos a ambos de allí, mientras que el "Príncipe Imperial" cubría su retirada.
Avanzaban con cuidado, protegidos por aquellos resplandores de Fuego hasta que, una vez dentro, las "Entidades" no pudieron seguir, así que cerraron la puerta de la casa y con ello llevaron a la pareja hasta la chimenea, donde se estaban calentando los otros. A Rem la recostaron en el sillón junto a Subaru, arropándolos con unas mantas, mientras que Dante llegaba hasta donde estaban ellos.
- Esto no puede seguir así.- Habló el joven de ropas negras y lentes de Sol.- Me niego, rotundamente.
- Amigo, apenas estamos en el "Segundo Nivel".- Le corrigió Kuzuki con seriedad.
- No me importa si es el tercero, cuarto o el millón y medio de "Nivel". Yo me refiero de que no podemos seguir yendo por un camino en el que nos ataquen sin tener un plan de antemano.- Movió una de sus manos en el aire, pasando frente a los que estaban junto a la chimenea.- ¡Espera, tengo una idea!.- Exclamó y fue hasta una mesa, utilizando su habilidad.
- ¿Qué piensas hacer?.- Preguntó Petra a él.
- Mi poder es crear tecnología de mi Mundo, por lo que pienso diseñar un sistema que nos alertará si hay presencia de "Entidades" a la vista y así estar preparados.- Respondió el peli negro, mientras que comenzaba a trabajar.
- ¿Siempre es así?.- Quiso saber Lúckacs a Yunyun, quien se hallaba tapando a Rem y Subaru para que no se congelaran.
- Siempre, desde que lo conozco.- Respondió la "Demonio Carmesí".- Cuando lo conocí, yo estaba sola, sin nadie en el camino y con miedo a que me pudieran hacer algo. Pero cuando Dante llegó, mi vida dio un giro de 360*. Cambió todo rastro de temor a uno donde pudiera confiar.- Le contó la joven castaña.- Sé que, tarde o temprano, cuando él tenga que pelear contra el "Rey Demonio", yo no voy a temer, porque confío en lo que lo logrará.- Relató con confianza en su voz.- Ahora dame una mano, por favor y pon estas frazadas a ambos, hay que ayudarlos a recuperar su calor corporal.
No dijo nada, por lo que comenzó a levantar al semi-inconsciente Subaru, el cual lo veía pero no podía emitir palabra alguna, sentía, aún, cierto rencor hacia el rubio pero, al notar que lo iba ayudando, fue acomodándose en el sillón.
- Tú...Tú nos protegiste...cuando ya no tenía más fuerzas y estaba...listo para morir con Rem...¿Por qué?.- Quiso saber, teniendo un hilillo de voz, agotada por todo lo vivido.
- Aunque seas mi rival, también soy militar, como oíste en el búnker y un Soldado de verdad no abandona ni deja atrás a un Camarada en el Frente.- Le respondió con franqueza en su voz.- Tal vez sigamos con nuestras rivalidades pero, aún así, no soy de esos que traicionan por la espalda.- Continúo hablando y mirando a la dormida Rem, la cual estaba moviéndose un poco pero el rubio la ayudó a estar más cerca del cuerpo de Subaru.- Eso es. Protégela como ella lo hizo por ti. No seas un cobarde, nunca. Tal vez...- Hizo una pausa, se quedó pensativo un momento y miró al suelo.- Tal vez no seas aquel Subaru que conozco. Siento que tu esencia original es distinta al que yo tengo de amigo pero igual, continúa a su lado. Sean un equipo, no permitas que le vuelva a pasar algo como lo que le pasó con...Ya sabes.
- Sí, sé a lo que te refieres.- Le habló el peli negro, quien iba recuperando, poco a poco, su calor corporal.- Cometí tantos errores en el Pasado, tantos que me avergüenzo de lo que hice. Pero lo que le pasó a Rem en aquel maldito combate, cuando le sacaron los recuerdos, su nombre, me partió el alma. Tuve que hacer una "Cruzada" para poder recuperarlos pero al costo de morir tantas veces.- Lúckacs notó la herida que tenía en el cuello, por lo que éste se la cubrió.- Sí, sé lo que vas a decir: ¿Cómo me hice esto?. Cuando intenté hacerle saber quién era, por la "Esencia de la Bruja" que llevo conmigo, me atacó y dejó inconsciente. Al recuperar la consciencia, ella desapareció y yo caí asesinado por una lluvia de flechas de un desconocido. Tú también estás en un "Estado de Muerte", lo puedo sentir.
- Soy inmortal, como mi padre, madre, hermanos y allegados en el "Imperio del Este" pero también, cuando usamos nuestro poder al máximo, éste nos puede llevar a una "Muerte". Yo tuve una pelea contra un desgraciado que...- Lúckacs se detuvo, teniendo imágenes de esa batalla.- Que me llevó a que empleara todo mi poder Elemental. En mi cuerpo está el espíritu de Arnes, una Demonio y Súcubo que se sintió atraída por mi poder y la Magia Vil. Le había pedido que saliera de mí para ir a un lugar seguro pero ella se quedó a mi lado y cuando unimos fuerzas, estuve a punto de morir pero Lutza me sacó de allí, llevándonos a ese búnker.- Le contó, mientras que respiraba hondo y miraba al suelo.- Solo espero que mis hermanos y amigos estén bien, continúen con la lucha y así poder volverlos.- Fue el pedido que hizo y se levantó de su asiento.- Bueno, dejaré que ambos descansen. Más tarde vamos a continuar para salir de aquí.- Se alejó y volvió la mirada, una vez más al peli negro y la chica Maid Oni.- "Sé que se cuidarán bien los dos. Lo sé. Tengo Fe".- Finalizó y subió la escalera que llevaba hacia la planta alta.
Allí arriba era una especie de "Altillo o Ático" donde se encontraba una cama. En ese lugar permanecía Fran, teniendo una pequeña estufa encendida al lado de Frederica, la cual seguía inconsciente, tapándola con unas frazadas y de ahí él le tomaba de las manos, besándolas para darle más calor y así hacerla volver en sí. Oyó pasos y al voltearse se topó con Lutza, quien traía consigo su rifle "Mauser" colgado a la espalda.
- ¿Todavía no despierta?.- Preguntó la rubia y el chico de Uruguay negó con la cabeza.
- Por desgracia, no, todavía, pero ya será. Dale tiempo. Todos estuvimos afuera, expuestos al frío descomunal.- Le explicó el muchacho, mientras que veía como el pecho de la Maid subía y bajaba.- Su respiración va volviendo a funcionar.- Respiró aliviado pero bajó la cabeza. Lutza, por su parte, se sentó en un taburete que había frente a la ventana y apuntó con su "Mauser" hacia donde pudieran haber "Entidades" que rondaran por allí.
- Es sorprendente.- Habló la chica y el uruguayo la escuchó pero se quedó al lado de Frederica.
- ¿Qué cosa es "sorprendente"?.- Le rebatió la pregunta.
- Allí afuera, esas criaturas están rondando por las zonas oscuras, por eso huían y temían tanto a la "Luz Sagrada" como al Fuego Elemental de Lúckacs.- Relató ella y miró por donde estaban los restos del "Smiler" que fue reducido a cenizas, mientras que otras "Entidades" se disputaban los restos de los "Sabuesos" muertos, entre ellos una especie de "Gigante" que parecía estar hecho de pieles, por lo que la rubia se retiró de allí y así contener las nauseas.
- No van a entrar. Confía en lo que te digo. Si hay luces en este lugar, es porque este es el refugio y de ahí hay que buscar la salida. Los próximos "Niveles" van a ser más complicados. Creeme.- Sostuvo Fran.
- Lo sé. Por cierto.- Lutza, tras escuchar sus palabras, invocó su "Luz Sagrada" y la colocó dentro de un farol portátil.- Ten esto, les dará calor a ambos.- Tomó asiento en el mismo taburete, el cual arrastró hasta donde ella se encontraba y quedó cerca del joven novio de Frederica.- Dime una cosa: ¿La amas muchísimo?.
- Demasiado.- Respondió Fran.- El día que nos conocimos e incluso antes de ir a su Mundo, por un simple accidente de mi vida, llena de quilombos, tristezas y males que no parecen tener fin, acabé cerca de los territorios de Lord Roswall. Ella me encontró y llevó hasta la Mansión, ya que la tenían bajo estricta vigilancia por los ataques de los "Arzobispos del Culto de la Bruja" y fue entonces que, al principio y con dudas, fui ganándome la confianza de ella, mientras que entablaba amistad con Petra.- Contaba el muchacho.- Yo nunca fui uno que se la pasa peleando, no sé cómo serán vos y Lúckacs.
- Oh, nosotros somos distintos: Vivimos luchando, buscando pelea contra enemigos, aunque en esta última ocasión las cosas fueron distintas. No siempre el héroe vence al malo, hay ocasiones en las que debes tomar ciertos recaudos cuando vas a combatir pero eso no significa que te debes volver un tibio.- Lutza respiró hondo y tuvo una serie de recuerdos que pasaron por su cabeza.-
Fran respiró hondo y la miró de cerca.
- Se nota a flor de piel que ustedes son diferentes a mí pero el caso mío es que yo nunca busqué pelear hasta que, de golpe, la Mansión fue atacada por Ley Batenkaitos y sus Camaradas "Arzobispos". Yo había escuchado la conversación que tenían Francesca y Petra sobre si yo podía ser un "Agente" del enemigo pero cuando ellos llevaron el ataque, me vio rodeado por ese demente, quien quería comerse mi nombre y recuerdos pero, de algún modo, también por el instinto de la Naturaleza Humana que nos ha llevado, por Milenios, a sobrevivir en entornos salvajes y peligrosos, le hice frente.- Le contó y de ahí él pudo ver, en los ojos de la chica, su asombro.-
- Lúckacs me contó de aquel loco, aunque en su Universo, él es amigo de los "Arzobispos" así como también de Subaru, Rem, Ram y los otros.- Añadió la "Princesa Imperial" esos datos, llevando a que Fran lanzara una risilla.
- Cómico. La verdad que lo es y sí, lo tengo que felicitar a tu amigo pero como dice el dicho: "Entre locos se entienden". Pero conmigo, te lo juro, cuando vi a Ley atacar con esa fuerza y más cuando intentó devorar los recuerdos de Frederica y hasta trató de matar a Petra, yo cargué contra él y le partí el Maxilar Inferior. No sé cómo. Yo no soy "Terminator" o "Hércules" pero lo que recuerdo fue que tomé un pedazo de mampostería y usé todas mis fuerzas hasta conseguir mi objetivo.- Continuó hablando el uruguayo a la rubia de Bosnia-Herzegovina, la cual se sacó su gorra de plato Oficial.
- Y lo hiciste bien.- Le felicitó la "Princesa Imperial".- En un combate no se abandona a nadie, se pelea hasta el final, sin importar qué tan complicado sea el enemigo.- Apoyó su mano en los hombros de Fran, volvió a colocarse su gorra de plato Oficial y de ahí notó que el farol portátil estaba iluminando muy bien el lugar.
- Lutza, ¿me llamaste?.- Oyó la voz de Lúckacs.
- Sí, amigo.- Respondió la chica, poniéndose de pie.- Iré con él a revisar la Planta Alta de la casa y más de que no haya alguna puerta con balcón abierta. Luego seguimos hablando.- Le prometió y con ello dejó a Fran con Frederica.
La chica había recuperado su color y el calor de su cuerpo, permitiendo que volviera a correr la sangre sin problema alguno. Quería abrir sus ojos pero los sentía, todavía, pesados por el enorme esfuerzo hecho, así que continuó dormida y él recostó su cabeza contra el pecho de su novia.
- Dormí tranquila, que yo no dejaré que nadie te lastime, Frederica.- Prometió y de ahí, mientras que cerraba los ojos, ella le acariciaba sus cabellos, así como también le sonreía con tranquilidad.
Mientras que Lúckacs y Lutza revisaban la Planta Alta, en la Baja se hallaba Dante, trabajando sin descanso y con Yunyun dormida a su lado, haciendo una serie de conexiones al "Radar de Entidades" que estaba diseñando y que sería de gran ayuda para las futuras operaciones en los "Niveles de los Backrooms".
- ¿Necesitas una mano, Dante?.- Escuchó la voz de Kuzuki. Éste se encontraba de pie frente a él, habiéndose quedado verificando que no hubieran novedades en el frente y revisando el libro de los "Niveles". El chico de ropas negras había terminado, tras una dura pelea, de instalar unos cables y circuitos, los cuales tomaban su tiempo para que hiciera funcionar al aparato y tras ello inició el pitido y el barrido del terreno.
- Tranquilo, estoy bien. Esta preciosura ya está funcionando. Mira.- Pidió su atención tras responderle y le enseñó el artefacto.- Aquí estamos nosotros.- Señaló una serie de puntos dentro de un cuadrado en la pantalla y una línea de radar que funcionaba como modo de seguimiento.- Adentro no hay peligro pero fíjate esto.- Se levantó, fue hasta una de las ventanas y sacó la mano, por unos segundos, justo cuando, estando en una zona oscura, el aparato empezó a emitir una señal y una serie de puntos rojos, los cuales se iban acercando a una gran velocidad pero, al momento de ser alcanzado por un "Ladrón de Pieles", Dante volvió a meter la mano adentro, mientras que el enemigo se retiraba de allí.- ¡Chinga tu madre, puto!.- Le gritó y mostró el dedo del medio a la criatura.- Ja, se fue "llorando" porque no me pudo alcanzar.
Una vez que disfrutó de su victoria, volvió a ponerse serio.
- Veo que este "Radar de Entidades" es una gran invención, nos permitirá estar a salvo de cualquier peligro.- Señaló Kuzuki, tomando asiento y de ahí sacaba el libro de "Niveles".
- Lo es y créeme, es mejor estar preparados para cuando ocurra algún inconveniente, porque uno no sabe con qué clase de riesgos nos enfrentaremos en los próximos que vendrán.- Advirtió Dante con tono serio.- Yo no pienso dejar que ninguno de ellos toque a Yunyun. El que le ponga un dedo encima a mi "Demonio Carmesí", lo mato.
- Estoy contigo.- Le respaldó el nipón de cabello negro, mirando a Caster, quien dormía junto a la chimenea al igual que Subaru con Rem.- Ahora estamos en un momento de descanso pero, tarde o temprano, vamos a tener que continuar. He estado viendo, en el libro, que hay una ruta, aquí dentro, que nos llevará al próximo "Nivel".- Relató éste, mostrando el citado objeto.-
- ¿Y sabes para qué lugar nos llevará?.- Inquirió Dante con dudas en su voz.
- A cualquiera, pero tenemos que ser sabios. Ya con haber corrido 10 km por ese pasillo nos ha dejado una mala experiencia.- Advirtió Kuzuki, ahora con tono serio en su voz.
- Solo nos queda prepararnos, amigo. Solo eso. Por ahora hay que descansar, dentro de unas horas volvemos al frente.- Auguró el novio de Yunyun y se fueron a dormir un rato con sus parejas.
[Quedan solo dos capítulos y termina esta historia. Los últimos serán más complicados, en base a los "Niveles" que cruzarán.
Saludos para todos ustedes, amigos y hasta el próximo capítulo.].
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top