Eran las siete de la mañana y al escuchar el despertador Karma solo tenía algo en la cabeza y fue pegarse en la frente ¿Cómo le iba a mostrar a Nagisa-kun al pulpo ese? Imposible, si alguien lo viera seguro se haría un escándalo por todo el mundo y la magia seria descubierta para los humanos y seguro los magos buscarían una forma de matarlo. Ya que supuestamente los humanos no deberían saber sobre la existencia de la magia en su mundo, pero al ser mejor amigo de Okuda una cosa llevo a la otra y es así como estamos actualmente.

Al levantarse lo hizo de la forma más lenta posible no quería levantar al pulpo que supuestamente está dormido en la habitación de al lado. A paso lento fue al baño y se lavó la cara y el cuerpo. No se quiso bañar para no hacer más bulla de la necesaria. Bajo las escaleras para ir al colegio enseguida y desayunar algo en la cafetería.

Koro-sensei seguro no sabe dónde estudio, pensó Karma sintiéndose el chico más listo del universo.

Hasta que en el momento que iba a abrir la puerta de salida un pulpo de dos metros con prendas de cocina rositas y platos con comida en sus ocho tentaculos le interrumpió.

-¡Karma-kun! ¿Adónde vas? Aun no termino el desayuno y no puedes ir al colegio sin comer- Exclamo el pulpo dejando al Akabane sin emociones.

Se olvidó de la velocidad del maldito demonio que tenía enfrente que estaba preparando masa para panqueques y muchas cosas más.

-Ven Karma-kun, no queremos que te suene el estómago al frente de Nagisa-chan, espera. Si tienes hambre tal vez te haga un almuerzo todos los días- Planeo para después tirar toda la comida al basurero. Una cantidad que podría alimentar toda áfrica.

-¿Que mierda? La comida y que tienes de cerebro para pensar eso ¿Un manga romántico mal hecho?- Soltó con horror Karma, le dolía ver esa comida yéndose a la basura.

Por lo menos no comeria lo que arruino su plan maestro de irse al colegio a salvo.

-Tranquilo Karma-kun, mira esto- Y ¡Pum! De la nada estaban todos los ingredientes sobre la mesa que ocupo Koro-sensei hace un rato- Y sobre eso, solo leí tus mangas por la noche para tener una base de lo que quieres lograr con Nagisa-chan- Eso provoco un sonrojo en Karma.

-¡Deja de decirle así a Nagisa-kun!- Soltó cansado, él era el único que podía decirle de esa forma a Nagisa. Aunque él lo hiciera cuando bromeaba para aprovechar.

-¿Kun? Así que es chico- El color del pulpo paso a blanco y después a un rosado pastel- ¡GENIAL! Podre escribir mi primera novela yaoi- Eso descoloco a Karma totalmente.

-No hagas esas bromas, mejor me voy y no me sigas- Y corría hacia la puerta y cerro con llave.

Suspiro aliviado al no ver al pulpo aparecer de la nada. Así que un poco mejor de ánimos comenzó su caminata a la estación de trenes donde seguro se encuentra con Nagisa. Oh mierda, la declaración de amor. Después de todo por eso está en esa situación con el amarre que invoco.

Comenzó a pensar en una forma de escapar y la mejor que se le ocurrió fue seguir a Nagisa por detrás para que él no le viera en ningún momento, debería ser lo más silencioso que pueda.

Al ver de frente de nuevo para saber cuándo entrar al tren ve a Shiota de espalda y no puede evitar dejar libremente sus emociones. Demostrándolas mientras lo miraba con amor, hasta podían verse corazones en sus ojos ámbar y un gran sonrojo junto a una sonrisa de enamorado, de una persona perdida en el amor y que le será imposible salir de él.

-Así que él es tu crush- Escuchar esa voz fue suficiente para que a Karma se le fuera todo color del rostro y su expresión cambiara a terror.

-¿Qué haces aquí? ¡No ves que hay gente que puede verte!- Comenzó a hablar al pulpo que andaba con un disfraz muy, demasiado mal hecho.

-Pero ando con un disfraz espectacular- Contraataco el pulpo.

-Eres sospechoso, no vez que tu cuerpo y altura no coordinan con lo normal aquí en Japón- Comenzó a gritar de forma baja para que nadie le tomara más atención de la necesaria.

-En verdad Karma me disfrace por los magos, los humanos no- No alcanzo a terminar su frase al sentir algo que provoco un escalofrió por todo su extraño cuerpo - Karma-kun tranquiliza tu frecuencia por favor- Suplico el pulpo, pero la reacción de Karma no mostraba que lo iba a hacer.

-¿Que te crees pul?- No termino su insulto al sentir la mano de alguien sobre su hombre.

Karma solo pensaba en gritarle y mandarle a la mierda quien interrumpió su conversación, pero por segunda vez en la mañana a Karma se le fueron los colores de la cara.

-¿Karma-kun? ¿A quién le gritas?- Y como si fuera cosa del destino, como ya sabes. El destino odia a este Akabane. La persona que le interrumpió no era nada más, ni nada menos que su amor platónico.

Karma primero fue mirar a la dirección del pulpo para que se fuera de la vista de Nagisa, pero al darse la cuenta de que estaba solo al menos se relajó un poco, pero después se acordó de lo que planeo hace unos minutos.

Debía huir y como lo pensó, lo hizo.

Al ver el tren llegar comenzó a correr como loco y así poder al menos camuflarse un poco con las personas de alrededor ya que con su color de cabello es algo complicado.

Cuando ya sintió como su espacio personal era ocupado por personas que también estaban apuradas sintió un alivio en su pobre corazón de demonio.

-No tuviste que huir Karma-kun, eso parecía una escena de novela mexicana- Karma solo abrió los ojos para ver a su lado al pulpo aun con su disfraz mal hecho.

-¿Y tú como sabes eso? Sabes, mejor al salir de este tren te vuelves a mi casa y buscare una maldita solución para deshacerme de ti- Comenzó a decir sin pensar si sus palabras dañaban a Koro-sensei.

-¿Entonces que harás con Nagisa-kun? ¿Huir por toda la vida? Eso no es admirable y tampoco es bueno para tu corazón de adolescente, necesitas ayuda y yo te la daré ya que soy tu amarre-.

Karma suspiro derrotado, ya solo le quedaba aceptar la ayuda de ese pulpo, ya que aunque fuera algo tonto lo que dijo era verdad.

No podía vivir toda la vida huyendo del ratón, cuando él es el zorro ¿Dónde quedo la lógica de su vida?

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Agradezco que lean este fanfic aun con mis demoras en subir un capitulo.

Podria decir que eh mejorado muchos aspectos en los momentos que soy ausente, pero la verdad solo leo y siento envidia de los protagonistas.

Últimamente siento que perdí el toque.

Esperen solo 3 meses y volveré a ser el tonto de siempre, la chica agridulce que coquetea cuando solo quiere esconderse de la vergüenza.

Los quiero <3.