Iris

Me acerque a él una vez que el tratamiento terminó, tomé un par de tijeras para quitar la venda lentamente.

—Intenta abrir los ojos lentamente. Puede que la luz se sienta un poco molesta así que intenta parpadear un par de veces.

Lo vi abrí los ojos lentamente, parpadeo un par de veces antes de girar a verme. Dominic sonrió mientras me miraba.

—Vaya que eres hermosa.

—Claro que si. Pero ahora que puedes ver estoy segura que no dejaras de observar a todas las mujeres hermosas.

—Dudo mucho que alguna persona sea más hermosa que tu.

—Ya lo veremos —dije mientras escribía en el informe —antes de continuar con las pruebas, ¿quieres ver a tu familia?

—Por supuesto.

Me acerque hacia la puerta no sin antes mirar sus reacciones, era un nuevo mundo algo tan simple como ver sus propias manos era tan curioso para él, había pasado un par de años para hacer las pruebas pero tras un profundo éxito por fin habíamos logrado nuestro cometido, una persona ciega de nacimiento podría ver por primera vez y sabia que aquello sería un gran logro. Abrí la puerta para llamar a su madre, primero ella entró emocionada para acercarse lentamente.

—Tenías razón, mi madre es hermosa—escuché decir a Dominic haciendo llorar a su madre biológica.

—En realidad ambas lo son. Señora Coxx puede pasar.

—¿Por qué sólo ella? —preguntó con cierta ofensa Charlie.

—Solo puede haber dos personas máximo en la habitación pero bien metanme en problemas y entre todos.

Dije y todos de inmediato entraron, incluso Corey fue detrás de sus hijos para entrar en aquella habitación y observar a su hijo. Las pruebas habían sido estresantes y la cirugía aún más por lo que esta gran familia había causado un gran revuelo aunque ahora que los miraba sentía cierta ternura, era lindo verlos todos juntos riendo en una nueva etapa de su vida.

—Iré por algo de tomar, si alguien viene como excusa digan que pasaron cuando yo me fui.

—Eres la mejor.

—Claro que lo soy.

Le respondí a Dominic antes de salir, a diferencia del hospital en Londres, en Baltimore los pasillos son muchos más largos debido a la gran cantidad de habitantes por lo que las máquinas expendedores estaban mucho más lejos.

—Debes estar bromeando Julio —dije al hombre mayor quien se llevaba la máquina.

—Lo siento mucho Iris pero esta se va a mantenimiento.

—Esto se siente con crueldad, no debe hacer este tipo de cosas a una mujer como yo.

—El ejercicio es bueno para todos—bromeó Julio mientras se marchaba con la máquina por el elevador, lo único que agradecía era estar en el segundo piso así que no tendría que bajar mucho.  Aunque aún así era agotador ya que tendría que buscar la maquina hasta recepción.

—Tal vez debería comer algo también.

Me detuve en el pasillo cuando lo mire, Lex conversaba con su padre quien parecía estar muy animado, estaba segura que le contaba como todo ahora un completo éxito y como las cosas llevaban un buen ritmo, giro a verme y yo fingí no verlo mientras concentraba mi atención en la máquina, creo que solo compraría un jugo y me iría rápido.

—¿Estas en un breve descanso?

—¿Que? —pregunté mientras giraba a verlo
—. Si, aunque sólo venía por un jugo.

—¿Y sólo tomaras eso?

—Si, yo tengo mucho trabajo que atender.

—Mi padre me a dicho que no has comido.

Doctor David, ¿por qué me acusa de tal manera? Gire para ver al hombre quien me sonreia con un enorme pulgar arriba.

—Bueno yo...

—¡Ilis! —grito una pequeña mientras se acercaba para abrazar mi pierna.

—Hey, pero miren quien está aquí, si es la pequeña Aranza—cargue a la pequeña entre mis brazos antes de dar un par de vueltas haciéndola reír.

—Es un gusto verte Iris
—RoseMary se acercó con una enorme sonrisa.

—Y llegaron justo a tiempo, Dominic ya está despierto y aún faltan un par de minutos para sus siguientes pruebas —dije mientras bajaba a la pequeña al suelo—. Si se dan prisa podrán verlo, saben que las acompañó.

—No hace falta, conocemos el camino. Además estoy segura que estas ocupada.

Maldita sirenita con piernas estoy segura que sigue sin entender los llamados de auxilio disfrazados como excusas, ambas pelirroja se marcharon. Mire a Lex quien me observaba serio.

—¿Se puede saber la razón por la cual mi propia esposa me esta evitando?

—Se que me regañaras porque aun no e comido.

—Y estas en lo cierto—dijo mientras apretaba mis mejillas entre sus manos—.Vamos por algo de comer.

—Pero...

—Tu misma dijiste que aún tenían un par de minutos—tomó mi mano para llevarme hasta los asientos de espera en recepción, lo vi tomar una bolsa para sacar varias platos de comida.

—Si sigues alimentando de esa manera solo me engordaras.

—Es una manera de comer adecuada, y tarde o temprano terminaras ganando peso.

—Eres cruel.

—Solo es por tu bien—extendió la cuchara en mi dirección, abrí la boca para comer un bocado disfrutando del sabor de la comida, él tomó una servilleta para limpiar mi boca, mire alrededor notando las miradas curiosas de todos.

—Todos nos están observando.

—¿Acaso importa?

—Es vergonzoso.

—¿Y?

—Con qué sigues enojado, ¿cuando me lo perdonará?

—Dijiste que me lo recompensarias y esto aun no es suficiente.

—Vaya pero que ambicioso.

Bromee con él mientras recordaba lo que había sucedido lo de hace tres años atrás.
Lo que había sucedido aquel día en el aeropuerto sólo nos había causado un herida más grande pero al final sirvió para darle un completo fin a todo, ambos sabíamos que algo entre nosotros ya no funcionaria, solo era un sentimiento con una aferracion que lastimaba, decidimos que el tiempo lo arreglara. Ese mismo día me enteré que fue la propia RoseMary quien lo había traído al aeropuerto, al final esa sirenita con piernas no es tan mala solo era una persona con un gran corazón y un tanto tonta, al final ambos se casaron y una vez que tuvieron la nacionalidad se divorciaron, esa relación entre ambos es extraña debo confesar que esperaba un gran romance pero al parecer realmente sólo son grandes amigos, incluso su pequeña le dice tío a Dominic y en cuanto a ella consiguió un mejor empleo estable y aquel chico extranjero con la cual la vi abrazándose resultó ser el hermano de su difunto esposo quien ahora es su esposo, sigo insistiendo la historia de ellos si que es extraña y bueno, en cuanto a mí yo decidí mover algunas de mis influencias para tomar un avión privado para llegar antes a Baltimore, para cuando Lex llegó a su hogar yo ya me encontraba sentada en su sala y por supuesto que le di una gran bofetada por haberme dejado ahí y quitarme  el anillo pero gracias a eso por fin había logrado volver a comenzar mi amistad con Dominic, y bueno tuve que volver a pedirle matrimonio pero esta vez estaba bajo sus condiciones quien diría que este tonto americano sacaría sus verdaderas intenciones, aunque no me quejo es un excelente esposo. Aunque aún hay un extraño sentimiento de rivalidad entre él y Dominic, hombres, nunca los entenderé.

—Doctora Cooper hay una emergencia.

—Voy enseguida—dije con la intención de levantarme pero Lex me detuvo.

—Estoy seguro que alguien más puede ocuparse, llama a Karl y que él se encargue.

—Si doctor Cooper.

Mencionó temerosa la enfermera, así es, mi esposo es el que causa terror aquí y nada ni nadie se atreve a mirarme con malas intensiones, insisto tenerlo de esposo tiene sus ventajas.
Durante los últimos años han pasado tantos años, por ejemplo Ilan está estudiando para ser el heredero oficial de todos los negocios familiares por lo que Korden es su tutos, cosa que casi le causa un infarto a mi hermano, en cuanto a mi padre al poco tiempo que yo me casé él también lo hizo y con Raquel, sabía muy bien que ese par traía algo entre manos asunto que le causó el segundo infarto a mi hermano, ese hombre si que era un exagerado. En cuanto a mis amigos en Londres escuché que Jeremy tuvo una gran boda con Abby, por supuesto que ahí la infartada fue su madre cosa que pasó doblemente cuando su hija se caso con Zachary, un simple oficial de policía y tal como lo predije Charlotte terminó divorciadosa del hermano de Jeremy, aquello si que fue un gran golpe para la vieja arpía, en cuanto a Browen creo que consiguió el trabajo de sus sueños y ahora viaja por el mundo escribiendo varias noticias y en cuanto a su hermana, aquella pequeña se está preparando desde muy joven para convertirse en médico me alegra mucho haberla inspirado. Y bueno, ahora todos los Coxx están emocionados por la nueva noticia de Dominic, sin mencionar que están llegando los nuevos nietos.

—Estoy agotada —me tumbe en la cama una vez que me coloque la pijama—. Podría dormir durante varios días.

—Tu hermano llamó para confirmar nuestra asistencia para navidad.

—¿Y que has dicho?

—Que ya tenemos los boletos y que llegaremos un par de días antes.

—Será una gran sorpresa para él cuando lleguemos, ¿Crees que deba colocarme un moño?

—Creo que deberías preparar tu maleta.

—¿Por qué? Tengo un maravilloso esposo que sabe lo que me gusta ponerme y hace las cosas correctamente.

—Si claro.

—Habló enserio, tu forma de doblar la ropa me es tan exitante.

—Debo confesar que tus excusas para que realice tus deberes están mejorando.

—Cariño, tengo hambre
—dije haciendo un puchero.

—Déjame adivinar, tarta de frutas con una gran taza de chocolate caliente.

—Por eso te amo.

—Apuesto que si —dijo besando mis labios antes de marcharse a la cocina.

Mire la gran fotografía que colgaba en la pared, mi vestido de novia había tenido un estilo sencillo pero con flores adornando mi cabello y Lex en vez de mirar hacia la cámara me miraba con una gran sonrisa, yo había decidido que esa fotografía fuese la predilecta para el cuadro después de todo me encantaba la forma en la que me miraba, esa sonrisa tan enorme llena de felicidad con aquella mirada que reflejaba tanto amor. Aunque bueno para empezar casi todo el tiempo podía notar la felicidad de Lex, nunca lo oculto desde el primer momento en que me vio entrar con él vestido de novia hasta el día de hoy su mirada solo se centra en mi con una gran sonrisa y siempre cumple con su voto de cuidarme incluso en las grandes adversidad, un sentimiento que e correspondido todos estos años.

—Y doble fresas para ti
—Lex tomó una para dármela en la boca, me senté en la cama extendiendo mis piernas sobre esta para estar más cómoda.

—Luego te quejas que soy caprichosa pero me pregunto de quien será la culpa.

—Nunca me e quejado de ello.

—Lo veo en tu mirada.

—¿Que mirada? Yo solo digo que te amo.

—Si lo haces—Lex se acercó se acostó en la cama para recargar su cabeza sobre mis piernas
—y lo haces mucho más seguido ahora.

—¿Puedes culparme?

—Claro que no, tienes una esposa hermosa.

—Si la tengo.

—Y si tienes una esposa hermosa eso significa que tendrás un bebé muy lindo.

—Tendremos, el bebé es nuestro—dijo para besar mi pequeña barriga.

—No puedo esperar para llegar y darle la noticia a mi familia, estoy segura que Leslie se desmayar de la emoción, en especial papá saltará del alegría al enterarse que tendrá su primera nieta.

—No creo que se emocionen tanto como mis padres. Mi padre aún guarda la primera ecografía en su bolsillo y mi madre monitorea cada momento de tu embarazo.

—Bueno,son médicos y tienen la ventaja. Sabes estuve pensando mucho sobre los nombres y creo que ya tengo los ideales.

—¿Eso crees?

—Bueno, estoy segura de ello. Esther Carryn Cooper Shuster, suena hasta nombre de super heroe.

—Me encantan.

—¿Enserio?

—Por supuesto, nuestra pequeña Esther Carryn volverá locos a todo el mundo.

—No dudes de ello, en especial a los chicos, sólo espero que no seas un padre celoso.

—Nuestra hija será lo suficientemente lista como para no desperdiciar su tiempo en algo tan banal como los hombres.

—Suenas seguro de ello.

—Lo estoy, además solo aprovare al hombre lo suficiente temerario para estar con ella, por que estoy seguro que antes de mi tendrá que pasar por una larga lista de hombre furiosos que querrá protegerla.

—Con ver una fotografía de mi hermano será más que suficiente para auyentarlos.

—Lo sé, por eso no preocupo por ello. Lo único que quiero ahora es a mi pequeña sana.

—Yo también... Oye recuerdas nuestra conversación sobre que tener hijos.

—Ni lo menciones.

Mencionó mientras escuchaba el pequeño ladrido de nuestro carrocho quien se acercó moviendo la cola para que lo subiera a la cama.

—Incluso duque esta ansioso por conocer a su nueva hermanita—dije tomando al cachorro entre mis brazos quien se abrió espacio para acostarse cerca de mi barriga —irónica esta familia de cuatro.

—Yo diría que maravillosa.

—Si, así es.

Hace tiempo mi madre me explicó lo complicado que puede ser el amor, pero en especial lo ciego que era este y no, no se refirió a los actos irracionales que este suele provocar, ni a tolerar los malos tratos, más bien es ciego en el sentido de pasar por algo los pequeños defectos, aquellos cosas pequeñas como una cicatriz o un terrible acento turístico, es ciego porque convierte los malos momentos en Buenos, que te hace olvidar todo lo malo en cosas maravillosas. Mi madre me enseñó que el amor vale mas que el oro, que es mas precioso que cualquier joya, que es mas fuerte que el acero, que es tan ciego ya que no es algo que se encuentra tan fácilmente. Por eso decidí buscarlo ciegamente hasta que lo encontré.

Capítulo dedicado a:
VMjami