Al otro día desperté más feliz que nunca, pensando en el recuerdo de ayer, que no era posible lo que me había pasado, que todo sólo era un sueño. Se me hacía tan distante y lejano, algo realmente borroso al recordar. La manera en que me halagó no era normal para una persona a la que apenas conocías - si es que se podría decir "conocer"- Pero al fin y al cabo, eso no me serviría para hoy en día.

  Como todo día me cepille los dientes y fui a lavarme la cara; ya era cotidiano en mi vida. Nunca olvidaré como me veía en él reflejo del espejo- manchado y sucio- Con ojos soñadores y una sonrisa de adolescente enamorada.

  Si tu me conocieras en persona, te sorprenderías de verme feliz, ya que; nunca estaba contenta. Siempre estoy enfadada, o con cara de algo que me molestara. Si estaba feliz era porque me pasaba algo, o era por alguien.

  Me bañe y me vestí para ir al colegio, con una franela y shorts deportivos - era día de hacer ejercicio- y me fui con mi papá como era costumbre.

No podía esperar para contárselo a mis amigas - si es que puedo decirles así ahora- ya veía sus expresiones de impresión y también de que no lo podían creer. Eran tres mejores amigas las que eran muy importantes para mí, sus nombres eran Fabiola, Francesca y Carolina. Ellas fueron las que me apoyaron en mis momentos más difíciles que tuve en mi vida social y familiar, como ésto. Me encantaba la manera en que nos ayudábamos mutuamente, como si nunca nos separaríamos en toda nuestra vida, pero no estaba en lo correcto.

  Recuerdo que a la primera que le conté lo sucedido fue a Francesca, ya que, sabía que si le decía a Carolina y Fabiola iban a decir que estaba loca, o tal vez ; no le agradaría Alex. Fracesca, estuvo algo impresionada por aquella historia que conté. Su primera oración que tuvo después de terminarla fue :

"Creo que te está empezando a gustar"
 
  Yo, impactada le dije que no, es decir, ¿Cómo me podía gustar alguien que ni siquiera conocía personalmente?. Además, estaba más que asegurada que si lo conociera, no se fijaría en mí ni una sola vez. Por mi aspecto, y la manera de ser que tenía; testaruda y algo posesiva. Era como una mezcla de dulce y salado. Amable cuando me lo proponía e insistente cuando quería.

   Toda la mañana estuve pensando en él, aunque mis amigas me sacaban de mi ensueño cada vez que podían. No le prestaba atención a la clase, mi único pensamiento - algo estúpido para mí en este momento- era hablarle, conocerlo un poco más y saber de su vida.

   Quería llegar a mi casa para conectarme en Facebook. Estaba acelerada con todos mis pensamientos. Pero, a la hora de la verdad tuve tantos nervios que decidí esperar dos días, una espera algo eterna para mí.

  La conversación la comencé yo (como la mayoría de veces que hablaba con Alex). Saludándolo y preguntando como estaba y qué hacía. Me dijo que estaba bien y que no hacía nada. Algo que era prácticamente imposible, de tantas cosas  que podrías hacer en la vida. Pero creo que estoy saliéndome del tema. El punto es que me preguntó :

  "¿Podrías pasarme fotos de tu cara?"

   Estaba nerviosa, lo único que pensaba era si yo no le gustara por como era. Es decir, desde que era pequeña siempre me habían dicho gorda, fea,y otros adjetivos que prefiero guardar para mí. Ya  para mí era un hecho, la palabra gorda estaba quemada sobre mi cerebro y mi memoria. Yo sabía que no le iba a gustar. Tuve varias ideas -algo no muy realistas pero por lo menos lo eran-  mandarle una foto de una de mis amigas o tal vez, buscar una chica en internet con extremada belleza y así utilizar sus fotos para engañarlo. Al final, decidí utilizar una foto mía con una amiga - más linda que yo por supuesto- y le recalqué que yo era la de la derecha, con malos gustos de ropa y el cabello despeinado.

  Lo único que hizo fue preguntarme por mi amiga. Como por ejemplo, ¿Quién era? Y ¿De dónde la he conocido?. Le respondí todas, que ella era del colegio y que era una de mis mejores amigas lejanas. Para romper el hielo, le hice una broma :

  "Creo que si soy fea, jajaja estás preguntando por mi amiga y no por mí"

Sólo respondió las siguientes palabras :

  "Jajaja no, al contrario eres bonita Emily. Me encantan tus ojos , nariz y labios❤"

     Mi corazón jugaba por mi mente.Quería decirle lo mismo aunque no estaba preparada. Se me hacía que Alex era el mejor chico que había conocido - todos tontos y algo estúpidos- Alex, era maduro,sincero y directo para decir las cosas ; sin pelos en la lengua.  Pero yo, era todo lo contrario, soñadora,inmadura y algo insistente.Apostaba, que si me conociera, hubiera salido espantado y corriendo con una sola mirada de mis ojos negros pensativos

Era pequeña,tonta e ingenua, todo lo que busca un chico mayor  para jugar.