Capítulo 54: Amar (Chuuya)
"Amar: Es un verbo transitivo que hace referencia al más puro interés que alguien es capaz de sentir por otra persona"
Luego de un tiempo abrazados, Dazai se separó con una expresión algo avergonzada, siendo sincero, es la primera vez que veo aquella expresión en su rostro
- ¿Qué? – pregunte con curiosidad
- Eres realmente una buena persona, Chuuya – me comento con seriedad con una leve sonrisa – Y sinceramente no te merezco, así que haré todo lo posible para que seas feliz, ¿Te casarías conmigo?
Me reí ante ese último comentario, aquí vamos de nuevo, en su rostro estaba escrito que no hablaba enserio
- No tengo pensado casarme en buen tiempo, Dazai, así que pregunta dentro de unos 10 años más – dicho eso me incorpore del escalón
- Pensé que dirías que si por el ambiente, no sabes leer entre líneas, cara de muñeca – se quejó como si hubiera sido parte de sus planes
- Si, si, como quieras - ¿Me pregunto que me diría el jefe si le dijera que me casare a esta edad? Seguro encuentra el modo de dispararme. Sonreí ante eso, si, estaría furioso
- Pero hablaba enserio... realmente hare todo lo posible para encuentres tu felicidad, Chuuya – me encontré con su determinada mirada - ¿Puedes creer en ello?
Sus palabras se interpusieron con las que me dijo mi jefe hace algunas horas...
"Piensa bien en lo que quieres hacer ahora, muchacho, empieza a crear bien tu felicidad"
- Yo... puedo creer en ello – conteste con aquella pregunta que resonaba últimamente en mi mente... ¿Qué es lo que quiero hacer ahora? – Quiero comer un helado – comente en voz alta sin querer, logrando que Dazai se riera divertido ante eso
- Debe haber algo abierto a estas horas, ¿Compramos y regresamos a casa? – me comento levantándose del escalón al mismo tiempo que me agarraba de la mano con naturalidad
Me sobresalte un poco ante lo último... en realidad, hay algo que quiero decirle, algo que he estado pensando y que creo haber logrado encontrar una respuesta... así que, no creo que funcione si estamos en el departamento
- ¿Chuuya?
- Oh...¿Por qué mejor no caminamos por la bahía? Veamos el amanecer aprovechando que estamos fuera, quiero ver el mar – aprete de su mano de regreso con una leve sonrisa
Ah maldición... me esta mirado fijamente...¿Por qué tiene que ser tan inteligente?
- Bien, si Chuuya lo quiere así – fue todo lo que dijo
Lo mire con sospecha, pero el solo me sonrió como si no fuera un gran problema.
Para mi sorpresa había una pequeña tienda abierta a estas horas de la madrugada, aunque, estuvimos en silencio un buen rato luego de comprar los helados, más de una vez me pregunte como debía iniciar la conversación sin lastimarlo, no quiero hacer eso...mucho menos ir en contra de esta confianza que poco a poco hemos ido construyendo
Mi mirada se distrajo en todo momento en la playa, no nos habíamos acercado a ella, pero desde la calle se podía observar y escuchar el sonido del mar mientras caminábamos
- Yo...- nuevamente las palabras quedaron atrapadas en mi garganta sin darles espacio para salir, así que, opte por adelantarme unos pasos de él - Yo... hay algo que quiero decirte – finalmente pude decirlo a esa pequeña distancia
Escuche una suave risa
- ¿Estas terminando conmigo, Chuuya? – me pregunto sobresaltándome, tenía una sonrisa en sus labios que de algún modo era dolorosa de ver
- ¡No! ¡No es eso! – me detuve a medio paso al igual que él
- Entonces, si no quieres que tenga el pensamiento equivocado, deja de esquivar mi mirada - esas palabras hicieron que lo buscara bruscamente con su mirada – Ahí están esos bellos ojos, ya me estaba asustando que no me miraras – me sonrió con cierta melancolía – Te escucho, Chuuya, no tenías que tener miedo de ir al departamento para decírmelo ¿Estabas asustado de que dejara encerrado con llave?
Trague con fuerza ante eso
- ... ¿Por qué me dejarías encerrado?
Se encogió de hombros, rompiendo esa leve distancia entre ambos con unos pocos pasos. Una de sus manos llego a mi rostro, colocando un mechón de mi cabello detrás de mi oreja, dejando que su mano se apoyara en mi mejilla, impidiéndome alejar la mirada de nuevo
- Porque Chuuya... me está mirando como si se fuera a ir por mucho tiempo – fueron suaves palabras que no lograban alcanzar el fuerte significado detrás de ellas
Sostuve su mirada sin poder negar lo que me estaba diciendo, y eso solo parecía aumentar esa tristeza tacita entre los dos
- Y tú me miras como si te estuviera abandonado – susurre quitando su mano de mi rostro
- ¿No lo estás haciendo? – su comentario salió junto con una pequeña risa sin alegría
Me mordí el labio ante esa pregunta, sin poder contestarle como él espera... no quiero que suene a una despedida que será para siempre porque no es así... pero ¿Cómo debo explicárselo? Mire hacia el mar por un segundo, en esta zona hay una pequeña playa bajando cierta escalera sino me equivoco
- Acompáñame un segundo, Dazai – le comenté adelantándome sin esperar su respuesta, bajando rápidamente la escalera quitándome los zapatos y calcetines apenas llegué a la suave arena – Nunca me había dado el tiempo de venir aquí – le sonreí mientras caminaba hacia la orilla del mar
Dazai me regreso la sonrisa, solo mirándome mojar mis pies en el agua
- Yo tampoco, pero, ten cuidado, Chuuya, las olas son más grande que tú, podrían llevarte
- ¡No me voy a acercar a las olas! - ... procese un segundo si insulto mi altura o técnicamente las olas eran más altas que cualquier persona, pero Dazai solo me estaba sonriendo como si no hubiera dicho nada malo
- ¿No te gusta Yokohama? – me pregunto en cambio captando mi atención
- Es mi hogar – conteste con suavidad, es el lugar donde están las personas que quiero y casi todos mis recuerdos llenos de felicidad – Nunca se abandona un hogar, por muy lejos que vayamos – me encontré con su mirada – Por eso tampoco te estoy dejando, Dazai, pero... si te pediré algo egoísta que puedes rechazar sin culpa - Le sonreí con cierta tristeza
- No sé si quiero seguir escuchando Chuuya – contesto sin dejar de mirar a mis ojos con seriedad – No apuesto cuando sé que perderé
Suspire ante eso tirando un poco de agua con mis pies, dice eso, pero aun así está atento a lo que voy a decir
- Yo...durante mucho tiempo me tuve que mantener en un solo lugar porque... siempre tuve miedo a que si viajaba a otro lugar me encontraría con ese asqueroso bastardo, nunca estuve seguro de donde venia solo que Yokohama era seguro... – me explique golpeando con fuerza el agua deteniendo con mi habilidad las gotas que podrían caer sobre mi o Dazai, lanzándolas lejos – Pero... ya no tengo necesidad de eso – le sonreí sintiendo con alegría que ese peso había desaparecido de mi corazón – Yo quiero conocer... quiero usar esa libertad que me ayudaste a tener, Dazai... quiero conocer otros lados que no sean Yokohama
Su mirada se apartó de mis ojos, dirigiéndola hacia la luna que alumbrara está tranquila noche
- No es solo eso ¿Verdad, cara de muñeca? – termino por decir con calma – Quieres alejarte un tiempo de toda la muerte y la sangre, por eso, no puedo ir contigo
Me sobresalte ante eso, haciendo una mueca... si, eso era cierto, pero no era por eso por lo que Dazai no podía acompañarme
- No te he relacionado en ningún momento con algo que quiera alejar – aunque... es la persona que más está rodeada de sangre y muerte, aun así... Dazai no es alguien a quien quiera fuera de mi vida
- ¿Estás seguro? – su mirada estaba opacada por una profunda oscuridad – Sabes, Chuuya, desde que me prometí no volver a hacerte daño, me pregunte como podía hacerlo si soy la representación del peligro, no soy una buena persona y no creo que lo sea con alguien que no sea tú, pero ¿Es justo para ti estar con alguien como yo? Alguien que vive de hacer daño a los demás...
- Yo también he matado a muchas personas, Dazai
Me sonrió, pero era aquella sonrisa que no veía desde hace tiempo, una sonrisa que no lograba llegar a sus ojos
- No, Chuuya, es distinto, yo acepte entrar a este mundo por voluntad propia, pero tu fuiste arrastrado – su mirada sostuvo la mía por un largo segundo antes de volver a hablar – El mundo de la luz siempre ha sido tu lugar, cara de muñeca, eres sin duda... una luz brillante en esta oscuridad donde me encuentro, por eso... no puedo dejarte ir - Me le quede mirando sin saber que decir ante esas palabras...- así que... si realmente te causa miedo y asco el que este a tu lado por todo el daño que hago... solo me queda cuidarte desde la distancia, cara de muñeca
Fruncí el ceño ante lo último que ¿Asco? .... ¿Acaba de decir miedo y asco?
- Espera tu...¿Qué mierdas estas diciendo? ¡No hay modo de que sea por eso! ¡Te amo lo suficiente como para aceptarte así, imbécil! – las palabras que escaparon no pasaron por ningún filtro gracias a mi enojo, pero tuve el leve pensamiento de que cuando estuviera solo me avergonzaría – Eres un idiota, un maldito idiota ¿No te he dicho lo mucho que te necesito en mi vida? ¿Lo mucho que te quiero en ella cada día? ¡Te has convertido en la persona que más espacio está ocupando en mi corazón! y ¡Aun así te atreves a decir eso! ¡Termina de escuchar lo que tengo que decir antes de que me insultes, bastardo!
Exhale agotado por lo que había dicho, solo notando unos segundos después lo que acaba de gritarle, escuchando una pequeña risa divertida
- Estoy seguro de que no me lo habías dicho, cara de muñeca – me aclaro con una sonrisa que si alumbraba su mirada
- Oh... bueno, ahora lo sabes – espete de mal humor, aunque para mi sorpresa, comenzó a caminar en mi dirección, parecía no importarle que sus zapatos se mojaran con el agua salada, tomándome por cintura a penas me tuvo a su alcance
- Hmm... ¿Quieres probar la inmersión en el mar? – me pregunto subiendo una de sus manos a mi rostro, acariciándolo con suavidad
- ¿Inmersión? – repetí pestañeando en confusión
- Ahogarnos
Si... quizás debí esperarme eso
- ¡Ya te dije que no me voy a suicid... - fui rápidamente interrumpido cuando atrapo mis labios entre los suyos, manteniéndolos juntos por un segundo que sentí eterno, fue tan repentino que solo cuando reconocí a mi corazón latiendo desesperado contra mi pecho pude cerrar mis ojos en busca de mas
Después de tantos besos dulces solo puedo decir que este beso estaba lleno de una desesperación que se había estado conteniendo, se tragaba cada uno de mis intentos de respirar y mordía con suavidad mis labios hasta que escuchaba como me quejaba por el pequeño dolor que causaba, permitiéndose solo entonces lamerlos casi como si quisiera disculparse por ello
Su mano subió desde mi cintura por mi espalda, con lentitud, no importaba que estuviera usando una camisa, aun así, diversos estremecimientos placenteros me recorrían, logrando que me estrechara con él mordiendo su labio como venganza
Los segundos se convirtieron en minutos, y solo quiero aferrarme a cada detalle que puedo sentir de sus labios, quiero grabarlos para siempre en mis recuerdos de tal modo que nunca más se puedan ir, con un suspiro me aferre a su camisa en un intento de no caer al suelo por el temblor en mis piernas. Dazai pareció comprender que si seguía capturando mis intentos por respirar terminaría por desmayarme, así que, sonrió contra mis labios dejándolos ir de la placentera tortura que fue aquel beso
Sus brazos me rodearon con un cariño que abrigo mi pecho
- Yo también te amo, Chuuya – me comento posando sus labios en mi cabello por un segundo
Cerré mis ojos escuchando el latido de su desesperado corazón, era casi como si nuestros latidos de hubieran sincronizado, la prueba perfecta de que todo que dijimos fue enserio
Gracias por leer ❤️❤️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top