Capítulo 33: Preterir (Chuuya)

Preterir: verbo transitivo que significa hacer caso omiso de una persona o una cosa”

Es curioso cómo solo hace unos días atrás no recordaba nada de lo que está ocurriendo en estos momentos. Se que en ese tiempo me sentía extrañamente cómodo pero incompleto, aun así, nunca imagina que la parte que me faltaba fuera tan asquerosa.

Sentí como la fuerza en mis piernas me estaba abandonando por cada segundo que utilizaba mi poder. Era difícil estar herido y tratar de controlar la gravedad, fácilmente podía destruir todo el edificio, pero…Atsushi y el imbécil de Dazai quedaran atrapados bajo los escombros.

Me detuve apoyándome en una de las paredes que aún no había destruido. Lleve mi mano a mi boca, tratando de no vomitar.

El constante golpeteo en mi mente me mareaba a tal punto de solo querer rendirme. Pero esa nunca sería una opción.

Pensé que morir seria menos doloroso…Mierda, ya estoy pensando como el idiota de Dazai.

Y Hablando del diablo…

- ¿Dónde estás, Dazai? – mi voz seguía gastada pero no pude evitar decirlo en voz alta.

No lograba encontrarlo por mucho que destruyera habitación tras habitación, sé que estuvo aquí, la sala de tortura no es algo difícil de reconocer. Pero, Dazai no estaba ahí.

Lleve mis manos a mi cabeza con dolor. Mierda, que insistente. No puedo detenerme aquí.

Apoye por completo mi espalda en la pared. Solo un segundo…solo un segundo.

- “¿No es más fácil rendirse?”

Negué con la cabeza con fuerza, como si eso me fuera a ayudar a que saliera

- ¡Fuera.de.mi.cabeza! – lo dije con la mayor fuerza que pude teniendo en cuenta mi desgastada voz

- “Me gusta estar aquí” – esas palabras resonaron en mi cabeza, como si las hubiera dicho a una habitación vacía

Sin importarme que mis piernas ya no me funcionando del todo, seguí caminando

Quizás no se lo admitiría nunca, pero, el hecho de que pudiera hablarme a mi mente me estaba poniendo nervioso. Sobre todo, por que significaba que cada vez mi resistencia contra su absurda habilidad se iba desvaneciendo. Si lograba atraparme…

Negue con la cabeza. No, eso no pasara.

- Dazai, si sobrevivo a esto juro que golpeare tu maldito rostro – susurre destruyendo otra pared ¿Por qué tiene que desaparecer cuando se le necesita?

Nuevamente encontrándome con solo un pasillo, me pregunto cuanta gente estará siendo herida y cuantos habrán logrado escapar por todo el lio que estoy causando.

Como sea, el fin justifica los medios, al menos en estos momentos, además, no es como si la gente con la que me he encontrado fueran buenas personas. Pase por sobre los escombros de la pared rota, logrando llegar con éxito a otro maldito pasillo.

Mire a mi alrededor algo confundido ¿De dónde recuerdo este pasillo? No había puertas, ni ventanas a lo largo de este lugar en específico. Una puerta en específico llamo mi atención ¿No es esto…

Tosi con fuerza, inclinándome ante la falta de aire que llegaba a mis pulmones.

Que…repulsivo es todo esto

Cuando deje de toser, me acerque a esa maldita puerta. No la abrí como cualquier otra persona lo hubiera hecho, sino que simplemente la hice polvo dejando ver su interior con mayor facilidad.

Vaya, no ha cambiado nada. Supongo que nunca perdió la esperanzas de atraparme o solo la usaba para alimentar sus fantasías conmigo.

Agarre entre mis manos el peluche de oso que había sobre la cama. La mirada del animal solo me hacia sentir asco.

No me di cuenta del momento en que exploto producto de mi mas o menos controlada habilidad.

- Mierda – gruñí recordando el significado de esta habitación.

Mire alrededor recordando la primera vez que me trajo a esta habitación en específico. ¿Cuándo habrá sido? ¿Habré tenido diez u once años? En ese tiempo no me importaba mucho lo que hicieran conmigo. Un niño haría lo que fuera por hacer sentir orgullosos a sus padres, en mi caso, ese padre siempre fue Ivankov. Yo hacía todo lo que me ordenara, matar a quien fuera o resistir los constantes entrenamientos que me harían “más fuerte”

¿Cuánto puedes soportar, Krasivyy?

Ni una mierda, estaban torturando a un niño y el imbécil de Ivankov realmente disfrutaba de verlo.

La primera vez que entre en esta habitación, ese supuesto “Padre” me trajo de la mano no dejaba de decirme que un regalo por portarme tan bien con ellos.

Había tantos juguetes hechos específicamente para un niño de mi edad.

El solo me observaba jugar con ellos durante horas, luego se retiraba en silencio. Dejándome solo en esta habitación hasta que un subordinado aleatorio pasaba por mí horas después. Ers todo lo que pasaba...

Si tan solo…si tan solo hubiera sido un regalo inocente y no me hubiera enterado de lo que hacía después, quizás nunca hubiera huido, manteniéndome finalmente a su lado.

Ese imbécil nunca me toco...pero no significa que no haya querido hacerlo

El recuerdo solo me hizo sentir mas nauseas. Golpee con fuerza la pared queriendo borrar ese recuerdo de mi mente

- Mereces algo peor que la muerte, imbécil – gruñí irritado con todo lo que estaba viendo. Hay miles de razones para odiar a ese desgraciado, pero ¿No tengo derecho a odiarlo solo por este hecho en particular?

Pensé que…pensé que la había destruido la última vez que estuve aquí.

La habitación se veía borrosa. Pestañee tratando de enfocar la mirada, mientras más me concentraba mas notaba que la habitación perdida detalles y color.

Esto es…

- Mierda ¡Deja de jugar con mi cabeza!

A penas me di cuenta de que todo era una ilusión creada por Ivankov volví a estar en el maldito pasillo que hace un rato. Me apoye en la pared mareado

- “¿No era un lugar que te tranquilizaba?”

- Cállate – le espete sin poder moverme. Esta cada vez más cerca de alcanzarme. Mientras mas cerca esta de mí su poder aumentar.

Según lo veo, no parece tener prisa en atraparme. Su confianza en que me va a capturar es demasiada.

- “Pensé que así te lograría dejar descansar ¿No quieres dormir un rato, Krasivyy?”

No sé cómo podría explicar la sensación de cansancio que se apodero de mí. Una sensación de cansancio acompañada por una un sentimiento de impotencia, odio e Ira.

Esa combinación no era buena cuando tienes una habilidad como la mía.

Normalmente cuando caes sientes el golpe y el dolor del acto, yo solo note que el mundo se giraba antes de terminar en el suelo. Nada más, al menos un poco de dolor extra me podría haber despertado de mi estado de somnolencia. Pestañee cansado. Los tatuajes estaban brillando en mis brazos. No quiero que se active esa parte de mi…realmente no lo quiero. Por mucho que lo repetí en mi mente, no es como si pudiera haberlo evitado. Estaba…tan cansado.

De todos modos, es mejor morir por culpa de la corrupción que vivir sin mis recuerdos y ser una maldita marioneta.

Cerré mis ojos agotado. Lo que sea, que se active la maldita corrupción. Mire de reojo como el tatuaje iba apoderándose poco a poco a de mis brazos.

- No es agradable verlos de nuevo – comente irritado

Entre mis pestañeos al perder mi racionalidad, pude notar como pasos tranquilos se acercaban a mí.

- En lo personal, me gustan mucho esos tatuajes, cara de muñeca

Levante la mirada para encontrarme con la mirada divertida de Dazai. Parpadee confundido

- ¿Por qué diablos? – le susurre con mi voz agotada. ¿En qué momento apareció?

Dazai me frunció el ceño al escucharme agachándose para quedar en mi campo de visión

- ¿Qué le paso a tu voz? – me comento agarrando mi mano. Suspire aliviado al sentir como las habilidades en mi se anulaban. La falta de dolor, la sensación de alivio en mi mente fue suficiente como para que notara que esto no era otra ilusión, aunque, por otro lado, ahora que lo veía con claridad. ¿No acababan de torturarlo? Como diablos es que parece que solo paso por un campo de flores.

- ¿Estoy en el infierno? – el susurro salió lo suficientemente claro como para que él lo comprendiera

- ¿Es tu forma de preguntarme si estas muerto, Chuuya? – me comento incorporándome en sus brazos con facilidad. Deje caer mi cabeza sin fuerza en su hombro, sintiendo como el dolor se alejaba de mi cuerpo. Al menos el provocado por la maldita habilidad. Dazai me miraba atento. Soy solo yo… o está realmente molesto, no es como si su sonrisa burlona me dijera algo, pero el color oscuro en su ojo me deba bastante mala espina- Un muerto no podría estar hablando con un vivo – me espeto en cambio

- ¿No eras tú… el diablo?...El diablo… no puede morirse – le susurre sonriéndole divertido

Levanto una ceja. Sus labios temblando me decían que estaba aguantando la risa, al menos un poco de la ira se marchó de sus ojos.

Iba a decir algo más, pero la tos me interrumpió. Mierda, debería dejar de seguir gastando mi garganta

Dazai tenia el ceño fruncido mientras me miraba

- Estas muy herido, cara de muñeca

Hablando de heridas…

- Iba… a decir…lo mismo…cuando…te viera – le conteste golpeándolo con el puño en el pecho. Aunque fue un golpe sin fuerza. Con lo mucho que quería golpearlo en la maldita cara - ¿Cómo es que…te ves tan bien?

Me sonrió con petulancia

- Siempre me veo bien

Volví a golpearlo con el puño en el pecho, pero con toda la fuerza que pude reunir. Por la mueca que se apodero de su rostro supe que logré golpearlo de buena forma

-Tu …llegas tarde…idiota – le susurre con cansancio. Le inste a que me dejara apoyarme por mi mismo. Solo logre que me atrajera hacia el con mas fuerza. Tenía el ceño fruncido mientras le devolvía la mirada – Bájame, Dazai

- Si te suelto te caerás, Chuuya

- Estoy bien

Bueno, teniendo en cuenta mi segura mala apariencia por las heridas y mi voz claramente destrozada, tampoco confiaría en ese “Estoy bien”

- Y tengo que creerte ¿Por qué…

- Solo bájame, Dazai – le espete de mal humor.

Él se encogió de hombros antes de hacer lo que le pedía.

- Te vas a caer – me advirtió quitando todo contacto físico conmigo

- Estoy bie…

Un repentino mareo me hizo caer hacia el frente. Mi orgullo nunca me dejaría admitir que, si no fuera por que me agarro del brazo, ya estaría en el suelo.

- ¿Decías?

- Cállate- le espete molesto, dejando que me sostuviera por el brazo. Al menos no intento volver a cargarme en brazos. - ¿Dónde…estabas? – le comenté tratando de no quejarme por el dolor de forzar mis cuerdas vocales…era un alivio que estuviera a salvo.

No pareció escucharme, su mirada fija en mi cuello. Llevo su mano libre a este. Me queje sin poder evitarlo por el ligero dolor de su suave caricia en la quemadura que me habían causado las contenciones. Tome su mano por la muñeca intentando que dejara de tocar la herida, no es que me doliera su toque, pero, era una sensación extraña. Cuando deje de intentar alejarlo, dejo de presionar, en cambio continúo tocando la quemadura con suavidad ¿Estaba tratando de que me dejara de doler?

- ¿Qué…es…lo que te…pasa, imbécil? – le comenté frunciendo el ceño. Nunca podre entender que pasa por su maldita mente de Dazai

- ¿No te ordene algo antes de comenzar la misión, cara de muñeca? – me comento como si su mano en mi cuello no fuera un gesto amenazante. Rodé los ojos ante eso ¿Cuál de todas sus malditas ordenes?  - ¿Quieres que te ayude a recordar?

No podía quitar mi mirada de la suya ¿Cómo diablos me iba a ayudar a recordar? Fuera lo que fuera que planeaba no me daba buena espina. No cuando me miraba de ese modo. Trate de recordar. ¿Qué diablos está tratando de decirme? Cuando el recuerdo me golpeo parpadee sorprendido

- ¿No puede ser… que esa estúpida orden… de no salir lastimado fuera en serio? – le susurre consternado. ¿De verdad iba a castigarme?

- Siempre hablo enserio, Chuuya – me contesto dejando ir mi cuello. Solo para agarrar a continuación mis muñecas. Miro con una mueca las quemaduras en ellas – Completamente en serio – repitió como si se tratara de convencer de algo

Suspire. Lo que sea, si quiere hacer algo al respecto será después de que terminemos con esta misión

- No es momento de…. tratar mis heridas, Dazai – le comenté, aunque no intente soltar mis muñecas. Asi estaba bien – No tardara mucho… en aparecer – le susurre finalmente. Tragando para intentar que mi garganta dejara de doler. Sin mucho éxito. Su mirada se quedó fija en mis ojos. Me pregunto que fue lo que vio en mi rostro que lo hizo fruncir el ceño- Asi que, …. antes de que aparezca…. ¿Me puedes decir donde mierda fuiste?

Dazai suspiro. Aunque termino por sonreírme como si hubiera logrado algo muy grande

- A buscar la solución a tus problemas – mientras decía eso comenzó a rebuscar en sus bolsillos

Gracias por leer hermosos seresssss ¿Cómo han estado? ¿Cómo llevan esa cuarentena? ¿Ya se tiñeron el pelo por la desesperación?... yo me lo teñí rubio kjajkajkakj❤❤❤❤❤❤❤❤❤

Tengo la semana libre del 1 al 6 de junio, y esta semana no tengo evaluaciones así que tratare de actualizar día por medio. Es que tengo unas ganas de escribirrrrrrrrrrrr

Por cierto, estaba mirando una confesión sobre cuantas palabras escribían algunos escritores de fanfic en un capítulo, y yapo, yo suelo escribir entre 2000 a 3000 palabras, que son más o menos 6 o 8 páginas de Word respectivamente. Lo máximo que he escrito son unas 8000 palabras, que son cerca de 33 páginas de Word (el oneshot) y para mi eso es mucho que leer en un cap😫😫

Pero wey, había personas que escribirán capítulos de 12.000 palabras, ósea, ¿Cómo lo logran? Mis respetos para ellos😮😮😮

Eso es todo lo que tengo que informar por esta semana

Besossss~

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top