Capítulo 26: Tocar (Dazai)
“Tocar: Verbo transitivo/verbo intransitivo que hace referencia a poner en contacto una parte del cuerpo, especialmente las manos, con una cosa, de manera que esta impresione el sentido del tacto”.
- ¿Qué te hizo, Chuuya?
La duda estaba en su mirada. Incluso abrió la boca un par de veces para evaluar lo que debía responderme. Finalmente negó con la cabeza mientras empujaba mis manos lejos de él. Busco con la mirada algo con lo que taparse.
Se formo un silencio incómodo. Aproveche de observar las heridas que por mucho que el intentara ocultar, sobresalían por su color de piel. Eran pequeños moretones a lo largo de su torso y seguro de su espalda, como si hubieran golpeado repetidas veces sin parar con ira. Aunque lo que mas destacaba eran las marcas de mano que se aferraban a su cintura y hombros, parecían haber sido causadas con toda la intención de demostrar posesión. Quiero asesinar a alguien, es una pena que ese alguien no este en la habitación
Estaba temblando. Como si aquello que lo había sostenido toda la vida de repente se hubiera esfumado como si nunca hubiera existido en realidad. Quizás era eso lo que ocurría en su mente en estos momentos.
Me senté a su lado apoyándome en la marquesa de la cama, se sobresaltó por el sonido
- Ven aquí, cara de muñeca – Se me quedo mirando sin moverse así que terminé por atraerlo a mis brazos
- Estoy bien, Dazai
- No he dicho lo contrario – le dije sonriendo por cómo me devolvió el abrazo con fuerza. Sus manos temblaban contra mi espalda, pero poco a poco fue recuperando la compostura
Lo he observado, puede parecer alguien que odia el contacto, pero en realidad es lo que más lo calma. Nos quedamos así unos segundos.
Desde que conozco a Chuuya siento que me he vuelto mejor con el gesto de consolar. Siempre he sabido que es una forma efectiva para sacar información. Cuando la persona esta relajada parece querer confiar más, por lo tanto, habla más fácilmente. Sin embargo, con Chuuya se siente bien. Me apoye un poco más en él. Si, Chuuya es realmente cómodo
- Solo cerré los ojos un momento– me susurro luego de un tiempo, dejando caer su cabeza contra mi pecho – Cuando los abrí estaba mirándome en la esquina de la habitación y tenía esa desagradable mirada… - se separo de mi con más confianza – pero estoy bien, Dazai, no me quebrara de nuevo
Asentí. No tiene porque explicarse, incluso si se quebrara de nuevo no lo dejaría ir. Casi inconscientemente lleve mis manos a las marcas que tenia en la su cintura
- No te atrevas a dejar otra marca encima, Dazai – me espeto antes de que apretara sobre esta
- No iba a hacer eso – creo, no estoy seguro de mi conducta en estos momentos
- Pareces más enojado que yo – me espeto malhumorado. Parpadee ante eso, ¿Es eso lo que estoy sintiendo? Me miro confundido por lo que sea que fuera la expresión en mi rostro – Dazai, ¿Por qué-
El sonido de una fotografía siendo tomada nos distrajo a ambos, la cámara de la habitación parecía haber sacado una foto
Cuando llegue con él, desconecte todos los micrófonos y cámaras que habían instalado, pero para aparentar deje la que le había señalado hace unos minutos. No quería que vinieran a molestar mientras Chuuya descansaba. Aunque puede que haya sido un error, sobre todo por la mirada despiadada que apareció en sus ojos
- Odio que imbéciles me observen – gruño de la nada levantado la mano con su poder activado. La cámara que había emitido el pitido exploto hasta convertirse en un polvo casi inexistente. Conecto su mirada con la mía, la ira brillaba en sus ojos azules – Cuando lo tenga cerca voy a matar a ese pedazo de mierda – Me agarro con firmeza por la camisa, atrayéndome hacia el – No quiero que me detengas, Dazai, no importa lo que pase después, ya he tenido suficiente de su control en mí
- ¿Por qué te detendría? – Parpadeo sorprendido por mi pregunta.
- ¿Por evitar una muerte? – lo dijo como si fuera obvio. Le sonreí
- ¿Crees que me importa si ese bastardo muere? – le espete jugando con su cabello, enredándolo entre mis dedos. No aprecia molestarle ese gesto – Puedes hacer lo que quieras
Sus ojos brillaron llenos de secretos. Lo sé, sé que Chuuya no me ha dicho todo sobre su conexión con ese tipo, pero la sonrisa arrogante que me regalo me hizo olvidar cualquier interrogatorio.
- No te metas en mi camino – me dijo simplemente. No sonó como una amenaza. No cuando su mirada brillaba tan confiada, no pensé que volvería a ver esa mirada en él
- Mientras sigas al pie de la letra la misión no hay problema, Chuuya
Su sonrisa desapareció ante la mención de la misión en la que estábamos
– No pude averiguar dónde estaba, pero…dijo que vendría por mi
- Vendrán primero por mí, así que no te preocupes – le dije soltando su cabello, era una distracción demasiado grande. Es un desestresante eficaz
- ¿Qué? ¿Por qué? – le sonreí con burla, así que eso no había pasado por su cabeza
- Seguro vendrán con la excusa de que su jefe quiere hablar conmigo en privado para silenciarme, en ese tiempo tratarán de llevarte a una sala aparte, seguro al subterráneo que me mencionaste en la playa para poder contactarte con Ivankov– él tenía los ojos abiertos por completo
- ¿Cómo sabes eso?
- Es el plan mas adecuado para alejarme de ti, cara de muñeca – lo mire a los ojos con seriedad – Necesito que vayas sin quejarte, recuerda que se supone que tu collar si funciona
Él hizo una mueca
- ¿No podemos solo salir de aquí? – parecía reacio a ir con ellos, aunque era mas desgrado que miedo lo que venía de su parte
Negue con la cabeza
- Atsushi seguro está en algún problema – le comenté con sinceridad. Él de inmediato me presto atención – Encuéntralo, necesito saber que pasa con las personas de este lugar
Parecio recordar algo ante mis palabras
- Ivankov estaba herido, estaba herido en el sueño- me miro conternado - Tenia la mordida de un animal... casi como si fuera la de un tigre
- ¿Crees que Atsushi tuvo contacto con él? - le pregunte con seriedad
- En la vida real no, es muy cuidadoso con su privacidad pero...pudo haber contactado con él en un sueño y allí fue cuando lo lastimo
- No sacaremos nada deduciendo, Chuuya ¿Porque mejor no le preguntas directamente si lo pudo herir en sueños?
Este me asintio con lentitud.
- ¿Y que pasa con Akutagawa? – me pregunto confundido
- Akutagawa está bien – le dije con simpleza. Si todo va de acuerdo con lo que he planeado debe estar en ese lugar – Ahora, dejando eso de lado, tengo un último pedido
- ¿Qué cosa?
- Si te encuentras con Ivankov no luches– le sostuve la mirada- Corres lejos, hasta que lo pierdas de vista
- Dijiste que no ibas a interponerte en mi camino
- Y no lo hare – le dije con sinceridad, iba a cumplir esa parte del trato- pero…solo espérame
El asintió dudoso. Tengo mis razones Chuuya
- Espero que sepas lo que haces, Dazai – me dijo finalmente
- No he fallado con mis predicciones, Chuuya– le dije encogiéndome de hombros. Ese movimiento de hombros hizo que me mirara el torso. Le sonreí divertido cuando se alejó rápidamente de mi lado
- ¡Estas casi desnudo! – no dejaba de mirarme por la sorpresa
- Primero, solo tengo la camisa desabrochada y con las vendas puestas– le espeté levantándome de la cama –Segundo, tu si estas sin casi desnudo – busqué en la habitación hasta dar con esos absurdos uniformes blancos del lugar, pasándole solo la camisa, este se la puso rápidamente – Y tercero, estaba a punto de bañarme cuando decidí venir a mirarte así que deberías tomar responsabilidad
- No me bañare contigo, idiota – exclamo a la defensiva
- Y yo no pienso dejarte aquí solo de nuevo, Chuuya
- Mantengo lo que digo, Dazai – cada vez estaba mas enfadado. Al menos ya no esta con miedo en su cuerpo, aun así…
Lo agarre de la mano con firmeza.
- No te atrevas, bastardo
Le sonreí, esto iba a ser divertido
- Chuuya, no estés de tan malhumor – le espete terminando de arreglar mi corbata
- ¡Pensé que me ibas a obligar a bañarme contigo, idiota!
- ¿Y dejar que veas lo que hay debajo de las vendas gratis? – le espete quitándole la tela que le había colocado en los ojos.
Lo lleve al baño y lo deje sentado en una esquina con la tela sobre sus ojos mientras me bañaba. Lo hice hablarme todo el rato para saber que estaba despierto.
Parpadeo ante el cambio de luz, intentando acostumbrarse a esta, sus pupilas volvieron poco a poco a la normalidad
- No quería ver lo que hay debajo de las vendas, Dazai – me exclamo huraño
- ¿Aun no quieres preguntar que es lo que pido para saberlo?
- No – fue una negación completamente cortante.
- Puedes preguntar cuando quieras, Chuuya – le comenté terminando de colocar mi bléiser negro encima – No es una historia tan interesante
Nos quedamos mirando hasta que se escucho como golpeaban la puerta con suavidad
- Señor Dazai, el jefe está dispuesto a verlo – gritaron fuera de la puerta
- Salimos de inmediato – grite sin quitar la mirada de Chuuya
Se creo un silencio fuera de la habitación
- Señor Dazai, solo solicitaron su presencia, Nakahara-san debe esperar aquí – comento con seguridad – No se preocupe, estará completamente a salvo mientras ustedes conversan
Con una pequeña sonrisa moví labios para Chuuya
“Te lo dije” – le gesticulé
Me sonrió divertido. Aunque parecía nervioso
- Estarás bien, cara de muñeca – le dije revolviéndole el cabello. Este suspiro
- ¿Tú estarás bien? – me dijo sorprendiéndome. ¿Cuándo me habían preguntado eso?
- ¿Ya te acostumbraste a mi compañía? ¿No quieres dejarme ir? Estoy tan conmovido que lloraría ¿Quieres suicidarte conmigo ahora? – le dije en cambio con burla en mi tono de voz. Este chasqueo la lengua
- Cállate, idiota – me dijo quitando mi mano de su cabello- Solo pregunte por el bien de la misión. Ve y cáete a un pozo
La sonrisa en mis labios era real, no puedo recordar un momento antes de conocerlo en el que sonriera de esta forma. No se siente nada mal
- Hasta luego, Chuuya, no me demorare tanto – le comenté poniendo mi mano en la manija del baño para salir. Su mirada llena de nervios me detuvo
- ¿Qué?
-…Suena como si no fueras a volver pronto, Dazai – me contesto son seriedad.
Ladee un poco a la cabeza al escucharlo decir eso. Así que hice lo único que se me ocurrió para que dejara de mirarme tan consternado. Bese con suavidad sus labios. Solo fue un segundo, no quería dar un espectáculo gratis en este lugar. Y, sobre todo, solo buscaba tocarlo antes de separarnos. Abrió sus ojos ampliamente ante el gesto. Le sonreí divertido, hay cierta entretención en molestar a Chuuya
- Que significa esto – me susurro con sus ojos fijos en los míos
- Es un hasta luego más real
- No me refiero a eso idiota - Me miro frustrado.
Se lo que quieres preguntarme, cara de muñeca, no es difícil de inferir lo que deseas preguntar, pero es una repuesta que ninguno de los dos aún tiene.
Ambos nos miramos fijamente, se que su mirada determinada era un buen augurio. Mis planes no fallaran
- No te vayas a quedar dormido, Chuuya – le espete medio en broma medio en serio
- No lo hare, idiota – me espeto recuperando su conducta llena de seguridad – Solo vete
Me reí divertido. Le di un último vistazo antes de salir de la habitación, la puerta se cerro con suavidad en mi espalda. Es hora de cumplir con mi parte del plan.
El chico que se nos presento en la mañana me esperaba fuera
- El jefe lo espera en su oficina
Mire alrededor unos segundos, todo es blanco. Nada útil para matar a alguien.
- Me gusta la decoración de este lugar, como que dice: “Bienvenido a casa, pero espero que te vayas pronto” – le espete sin dejar de mirar alrededor. Es obvio que van a intentar eliminarme, como si fuera tan fácil contactar con un jefe de una organización - ¿No crees lo mismo?
- Sígame
- Claro, la muerte no espera a nadie
Se congelo ante eso.
- ¿Dije algo malo?
- No… no es nada
Comenzó a caminar por el pasillo, aunque aprecia estar huyendo de mí. Me guío hasta unas escaleras que parecían bajar hacia otra habitación completamente oscura. Era casi como bajar a una caja sin salida.
- Está esperándolo allí abajo – dijo con rapidez, parecía solo querer irse
- Bien – le señale la escalera - ¿Bajas primero?
- ¡No! – su grito aterrorizado no me sorprendió. Se aclaro la garganta – Digo, no tengo permitido ver al jefe
- No te preocupes, le explicare que necesito a mi guía a mi lado o podría perderme – le dije con voz asustada
- Es solo una habitación – lo sé, claro que lo sé
- Cualquier cosa podría pasar – le dije encogiéndome de hombros – Bajas un segundo y luego te vas
Miro la escalera que bajaba como si esta fuera a comérselo.
- Solo un segundo – susurro sin dejar de mirar.
Mire hacia abajo pensando en el comentario de Chuuya de: “Ve y cáete a un pozo”, creo que estoy a punto de hacerlo. Sonreí un poco ante eso, pero mi rostro volvió rápidamente a la normalidad
- ¿Entonces?
- Me dijeron que no bajara – insistió aún más nervioso
- No es como si fueras a morir por bajar - Trago con fuerza - ¿O morirás si bajas? – me miro aterrorizado
- Yo… bajare solo un segundo
Le sonreí con falsedad.
- Gracias, no sé qué haría si me perdiera allí – suspire como si fuera mi mayor temor.
Siguiéndolo baje las escaleras. Las luces no se encendieron cuando llegamos a la habitación. Cuando trabajas con la sangre es fácil reconocer su olor, y esta habitación apestaba a ese liquido
- Tengo que irme ahora, señor – me exclamo el chico caminando hacia la escalera, pero algo lo tomo arrastrándolo hacia el fondo de la habitación.
Antes de que terminara de gritar se escuchó el chasquido de un cuello roto. Silbé ante eso, siento que ese debería haber sido mi cuello. Lo mismo debe haber pesando el asesino porque se apresuró a agarrarme. Golpeándome contra la pared, no sentí cuando se acercó a mí. Y no solo por la habitación oscura, sino porque no hacia ruido al caminar, como si en vez de asesinar solo estuviera paseando.
Me sostenía el cuello con fuerza, apretando cada vez más. No pude evitar pensar en el perfecto ataque que había sido, no sentí las intenciones asesinas…solo conozco a una persona capaz de hacer eso
- ¿Atsushi? – exclame con mi voz apenas saliendo.
Las luces se encendieron de golpe. Encontrándome con unos ojos completamente transformados en los de un tigre, sin ninguna emocion en ellos.
- ¿Eres Atsushi?
Me miro sin intenciones de dejar de estrangularme, sus intenciones aun eran de querer matarme, lo cual se hizo más evidentes cuando enterró sus garras en mi piel. Es como si hablara con su tigre
Aunque repentinamente me soltó mi garganta, alejándose de mi con paso apresurado. Casi tropezando en su prisa. Se sostuvo de la pared mientras me analizaba
- ¿Dazai-san…? – sus ojos volvieron a la normalidad, a diferencia de hace unos segundos su mirada era claramente de desesperación - ¿Eres Dazai-san? – luego murmuro para sí mismo - ¿Por qué me dejo ir? ¿Es un tiempo fuera?
- ¿Acabas de intentar matarme? – le comenté tocando donde había enterrado sus garras, no es la primera vez que logra darme un golpe, pero es la primera vez que es un golpe hecho sin emociones– Bien hecho, Atsushi-kun
Que orgullo, se había demorado en atacar de este modo. Sin embargo, es algo que Atsushi-kun nunca haría
- No…yo no quería hacerle daño -espeto mordiéndose el labio con fuerza, tenia sus colmillos transformados así que se estaba provocando un gran daño. La sangre fluyo por su labio herido.
- Atsushi, vas a destrozarte los labios – le comenté intentando acercarme, pero este se movió para evitar que lo tocara.
- No se acerque, Dazai-san, no estoy bien…no me encuentro bien – Su voz estaba temblando mientras me hablaba – Casi… lo destrozo, quieren que lo destroce, pero… Yo pude regresar a tiempo…pude regresar a tiempo…si no hubiera sido así, le habría arrancado la garganta…yo no quiero arrancarle la garganta, Dazai-san, no quiero hacer eso
De la nada me gruño, aunque se tapó la boca con ambas manos, poniendo presión para que el sonido no saliera
- No quiero…no quiero – se estremeció con fuerza, su cuerpo parecía estar teniendo mucho dolor.
Se lo que esta ocurriendo…aun así…necesito preguntar
- Atsushi, sé que diré algo que claramente se ve, pero ¿Estas en control de ti mismo? – le comenté sin moverme de mi lugar. Su mirada que cambiaba de un momento a otro a la de un tigre solo parecía querer asesinarme.
De la nada se quedo quieto, enfocando su vista en mí. Tenia una mueca de dolor. Intento hablarme, pero su voz no salía, se dejo caer por la pared, como si las fuerzas lo fueran abandonando. Pero negó con la cabeza para mi
- ¿Es por una habilidad?
Volvió a negar con la cabeza. Eso solo nos deja con una opción…
- Es Byakko – aprete los puños con rabia al ver como asentía casi llorando. ¿Por qué se había pasado de nuevo? La última vez que paso esto…Pensé que no pasaría de nuevo. Comencé a caminar hacia él, aunque solo causo que el se apegara aun mas a la pared, parecía aterrado
- No se acerque, Dazai-san – me espeto estirando las manos en el aire como si con eso pudiera detenerme – Tengo ordenes de cortar su cabeza
Me detuve ante eso
- ¿Estas siendo controlado también?
Este asintió nervioso.
- Tiene…tiene que irse, no se porque, pero me dejo conversar con usted – me dijo con la voz ronca, sus ojos parecían haber recuperado su color – pero si se queda aquí, lo matare
- No me importa eso, Atsushi-kun – le espete, tengo que intentar averiguar si puedo devolverlo a la normalidad. Coloque mi mano en su brazo, pasaron algunos segundos, pero Atsushi se veía igual de alterado, y sus ojos cada vez se veían más despiadados. Antes de que pudiera decir algo se alejó de mí, tenia los puños apretados, la sangre goteaba de esto debido a las garras que atravesaban su piel
- No siento a Byakko como antes– me susurro con voz ronca, lo dijo tan de repente que mi mente no proceso el cambio de tema hasta que el sonido de su voz solo se convirtió en un débil eco cada vez sonaba más como un animal – Ahora solo hay un desconocido en mi cabeza
Su voz sonó más segura que nunca ante esa afirmación. Atsushi era alguien que siempre mostraba vulnerabilidad en su forma de ser, así que este cambio solo venia de la profunda desesperación que seguro estaba experimentando.
- ¿Quién te hizo esto?
Un gruñido salió de lo profundo de su garganta. Nuevamente la voz no parecía querer salir de su garganta.
Supongo que no puede decirlo
- Yo…- Negó con la cabeza desesperado, luego me murmuro - Los niños aún pueden ser salvado, Dazai-san
Esta hablando de la misión
- Están usando a las personas para…para forzar habilidades en ellos, pero a los niños aun no, …hay que sacar a los niños– me susurro con rapidez, casi como si el tiempo nunca mas fuera a volver para el – Los adultos…a ellos los usan con más facilidad, Dazai-san
- Atsushi – observe como uno de sus ojos ya estaba completamente trasformados. Su tiempo fuera se estaba acabando
- No deje que tengan a Chuuya-san… – me espeto finalmente antes de que su voz se cortara.
Sus manos se trasformaron por completo en garras, en menos de un minuto, estaba en una habitación con tigre furioso, este comenzó a gruñirme. Sentí como la muerte caminaba por la habitación ante eso. Su tigre me odiaba, nunca me había soportado del todo, pero ahora sentía el verdadero odio de su parte
Solo puedo decir que baje la guardia al ver a Atsushi-kun de este modo. No me trae recuerdos agradables verlo tan descontrolado. Es lo único que puedo decir como excusa por no sentir como alguien se acercaba a mí por mi espalda.
Mire como sorprendido el cuchillo que sobresalía de mi costado. De inmediato golpee hacia atrás pero mi mano estaba aturdida. Ya veo, tiene algún tipo de sedante. Mi vista se volvió borrosa mientras caía al suelo
- Bien hecho, Atsushi, lo tenemos – escuche como unos pasos me rodeaban. El tigre le gruño, pero no lo ataco. Debe ser quien lo controla – El jefe estará feliz
Gracias por leer 💖💖💖
Siendo sincera tengo el siguiente cap listo pero.... ¿No hay cierta diversión en dejar la duda? Con amorsh
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top