"Sobreponerse: Verbo pronominal hace referencia a superar un problema o una situación difícil o no dejarse abatir por un estado de ánimo".

Me gusta pensar que soy una persona paciente, claramente no el rey de la paciencia, pero paciente, a fin de cuentas. Sin embargo, desde que conozco a Dazai, solo me considero paciente con todos los que no llevan su nombre, es decir, solo es cosa de mirarlo para que uno se desespere. Seguro algunos dirán que exagero, pero hasta su forma de respirar me irrita por completo.

Como ahora, me estaba observando con una sonrisa divertida y los ojos llenos de misterio mientras el ascensor sube al piso del jefe de la Port Mafia.

- ¿Que mierda te pasa? - le gruñí ya desperado, él puso cara seria, pero no engaña a nadie con esa cara falsa

- ¿Porque lo preguntas, cara de muñeca? - me dijo con fingida voz seria

- ¡No me engañaras con esa cara! ¡Estabas sonriendo desde que entramos al ascensor! - le dije desesperado, el volvió a poner su sonrisa de: "¿Eres idiota?" ¡No hay sujeto más irritante!

- ¿Acaso no tengo permitido sonreír, querido Chuuya?

- Estas tramando algo en mi contra, te conozco lo suficiente como para saberlo - le dije entrecerrando los ojos, él solo se apoyó en la pared sin perder su sonrisa hacia mi

- Por supuesto que no, solo te persigues solo

- Dime porque te reías, Dazai

- Si te lo dijera ya no sería gracioso, y dudo que lo comprendas si no te has dado cuenta solito

Siento que escuche el sonido de mi hilo de paciencia romperse. Sin siquiera analizarlo me lancé contra el tomándolo por la solapa de su camisa y levantándolo del suelo. Él ni se inmutó, incluso se rio más divertido.

- Te diviertes a mi costa, bastardo - le gruñí, a lo que solo levanto su mano y agarro mi cabello. No lo tiro, parecía estar analizando algo

- Me he estado preguntando ¿Es tu color natural?

Me quede mirándolo confundido, ¿Pero qué le pasa?

- Si - le respondí inconscientemente, casi por inercia.

- Me gusta, es de un color tan feroz como tú

Me dio una sonrisa llena de felicidad y sus ojos brillaban con cariño. Realmente no lo entendía, me usa como se le da la gana, sin olvidar que vendió mi alma al diablo, pero me mira y me toca como si de verdad le importara.

- Eres muy extraño, bastardo- le dije con sinceridad

- Me han dicho cosas peores, cara de muñeca

- ¿Porque será que no me sorprende? - le dije soltándolo del agarre, suspirando ante esto. Me recargué en la pared contraria del ascensor y cerré mis ojos. ¿Qué iba a hacer? ¿Como iba a resultar todo esto? Claramente no era una solución que fuera alcanzar de la noche a la mañana, pero efectivamente sentía que nada bueno iba salir de esto. Aun no quiero morir, no quiero...pero si volviera a sus malditas manos, preferiría mil veces cortarme el maldito cuello...No...no puedo pensar así, Dazai me estaba contagiando sus malditos impulsos suicidas, pero ¿No era mejor morir a volverme su marioneta sin voluntad propia? Una que solo cumpla sus más mininos deseos....porque eso es lo que va a ocurrir si vuelvo con él

Abrí mis ojos aún más cansado que antes, bien, un paso a la vez Chuuya, debes empezar caminando para luego correr, o me caeré. Mire de reojo a Dazai, este me miraba sumamente atento, sin su sonrisa habitual, pero si con una seriedad intimidante

- ¿Que? - le espete huraño

- Te ves patético - me dijo con seriedad.

- ¿!AH!? - me erice por completo ante ese comentario. Pero preferí no replicar, ante eso se tensó y algo peligroso paso por sus ojos, como cuando lo conocí por primera vez. Sin más se acercó a mí de una manera que podría parecer un leopardo con su presa, de forma elegante, pero sin dejar de demostrar que era el cazador y no la presa. Se detuvo cuando solo un suspiro separaba nuestros cuerpos. Fruncí el ceño cuando ante mis ojos solo estaba su pecho, no iba a subir la mirada para observarlo. Pero el frustro mis planes levantando mi mentón con su dedo índice, haciendo que nuestras miradas se conectaran

- Odio esa mirada en ti, cara de muñeca- me susurro con una voz suave que se contradecía con su mirada misteriosa.

- ¿Mi mirada? - le dije confuso

- Es irritante, no soporto verla

- ¡Nadie te obliga a hacerlo, bastardo!

- Pienso pasar un largo tiempo a tu lado, lo mínimo que puedes hacer por mí es mirarme como antes

- No entiendo ni una palabra de lo que me dices - él me frunció el ceño, y sin dejarme siquiera pesar sus acciones, atrajo mi cabeza hacia el de forma brusca, hasta que estuve apoyado cerca de su corazón, parpadeé ante eso, luego con suavidad comenzó a acariciar mi cabello con una se sus manos mientras que con la otra me abrazaba con suavidad. Cuando hice ademan de separarme, el utilizó fuerza para mantenerme quieto

- ¡Que mierda estás haciendo! - le dije ya completamente desorientado por sus acciones

- Shhhh....tranquilo, Chuuya, ya verás que saldrás bien de esto- me dijo en cambio con suavidad en su voz, yo me tense por completo - ya verás como en poco tiempo estas en tu rutina diaria, usando ese desagradable sombrero, trabajando en tu bar e incluso leyendo ese libro tuyo, te lo prometo Chuuya

- No puedes prometerme eso - le dije con la voz ronca por sentimientos que no podía dejar escapar pero que parecía que había el notado a través de mi máscara

- Claro que puedo, y me asegurare de cumplirlo - me dijo sin dejar de mecerme con un cariño que nunca hubiera relacionado con él. Así que solo por un segundo me apoye en esta persona, aun cuando quizás sus palabras solo eran para usarme, sin embargo, seguía siendo uno de los pocos que parecía tener un sentimiento de preocupación.

- Me hiciste daño - le espete luego de unos segundos con sinceridad. Él se paralizó y con lentitud dirigió su mirada a la mía, atento

- ¿Cuándo? - me susurro, yo solo lo mire, el pareció entenderlo a los pocos minutos

- Te hice daño, Chuuya- me respondió confirmando todo, dejando caer con suavidad su frente con la mía, apoyándose- Mucho daño, usé tu confianza, y destruí cualquier indicio de esa viveza en tus ojos, pero, no lo volveré a hacer...

- No creo que tu palabra sirve mucho ahora, Dazai- el me sonrió sin dejar de apoyarse en mi

- Lo sé, pero lo demostrare Chuuya

Sentí como me dejaba llevar por el extraño momento. El igual pareció notarlo, ya que con una suave sonrisa acercó sus labios a los míos, hasta que nuestros labios compartían el oxígeno del otro. Con cuidado cerré los ojos.

- Estoy seguro de que te di una habitación para Dazai-kun, así que ¿Porque están usando mi ascensor como plaza pública? - dijo una voz divertida desde afuera del ascensor. De inmediato reaccione empujando lejos a Dazai, el cual tenía una mueca molesta pero inmediatamente la cambio por su típica sonrisilla molesta, dejando atrás cualquier rastro del cariño que me había mostrado antes. Siento que estoy completamente sonrojado, parece ser que el ascensor llevaba un buen rato con la puerta abierta pero no nos habíamos dado cuenta.

- No sabía que disfrutabas observar a otros teniendo intimidad, Mori-san~ - le dijo Dazai burlón

- No suelo hacerlo, pero si lo empiezan a hacer frente a mí, no me quedan muchas opciones ¿Verdad, Dazai-kun?

- El problema no es que hayas mirado el problema es que interrumpiste mi toqueteo con Chuuya

Parpadee ante eso...espera ¿Qué?

- ¿Es así? Aun así, no puedo permitir que se estén desnudando sin casarse primero ¿Cuándo pensaban casarse, Dazai-kun?

Mire horrorizado la conversación de ambos, y, antes que de decir cualquier cosa...

- ¡Yo no me voy a casar con este bastardo! - grite indignado ambos me miraron con el ceño fruncido, ¿Ahora yo soy el malo?

- ¿Entonces no niegas que se estaban toqueteando en mi ascensor?

- ¡No estábamos haciendo nada! - le espete enfadado

- Entiendo - dijo el jefe asintiendo compresivo - por otro lado, ¿Por qué no te casaras con el? Me explico que no quieres entrar a la Port mafia, pero no estaría mal que te unieras a través del matrimonio Chuuya-kun ¿No te casaras con él porque está muy delgado, usa vendas gastadas y de paso hace miserable a la gente de su alrededor?

- ¡Si! - dije sin pensar, pensando que me daría la razón, sin embargo, quede mas consternado que hace un rato - Digo ¡No!

- Pero igual tiene cualidades buenas, Chuuya-kun- me dijo con una sonrisa, ignorando mi último comentario, mire de reojo a Dazai para ver si me iba a defender, pero este se estaba mirando las vendas con el ceño fruncido ¿Pero que mierda hace? Sin embargo, el continuo - Por ejemplo, ¡Tiene una gran fortuna que heredar!

- ¿La tengo? - pregunto Dazai confundido, ¿Que les ocurre a estos dos?

- Claro que la tienes - continúo asintiendo - y...tiene otras cualidades buenas. por ejemplo...hummm...Dazai-kun te las dirá

Bien, esto me interesaba, mire atento al idiota y este me sonrió

- Tengo una gran fortuna que heredar - dijo, no pude evitar sonreírle por el comentario estúpido, luego solo negué con la cabeza

- Creo que hay un error, realmente no me casaría con él por su dinero

- Pero si por mi cuerpo

- Si, por tu cuerpo... !Bastardo! eso no es cierto ¡¿Porque estás haciendo caso a esto?! ¡No nos vamos a casar! ¡Ni siquiera me lo has pedido!

- ¿Ese es el problema? - dijo el jefe con una sonrisa, y luego le hizo una seña a Dazai con la manos - ¿Cuándo se lo pedirías? Me gusta el plan de que se case contigo

- ¿Quieres casarte conmigo, Chuuya?

- No están entendiendo, ¡Yo no me voy a casar! A menos que...

- ¿A menos que? - dijeron esos dos al mismo tiempo, los mire cohibido

- Ya saben, uno se debe casar por amor no por obligación - les dije negándome a sonrojarme, se quedaron en silencio unos segundos, hasta que Dazai comenzó a reírse con ganas, lo miré enfadado, no es como si hubiera dicho algo gracioso, miré de reojo al jefe, pero este en cambio me miraba con una mirada pensativa y una sonrisa algo triste

- No pensé que escucharía esas palabras de nuevo - dijo pensativo, lo mire curioso, su mirada, aun cuando estaba proponiendo que me casara era bastante distante, pero ahora parecía tener cierto rastro de felicidad, luego negó con la cabeza y se dirigió hacia la puerta al final del pasillo, dando a entender que quería que lo siguiéramos. Aprovechando que nos había dado la espalda, golpee con fuerza a Dazai en su maldita cabeza, de inmediato paro de reír y me miro con una mueca

- Chuuyaaa, eso no es justo, solo me causo gracia tu inocencia y sentido del romanticismo, teniendo en cuenta que hoy día lo importante es el sexo- me dijo con una sonrisa burlona

- ¡Cállate! - le espete enfadado, este me comenzó a mirar curioso

- ¿Solo te casarías por amor?

- Si es que me caso - le dije cruzándome de brazos

- interesante, nunca se me paso por la cabeza la palabra amor junto con el matrimonio - me dijo pensativo

- ¿Es así? - le pregunte con curiosidad - ¿Entonces no te casaras?

- No es eso, me casaría, quizás, dependiendo de cierta variable

- ¿Cuál?

- Cara de muñeca, claramente hablo de lo compatible que seamos en la cama - me dijo comenzando a sonreír

- Eres un cerdo - le dije con una mueca - ¿No me estabas pidiendo casarme contigo hace solo unos minutos? Ni siquiera sabes como soy en la cama - le comenté en burla

- Me arriesgaría contigo - me dijo con una extraña sinceridad, pero sin quitar su mirada burlona - aunque, podríamos averiguarlo ahora ¿Qué opinas?

No pude evitar reírme divertido por esto, el me miro ofendido

- No, gracias - le dije con sarcasmo, mientras comenzaba a caminar hacia la oficina de ¿Mori-san? El me siguió curioso

- ¿Solo si hay amor? - me dijo hablándome en general, levante una ceja hacia el

- Si

- ¿Es algo de tu lista de vida?

- Si, esta escrita en ella - me detuve de golpe, girándome para enfrentarlo- ¿Cómo sabes eso?

- ¿Qué cosa? - Me pregunto con inocencia

- Sobre mi lista de vida, Dazai - le exclame completamente confundido, no se lo había dicho nunca a nadie, él me sonrió

- ¿No todos la tienen? - me dijo en cambio, lo mire con sospecha, el se rio, y sin más se adelantó, ingresando a la oficina de Mori-san. Ni crea que olvidare esto, le preguntare apenas pueda. Entre detrás de Dazai, enfocando mi vista de inmediato en Mori, el cual estaba detrás de su escritorio

- Entonces ¿Que me quieres preguntar Chuuya-kun? - me dijo, sobresaltándome, mientras comenzaba a escribir en unos documentos, Dazai solo se apoyó en la pared del fondo, escuchando.

- ¿Qué es lo que quiere la Port mafia conmigo?

Mori, dejo de escribir y me miro atento

- Dices la "Port Mafia" como si en realidad estuviéramos detrás de ti

- No soy estúpido, tengo bastante experiencia con las organizaciones criminales, así que, quiero mi repuesta - le exclame sin siquiera asustarme un poco de este hombre.

- No te equivocas, en realidad te queremos con nosotros, se identificar una buena inversión cuando la veo- murmuro con una sonrisa

- Aun así, me entregaron - le dije apretando los puños ante ese detalle, pero Mori no perdió su confianza

- Era solo como seguro para mantenerte aquí, después de todo, el único que puede detenerlo de acercarte a ti es Dazai-kun - me dijo comprendiendo de inmediato, no dudaba de que lo fuera comprender, por algo es el maldito jefe de la mafia

- ¿No contaban con que solo me fuera?

- Si, para ello pensábamos en matarte - me dijo con una sonrisa, observe como Dazai se tesaba - sin embargo, Chuuya-kun, tenerte con nosotros solo es la primera parte del plan

- Lo sé, supongo que solo soy el plato de entrada ¿Qué es lo que realmente quieren? - le dije encogiéndome de hombros

- Sabia que eras inteligente, veras, Chuuya-kun, Solntsevskaya es una organización que últimamente nos ha estado trayendo más problemas de lo normal, solemos hacer la vista gorda ante lo que hacen, pero, han estado usando gente de Yokohama para sus queridos experimentos, y eso es algo que como Port mafia no puedo permitir, está burlándose de nuestro poder bajo nuestras narices

- ¿Es así? - dije estremeciéndome un poco ante la palabra experimento, sentí como Dazai colocaba por un segundo su mano en mi hombro, dándome algo de apoyo, lo miré contrariado ¿Cuándo se acercó?

- Si - dijo Mori mirando el gesto algo sorprendido

- Mori no lo va a admitir - dijo de la anda Dazai riendo con suavidad - pero seguro también es por Atsushi, no quiere que se lleven al niño que le recuerda a su primer amor

- No se parece a el - dijo con tranquilidad Mori, quizás le hubiera creído si no fuera porque rompió en dos el lápiz que tenia en la mano, Dazai solo se rio con burla - ¿No crees que estaba de más ese comentario, Dazai-kun?

- Nop, Chuuya pidió detalles específicos - le respondió sin perder su tono de burla

- ¿Primer amor?

- Eso no es importante - dijo Mori con el ceño fruncido

- Claro que lo es, es una historia digna de contar - exclamo Dazai con malicia -tranquilo, Mori-san como consuelo te diré que el primer amor nunca funciona

- En ese caso, estas advertido, Dazai-kun - respondió con una sonrisa mientras nos miraba a ambos, hice una mueca ante eso

- ¿Qué quieres decir? - le espeto Dazai

- Dejemos eso de lado - espeto Mori con un suspiro - Chuuya-kun, dimos contigo luego de el ultimo evento en el que te involucraste, pero hay que admitir que te seguíamos la pista desde hace un tiempo, después de todo el jefe de Solntsevskaya has estado buscando a su querida mascota sin descansar

- No le digas así- Mire a Dazai y aunque estaba sonriendo, se notaba que estaba enojado, lo empuje con el codo, el me miro con una mueca

- Esta bien, estoy acostumbrado a que me digas así - le espete encogiéndome de hombros, luego me dirigí hacia Mori- Pero no significa que me guste

- Mis disculpas, solo que es interesante que un muchacho como tu haya encantado tanto a ese espeluznaste sujeto ¿Quieres contarnos?

- No, no es necesario - le dije sonriendo con sarcasmo - además, no hablare sin tener un seguro de que cumplirían mis condiciones

- Te escucho

- No me uniré a ustedes -le dije sin escrúpulos- no me salí de un infierno para entrar a otro, pero puedo ayudarlos mientras dure este tiempo

- ¿Algo más? - me dijo pensativo

- No crean que me quedare observando como hacen todo, quiero participar en la misión directamente y por, sobre todo, no quiero que me persigan o me busquen cuando esto haya acabado, cuando esto acabe, simplemente me dejan tranquilo ¿Puede aceptar eso?

- ¿Tendremos tu participación completa si acepto?

- Si

- Bien, pero mientras la misión dure estarás a cargo de Dazai-kun - dijo sin más mientras volvía a escribir en sus documentos, me tense, pero no reclame, sabía que su habilidad era la única que podía detener a ese sujeto, aunque me costara admitirlo

Dazai estaba bastante serio, me sorprende que no haya participado de esto, pero parecía querer darme mi espacio

- Me sorprende que no esté insistiendo en que reconsidere mi condición de entrar a la Port mafia - le dije con sospecha, Mori me miro con una sonrisa escalofriante

- Confió en que sabrás cuál es tu mejor opción cuando llegue el momento, Chuuya-kun, después de todo, los humanos saben que para sobrevivir hay que sacrificar ciertas cosas

- ¿Eso es una amenaza? - le dije con seriedad

- Claro que no, por otro lado, siempre te puedes casar con Dazai-kun

- ¡Ya dije que no! - le dije enfadado, el no perdió la sonrisa

- Dejo a mi heredero cualquier detalle que puedas decir sobre Solntsevskaya, el me informará luego

- ¿Quién es? -pregunté confundido, Mori parpadeo sorprendido

- Dazai-kun, por supuesto

Mire shokeado al bastardo, que solo me saludo con la mano alegre.

Terminado de hablar con Mori, bajamos con un silencio cómodo, apenas estuvimos de vuelta en su departamento lo mire atento.

- ¿Y? ¿Como empezamos? - le exclame, a lo que me señaló la hora con su teléfono

- Esperaremos una llamada - me dijo con una sonrisa

- ¿De quién? - le dije con el ceño fruncido

- Atsushi - me respondió cantarín

- ¿Como sabes que te llamara? - le dije sorprendido

- Lo hará y mientras esperamos, tu y yo conversaremos sobre algunos detalles, cara de muñeca

Me tense, comprendido a lo que se refería, me senté en el sillón y lo mire serio

- ¿No tienes algo de alcohol fuerte? - le dije mirando a mi alrededor

- No, no, no Chuuya, no más alcohol para ti

- Bien, bastardo, solo pregunta, aunque no deberías confíar mucho en mi memoria, tengo varias lagunas que no puedo rellenar - le dije serio

- ¿Como se llama el jefe de Solntsevskaya? - lo mire confundido

- Esa es una pregunta estúpida, imbécil. Ustedes ya saben su nombre- el me sonrió con misterio

- Si, eso es cierto, pero si no puedes mencionar su nombre sin congelarte del miedo ¿Cómo esperas enfrentarte a su organización, cara de muñeca?

- ¿Qué? ¿Me vas a hacer terapia? - él se rio divertido

- Puedes pensarlo como quieras, ahora, dime su nombre mirándome a los ojos, hazlo real, Chuuya - me espeto con seriedad, yo inhale con suavidad y luego exhale, bien, ese desgraciado ya no me controla, no lo volverá a hacer jamás

- Se llama....

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