Capítulo XIII: Fuego

El líder de la Secta Jiang cerró sus manos en un puño, no había esperado nada de lo que había sucedido luego de que dejara a sus dos hijos en el campamento improvisado por la secta omega, dos cultivadores habían solicitado su presencia y él había ido al encuentro de Wen Ruohuan, a pesar de la rivalidades entre los clanes nunca había una confrontación directa, por eso no temió al asistir a aquel lugar solo, su nivel de cultivo tampoco era bajo y podría salir bien librado si llegasen a atacarlo.

Sin embargo, nada lo preparó para ese escenario, frente a él había una pila de oro y artefactos valiosos para la cualtivación, el líder de la secta Wen se encontraba sentado en un taburete elevado y lo miraba con una sonrisa de desdén, a su lado su segundo hijo Wen Chao esperaba ansioso.

— ¿A qué debo su llamado, líder Wen?—

— Tienes tres hijos omegas muy hermosos— dijo el hombre calmadamente— He escuchado que tu hija va a casarse con el hijo de los Jin y tu segundo hijo está comprometido con uno de los jades Lan, visto de esa forma tu secta se encuentra muy privilegiada

— Mi familia es cosa mía, Ruohan — le contestó frunciendo el ceño— No creo que me hayas llamado para conversar de las virtudes de nuestros hijos

— Omegas que son monedas de cambio— soltó una risa condescendiente— Tan bueno para ustedes y tan desafortunado para nosotros, afortunadamente mi hijo Wen Chao ha quedado maravillado con tu único hijo soltero

El rostro de Jiang Fengmian se contrajo en una mueca, esto no podía ser nada bueno, el repentino interés del líder Wen en sus hijos era algo que quería evitar desde que descubrió la naturaleza de sus cachorros, observó el oro tendido a sus pies y no tardó en hilar sus ideas, apretó su arma con furia y fruncio el ceño repasando en su mente la forma de sacar a sus hijos lo más pronto de aquel lugar.

— Mis hijos no son moneda de cambio— contestó solemnemente— No voy a darte ninguno para que lo humilles como una concubina, Wen Ruohan

— ¿Por que es tan difícil aceptarlo?— preguntó desdeñoso cruzando sus piernas mientras llamaba a sus guardias— ¿Acaso no puedes verlo Jiang  Fengmian? Dentro de poco no habrá Jin ni Lan, solo Wen... ¿No quieres asegurar el destino de tus hijos?

El alfa empujó el oro lejos mientras negaba, no vendería a sus hijos, retrocedió dispuesto a atacar a los cultivadores que lo rodeaban cuando un sollozo rompió la tranquilidad del lugar, su hijo Jian Cheng fue empujado dentro por unos alfas vestidos de blanco, traían al menor amarrado con un muy enojado Lan Qiren siguiendole los pasos, el hermano Lan miró el oro tirado en el suelo y al líder de secta Jiang por un largo rato para luego regresar su mirada al frente.

— ¿Por qué han amarrado a mi hijo?— preguntó el alfa mirando furioso a los Lan— ¿Que clase de ofensa es ésta?

— Hemos atrapado al señorito Jian Cheng intentando colarse en los aposentos de Lan Xichen— explicó Lan Qiren con desdén— Quiso aprovechar que los dos jades bajaron sus defensas por estar en celo para poder ser marcado

— Esa es una ofensa muy grave— gruño Jiang Fengmian inspeccionando a su hijo con la mirada— No debe hacer ese tipo de acusaciones sin pruebas

— ¿Pruebas? ¿Qué mas pruebas necesitas que tu hijo vestido de esa forma colandose en horas no adecuandas? — le espetó el alfa empujando al omega hacia su padre— Ha liberado sus feromonas, es terriblemente obvio que esperaba ser marcado

Jiang Fengmian tomó a su hijo en brazos mientras suspiraba, lo inspeccionó en silencio hasta reparar en la marca que adornaba su cuello, estaba cubierta por su túnica por lo que los alfas de Gusu no habían podido verla, él al ser su padre era el único que podía revisarlo de esa forma por eso habían recurrido a él, cerró los ojos un momento para luego volverlo a abrir y encontrarse con el rostro aterrando de Jiang Cheng, el joven temblaba mirando el suelo como si esperara una sentencia a muerte, acarició su hombro con cariño y lo escondió detrás suyo.

— Llamen a Lan Xichen— pidió con calma— Creo que él puede dar una mejor versión de los hechos

Wen RuoHuan observó la escena curioso, pateo el oro hacia el lider Jiang y se retiró dando carcajadas burlonas, el alfa mantuvo su silencio hasta que todos se fueron. Su hijo se había arrodillado suplicando perdón, sus lágrimas se escapaban de sus ojos sin poder contenerlas, su cuerpo aún temblaba y estaba seguro de que su omega interno suplicaba regresar con su alfa, el mayor froto sus sienes intentando calmarse, su pequeño hijo había sido arrancado de sus brazos en sus narices.

— ¿Qué sucedió? ¿Por qué Lan Xichen te marcó?— preguntó en voz baja arrodillandose a la altura de su hijo— ¿Él te forzó? ¿Te hizo daño?

Wei Ying quién estaba a punto de ingresar en aquél lugar luego de ver a su hermano ser llevado por cultivadores se detuvi conteniendo el aliento, se ocultó tratando de escuchar la conversación.

— No, padre— susurró el menor mirando el suelo— Yo... yo hice algo horrible

— ¿Por qué?—

— Madre dijo que debía de hacerlo, sino lo hacía no sería mejor que Wei Ying, sino no podría ganarme tu cariño—

El alfa apretó los puños molesto, no comprendía como su esposa podía llegar a estos límites del odio, apretó a su hijo en un abrazo mientras besaba su frente, adoraba a sus tres hijos, quizás había sido más indulgente con Wei Ying porque el provenía de una familia disuelta, había sufrido el abandono e intentaba compensarselo, eso no significaba que amase menos a sus dos cachorros, estaba orgulloso de los bellos omegas en los que se habían convertido.

— Madre dijo que debía aprovechar el celo de Lan Wangji para ser marcado porque sino lo hacía el rompería el compromiso— susurró en voz baja ahogandose en llanto— Lastimé a Wei Ying a pesar de que el me dijo que el hermano Lan era su destinado, pensé que mentía pero cuando ingresé a aquel lugar, él no reaccionó a mí, me miró como siempre y salió del lugar entonces Lan Xichen me reclamó

— ¿Él te forzó?—

El omega nego avergonzado dejando notar el olor de su alfa impregnado en él, ellos llevaban viéndose a escondidas un largo tiempo a pesar de mo admitir que ambos eran destinados, aprovechando cada cacería y encuentro de sus padres para verse, él no esperaba encontrarlo ahí aquél día, no esperó ser marcado pero disfrutó cada segundo, no importó lo que su madre había dicho sobre lo que era bueno para él, en cuánto lo vio supo que se pertenecían, que no podía unir su vida a otro alfa que no fuese Lan Xichen pero cuando los efectos del celo de su alfa se asustó, no quería ser rechazado y huyó de ahi usando solo las túnicas interiores del hermano Lan, su descuidada huída alertó a los demás y fue tontamente atrapado hasta ser llevado ante su padre.

— Es mi destinado, padre— susurró el menor en voz baja— Él es mío, no puede ser de nadie más

— Ya veo— el alfa calmó a su hijo dejando un beso en su frente— Pero debes entender que tus acciones tienen consecuencias, ellos no aceptarán su unión de esta forma

El clan Gusu Lan no se conmoveria ante la historia de Jian Cheng, los alejarian a ambos por no cumplir las tradiciones familiares, posiblemente encerrarian al alfa en seclusión y los alejarian por siempre de su hijo, el precio de las acciones de su omega más pequeño era muy alto, ambos lo sabían por lo que su situación era difícil, el mayor se sacó su túnica exterior y cubrió a su hijo mientras frotaba sus brazos, a pesar de no querer admitirlo, sus cachorros habían crecido y estaban tomando sus propios caminos.

— Jiang Cheng, yo siempre estaré orgulloso de ti— susurró abrigando a su hijo con cariño— No me importa si ustedes son alfa u omegas, para mí siempre van a ser mis cachorros queridos

— Lo siento, padre— susurró el menor rompiendo en llanto— No quiero decepcionarte

La tienda volvió a abrirse dejando entrar a los líderes de la secta Lan seguidos de los dos jades, ambos parecían estar algo alterados a pesar de que el rostro de Lan Wangji se mantenía estoico, la sonrisa calmada de Lan Xichen había desaparecido mientras observaba a su omega oculto en los brazos de su padre, tenía que afrontar a sus mayores, no dejaría que se lo llevaran de su lado, no después de haberse enlazado finalmente.

— Fengmian— el líder Lan asintió a modo de saludo— Las situaciones no son las ideales pero necesitamos esclarecer lo que sucedió, tu hijo debe hablar con la verdad

— Así hará, Qinheng-Jun, no dudes de eso— suspiró alborotando el cabello del omega— Sin embargo, debo de admitir que estos hechos escapan de mis manos y de las tuyas, les corresponde a nuestros hijos explicarnos lo ocurrido

Lan Xichen avanzó haciendo una profunda reverencia ante el padre de su omega, ofreciendoles sus respetos pero cuando iba a empezar a hablar alguien interrumpió, tiro alfunas cosas a su paso mientras llegaba donde su hermano y su padre, el príncipe de Xian Le intentaba detenerlo pero solo se vio arrastrado en el desastre hasta el centro de aquella reunión.

— Maestro Lan, tío Jiang— se arrodilló clavando su mirada en el suelo— Fue mi culpa...

El hermano del líder Lan Qiren lo miró con rabia mientras acariciaba su barba mientras los dos jades se miraban entre sí en silencio, el omega les miró brevemente antes de continuar su confesión.

— Pensé que como mi hermano Jiang Cheng estaba comprometido con mi alfa, podía forzar a romper dicho compromiso si era marcado antes— Jian Cheng jadeo tratando de negar lo dicho pero su padre atajo sus movimientos— Fui a buscarlo en medio de la noche y encontré al hermano Lan Xichen, él me envió de regreso a mi campamento pero yo me negué a irme, recién he cumplido quince años y no puedo controlar adecuadamente mi celo, confundi su aroma con él de mi alfa y traté de seducirlo, Jian Cheng vio mi comportamiento indecoroso y corrió a alertar a nuestro padre pero fue atrapado en el camino

— ¿Confundir el aroma de tu alfa?— preguntó escéptico Lan Qiren— ¿Así fue como pasó? ¿Tú te ofreciste a otro que no era tu alfa y arrastraste a eso a tu hermano menor? ¿Como pudiste? ¿Acaso no tienes vergüenza?

El omega miró a su tío esperando que el dijese algo pero solo fue escondido detrás de él en un gesto protector, ambos omegas se abrazaron entre ellos sollozando mientras repetían que lo sentían.

— Tienes que romper ese compromiso, hermano— dijo Lan Qiren mirando con asco al omega— No podemos permitir que alguien como él manche a la familia... intentó deshonrar su lazo... ¿Que hará cuándo esté enlazado con Wangji y la vida de ambos sea una sola? ¿Acaso quieres que tu hijo sufra?

— El compromiso al que mi esposa accedió fue entre Lan Wangji y mi hijo menor Jiang Cheng— informó el alfa frunciendo el ceño— Sin embargo, debido a las circunstancias creo que lo mejor sería apresurar el compromiso entre Jiang Cheng y su hijo mayor

— No es posible— chillo Lan Qiren encolerizado— Debemos romper lazos con ellos, esta situación puede hacer que la reputación de tus hijos caiga en desgracia, hermano

— Bien, eso haremos— indicó el lider de secta Lan ignorando a su hermano— Tu hijo será recibido en Gusu como el prometido de Lan Xichen, sin embargo, seguiremos las costumbres que nos caracterizan, el omega recibirá la formación adecuada apra casarse

Jian Cheng buscó con su mirada a su alfa y sonrió radiante queriendo correr a sus brazos, sin embargo, no lo hizo, tenía que guardar las apariencias, su hermano acarició su espalda consolandole, pidiendo que dejase de llorar, observó el rostro lloroso de su hermano mayor y se sintió un tonto por haber dudado de su cariño, a pesar del tiempo separados, Wei Ying seguía siendo su hermano y haría de todo para protegerlo.

— Sin embargo, el comportamiento de Wei Ying resulta inaceptable— dijo el líder mirando al chico con desaprobación— Su actuar pudo haber llevado a que el lazo con mi hijo se rompiera, él no lo respetó y atentó contra él, no puedo permitir que Wei Ying sea parte de nuestra familia

— Padre...— quiso oponerse Lan Zhan avanzando hacia su omega pero fue detenido—

— No digas más, Lan Zhan— le cortó su padre silenciandolo— No permitiré ésta unión, por lo que has dicho Fengmian, comprendo que no reconoces a Wei Ying como tu hijo y él tampoco es parte de tu secta ya que hoy no se presentó como tal, por tanto no puede abogar por él ni responder en su nombre

Los omegas aún abrazados se miraron entre ellos un largo rato, Wei Ying fue el primero en alejarse arrodillandose frente a los Lan, no quería comprometer la reputación de la familia que lo había acogido, el alfa Jiang intentó ocultarlo pero el chico se negó con una breve sonrisa, Xie Lan se apresuró a caminar junto a su hermano mientras conjuraba un talismán que diese aviso a su líder Shen Qingqiu.

— El lazo dado por el destino es un regalo, sin embargo cuando dicho regarlo es despreciado tan vilmente corresponde ser quitado— el alfa le observó analizando el rostro del omega— En unos meses realizaremos la ceremonia de rompimiento del lazo, hasta entonces debes abstenerse de acercarte a mi hijo

— Es mi alfa— susurró Wei Ying aferrandose a Xie Lan para ponerse de pie— Ustedes no pueden...

Lan Zhan empujó a su padre tratando de llegar a su omega cuando el caos estalló allá afuera, gritos de desesperación resonaban por todos lados mientras Wen Ruohuan volvía a ingresar al lugar con una sonrisa victoriosa, tomó asiento delante de los líderes de secta y observó el oro ofrecido.

— Olvidé mencionarlo, mis políticas incluyen eliminar a los omegas rebeldes— dijo apretando el estandarte de la secta LanHua hasta arrojarlo al suelo— No podía hacerlo durante la ceremonia, sin embargo, la reunión de las sectas ya acabó, es una pena...

— Wen Ruohuan— gruño Fengmian desenvainando su espada— No puedes atacarlos, son niños aún

— ¿Acaso estás desafiandome, Fengmian? Viejo amigo, no pensé que tendria que atacarte primero— una risa histérica escapó de sus labios— Supongo que tendré que someter a sus sectas primero

Jiang Cheng fue empujado a los brazos de Wei Ying mientras Lan Qiren, Qingheng- Jun y Jiang Fengmian intentaban someter a los cultivadores Wen, el menor miró al príncipe y él tiró de ellos tratando de llevarlo de regreso a su campemento, había fuego por todos lados, omegas corriendo de un lugar a otro mientras se protegian con sus armas espirituales, el hermano Tang Mo intentaban completar una matriz de transportación mientras el alfa Nie se enfrentaba a varios perros Wen al mismo tiempo.

— Tenemos que irnos— ordenó Shen Qingqiu blandiendo su espada y lanzando ataques de hojas a diestra y siniestra— ¡Todos dentro de la matriz!

Jin Guangyao sujeto a su hermanito, al pequeño Wen Ning y se aferró a Nie Huaisang antes de empujarlos dentro de la matriz regresando dónde su alfa, la primera matriz se llevó a todos los médicos, artistas y niños de la secta mientras los cultivadores más fuertes se quedaban para protegerla, Xiao Mo se movía de un lugar a otro lanzando talismanes mientras ayudaban a apagar el fuego, sin embargo cada vez aparecían más atacantes dispuestos a acabar con ellos, el mago fue herido dejando parte de la matriz insegura, los omegas se miraron entre ellos acercándose hasta cerrar el círculo, Jiancheng se negó a soltar la mano de su hermano mientras buscaba a su alfa aterrado.

— Tienes que irte— susurró el mayor de los Lan besando la frente de su omega— Estarás mas seguro con ellos

La matriz volvió a estar completa iluminando por última vez el lugar, Jin Guangyao que se resistía a abandonar a su alfa fue empujado dentro de la matriz en medio de gritos y llantos, los omegas desaparecieron sin dejar a ninguno atrás, el mayor de los Nie se apresuró a destruir la matriz luego de que se fueran y arrastrar a los dos jades de Gusu lejos de aquel asedio, necesitaban volver a casa cuánto antes, seguramente las tropas Wen ya se dirigían hacia sus hogares.

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