034 ;Final;

Tú:

Me encontraba empacando todo con ayuda de Tae y Jin, quienes chillaban como bebés. Suplicaban que me quedara y me hacían pucheros de cachorros.

—Chicos, no es como si fuera morirme. Solo me iré... al otro lado del mundo. —comencé a chillar con ellos y nos dimos un fuerte abrazo

No había visto a Jimin desde hace unas horas y para ser sincera me afectaba. Tal vez estaba bastante ocupado, no lo sé. Di un fuerte suspiro y terminé de empacar.

—Aún faltan tres horas para que te vayas pero se siente como si faltara un minuto. —sollozó Tae y le revolqué el cabello.

—¿N-no t-te puedes quedar para siempre? —suplicó Jin sin despegarse de mi brazo

—Aish par de llorones, no me dejan dormir. —se quejó Yoongi entrando a la habitación. —_____ aún no se va, dramáticos

—¡No te hagas el duro! Bien que ayer llorabas conmigo por ___. —le regañó Tae mientras se limpiaba las lágrimas

—Hijo de....—le dio un zape.—Eso no es cierto, no seas mentiroso

Reí.—También te extrañaré Min Yoongi, aunque seas todo un tonto. —lo abracé fuertemente

—Ay, me estas asfixiando. —se quejó Yoongi pero me correspondió el abrazo y los demás se unieron

Faltaba una hora y Jimin aún no llegaba. Jin había hecho una rica cena para todos y luego salimos al parque un rato.

—¡Jungkook hiciste trampa! —grité corriendo detrás de él pero me tropecé y caí de cara al suelo.—Auch.

Lo siguiente que oí fueron carcajadas, sobretodo las de Jin. Me senté viendo mi rodilla derecha raspada y la cara toda sucia.

—¡Jeon Jungkook! —chillé fingiendo enojo mientras hacía una mueca del dolor

La rata vino hacia mí sin dejar de reírse y me ayudó a levantarme.

—Lo siento ___, ¿puedes perdonar a este tierno conejito? —hizo un tierno aegyo y no pude evitar sonreír

—Bien, te perdono pero tendrás que cargarme. —me subí a su espalda y fuimos con los demás

—Oigan, ¿alguien sabe dónde está Jimin?— preguntó Namjoon y todos negamos

—Salió muy temprano avisando que tenía algo importante que hacer. —respondió Jungkook y bajé la mirada ante eso

Algo importante...

—Bueno creo que deberíamos ir al aeropuerto ya. —dije cambiando de tema y fuimos a la camioneta

Me senté atrás con Hoseok y Jungkook mientras jugábamos al piedra, papel y tijeras. Tarareábamos las canciones que aparecían en la radio y escuchábamos los chistes malos de Jin que aún así daban risa.

Miraba al teléfono constantemente en busca de alguna llamada o mensaje de Jimin, pero nada. Al final, me quedé dormida en el hombro de Jungkook con algo de decepción.

Llegamos al aeropuerto y bajé mi maleta junto con mi mochila. Entramos y por loco que suene, a lo lejos, vi a alguien parecido a Jimin. Fui a comprar mi boleto hacia Los Ángeles y volví con los chicos a despedirme.

—Bueno, es hora de despedirse. —susurré con la voz temblorosa y abracé a cada uno individualmente

—Ay niña, te vamos a extrañar un montón. —lloró Namjoon

—Extrañaré a mi acompañante de bromas. —dijo Hoseok

—Y yo a mi rival de videojuegos. —habló Jungkook escondiendo las lágrimas

Tae se abalanzó sobre mí logrando que casi me cayera. Lloró en mi hombro junto conmigo y luego se separó. Verlo así me partió el alma, verlos a todos llorar me derrumbó completamente.

El anuncio de una mujer por los altavoces anunciando mi vuelo nos hizo separarnos. Me limpié las lágrimas y respiré hondo.

—Volveré lo más pronto posible chicos, espero no se olviden de mi eh. —reí un poco y fui hacia la fila que me llevaría al avión

Sentí como alguien tocaba mi hombro y volteé. Al verlo ahí parado frente a mi con una radiante sonrisa no pude evitar ahogar un grito y abrazarlo con fuerza

—¿Te ibas a ir sin despedirte? Me dueles ____, me dueles. —dijo Jimin correspondiendo el abrazo

—Pensé que no vendrías...—susurré sin dejar de abrazarlo

—No quería despedirme de ti con los chicos, tenía que verte por última vez a solas. Aún no puedo asimilar que te vas y no quiero soltarte.

—Ojalá pudiera detener el tiempo ahora, pero no puedo. Solo prométeme que no te olvidarás de mi. —lo miré a los ojos

—Jamás te olvidaré, esperaré por ti lo que sea. Toda una eternidad si es posible. —dicho eso las manos de Jimin me agarraron de la nuca y me atrajo hacia él envolviendo nuestros labios en un suave beso

No se cuanto tiempo duramos así pero desearía que hubiera sido para siempre.

—Te amo Park Jimin. —le sonreí y lo vi por última vez antes de irme al avión

Recibí una notificación de Instagram y la abrí.

Sonreí como tonta y apagué el teléfono cuando la azafata avisó que íbamos a despegar. Me puse el cinturón de seguridad y miré por la ventana el paisaje de Corea.

Que dolorosas son las despedidas, ¿cierto?

Pues esto no es un adiós, es un hasta luego. Mi historia con Jimin apenas está empezando y estoy segura de que la tuya igual está empezando.

Solo que no te das cuenta. Quién sabe, tal vez ese seguidor nuevo en Instagram sea tu principe azul que tanto esperabas.

                      ¿Fin? No.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top