—Cuéntame, primita... ¿cuando es que me vas a presentar a ese dichoso Morgan?— mi primo Liam alzó una ceja— Esta belleza no puede esperar tanto tiempo.— se quejó.

—Perdón... es que lo había olvidado. Es que estoy centrada en acabar con los Jones en la competencia que te dije... Lo bueno de todo es que la tia Sky volvió ayer y con ella me siento más segura.

—¿Estás centrada en acabar con los Jones... o estás centrada en Max Jones?— me miró picarón.

Simulé arcadas— ¿Qué te pasa?... creo que te está afectando la falta de un hombre.

Asintió— Si, me hace falta un hombre, pero hablo en serio... desde que llegaste no has dejado de hablarme de Max, de lo idiota que es Max, de que no soportas a Max, de que Max es esto, Max es aquello...— enumeró con sus dedos— Cuando alguien habla tanto de otra persona es porque algo sucede...

Si, sucede que no lo soporto porque es un insoportable.

Lo miré raro— Que exagerado eres... tampoco lo he nombrado tanto, estúpido.

Actúa igual de insoportable que M...

Olvídenlo.

Es que entiendan, cuando no soportas a una persona, esa persona se mete a tu cabeza, es normal, pero no significa nada de lo que Liam se imagina...

—Si, claro...— rodó los ojos— en fin, ¿cuando me lo presentarás?

—Ew, ¿y tú para qué quieres conocerlo?— pregunté.

Se encogió de hombros— Quiero conocer al chico que vuelve loca a una de mis primas favoritas.

—Me vuelve loca pero no de una buena manera, créeme. Lo detesto.

—Como digas...— me miró incrédulo.

Después de eso, no creerán lo que pasó... Liam y yo continuábamos con nuestro momento de chisme entre primos en el patio de su casa y Stassie la envidiosa llegó... pero no es lo peor, llegó con el insoportable.

Quiero saber si es que he hecho algo malo. Porque es obvio que el destino está en mi contra.

Ambos nos saludaron— Liam, él es Max... Max, él es mi primo Liam.— los presentó.

Liam abrió la boca de par a par y miró a Max detenidamente, luego me miró a mí y luego a Max devuelta. Rodé los ojos por la falta de disimulación de mi primo.

—Así que tú eres el famoso Max...— dijo ganádose un codazo de mi parte.

¿Cómo que famoso?

—¿Tanto te han hablado de mí?— sonrió de lado mirándome.

¿Y a mí que me mira?.. que mire a su noviecita.

Mi primo rió— Que ego tan grande tienes, me gusta.

Stassie miró raro a Liam— Ew, deja de coquetearle, ¿quieres?

—Sabes que es mi naturaleza, relájate. No puedes pedirle a un león que deje de ser el rey de la selva...— dijo encogiéndose de hombros.

Negué divertida... Liam y sus dichos raros.

Stassie tomó del brazo a Max y se lo llevó devuelta a la casa.

A lo que desaparecieron del patio Liam me miró con asombro— ¡¿Estuviste encerrada en una celda con ese Dios griego y no hiciste nada?!— exclamó— ¿En donde quedarón todas las enseñanzas que te de dado?

—Shh, cállate.— lo fulminé— estás demente, Liam.

—¿Demente yo?.. demente tú que permites que Stassie te lo robe.

—Por mí que se casen y tengan muchos hijos... pero eso si, que ambos se muden muy lejos y sean muy felices.— sonreí sin mostrar los dientes.

—No pareces mi prima...— negó— ¿No será gay?— puso su mano en su barbilla— Tal vez aún esté en el closet.

Reí fuertemente— Pues ve y averígualo.

Suspiró— Buena idea, lo haré más tarde.

—Y eso que no has visto a su primo y a su hermano...— dije.

—Oh Santa Lady Gaga...— miró al cielo— yo necesito a uno así en mi vida.

—No pensarás lo mismo cuando abra la boca y haga lo que mejor sabe hacer... ser un insoportable.

***

Liam rió como por centésima vez en la noche— Por Dios, Max... harás que me orine.

—Tampoco soy tan gracioso...— hizo un gesto con su mano mostrando modestia.

—Claro que lo eres, tonto...— Stassie sonrió— Siempre se lo digo y él lo niega.— miró a Liam.

Rodé los ojos.

—Admítelo, lo eres.— dijo mi primo.

—Coincido con Max, no eres gracioso para nada.— sonreí falsamente.

—Tú siempre tan linda...— dijo sarcástico.

Lo sé.

—Lo soy.— dije.

Miré a Stassie, quien me miraba con aburrimiento. La miré de la misma manera— ¿Qué?— le pregunté— la belleza no se pega, prima.

Rió sarcásticamente. Antes de que me contestara, la tia Rachel la llamó desde adentro de la casa. Ella se quejó pero luego se levantó y entró a la casa.

Gracias a Dios, ahora sólo falta que se largue el otro insoportable y todo será perfecto— Creo que deberías ir con Stassie.— propuse.

Alzó las cejas— ¿Tanto te incomodo?

—¿Incomodarme? ¿Tú?— me burlé.

Liam me dio un codazo— No seas tan odiosa...— me regañó.

—Pff... odiosa Stassie. Yo no soy odiosa.

—No, claro que no lo eres.— dijo Max con notable sarcasmo en la voz.

—Bueno, tal vez sea odiosa, pero sólo con las personas que se lo merecen.

—¿Y por qué Max se lo merece?— preguntó Liam.

—Porque es insoportable.— dije con obviedad.

Max rió— Mírate en un espejo, nadie es más insoportable que tú.

Si, claro...

Él sonrió con egocentrismo— Por lo menos yo no le hablo de ti a los demás...

Lo miré como si estuviera loco— ¿Y tú de verdad crees que yo le hablo de ti a los demás?

Bueno si... pero hablo mal de él, no como él piensa.

Él se encogió de hombros— Yo no lo dije, Liam lo dijo...— miró a mi primo— Así que soy el "famoso Max"...— dijo con orgullo.

—Para tu información, querido amigo, Liam sabe de ti por tu noviecita, no por mí...— me crucé de brazos.

En realidad si sabe de él gracias a mí, pero shh...

Me vio incrédulo— Como digas, Sophie...

—Que gran ego tienes, Max... no me sorprende.

—Se parece al tuyo, ¿no?— Liam me miró— En realidad ustedes se parecen mucho... es más, ¿por qué no se besan?

Le saqué el dedo del medio.

Ahora no es sólo el destino, sino también Liam... nadie está de mi lado.