ㅡ ¿Crees que me veo bien?

Con una sonrisa tímida, KyungSoo giró sobre su eje, sacudiendo su saco negro, mientras intentaba lucir coqueto frente a su alfa. ChanYeol, quien estaba descansando en el sillón con mucha somnoliencia, pareció despertar de su divague entre ir o no ir a la cena familiar (propuesta principalmente por él), y le dirigió una mirada de pies a cabeza al azabache, levantándose con sumo interés por lo que veía.

Las costuras parecían ceñirse sobre su esbelto cuerpo, apretando en puntos específicos que hacían resaltar sus atributos, haciendo énfasis en lo apretado que le quedaba en la zona de sus glúteos. Su camisa blanca hacía resaltar su pálida piel, y los detalles en negro hacían juego con su cabello oscuro.

Subió su mirada de nuevo, inconsciente de sus dedos traqueteando ansiosos sobre su muslo, y de su notoría impaciencia por tocarlo.

ㅡ Te ves tan delicioso amor, que me dan ganas de comerte entero.

KyungSoo no pudo evitar reír, dándole la espalda rápidamente. Un tierno sonrojo que se esparcía desde su cuello hasta sus orejas. Estaba tan avergonzado... ¡nunca nadie le había hecho sentir tan halagado! Junto a ChanYeol, no había día en el que no se sintiera amado, y le dejara en claro el poder tenía sobre él. Dejándole en claro que podría hacer con él lo que quisiese.

Porque a los ojos de ChanYeol, él era glorioso, un hombre tan hermoso por dentro como por fuera, causando en su interior aquel sentimiento tan arraigado de querer protejerlo contra cualquier cosa que amenazara su integridad.

ㅡ No soy tan lindo como piensas...

ChanYeol se movilizó hasta llegar a su lado, volteándolo lentamente para quedar enfrentados, y ver a los ojos a la persona que causaba sensaciones indescriptibles en su cuerpo.

Si había algo que le disgustase en sobre manera, era ver el poco cariño que KyungSoo se tenía así mismo.

ㅡ Dilo de nuevo.

El azabache miró fijamente sus ojos, hechizados por la dominación que ejercían sobre él, volviéndolo alguien que no pudiese pensar por sí mismo. Su marca ardió de tal manera, que provocó el deseo de que clavara sus dientes una vez más en su cuello.

ㅡ Y-Yo... ㅡ KyungSoo se sintió más pequeño, un manojo de nervios que le impedían actuar con normalidad. ¡Las fuertes feromonas de ChanYeol estaban volviéndolo loco!

ㅡ No digas cosas tan horribles, no cuando eres el ser más bonito que pude haber visto, Soosie.

Llevó sus dos manos hasta los costados de su cabeza, acariciando con lentitud su nuca, entrelazando sus dedos entre su corto cabello, acercándose hasta quedar a escasos centímetros de su rostro, mezclando ambas respiraciones.

ㅡ Chan...

Dio un pequeño beso a sus labios, dejándolo con ganas de más al separarse abruptamente de él.

ㅡ Vamos, llegaremos tarde a nuestra presentación oficial como pareja. A mi madre no le gusta que le hagan esperar, Soosie.

Maldijo en voz baja a su sonrisa burlona, tomando una bocanada de aire al sentirse ahogado, quedando plantado con el resto de potentes feromonas que soltó ChanYeol en advertencia.

El camino hasta la casa de los padres de ChanYeol pareció ser eterno, mientras los latidos acelerados de su corazón hacían estragos a su estabilidad.

¿Les caería bien? ¿Y si hacía el ridículo frente a sus suegros? Odiaría ser el primer hombre que el castaño presentara, y que resultara en un fracaso.

ㅡ Amor, tranquilo. Todo saldrá bien. ㅡ ChanYeol mantuvo su mano libre junto a la suya, totalmente entrelazadas, mientras le dirigía una mirada amorosa a la vez que la apartaba para mirar el camino.

Suspiró, si KyungSoo era sincero, sentía que perdía el aliento al ver pasar los autos, casas y el cálido paisaje por la ventana del coche, yendo hasta un lugar que lo ponía de lo más ansioso. Se removió incómodo en su asiento.

ㅡ ¿Y si les caigo mal? ¿Cómo tengo que saludarlos? Yo nunca hice esto... ¡Chan, estoy asustado!

ChanYeol dio un apretón a su mano, aún manteniendo su vista en la carretera. Con ese simple gesto pareció darle una bocanada de aire a su reciente sofocación.

ㅡ Respira, esto es algo que terminará en un santiamén. Ellos no son malos, así que no te hagas la cabeza, Soosie. ㅡ KyungSoo mordió su labio inferior, pegando su cabeza al respaldo del asiento ㅡ. Deja de morderte el labio, KyungSoo.

Rodó los ojos, soltando un bufido.

ㅡ ¿Eres un mago o algo? Ni siquiera me estabas viendo.

ㅡ Te conozco lo suficiente como para saber de ese tic nervioso que tienes. ¿Acaso piensas que no te presto atención?

KyungSoo contuvo sus ganas de mordisquear de nuevo sus labios.

No entendía como con simples palabras, ChanYeol lograba descolocarlo por completo. Realmente sentía como si estuvieran conectados, porque sin tener que decir sus sentimientos, de algún modo fantástico podían saberlo.

ㅡ Eres... Eres tan tú.

El castaño rió, confundido por sus palabras.

ㅡ ¿Y cómo soy yo?

KyungSoo sonrió levemente, mirando por la ventanilla.

ㅡ Increíblemente apuesto, seductor... Y también algo manipulador. ㅡ Dirigió su vista hasta su novio, admirando su perfil delicado, tan bello que hasta le sorprendía estar a escasos centímetros de él ㅡ. Pero también eres alucinante, magnífico, cómico y perfecto.

ChanYeol ladeó su cabeza, avergonzado por sus palabras. Sin poder evitarlo, una linda sonrisa comenzó a asomarse entre sus labios, sintiendo un peculiar calor recorrer su pecho hasta llegar a su corazón. Se sentía tan bien saber que significaba algo para la persona que amaba, que no había nada que pudiera igualar aquel puro sentimiento que se adueñaba de su mente al estar junto a KyungSoo.

Solo quería estar a su lado por siempre. ¿Era posible cumplir esa silenciosa promesa?

Miró al frente de nuevo, y supo por los carteles señalizados que faltaba poco por llegar a su destino. En cuestión de escasos minutos, apagó el motor del auto, luego de estacionar al frente de la casa de sus padres.

ㅡ ¿Sabes algo Kyunggie? ㅡ Mantuvo sus manos en el volante, aún cuando había detenido por completo el automóvil. Hizo puño ambas manos ㅡ. Una de las primeras veces que te llevé en auto hasta la empresa, tuve una epifanía.

KyungSoo miró atentamente al castaño, intentando regular su agitada respiración.

ㅡ ¿De qué hablas, Chan?

ㅡ En serio sentí que te confesaba mis sentimientos, y lo tanto que me molestaba que me alejaras de ti. Porque lo único que quería hacer era besarte para acallar tus quejas. ㅡ El azabache abrió sus ojos, sorprendido por sus palabras. Se acercó un poco de forma inconsciente, acercándose con lentitud hasta él ㅡ. En serio creo que somos destinados, KyungSoo.

Un clic resonó en su interior, como si las piezas de un confuso engranaje terminaran por encajar a la perfección, luego de una lucha interna que parecía interminable.

Lo primero que pensó fue en sus constantes mareos y fuertes dolores de cabeza, antes de relacionarse nuevamente con ChanYeol, luego de separarse en la secundaria y cortar lazos.

De una extraña forma, siempre sintió que las cosas entre ellos habían quedado inconclusas. Como un hilo rojo que se tensaba por su distancia, y hacía nudos ante sus antiguas peleas.

ㅡ Y-Yo... hace un tiempo tenía fuertes dolores de cabeza. Me atacaba antes de que mis celos se manifestaran. ㅡ KyungSoo aún conmocionado, intentó hablar sin que su voz se quebrara ㅡ. Pero sólo sucedía... si mis recuerdos junto a ti aparecían en mi mente. Todo se calmó cuando volviste a aparecer en mi vida físicamente.

Ambas miradas se conectaron, viendo profundamente a través de sus ojos, casi atravesando sin control sus almas. Parecieron reconocerse, y entrelazarse sin contención alguna. No podían detenerse, y ambos juntaron sus labios en medio de salinas lágrimas que caían de sus ojos.

Aquella verdad que pedía a gritos ser descubierta, siendo ocultada de ellos... finalmente había salido a la luz.

Todo encajaba.

Un beso que declaraba su confesión, una cercanía que duraría por la eternidad. Ambos volvieron a reconocerse como en el comienzo, dejando entre sus labios la esencia de un amor que escalaba a la vida y la muerte, en todas sus vidas pasadas.

Ninguno quería que ese momento terminase.

no estoy llorando 😭
gracias por leer!