Las cosas no pintaban tan bien como los chicos se imaginaban que estarían, Amaya se mostraba mas débil de lo que debería estar una persona inmortal cuando cura sus heridas, así como en el pasado cuando sus quemaduras de un grado muy alto se curaron enseguida, mientras que esas heridas producidas por las esposas en sus pies aun estaban presentes. La, ahora, de pelo corto color violeta no dejaba de toser a causa del humo inhalado cuando fue rescatada.

Enseguida sus hermanos la colocaron en su propia carpa siendo asistida junto a Hak, los dos heridos físicamente, lo que les diferenciaba es que Hak estaba sanando mucho mas rápido de lo que lo estaba haciendo la chica, preocupando a sus hermanos, Yona y Yoon. Aunque ella le sacaba importancia, les declaro ella misma que detuvo tanto su auto sanado que su cuerpo estaba restaurandose por ese motivo. Zeno, recordando algún que otro evento parecido a este, por lo que relajo a los chicos.

El quedarse en ese lugar no tenia lugar a replicas, tanto Hak como Amaya no se podían mantener en pie mucho tiempo por sus heridas y, sumado a eso, la chica no podía respirar muy bien, ni si quiera estaba comunicándose con los demás, solo asentía o negaba las respuestas hacia los demás, por mas que tomara liquido no ayudaba a que su garganta se relajara, por lo que la tos era constante y se escuchaba ahogada y ronca a la vez asiendo un ruido extraño.

Hak ya se había despertad, por lo que conversaba con Yona y Yoon mientras que era interrumpido algunas veces por alguno de los dragones o por la tos de la chica acostada junto a el, volteo su cabeza para ver su estado. No pudo evitar pensar que la persona que estaría en su mismo estado seria la de pelo rojo si Amaya no hubiera tomado su lugar. El agradecimiento le invadió, aun mas, cuando vio la cara de preocupación de Yona hacia su persona.

Hak: ¿no nos podrían dar agua a Amaya y a mi?- pregunto con la voz ronca al ver como la chica no dejaba de toser, la de pelo violeta empezó a mover la cabeza junto con sus labios como quien quisiera hablar.

Amaya: ... ...- se llevo una de sus manos a su garganta mientras que la otra tapaba su boca cuando un ataque de tos la hizo retorcerse en la cama, lagrimas empezaron a invadirla, la sensación que tenia en su garganta era mucho mas dolorosa que cualquier otra cosa que a sentido hasta el momento.

Kija: ¡Amaya!- enseguida tomo uno de los cuencos de agua que Yoon había dejado a mano para darles a los dos heridos y le dio a beber a su hermana, esta tomo todo lo que había en el recipiente para después separarse y toser otro poco mas y empezar a sentirse bien.

Hak ya estaba vestido y empezaba a caminar mientras que, a duras penas, Amaya podría permanecer sentada, por lo que se recostó en la carpa para poder estar mas derecha. Hak y Yona se habían ido de la carpa hace un momento sin llamar la atención de los demás que quedaron dentro del lugar. Por lo que atención paso a ser para la chica que estaba batallando para decirles a los chics que estaba bien.

Zeno: ¿te encuentras bien hermana?- la mencionada asistió sonriendo suavemente, ya no volvió a toser, sentía su garganta mas relajada, aun no como para hablar, pero, si como para estar tranquilamente.

Jae-Ha: si que nos has dado un gran susto Amaya- se acerco hacia ella propinando un suave golpe en el hombro, ella soltó un lamento sobándose el hombro- eso fue por dejarnos fuera de esto y salir tan herida.

Kija: ... y esto- se acerco a ella abrazando con fuerza y a la vez cariño, como para no dañarla mas de lo que ya estaba herida- es porque estas con nosotros de vuelta.

Enseguida las lagrimas empezaron a correr por la mejillas de la chica de melena corta asiendo que sus hermanos se emoción por la imagen que estaba delante suyo. Enseguida de que se escucho el primer lamento se escucho cuatro pares de manos la rodearon asiendo que las lágrimas corrieran mas rápido y que el alivio llegara antes a la chica de volver a ver a los chicos junto a ella.

Se notaba, también, que Amaya hacia esfuerzos para poder comunicarse con ellos, movía sus labios mientras que ruidos de ahogado salían, junto a palabras o letras, sueltas. Los tres dragones mayores, Zeno, Jae-Ha y Kija se fueron junto con Yoon para hacer la comida para todos dejando a la inmortal y al Seiryuu dentro de la carpa, Ao aprovechar el momento para ponerse en la cabeza de la chica sacándole risas a la chica.

Shin-Ha: Amaya, ¿estas realmente bien?- su tono parecía estar preocupado, se arrimo a donde estaba la chica apoyando hombro con hombro, sintió como la chica asentía suavemente para que la ardilla no se cayera de su cabeza.

Amaya: si... me sigue mo..stran..do la garganta... pero por lo menos, no me duele nada mas- si bien se escuchaba entre cortada y, algunas palabras parecían desaparecer. Era entendible lo que decia- ... lamento el que me tuvieras que salvar en una situación asi- sin mas poso sus manos en las del chico sintiendo como sus manos había heridas que el mismo Shin-Ha se ha curado.

Shin-Ha: no es nada, lo importante es que todos estamos bien- se sincero el chico a la de pelo violeta. Paso su mirada a la chica y no la desvió de su persona por unos buenos minutos- Amaya, ¿es normal lo que esta pasando entre nuestros dragones?

La chica se mostró sorprendida por la repentina pregunta hecha por el chico, sabia que el es muy directo, pero, no tanto como para hacer ese tipo de preguntas. A causa de la timidez bajo su cabeza y empezó a jugar con sus dedos, buscando las palabras correctas.

Amaya: ... si estas dispuesto a escuchar una historia, te puedo explicar todo esto- El chico hizo un ruido de afirmación para que la chica empezara, tomo una de sus manos dejando que la chica se relajara al sentir el calor que desprendía- esto me lo contó la misma Muryuu cuando tome de su sangre, en realidad ella y el Seiryuu son pareja en su forma dragón, por lo que, en sus propias palabras, la parte humana, nosotros, estamos destinados a enamorarnos.

El chico escuchaba atentamente, la sorpresa le invadió, no sabia esa parte ni se la esperaba. Su expresión seguía siendo estoica, no quería sacar conclusiones antes de tiempo sin saber todo lo que la inmortal le tenia que contar.

Amaya: ... fue así como conocí a Abi, el primer Seiryuu- sonrió suavemente de manera cálida a la nada, sintió como Shin-Ha tenso la mano que los unía asiendo que ella se riera suavemente- al comienzo solo fue una relación de hermanos, pero, con el paso del tiempo nuestros sentimientos crecieron. Nos casamos y tuvimos un hijo, el segundo Seiryuu de la historia- su sonrisa se entristeció y una mueca apareció- con el no me sentí atraída, lo cual agradezco, y creo que eso se debe a que lo veía como un hijo, no como a un novio en potencia.

Shin-Ha sintió como la chica se empezaba a escuchar mejor y mas relajada, aunque, un entremetimiento ataco a la chica cuando menciono a su hijo a la vez que vio la mueca de asco al pensarlo como una pareja en potencia, el mismo se estremeció ante esa imagen.

Amaya: después de eso paso lo que ustedes saben, fui escondida en una curva ocultada por todos y de todos por lo que no tuve mas cercanía con los descendientes de Abi después de mí hijo- volvió a sonreír de manera triste al pensar en todos esos años- por eso, ¿pudiste sentir "eso" cuando me rescataron de la carreta?- el chico asintió apretando su mano suavemente- pues, son nuestros dragones diciéndonos que tenemos que estar juntos nuevamente.

Shin-Ha: ¿por eso te fuiste acercando de a poco a mi?- ahora pregunto el chico viendo como ella asentía con un ligero sonrojo en sus mejilla- pude sentir como algo me decía que no me alejara de ti en ningún momento. Ahora entiendo a que viene ese sentimiento.

Amaya: se podría decir que nos enamoramos desde el mismo momento que estuvimos uno junto al otro- sentencio la chica, el chico simplemente asintió- por eso me fui acercando de a poco a ti, para no sorprenderte con esta información de repente y no causar la "obligación" de corresponder solo porque Seiryuu te lo dice.

Shin-Ha: ... al comienzo me acerque solo como un hermano- se sincero el chico, asiendo que la chica bajara su cabeza pensando que se trataba de un rechazo- pero después paso todo esto... y pude sentir que no solo fue Seiryuu el que te quería salvar, si no yo mismo no quería que nada malo te pasara y el querer protegerte que me di cuenta de todo lo que pasaba.

Amaya: ....- la sorpresa era palpable en su rostro, el chico sonrió un poco mas para después seguir hablando.

Shin-Ha: y escucharte decir que me amas, fue suficiente como para terminar de darme cuenta que realmente...- volteo a donde estaba la chica sosteniendo ambas manos y viendo las reacciones que hacia la chica- que te amo, Amaya.

La chica sonrió cálidamente con lagrimas en sus mejillas y ojos. Pactaron el empezar lento y no apurar sus sentimientos, si las cosas seguían bien lo harían publico, hasta que eso sucediera, solo serian amigos que se querían mucho. Esta decisión fue tomada mas porque Shin-Ha es demasiado tímido y Amaya no era de tomar la iniciativa en nada relacionado al amor, por lo que preferían ir lento.

Salieron de la tienda cuando escucharon muchos murmullos fuera del lugar en el que estaban. Al prestar atención supieron que se trataban de soldados de la tribu del cielo inconformes con la presencia de ellos en ese lugar, lo único que le impedía sacarlos del lugar era que los mismos soldados estaban a favor de que estuvieran allí. Kye-Sook, el consejero de Soo-Woon estaba haciendo lo suyo para tranquilizar a las masas, volteo a donde estaba Yona y los demás dragones.

Kye-Sook: seré franco, estoy tratando de reclutar a los hombres mas hábiles y fuertes, ¿no quieres unírsenos, princesa Yona?