Capítulo Único.
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TobiDei
"Inocencia"
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«Advertencia: Este One-Shot contiene escenas +18, leer bajo su propia responsabilidad.»
Un día común y corriente, específicamente en una tarde soleada y calurosa los miembros de Akatsuki tenían su día libre juntos en uno de sus tantos escondites, soportando el abrazador calor que emanaba aquella cueva. Entendieron en ese instante que pasar su semana de vacaciones en la guarida que se encontraba en la aldea de la arena fue realmente una mala idea.
En el sillón se encontraban la mayoría de los hombres de Akatsuki, a excepción del revoltoso Tobi, sin camisa, también se encontraba la única mujer con ellos, esta llevaba una camiseta ligera junto a unos shorts para evadir el calor.
-Maldigo el día en que solo hubieran hombres en la organización.- Se quejaba la mujer en voz alta mirándolos.
Se encontraba muriendo de calor la pelimorada, pues, era la única que vestía prendas de más, los otros solo rieron en voz baja. Hidan la mira burlescamente, era verdad que todos eran hombres en aquel lugar, más sin embargo la mayoría eran parejas entre si, exceptuando al único rubio y al enmascarado, ella podría andar libremente en ropa interior si quisiera y ninguno la miraría. Pero Pain se negaba rotundamente a que ella anduviera "mostrándole todo" a los demás miembros.
-No es nuestra culpa que tengas un novio celoso.- Se burlo descaradamente el peliblanco, siendo fulminado por la mirada del líder.
Konan se cruza de brazos claramente molesta.
-No es mi culpa que él no entienda que todos ustedes son unos come pollas.- Le enfrento, Deidara junto a Hidan y Sasori se rieron mientras que Kakuzu, Kisame, Itachi y Zetsu se mostraron claramente ofendidos, los dos primeros porque ellos no eran los pasivos, mientras que los últimos dos por el apodo "Come pollas", Konan bufa molesta.
¿Y Pain? El solo volteo su cabeza hacia un lado cubriendo su boca para disimular sus carcajadas.
-A todas estas- Interrumpió Kisame mirando hacia varios lados.- ¿Donde esta Tobi?
Los demás a excepción de Deidara miraron alrededor buscando al mencionado, hasta detener su mirada en el rubio el cual tomaba un jugo de limón tranquilo hasta notar la mirada de sus compañeros sobre sobre él.
-¿Que?
-¿Sabes donde esta Tobi? - Le pregunto Itachi por los demás.
-¿Por qué debería saberlo?- Responde desinteresadamente.
Konan lo mira enojada.
-Porque es tu jodido compañero.- Le soltó aun molesta.
En eso Tobi baja por las escaleras con rumbo hacia la cocina, traía puesto su pantalón negro junto a su sudadera de mangas largas del mismo color y su inseparable mascara anaranjada. Los demás al verlo sintieron asfixiarse del calor.
-¿¡Como puedes andar con tanta ropa en medio de este calor?!- Gritaron todos a la vez.
Tobi los mira, girando su único ojo en señal de molestia bajo su mascara sin que nadie lo notara, para después responder con aquella voz chillona que lo caracterizaba.
-No tengo calor Senpais.
Era una vil mentira, lo sabia, moría de calor y quería quitarse toda su ropa para quedar en ropa interior, ¿Por qué no lo hacia? Simple, no quería mostrar su cara y mucho menos que vieran su cuerpo, se avergonzaba de aquellas cicatrices y por ello las ocultaba bajo esa ropa. Por ello pasaba el caluroso día metido en su habitación donde estaba seguro no lo molestarían.
Los Akatsuki notaron que mentía. Veían claramente como su sudadera se apegaba mas a su cuerpo por el sudor, mas no dijeron nada al saber el porque estaba así.
Sin más Tobi entra a la cocina, toma un vaso de llenándolo de agua fría para después regresarse por donde vino y subir las escaleras ante la atenta mirada de los demás, una vez el azabache desapareció de su vista Hidan hablo.
-¿Qué tanto ocultara detrás de esa máscara para querer soportar este calor?- La intriga se notaba en su voz, llamando la atención de todos los presentes. Kakuzu lo mira molesto diciéndole con su mirada que eso no era su asunto.-Oh vamos Kakuzu, no me mires así ¿No te has preguntado siquiera como puede ser su rostro?
Kakuzu lo mira indiferente volteando su mirada.
-No.
Soltó sin mas, pero en su interior la curiosidad lo carcomía. Los demás en su lugar empezaron a dar sus opiniones de como seria el rostro de Tobi.
-Quizás Sea feo.- Inició Kisame siendo secundado por Zetsu y Sasori.
-Seguro tiene alguna cicatriz.- Dio su punto de vista Itachi, Pain asiente de acuerdo.
-Seguro es súper sexy.- Sonríe de forma ladina Hidan, Konan lo acompaña en opinión.
Deidara solo escuchaba atentamente todo lo dicho por sus compañeros, imaginándose en silencio como seria ese rostro que tantas veces intento ver. Al levantar la mirada nota que es el centro de atención de sus compañeros una vez mas, por lo que se levanta y camina hacia las escaleras.
-Me da exactamente igual como sea su rostro.
Soltó sin mas subiendo hacia su habitación, odiaba tener calor y odiaba aun mas que lo molestaran tanto, ya tenia suficiente con el molesto de Tobi como para soportarlos a ellos en su día libre.
-Uy si, que chiste.- Se burlo Hidan.
-¡Repitelo hasta que te lo creas!- Grito ahora Kisame.
Siendo ignorados por el rubio.
...
Mientras en la habitación de Tobi, el azabache se encontraba ya solo en boxers con su mascara aun lado bebiendo calmadamente el liquido cristalino que se encontraba en su vaso. Pensaba seriamente que odiaba con todo su corazón aquella guarida en Suna, pues era el único que moría extremadamente de calor al ser el que mas ropa ocupaba.
Por un demonio ¡Y ni siquiera podía quitarsela a gusto en el sofá frente al ventilador!
Odiaba a veces tener que ocultar su identidad, pero sabia que esto era mas que necesario.
Desde afuera de su habitación empezó a oír pasos, claramente reconoció el chakra de su rubio compañero. El azabache se mostraba relajado y algo aburrido sabiendo de ante mano que este seguiría de largo hasta su propia habitación, por lo que no se molesto siquiera en levantarse a poner el cerrojo. Lo que no sabia el azabache era que el rubio tentado por sus propios pensamientos y por las insinuaciones de sus compañeros, se detuvo enfrente de la puerta de este dudando si lo que estaba apunto de hacer fuese buena idea.
Tentado por sus propios pensamientos, junto a las ganas de ver el rostro de su compañero entró sin más en la habitación de este.
El azabache casi se atraganta con el agua al sentir la puerta abrirse por lo que agarro su mascara colocándosela a la velocidad de la luz, quedando así en ropa interior ante la incrédula mirada del rubio. Tobi agradecía con todo su corazón que su mascara estuviese justo a su lado y pudo ponersela a tiempo.
-¿D-Deidara-Senpai?- El azabache seguía atrapado en su asombro por el intruso en su habitación.- ¿Que hace en la habitación de Tobi?
El mencionado no respondió, solo recorría su mirada a través del cuerpo de su compañero de equipo, dándose cuenta que era la primera vez que lo veía en tan poca ropa, joder, ni siquiera lo había visto sin camisa ninguna vez. Aunque ahora que lo pensaba mas a fondo, jamas imaginó que la piel de Tobi fuese tan clara, tampoco le sorprendía ese hecho pues este ocultaba hasta sus manos tras unos guantes. Siguió mirando el cuerpo del azabache en silencio, notando algunas cicatrices blancas en el cuerpo de este, ¿Que le habrá sucedido ahí? Pensaba internamente, a su mente llegó una fugaz idea, sonriendo un poco, Tobi lo seguía mirando confundido.
Una pequeña broma no estaría mal ¿Verdad?
Aun sonriendo cierra la puerta atrás de si con seguro, para después acercarse peligrosamente a Tobi, al estar lo suficientemente cerca el azabache retrocede un poco y el rubio con su dedo índice empieza a trazar los pectorales bien marcados de su compañero. Le jugaría una pequeña broma al inocente de Tobi, así lo incomodará lo suficiente para alejarlo de si unos días mas.
Y sin saberlo Deidara cabo su propia tumba.
Con la palma de su mano acaricia sensualmente el pecho y hombros de Tobi, este en su lugar se puso rígido ante el shock de lo que estaba sucediendo, jamas imagino que Deidara estuviese haciendo este tipo de contacto con él, por un segundo dudó si seguirle el juego pues aun debía mantener la máscara de Tobi, su cuerpo tiembla al sentir las tibias manos del rubio en su desnudo pecho, delineando sus pectorales.
-¿S-Senpai?- Susurro confundido.
Deidara amplia su sonrisa, su mano izquierda la sube lentamente hasta la oreja de este acariciando y lamiendo con la boca de su palma, con su otra mano seguía toqueteando el pecho de Tobi bajando lentamente hacia el bóxer negro que traía, justo cuando estuvo a punto de rozar la ligera tela, su acción fue detenida por la mano del enmascarado. Inconscientemente el rubio pone una mirada de disgusto, sin darse cuenta le empezaba a gustar tocarlo descaradamente, la piel de Tobi era muy suave.
-Oh vamos Tobi.- Deidara sonríe de nuevo, acercando su rostro a la oreja contraria a la que acariciaba.-Dejame tocarte.- Susurra con picardía, sonriendo aún mas al notar el rubor del azabache que se había extendido hacia sus orejas, empezando a lamer y succionar el lóbulo de su oreja izquierda, su entrepierna dio un respingo cuando sus labios tocaron la suave piel del azabache.
Tobi se encontraba incrédulo en su lugar, aun sin poder creer lo que el piroartista hacia. Hasta que un recuerdo fugaz llegó a su mente, recordó lo poco de la conversación que tuvieron sus compañeros que escucho mientras se dirigía hacia su habitación, estos se encontraban hablando de como sería su rostro, su mente hizo clic.
Ahí lo comprendió todo.
Era un plan de Deidara para poder ver su rostro. Su entrecejo se fruncio de molestia, no podía creer que el rubio callese tan bajo solo para ver que escondía tras su mascara. Una idea cruzo su mente, por lo que sonriendo retrocedió un poco hasta su cama, el rubio solo lo seguía sin dejar su acción de lamer su cuello y oreja.
¿Deidara quería jugar? Bien, le demostraría como hacerlo.
Ante el silencio de Tobi y sus intentos de "separarse" Deidara sonrió complacido, hasta que sintió como el azabache lo separaba un poco, fruncio el entrecejo molesto y sin esperarlo cayo de espaldas a la cama de su compañero. Sorprendido lo mira notando como este se coloca encima suyo dejando un poco de separación.
-Entonces tocame.- El cuerpo de Deidara tembló.
Jamas había escuchado aquella voz gruesa que salio de los labios de su compañero, una voz sería y varonil, algo ronca. Sin quererlo soltó un suspiro satisfactorio al oírla, el azabache toma una vez más la mano del rubio pasándola sobre su pecho, haciendo que el rubio acaricie ambos pectorales de forma lenta, luego de la misma forma hizo descender la mano de Deidara hacia su abdomen, repitiendo la misma acción que con sus pectorales, la boca que había en su mano pasaba la lengua sobre el cuerpo del azabache, haciéndolo gruñir de satisfacción, todo ante la asombrada mirada del Rubio.
Guiando aun la mano de este, Tobi hace que los dedos del mas bajo tocaran el inicio de sus boxers, Deidara suelta un gemido de sorpresa al sentir la delgada tela en las yemas de sus dedos, mirando embobado el accionar del azabache y aunque no quisiera admitirlo sentía como su entrepierna se endurecía ante la gran vista y sensación que tenía al tocar el cuerpo de este. Tobi retira la mano de Deidara de su abdomen bajo, el rubio suelta un gruñido de disgusto el cual es reemplazado por un jadeo de sorpresa al sentir como el mayor le bajaba su propia banda ninja hasta cubrir sus ojos. Antes de que el rubio se quejara de su ahora ceguera Tobi rápidamente voltea su mascara hacia un lado, para después empezar a lamer el cuello del mas bajo.
Su lengua se movía de forma lenta degustando el cuello de este, sorpresivamente Deidara no puso resistencia abriendo mas su cuello para que el moreno tuviese mas acceso. Sin perder el tiempo Tobi muerde con sutileza el cuello del rubio para después succionarlo hasta dejar una pequeña marca, seguida de otras mas. Inconscientemente empuja sus caderas hacia abajo rozando así ambos miembros semi erectos.
-Hm~- suelta un mínimo sonido inentendible el rubio, este estaba presionando sus labios para evitar soltar más de estos.
El azabache sintiéndose rápidamente acalorado gracias a ese pequeño gesto, empieza a frotarse un poco más fuerte en el miembro del rubio, bajando los besos, lamidas y morirás hasta el pecho del menor, dejando un camino de marcas rosas y moradas a su paso. Se detiene en uno de los pezones de este, mirando el pequeño botón rozado con deseo.
Al notar que el rubio ya no intentaba quitarse la banda de los ojos, en un rápido movimiento se deshace de su mascara tirándola hacia algún lado de la habitación para después atrapar el botón rosa con sus labios, jugando con este. Pequeñas lamidas en círculos succionándolo de vez en cuando, sin darse cuenta con su otra mano ya tenia atrapado el otro botón entre sus dedos índice y pulgar, dándole pequeños apretones, logrando así erizar la piel del mas bajo y endureciendo ambos pezones.
Deidara apretaba con fuerzas sus labios reteniendo cualquier sonido que pudiese salir de su garganta en aquel momento, frustrando así al azabache.
El mayor ya cansado de que este no soltara los pequeños jadeos de sus labios muerde el pezón que tenia en su boca al mismo tiempo apretando el otro con sus dedos y uniendo sus caderas apretando justamente ambas entrepiernas.
-Ahh~
Soltó por fin el más bajo, al instante cubriendo su boca con su mano, asombrado de soltar aquel gemido ruborizándose en el acto. Tobi por su parte sonríe victorioso, alejándose un poco observa a Deidara, el cual tenía los labios ligeramente separados con su cuello y pecho lleno de marcas rosas, moradas y una que otra marca de sus dientes. La sonrisa del mayor se amplia, con rapidez baja el short del rubio quitándoselo dejándolos a ambos en ropa interior, el rubio se alarma intentándose quitar la banda ninja que cubría sus ojos, siendo detenido por el azabache una vez más.
-No te la quites.- Le ordena con voz sería, Deidara tiembla al escuchar de nuevo esa voz.- Tu iniciaste esto... Ahora soporta las consecuencias.- Susurra.
El rubio siente su cuerpo estremecerse al sentir de nuevo los labios de su compañero, pero esta vez el azabache iba pasando su húmeda lengua a través de su abdomen, bajando con una lentitud casi tortuosa, detiene su acción justo enfrente del ombligo del rubio dejando una mordida al lado de este. El rubio intenta de nuevo quitarse la banda en vano pues el azabache atrapa ambas manos colocándolas arriba de su cabeza, sosteniendo las con fuerza.
-Se un buen chico Deidara.- Tobi gruñe con molestia ante el intento fallido del rubio.
El azabache desciende una vez mas en el abdomen del rubio, deteniéndose en el corte en v que había en este, dejando leves mordidas y besos húmedos entre las lineas sobresalientes. Con su mano libre arranca de un tirón el bóxer del rubio dejándolo completamente desnudó a su merced, Tobi se detiene un momento mirando detenidamente al rubio, las marcas que había dejado en su cuerpo se veían mas notorias, el miembro del rubio se encontraba endurecido por completo y se mantenía levantado por voluntad propia al ser liberado de los molestos boxers. El rubio se encontraba sonrojado hasta las orejas al sentir la intensa mirada del azabache por su cuerpo.
Tobi suelta un suspiro cargado de lujuria.
Relamiéndose los labios toca con su mano libre la punta del miembro del rubio, este suelta un pequeño gemido al sentir los calientes dedos de su compañero sobre su parte íntima, con más confianza lo toma entre sus manos, subiendo y bajando su mano con lentitud masajeando el miembro del rubio de forma tortuosa.
-Agh ahh~
Gimió el rubio en voz baja al sentir las pequeñas corrientes eléctricas que le generaban los toques del azabache, este disfrutaba los sonidos que salían de la boca de su compañero, soltando con sutileza las manos del rubio empezó a acariciar el pezón derecho de este sin detener sus movimientos en el miembro del contrario, disfrutando los pequeños gemidos del rubio, el cual intentaba retenerlos en vano.
Inclinándose un poco pasa su lengua en la punta del miembro, Deidara arquea su espalda ante ello y el azabache sonríe al escuchar el fuerte gemido que escapo de los labios de este, acelerando los movimientos de su mano empieza a chupar la punta de el miembro del rubio introduciendola en su boca, su lengua jugaba con esta y sus manos aumentaban su ritmo. El rubio no creía lo que estaba haciendo su infantil compañero, se sentía en el cielo ante el toque de este, sentía como su cuerpo temblaba y al mismo tiempo como una sensación de calor rodeaba su miembro, sin esperarlo Tobi mete toda la extensión carnosa en su garganta.
-¡Ah~!
Gimió con fuerza el rubio al sentir la caliente y mojada boca de su compañero, Tobi empieza con movimientos lentos subiendo y bajando por toda la extensión, Tobi metía todo el miembro en su garganta desde la base hasta la punta, jugando también con su lengua, mientras subía y bajaba movía su lengua acariciando el jugoso miembro con esta y sus mano acariciaba las bolas con sus dedos de forma juguetona y a la vez sensual, con su otra mano seguía apretando el botón rosado con sus dedos.
El rubio gemía sin parar ante el toque experto de su compañero, sentía sus piernas temblar, su garganta reseca y sus ojos lloros, sin notarlo saca su lengua un poco gimiendo aun más fuerte.
-¡Ah! ¡T~Tobi! ¡Ah!- El rubio gemía sin control alguno y sin siquiera intentar evitarlo gimió el nombre del azabache.
Deidara sentía como estaba apuntó de soltar su esencia dentro de la boca del mayor, Tobi también noto esto al sentir como el miembro de Deidara crecía en su boca, así que detuvo su movimiento logrando hacer que a Deidara se le escapara un gemido de queja. Acerca tres dedos hacia la cavidad bucal del rubio metiendolos al instante en este, Deidara los lame con deseo, intentando incitar a que el azabache continuase con su acción, Tobi muerde su labio inferior y con su mano restante empieza a masturbar su ya endurecido miembro sobre la apretada tela de su bóxer.
Saca los dedos de la boca de Deidara al mismo tiempo que separa ambas piernas del rubio.
-¿T~Tobi, que h~haces...?- Pregunto temeroso mas no obtuvo respuesta pues el azabache introdujo el primer dedo en la entrada de este.-Agh, T~Tobi... D~Due~le.
El azabache ignoro la queja de su compañero empezando a mover con lentitud el dedo dentro de Deidara, haciendo un pequeño vaivén con este. El rubio mordía su labio inferior ante la incomodidad en su entrada, el azabache mete el segundo dedo moviéndolo en forma de tijeras. El rubio suelta un gemido lastimero, Tobi al mirarlo de esa forma suelta la coleta del rubio dejando su cabello suelto.
Y lo besa.
Besa sus labios de una forma lenta y con algo de ternura, degustando la cavidad bucal del contrario, jamas había imaginado que los labios de Deidara serían tan suaves, inconscientemente muerde el labio inferior del rubio sacando un jadeo de este al mismo tiempo que metía su lengua en la cavidad del contrario, iniciando una batalla de lenguas entre ambos. Al notar el cuerpo relajado de Deidara el azabache introduce el tercer dedo simulando embestidas, el rubio muerde el labio de Tobi con algo de fuerza, sacando un poco de sangre de estos. El azabache convierte el beso en uno aun mas demandante, la guerra entre sus lenguas se volvió intensa, de vez en cuando ambos separaban sus lenguas para succionar los labios del contrario antes de que sus lenguas se unieran de nuevo danzando a un solo compás, uno demandante y caliente.
Tobi no había detenido sus movimientos dentro de la entrada del rubio, el vaivén que hacían sus dedos se había vuelto brusco, metiendo y sacando sus dedos con fuerza, cuando por fin la entrada del rubio estuvo lo suficientemente dilatada saco sus dedos de esta.
El rubio puso una expresión de terror al saber lo que venía, inconscientemente apretó sus ojos y mordió su labio inferior. El azabache al mirarlo de esa forma sintió algo de pena ante ello, así que quito con lentitud la banda ninja del rubio sabiendo que se arrepentiría de eso después.
-Deidara, Mirame.- Ordeno con su voz mas seria aun, el rubio lo obedece quedándose embobado al instante, mirando con detenimiento cada parte del rostro de su compañero, piel clara la cual hacia un juego perfecto con su oscuro cabello y ojo, labios entreabiertos jadeando de forma lenta y unas cuantas cicatrices, deteniéndose en el único ojo abierto del azabache que lo miraba con seriedad y algo de lujuria.- Si no deseas continuar con esto solo dímelo.
El tono serio en su voz lo hizo estremecer, miro de nuevo su rostro y posicionando ambas manos en las mejillas del azabache las acaricio con ternura, mas aun la que estaba sobre las múltiples cicatrices en su rostro, el azabache suspiro.
-Arte...- Susurro.- ¿Por qué escondes tu rostro? - Tobi aparta la mirada, un ligero rubor cubre sus mejillas, el rubio sonríe.-Eres arte, Tobi.
El azabache aleja las manos del rubio de sus mejillas, algo avergonzado, suspira con lentitud antes de volverlo a mirar con seriedad en su único ojo, ahora era el turno del azabache tomar una mejilla de su compañero con su mano izquierda, acariciándola también de forma pausada y lenta, disfrutando el rose de su dedo con la suave mejilla,
-Si no quieres continuar con esto..- Besa la nariz de Deidara de una forma rápida.- Lo entenderé.
El azabache le sonríe tiernamente y el rubio se sonroja, correspondiendo la sonrisa con rapidez el rubio besa con deseo al mayor. Levantando sus caderas roza ambos miembros logrando que el azabache gruña en voz baja, dándole a entender que podía continuar. Y en un rápido movimiento el azabache se deshace de sus propios boxers, acercándose con lentitud coloca las piernas del rubio en sus hombros, toma su mano derecha entrelazando sus dedos con el rubio, ambos se sonríen una ultima vez y finalmente el azabache toma su miembro con su mano y se introduce con lentitud dentro de su compañero.
Deidara suelta un pequeño quejido del dolor al sentir la intromisión dentro de su entrada, Tobi apreta sus manos entrelazadas al mismo tiempo que profundiza su miembro dentro del rubio de forma lenta. Guiando su miembro dentro de la entrada, el azabache toma la cadera del rubio con su mano. El rubio apretaba sus labios e inconsciente de sus acciones con su mano libre la sabana agarra con fuerza la sabana de la cama.
Una vez dentro completamente del rubio, se queda quieto, esperando pacientemente a que el rubio se acostumbrara a tenerlo dentro. Uniendo sus labios con los de su compañero en un tierno beso, moviendo sus bocas con lentitud disfrutando la sensación de ambos par de labios unidos, el mayor desciende lentamente de los labios de su acompañante hasta el cuello de este, lamiendo con deseo las marcas antes hechas por el mismo en el blanquecino cuello del rubio y con su mano hace pequeños masajes circulares en su cintura,
Al ya no sentir tanto dolor en su entrada el rubio mueve con lentitud sus caderas tomando por sorpresa al azabache el cual seguía lamiendo su cuello, haciendo que este soltara un pequeño gemido ronco en su oreja.
Oh como el rubio había disfrutado eso.
Soltando la mano del rubio empieza a mover sus caderas de forma lenta, con un vaivén tortuoso, sacando pequeños gemidos del rubio. El movimiento generaba unas pequeñas corrientes eléctricas en ambos cuerpos varoniles, logrando que ambos soltaran ligeros gemidos, los del rubio en forma de suplica mientras que los del azabache eran de placer al sentir las cálidas y húmedas paredes del rubio apretarse alrededor de su endurecido miembro. En un ligero movimiento el azabache saca toda su extensión dejando solo la punta dentro para después entrar de nuevo en aquel lento movimiento que empezaba a enloquecer al rubio.
-M~Más... Tobi... P~Por fa~vor.
La pequeña suplica del rubio logro que una ola de calor inundara el cuerpo del azabache, bajando desde su cuello pasando por su espalda, rodeándola hasta su estomago y por ultimo juntándose en el miembro de este endureciéndolo aun más dentro del rubio. Deidara gimió ante aquella sensación.
El azabache toma las caderas del Rubio mientras se inclina un poco al mismo tiempo que hace que el choque entre ambos se volvieran mas fuertes, las estocadas se volvieron mas bruscas y el azabache solo movía sus caderas de forma circular, sin detener el ritmo rápido y brusco que se había formado, ante el repentino placer levanta su mirada hacía arriba soltando unos sonoros gruñidos.
El rubio por su parte rodeo el cuello de Tobi con ambos brazos, al mismo tiempo abría mas sus piernas para que el azabache pudiese profundizarse aun mas dentro de si.
-¡Ah! ¡Ah! ¡T~obi!- Los pequeños gemidos del rubio poco a poco iban tornándose en gritos de placer, sin poder formular una oración coherente solo gemía el nombre del azabache con fuerza, casi desgarrando su garganta en el acto.
El azabache solo aumentaba el vaivén de sus cuerpos intentando profundizar aun mas dentro del Rubio, los gritos de placer que este soltaba solo lo hacían gruñir con mas fuerza. Enterrando su cara dentro del cuello del rubio empieza a mordisquear las zonas mas sensibles de aquel lugar dejando aun mas marcas de las que ya tenia el rubio en el cuello.
Ambos en ese instante se sentían en el cielo, Tobi gruñía entre cada mordisco y lamida que daba, Deidara en esos momentos era incapaz de hablar correctamente por lo que solo soltaba gritos del mas puro placer. El rubio sentía como estaba apunto de venirse en los vientres de ambos, con las bocas que traían sus manos empezó a dejar mordidas en la espalda del azabache al mismo tiempo que sus uñas lo arañaban con fuerza. Cada segundo que pasaba sentía su clímax cada vez aun mas cerca e inesperadamente el azabache se detiene de forma brusca colocando su mano en el miembro del rubio, con su dedo pulgar tapa el pequeño orificio en la punta de la extensión, con el resto de su mano apretó un poco la punta de forma circular para evitar que este acabase, el rubio suelta un gemido de frustración, ¿Que manía tenia su molesto compañero para evitar por segunda vez su añorada eyaculación? No lo sabía.
-Aun no planeo que acabes.
Sonríe con malicia, el rubio tembló, ¿En que se había metido? De un rápido movimiento Tobi sale del rubio y lo gira colocándolo en cuatro patas, empuja a el rubio hacia el frente para que el rostro y pecho de este tocara el colchón, tomó ambas manos del rubio inmovilizandolas en la columna de este con su mano. Da una fuerte nalgada para que este elevara su trasero aun más y de forma rápida con un toque de brusquedad entra de nuevo dentro de él, sacando un grito de placer del rubio ante la nueva posición.
Con su mano libre abre un poco el trasero del rubio para introducirse aun más, sus fuertes embestidas ocasionaban que un ruido obsceno invadiera la habitación ante el choque fuerte y rápido de sus caderas, el sudor se hacia presente entre ambos junto a los fuertes jadeos que salían de ellos, sin quererlo el azabache roza el delicioso punto G del rubio, haciéndolo gritar de placer. Unas ligeras marcas rosas empiezan a aparecer en la cadera del rubio ante el fuerte agarre del azabache.
-¡A~Ah! ¡Tobi! ¡S~Si justo a~ahi! ¡Ah!
Gritaba con fuerza el rubio al sentir el fuerte roce en su punto dulce, sentía su garganta arder ante los gritos que soltaba y las fuertes corrientes eléctricas que recorrían su cuerpo solo lo hacía querer gemir con todo su ser, gritar de la forma mas fuerte que pudiese, el azabache lo enloquecía con aquellos fuertes movimientos.
Tobi aumenta el ritmo aun más, sintiendo como sus bolas chocaban contra las del rubio sin parar y sin quererlo soltó un gemido placentero de sus labios. Aquello calentó de sobremanera al rubio que ahora mismo movía sus caderas al mismo compás que su compañero e inclusive un poco mas rápido. El azabache suelta las manos de Deidara para después tomar el cabello de este con fuerza para ayudarlo a moverse aun mas rápido.
-¡Ahh!- Grita.
Ambos estaban dejándose llevar por aquellos instintos salvajes que desconocían que tenían, el ritmo de ambos se volvió mas brusco soltando gemidos y gritos sin control, el choque de sus caderas resonaba con aun mas fuerza que antes, el azabache empieza a soltar nalgadas al Rubio a el cual gracias a estas sentía su cuerpo estremecerse del mas puro placer.
De una forma rápida el azabache toma el miembro del rubio en sus manos empezando a masturbarlo con fuerza, el rubio gira levemente su cara la cual estaba contra el colchón, Tobi casi siente desfallecer al ver las sonrojadas mejillas del rubio, este tenia los ojos entrecerrados, los labios ligeramente abiertos y la lengua hacia afuera, soltando así gemidos incontrolables.
Y en una ultima estocada fuerte y brusca ambos soltaron su semilla al fin, en una explosión de placer.
-¡AH!- Gritaron ambos al sentir el fuerte orgasmo que los rodeo.
El rubio se corrió encima de la mano del azabache y en la sabana blanca que cubría aquel colchón, y el azabache dentro del rubio. Ambos jadeaban con fuerza y sentían sus cuerpos temblar, Tobi cayo cansado sobre la espalda de Deidara, mordisqueando una ultima vez el lóbulo del rubio salio con lentitud de la entrada de este, ambos gimieron ante ello.
Deidara mira de nuevo a Tobi sobre su hombro, este sonríe y lame de forma sensual su dedos llenos de aquella sustancia viscosa y blanca, formando una sonrisa ladina, Deidara se sonroja y entierra su rostro en el colchón.
Tobi ríe y dando un pequeño beso en la mejilla del rubio, el azabache se deja caer en el colchón boca arriba y el rubio solo se recostó en el colchón boca abajo aun gimiendo del cansancio. Por alguna extraña razón Tobi sintió la necesidad de cubrirlos a ambos con la sabana, por lo que sin querer ignorar su pensar los cubrió a ambos bajo la fina sabana blanca, siendo observado por un confundido Deidara.
-¿Por qué nos cubr...?- El rubio no pudo terminar su oración cuando la puerta de la habitación del azabache se derrumbo y entraron los demás miembros de Akatsuki sonriendo de forma burlona.
Tobi miraba atónito lo que le habían hecho a su puerta y casi sollozo de tristeza ante ello, mientras que Deidara no podía estar mas rojo de la vergüenza.
-¡Sabia que ese supuesto odio que decía tener Deidara hacia Tobi era tensión sexual! ¡Lo sabia!- Celebraba Kisame con un pequeño baile.
-¡Tenia razón! ¡La cara de Tobi es súper sexy!- Gritaba feliz Hidan siendo secundado por Konan.
Tobi cae en cuenta de que no traía su mascara y cubre la mitad de su sonrojado rostro con la sabana, causando breves risas en sus compañeros.
-No se que me sorprende más, que Deidara sea el pasivo o que Tobi fuera el dominante.- Soltó Sasori aun sorprendido mirando las marcas en el cuello del rubio.
-Y vaya que lo hace bien, solo bastaba oír los gritos de Deidara.- Menciona Zetsu divertido.
Deidara y Tobi se sonrojan furiosamente, el azabache mira en dirección hacia Itachi quien lo miraba en completo shock, con los ojos abiertos de par en par y la boca completamente abierta formando una perfecta "O", el azabache entendió aquella mirada al instante y sudo frío, cubriendo aun mas su rostro con la blanquecina tela.
Ahora si, ya se arrepentía de haber lanzado su mascara lejos.
-¿¡Tio Obito?!- Grito itachi sin salir por completo de su asombro.
Los Akatsuki al instante lo miraron sorprendidos en exceso, incluyendo a Deidara mientras que Tobi solo quería que la tierra lo tragase.
-¿¡Tio?!- Gritaron los demás al unísono.
Si, confirmado, Tobi quería que la tierra lo tragase. Los Akatsuki miraron a Tobi y luego a itachi para mirar a Tobi una vez mas y seguir con aquella frecuencia varias veces durante varios segundos.
-Jeje... ¿Hola?- Respondió avergonzado, descubriendo un poco su rostro.
Definitivamente Tobi tendría mucho que explicar ahora, pero valía la pena luego de disfrutar al rubio como lo hizo en aquella tarde y parte de la noche al notar que ya estaba oscuro.
Definitivamente Tobi le demostró a Deidara que no debía juzgar un libro por su portada y aquella inocencia que tanto creía que tenia el azabache, no era mas que un simple juego.
F I N
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Escrito:25/02/21
Publicado: 26/0221
¿Cual fue tu parte favorita?
¿Te gusto? Espero que si, les presentó mi primer intento de yaoi, jaksjaks.
¡Una cosa mas! ¡Deja aquí tu F por las caderas de Deidara! xd
¡Gracias por leer!
5578 palabras.
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