¡El limite! ¡Solo tenia que observar el 5% del total! «¡Vamos Izuku! ¡No puedes equivocarte! ¡No tienes una segunda oportunidad!»

Gracias a su equipo de soporte, en teoría podría aguantar hasta el doble de la potencia del One For All. Sin embargo, sus piernas eran otra historia.

Y tras saltar, Izuku rápidamente se sujetó del techo y salió del agujeró. Observó rápidamente sus piernas. ¡No estaban rotas! ¡Aun así, dolían mucho!

Eso significaba que se había pasado el 5%... pero por poco.

Lo estaba logrando. Para la primera vez... había salido bien.

Rápidamente comenzó a correr. ¡Mei! ¡Tenia que encontrarla! ¡Power Loader confía en él para hacerlo!

Poco sabia que Mei ya se encontraba en peligro. Despues de todo, fueron los villanos grandes quienes decidieron enfrentar al héroe profesional. El resto que tenia como orden asesinar a los alumnos...

Mei observó sus alrededores, metida en el otro edificio en llamas. ―Necesitan un ajuste, pero... ―sonrió, sacándose sus lentes― estos bebes servirán para el festival.

Ahora que seguiría... ¿Tal vez unos propulsores? ¿No había un héroe que utilizaba un modelo de esos bebes? Tendría que hacer memoria.

Ahora debería de regresar con Power Loader antes de que-

Un puño se acercó peligrosamente a su rostro. Mei no reaccionó, pero su mano logró activar por impulso su "sistema hidráulico de pistones", haciéndola a un lado, esquivando aquel ataque.

Rápidamente se volteó, observando a su atacante. ¡No eran ninguno de los chicos de la clase A! ¡Ese era...!

―¡¿Equipo de apoyo?! ―el villano afiló sus garras―. ¡Una inventora...!

―... ―Mei se frotó la mejilla. Ese ataque le había rozado―. ¿Quién eres tu?

Este sonrió enormemente ante la incredulidad de esta chica. ¡Hablar sola parece que solo era la punta del iceberg! ―¿Tienes equipo de apoyo para mi, niña? El mercado negro esta saturado últimamente.

―Intuyo que no eres un héroe...

―¿Y que si no lo soy? ―preguntó, deteniéndose unos segundos―. Cualquier grupo se beneficiaria con una inventora.

―¡El departamento de apoyo tiene como objetivo desarrollar equipo que vuelva los Quirks de los héroes mas fáciles de usar! ―Mei se vio extrañamente enfadada―. ¡Eso no incluye a villanos!

Chasqueó la lengua, fastidiado. ―Escuché que todos los inventores dicen lo mismo... ―blandió sus enormes garras de acero―. Entonces te sacaré todo lo que lleves encima despues de arrancarte la cara, mocosa.

Oh, ¿Una amenaza? Por primera vez, Mei se sintió genuinamente en peligro.

¿Y esos ruidos de fuera eran ruidos de batalla? Parece que las cosas se salieron de control...

Sintiéndose amenazada, y como alguien lejos de ser un héroe, Mei se vio algo nerviosa. Y cuando se ponía nerviosa, solía decir cosas sin sentido para algunos. ―¿Quieres matarme?

―Te matare. Así es.

―¿Quieres matar a los demás?

―Los otros se encargarán de esos niños.

Mei asintió ante ello. Un ataque masivo.

Eso solo significaba una cosa. ―¿Eso significa que, cuando salgamos de esta, el ojo publico estará sobre los alumnos que enfrentaron la invasión de villanos a U.A.?

Aquello hizo levantar una ceja al villano. ―¿Si...?

Mei volvió a colocarse sus lentes steampunk y sonrió nerviosamente. ―¡Entonces despues de esto recibiré exposición sin limites! ¡Te derrotaré, villano!

«¿Acaba de volverse loca? ¿Sabe de lo que esta hablando? ―se planteó aquel hombre, genuinamente perdido. ¡Que inventora mas egocéntrica!»

Peor aun, ¡¿Exposición?! ¡Tenia alma de vendedora!

Sin perder mas el tiempo, se lanzó contra aquella mocosa con totales intenciones asesinas. Rápidamente observó a un lado. «¡Ese sistema extraño que la salvo del primer ataque la orienta hacia la derecha! ¡Así que-!»

Mei apretó un botón a la altura baja de su pecho, lo que disparó un "alambre de flecha" que el villano, completamente desprevenido, esquivó por poco.

Y apretando otro al lado de su cabeza, Mei fue arrastrada al gancho el cual se clavó en la pared al final del pasillo.

El villano le observó con sorpresa. ―¡¿Que clase de estrategia es esa?!

―¡La mejor de todas para alguien que no practica ensayos de batalla reales! ―Mei llegó a la pared y pateó la ventana sin daños gracias a sus botas especiales.

Y ante la mirada incrédula del villano, se arrojó por la ventana a un piso 8. ―¡¿Esa maldita estrategia es huir?! ¡¿Y que con la caída?!

Obviamente no recibió respuesta, a lo que solo chasqueó la lengua y corrió al lugar.

Lo que menos esperaba era una emboscada. A juzgar por su equipo, no tenia nada para mantenerse en el aire o sujetarse de la pared.

Al llegar al marcó, observó abajo. Mei estaba a punto de estrellarse contra el suelo, cayendo de pie como un gato.

Sin embargo, sus "suelas de libración" que llevaba puestas se activaron a 30cm del suelo gracias a su sensores, activando su poderoso sistema el cual expulsó una gran cantidad de aire al suelo, la cual redujo el impacto de la caída literalmente en su totalidad.

El villano estaba impactado. ¡¿Que con esa mierda?! ¡Era el mejor equipo de apoyo que halla visto en su vida dejando de lado los cañones de plasma!

Mei le observó desde abajo, y comenzó a correr.

El villano rápidamente entendió. ¡Ella buscaba perderlo!

Rápidamente saltó aquel marcho, clavando sus garras de acero en la pared y bajando con velocidad. ¡Ese equipo de apoyo! ¡Debia obtenerlo a toda costa! ¡Despues de todo, el primero que se lo encontraba se lo quedaba!

Al llegar al suelo, comenzó a ir tras ella a paso rápido.

La observó girar en la esquina del edificio vecino, lo que le hizo apurar el paso. ¡No la perdería ni loco!

¡Y cuando la atrape-! ―¡¡Smash!! ―¿Eh?

Al girar en la esquina, recibió un poderoso golpe en su rostro, lo que le hizo volar absurdamente lejos, derrapando contra el suelo.

Mei se alegró. ―¡Muy bien, Midoriya!

Izuku apretó sus dientes, sujetando su brazo derecho. «¡Por el repentino aviso de Mei apenas y pude contenerme! ¡Definitivamente utilice 10%! ¡Mi limite! ¡Mi brazo recibió algo de la presión del Detroit Smash!»

―Una... emboscada... ―el villano se puso de pie con algo de esfuerzo. Ese golpe definitivamente fue con una fuerza sobrehumana―. Bien jugado... mocosa...

―¡Detrás de mi, Hatsume! ―Izuku apretó sus puños―. ¡Power Loader me dijo que vallamos con los demás a avisarles!

―No creo que eso sea conveniente ―Mei le observó―. Ese tipo dijo que "los demás" se encargaran.

Izuku apretó los dientes. ¡Un ataque simultaneo! ¡Todos son el objetivo!

Nuevamente el villano arremetió contra ellos, sorprendiendo enormemente a Izuku. ¡Que velocidad!

Tomándole de la cintura, Mei nuevamente activó sus pistones, logrando esquivar ese ataque junto a Izuku. Pero el villano maniobró, atrapando por la espalda a Mei. ―¡Estas muerta!

Antes aquellas palabras, Izuku reaccionó rápidamente. «¡One For All, 5%!» Y tras ello, dio un salto, arrastrando consigo a Mei, quien rápidamente amortiguó la caída de ambos con sus suelas de libración.

Ante aquel movimiento, el villano chasqueó la lengua. «¿Y que con esa sincronización? Se complementan como si ya hubieran luchado espalda con espalda antes...»

Mei se vio extrañamente seria. ―Por poco...

Izuku se volteó y observó al villano con toda su atención. ―Hatsume tuvo que salvarme... Que velocidad... ¡Esto es un villano!

Ella observó tambien al villano. ―Midoriya...

―¡Lo se! ―el chico concentró One For All en su brazo―. ¡Tenemos que vencerlo por nosotros mismos!

Aquello sorprendió a la chica. Conociendo poco a Izuku, esperaba que repita eso de «¡Detrás de mi, Hatsume!»

Izuku compartió el pensamiento. ¡Claro que si fuera por él, intentaría protegerla... pero acababa de comprobarle que este villano sobrepasaba sus capacidades! ¡Solo estaba entrenado físicamente, no en lo demás!

Al no tener sus ejercicios de Héroe, sin dudas solo era un chico del taller de apoyo con un Quirk vistoso. Por eso la necesitaba a ella. Demostró tener mas reflejos que él, y tal vez sus ojos eran la causa de ello. ―¡Si tardamos mucho tiempo, Power Loader puede que no logre aguantar mucho mas su batalla! ¡Tenemos que conseguir ayuda a toda costa!

Mei se vio sorprendida. ¡A si que él estaba luchando! Y a juzgar por las palabras del peliverde, no tenia muchas posibilidades de ganar..

―... ―asintió con firmeza, lista para ayudar―. Dime, Midoriya. ¿Confías en mi?

Este no dudó en responder. Despues de ser salvado hace unos segundos... y con toda la ayuda que le estuvo prestando estas semanas, sabia que Mei no solo era digna de su admiración, si no de su confianza. ―Si.

La chica sonrió levemente. ―Tengo un plan.

El chico observó con sorpresa como Mei literalmente rompió su espacio personal para susurrarle. ¡Muy cerca!

Claro estaba que el villano no se quedaría parado allí sin hacer nada. Los analizaba, tratando de acabar esto rápidamente, y con las menores heridas posibles.

Analizó las posibilidades que Mei podría explotar con su equipo de apoyo, así tambien, el Quirk el chico peliverde, notando que él necesitaba algo de tiempo para concentrar el poder y dispararlo en un super movimiento, lo que le daba ventaja.

Sabiendo aquello, ningún plan que ellos formulen funcionaria. Ya se hizo una idea de lo que podrían estar planeando.

O eso creía, ya que Mei le dio la espalda a Izuku. Confundido, el villano solo se preparó. «Probablemente su mecanismo de pistones se activará por el lado contrario al estar de espaldas, lo que espera que me tome por sorpresa. ¡Que ingenua!»

Tras deducirlo, se lanzó con fuerza tras ellos. ¡En el próximo golpe, atravesaría el pecho de ese peliverde!

Mei apoyó su espalda con Izuku. ―¡La señal!

El chico apretó los dientes. ―¡Ahora!

Mei disparó su flecha de alambre, apuntado al segundo piso del edifico del cual había saltado. Rápidamente ambos entrelazaron sus brazos, siendo Izuku arrastrado junto a Mei cuando el mecanismo hizo su trabajo, llevándoles hasta el segundo piso.

El villano se detuvo. ―¡¿De nuevo huirán?!

Y mientras Mei utilizó sus botas para amortiguar su caída, Izuku apoyó sus pies en la pared con pesadez y en un instante canalizó su poder en las piernas, dando un saltó contra el villano el cual le tomó completamente desprevenido. ¡Y a una absurda velocidad!

―¡¡Detroit... ―Izuku apretó su puño, y lo encajó nuevamente en el rostro del villano― Smash!!

Aquel golpe al 10% nuevamente mando a volar al villano, esta vez estrellándolo contra la pared.

Izuku cayó al suelo y rápidamente se apoyó en sus brazos, observándole.

Pasados los segundos, solo celebró en su mente. ―¡Esta inconsciente!

Mei sonrió enormemente. Bien... ¡Bien! ¡Lo había logrado!

Tras tener sus pies en el suelo nuevamente, se acercó a Izuku. ―¿Que pasa? ¿Por que no te levantas?

―... ―el chico hizo el esfuerzo por intentar mover sus piernas correctamente, sin resultado. Se había excedido.

Listo a utilizar el 10% en su golpe, tambien lo utilizó en el impulso de sus piernas, y no tenia equipo de apoyo allí.

Aunque no rotas, dolían como el infierno.

Sin embargo, y para sorpresa de la chica, quien pensó que debía de ayudar a Izuku, este hizo el esfuerzo colosal por ponerse de pie. ―¡Tenemos... que... ―el chico apretó los dientes, irguiéndose― contactar a los demás!

Ante aquel acto, Mei solo sonrió. Esto aseguraba aun mas su pensamiento equivocado sobre que Izuku era hijo de All Might. ¡Definitivamente debía ayudarle!

Y actuando desvergonzadamente como acostumbraba, apuntó a su hombro. ―Puedes apoyarte si quieres.

―... ―Izuku apartó la mirada, y asintió, apoyando su mano en el hombro de ella―. Gracias...

Sin embargo, y continuando en su actitud desvergonzada... ―¿Te gustan mis preciosos bebes? ¡Dime que son lindos!

Izuku asintió con fuerza casi instantáneamente. Ahora que estaba en el curso de apoyo, ¡Entendía el esfuerzo que conllevaba el diseño de equipo! ¡Que Mei haya hecho estos equipos en tan solo pocos días es simplemente de locos! ―¡Tus bebes son fantásticos, Hatsume!

La chica permaneció con esa sonrisa confiada mientras procedió a avanzar junto a Izuku. ―¡Tal vez no necesiten mejoras despues de todo! ¡Definitivamente captaré el ojo de alguna compañía cuando esto acabe!

Izuku se rascó la mejilla, sonriendo levemente. ―Si... Seguro que si.

Mei era demasiado alegre. Incluso en una situación critica como esta, lograba sacarle una sonrisa.

Tal vez podrían salir de esta.

Sin embargo, los profesionales aun lidiaban su batalla.

...

Y estaban perdiendo.