ARIA:

Oscuridad. Es lo único que captan mis ojos. Silencio. Lo único que perciben mis oídos.

Mi cuerpo está débil, cansado de tanta lucha. Solo siento frío en mi interior. Quiero dejarme ir, no sufrir más en este mundo. Si muero, mis padres prodrán retomar sus vidas sin preocupaciones. Si me voy de este mundo, mis amigos no tendrán que ocultar más su preocupación hacía mi. Todo sería más fácil así.

Frente a mi una gran puerta aparece. Me acerco a ella dispuesta a abrirla, acercando mi mano al pomo. Giro este abriéndola lentamente, tratando de ver que se oculta al otro lado. Es entonces cuando lo noto. Noto el calor de nuevo y consigo ver una luz cegadora y atrayente que me aleja de la puerta. Me encamino hacia ella, y a medida que me voy acercando escucho una voz que me es familiar. Dicha voz me llama y me suplica para que luche y despierte.

JAKE:

-Aria, tienes que luchar, que vivir. No te puedes rendir pequeña. No permitas que haya venido hasta aquí en vano y solo para verte morir. No me hagas esto. Hay tanto que quiero decirte, enseñarte-le digo al tiempo que mi voz comienza a temblar-.No me importa que nuestra historia sea corta. Lo único que quiero es tener una historia junto a ti, porque no sabes cuanto te quiero. Me gustaste desde el primer día en que te vi, con aquellas mallas y aquel top, mientras tratabas de ocultar tus nervios; me gustaste aún más cuando te vi bailar por primera vez en la playa; y a medida que te fuí conociendo, me acabé enamorando perdidamente de ti. He tratado de olvidarte, pero simplemente no he podido ¿y sabes porqué? Porque tú has conseguido rellenar, sanar mi corazón. Te has convertido en mi todo, en mi luz, en mi motivo para vivir y luchar. Aria, tú eres la que me devolvió las ganas de vivir. Si luchas, si sobrevives...te prometo mostrarte la belleza de la vida de la misma forma en la que tú me enseñaste a mi. Lucha pequeña, lucha por los que te queremos.

ARIA:

Esa voz cálida que escucho es la de Jake. A pesar de todo me sigue amando. Aún incluso después de abandonarlo, había vuelto por mí.

Escucho su voz muy cerca, diciéndome que soy su todo, su luz y que soy su motivo de vida y lucha, que me quiere y que siempre lo ha hecho. No puedo. No puedo dejarlo a él y a mis seres queridos. Debo luchar para poder decirle que también lo quiero.

Elijo la vida sobre la muerte. Elijo luchar, si eso me permite volver a verlo y sentirlo. Me obligo a mi misma a abrir los ojos de nuevo, a abrirlos de cara a la luz de un nuevo día.

Al abrirlos sé que acabo de hacer lo correccto, porque lo primero que ven mis ojos son otros de color azul bañados en lágrimas de felicidad.

-Aria- es lo primero que escucho.

-Jake-digo con voz entrecortada, percatándome de que en ese momento los dos habíamos nacido de nuevo-Tú también eres mi todo-.Respondo regalándole una sonrisa.

-Sabía que lucharías, que nunca te rendirías porque eso no está en tu forma se ser. Siempre, desde que te conozco, has sido una guerrera-me dice apartándome un mechón de cabello de mi rostro-. Además no podías irte sin despedirte de nosotros todos.

-Algo así nunca me lo perdonaría, por lo que te agradezco que aparecieras en el momento justo-le digo mirándole a los ojos e intercambiando una sonrisa.

-Creo que es mejor que vaya a buscar a tus padres. Se van a poner muy contentos de verte despierta.

-Espera-le digo agarrándolo por la manga  de la sudadera que lleva puesta-. Yo tengo...quiero explicarte lo que sucedió entre nosotros. Jamás quería dejarte, pero...

-Lo sé pequeña. Tina, Mike y Lema me lo contaron todo. Me hablaron del chantaje. No puedo creer que alguien sea tan vil para hacer algo así-me dice apretando los puños fuertemente.

-Ahora ya está solucionado. Volvemos a estar juntos-. Le digo, sintiendo como unas lágrimas resbalan por mis mejillas.

-Y nunca nos separaremos-me dice secándome las mejillas con delicadeza.

JAKE:

En repetidas ocasiones, Aria quiso confesarme su secreto. Contarme toda su vida, por lo que había pasado; pero no se había atrevido por miedo a que no la mirase con los mismos ojos, y a que eso condicionara/afectara a nuestra relación. Pero la verdad es que no me importa su pasado. La quiero como es, por lo que es, desde el primer instante en que la vi. Desde que la conozco lo único que quiero y que me importa es un futuro a su lado. Un futuro en el cual los dos vayamos descubriendo nuestras imperfecciones, gustos, sueños...Lo que más deseo ahora es tener un presente y un futuro a su lado, aunque este sea de tan solo unos días. Días que se poderían contar con los dedos de las manos. El resto ya no me importa, solo ella. Ella que me ha vuelto a enseñar a sonreir después de tanto dolor y sufrimiento.

La observo una vez más antes de salir de la habitación. Se ve tranquila, mientras su pecho sube y baja lentamente indicando que todavía vive. Al salir de esta, no puedo evitar mirar al cielo ya oscurecido e iluminado por las estrellas dándole las gracias a estas por haberla salvado tras mi deseo.

-Se acaba de dormir-les digo a mis amigos que se encuentran en la sala de espera-. Ahora toca esperar a los resultados para saber si todo ha salido bien; pero se ve sana.

-Jake...-oigo decir a Kevin.

-¿Qué ocurre? ¿Porqué tenéis esas caras tan largas?-. Les pregunto.

-El otro paciente que recibió el mismo tratamiento que Aria ha muerto-. Dice Lena entre sollozos, provocando que mi última esperanza se desvanezca.

-Pero Aria sobrevivirá. Es fuerte, una
luchadora. Nunca he conocido ha nadie tan valiente. Va ha sobrevivir-. Me digo más a mi mismo.