Subo este cap. Porque realmente les pido una disculpa por todos esos errores de los capítulos repetidos y todo eso, dedico este cap a Ivannitta, ojalá lo disfruten, enserio perdón.

—¿Pepper?

—¡Déjame en paz Tony!

Se escucha que la pelirroja grita por detrás de uno de los sillones, ante la reacción los labios de Steve se fruncen con incomodidad, no sabía lidiar con mujeres enojadas y menos si estaban tristes.

—Soy Steve, Pep, no te preocupes ¿dónde estás?

La voz de Steve había sido lo más dulce que había podido y ante ello Pepper sale por detrás del sillón, la pelirroja tiene el rímel corrido por toda la cara y los ojos hinchados y rojos, sin pensarlo dos veces va corriendo hasta los brazos de Steve y lo abraza fuerte, muy fuerte.

Steve le corresponde el abrazo.

—¿Qué tienes Pepper?

—Es Tony.

—¿Te hizo algo?

—No... — dice Pepper con una voz apagada y lenta soltándose suavemente del abrazo de Steve y volteándolo a ver a los ojos — ¿Steve?

—Cuéntame Pep, no le diré a nadie, lo prometo — Pepper ante la oferta entrecierra los ojos dudosa como si lo acusara de mentir, ante ello Steve le regala una sonrisa — en serio cuando prometo algo no rompo la promesa, puedes confiar en mí.

—Es sólo que... No sé si decírtelo a ti antes que a Tony y estoy asustada...

—Puedes confiar en mí, no le diré a nadie, te lo prometo.

—Es que... estoy... Estoy embarazada...

Ante la noticia se forma una enorme sonrisa en la cara de Steve sin embargo el rostro de la pelirroja permanecía con un gesto inmutable.

—¡Felicidades Pepper! ¡Tony se va a poner muy alegre! Se lo tienes que decir.

Steve vuelve a abrazar con emoción a Pepper y ésta le corresponde un tanto forzada, no le causaba mucha alegría ni emoción.

—Ese es el problema ¿en verdad  crees que quiera ser padre?¿o qué está listo para serlo? Tengo miedo Steve, que tal si no lo acepta o...

La voz de Pepper se va apagando lentamente hasta llegar a ser nada, las dudas y miedos la atormentaban en la situación que estaba pasando, esta vez no se trataba de un objeto o un problema menor, era un bebé, estaban hablando de un bebé, ella no sabía cómo se lo tomaría Tony y ése era su mayor miedo.

—¿En serio eso crees de Tony? Él va a aceptar al bebé Pep, no necesitas preocuparte por eso, créeme va a ser un padre espectacular. Deberías decirle.

Pepper se pasa una mano por cada ojo limpiándose las lágrimas.

—¿Cuando crees que sea el mejor momento para decírselo?

—¿Qué tal...pasado mañana? Hoy sería  muy inoportuno por la fiesta de Thor al igual que mañana, así que mejor el martes.

—Será el martes entonces. — dice Pepper un poco insegura — Voy a subir a felicitar a Thor, pero primero iré a arreglarme, sólo mírame ¡que vergüenza! Oh, Steve como puedes verme así y no darte asco.

—Señorita Potts, se ve hermosa. — hace una pausa el rubio regalándole una sonrisa de apoyo a Pepper — Pero honestamente, tiene rímel en toda la cara, hará falta un lavado facial.

Desmiente Steve con un tono de respeto.

—Sí lo creo — ríe Pepper — ¿para qué venías aquí? ¿Tony te envió a buscarme?

—En realidad no, fue una coincidencia que estuvieras aquí, venía a lavarme las manos.

—Bueno, entonces iré a arreglarme, nos vemos arriba.

—Claro señorita Potts.

—Sólo Pepper, por favor.

—Pepper. Entendido.

Se corrige Steve bajando el rostro ocultando una sonrisa y Pepper sube al elevador.

—Oh y Steve — se apura a decir la pelirroja poniendo una mano entre las puertas para que éstas no se cierren, Steve voltea a verla ante el llamado — por favor no menciones absolutamente nada, ni siquiera digas que nos encontramos aquí.

Steve asiente, Pepper quita la mano y las puertas se cierran dejando nuevamente a Steve solo en el baño.

Pepper abre la puerta de su habitación que comparte con Tony y entra, se dirige al baño y se mira en el espejo al verse sus azulados ajos se abren ampliamente totalmente sorprendida.

—Madre mía, cómo Steve no se desmayó al verme así.

Comenta para sí misma con un gesto de desagrado, algo de lo que siempre se preocupaba era dar una buena imagen, sin embargo esta situación había roto los límites en definitivo.

Con sus delgadas manos, comienza a lavarse con agua la cara limpiándose todo el rímel corrido en ella hasta que cuando se vuelve a mirar en el espejo, luce sin ninguna imperfección, al terminar con eso se dirige a su tocador y se coloca un poco de maquillaje: rímel, rubor, sombra...

Habían pasado 20 minutos en los que se maquillaba rápidamente, está entretenida delineándose la linea por encima del ojo, cuando escucha un fuerte golpe en el piso de arriba lo que la hace ponerse alerta, sabe que cuando todos Los Vengadores están reunidos en una sola habitación puede haber un caos total.

Se termina de dibujar la línea con preocupación, se acomoda su cabello y se dispone a ir a donde todos están reunidos. Cuando entra al elevador JARVIS le advierte con su tono robótico:

—Señorita Potts, el señor Stark está peleando con Thor en el piso de arriba. No le recomiendo...

—¿Trae la armadura puesta?

Pregunta Pepper con un tono de enojo y preocupación interrumpiendo a JARVIS a media oración.

—Sí, Señorita. Estos días ha estado modificando su armadura constantemente así que está más actualizada y es más peligrosa. No le recomiendo subir.

—No me importa JARVIS, llévame allá.

El elevador comienza a subir lentamente y cuando se detiene, Pepper presiona múltiples veces el botón que abre las puertas. Está desesperada por entrar a aquella habitación.

Cuando las puertas finalmente se abren, todo se encuentra muy tranquilo y todo el ambiente está en silencio.

Todo está ordenado en la habitación, sin ningún rasguño. Pepper frunce el ceño y voltea a ver a todos lados para verificar si hay rastro de algún Vengador obteniendo respuesta negativa a su revisión.

La pelirroja de pronto siente una fría brisa de invierno que acaricia sus brazos, voltea su vista hacia el balcón y se da cuenta que están abiertas las puertas con las cortinas flotando suavemente en el aire.

Pepper comienza a caminar lentamente hacia aquel lugar. Se detiene en el marco de la puerta y se recarga en él buscando con su vista a alguien. Se queda mirando detenidamente el panorama de la cuidad de Nueva York, los enormes rascacielos y la frondosa y rojiza arboleda de Central Park, al verla aún recuerda aquella vez que Tony la llevo a caminar por ahí y los gansos lo habían atacado, ambos corrieron lo mas rápido que pudieron pero aun así le rompieron su camisa a Tony y le robaron sus lentes, esa había sido una experiencia inolvidable en la que ambos se habían divertido mucho, pero había sido hace mucho tiempo.

—¿Linda vista, no?

Pepper pega un brinquito ante la voz de Tony en su oído y se voltea rápidamente a verlo directamente a los ojos.

—No vuelvas a hacer eso, por favor.

—Lo siento.

—¿Qué no tú y Thor estaban...? —la voz de Pepper se va apagando lentamente al comprender la situación — ¿le dijiste a JARVIS que me mintiera con eso?

—Sí, ¿por qué?¿estás enojada?

—No, simplemente no comprendo porque le dijiste eso, me asusté mucho creí que te podría haber pasado algo, los estaba buscando y...

—No, de hecho, estoy bien. En perfecta salud, ya que no tengo un pedazo de metralla intentando matarme todo el tiempo.

—¿Y los demás?

—Están arriba, ya vamos a servir la comida: cerdo ahumado con espárragos y...

—Pues vamos entonces.

—¿Pepper, sigues enojada?

—¿Enojada?

—Lo que pasa es que, tú nunca te habías enojado así conmigo y menos por hacerle una broma tan inofensiva al Capi, últimamente te noto diferente, más alterada y eso me preocupa Pep, ¿te pasa algo?

Pepper instantáneamente piensa en lo que le dijo Steve hace treinta minutos, le dirá a Tony toda la verdad dentro de un día, tenía que resistirse a la tentación de decirle toda la verdad, si se lo dijese se arruinaría el cumpleaños de Thor y era lo que menos quería.

—Pepper respóndeme por favor...

—¿Eh? No, no, estoy perfectamente bien, no pasa nada conmigo te lo aseguro... Hay que subir... Nos están esperando.

Pepper se apresura a llegar hasta el ascensor pero cuando está a punto de entrar Tony la detiene tomándola de un brazo y jalándola levemente, para que ésta se detenga.

—Pepper, si algo te llegara a pasar, no sé que sería de mí. Te amo como nunca he amado a nadie más, y me preocupo por ti, pero necesito que cooperes y me digas que es lo que te pasa, no soy adivino.

Pepper asiente y ante eso Tony se acerca lentamente para besarla intentando aligerar el ambiente sin embargo, ella instantáneamente retrocede hacia el elevador y presiona un botón, Tony frunce el ceño y después sube con ella, en todo el corto recorrido no hubo una sola palabra, tan sólo incomodidad entre ambos.

¡Subo pronto!
De parte de Sammy.