◌ ◌ ◌╰── - ̗̀ Capítulo 48 ̖́- ──╯◌ ◌ ◌
Dos días después
Paro de correr cuando llego al edificio, miro mi reloj y veo que son las siete de la mañana —aún es temprano—. Entro al edificio y veo al encargado —me saco mis audífonos
— Buenos días —lo saludo
— Buenos días, señor Bale —me saluda—. Recién acaba de llegar el cartero, su correspondencia —me entrega cartas y revistas
— Muchas gracias —empiezo a revisarlos, pero escucho que el ascensor ha llegado
Subo y aprieto el botón del Pent—house, mientras el ascensor sube, reviso las cartas, son los primeros recibos a pagar —de esto se tiene que hacer cargo Emma—. Paso a la siguiente carta y noto que es una carta para mí, no tiene remitente ni nada —esto es sospechoso—. Estoy por abrirla cuando se abre la puerta del ascensor, salgo y camino hacia el Pent—House, abro la puerta y siento un delicioso olor a waffles recién hechos.
— Izan, ¿Eres tú? —escucho la voz de mi abuela
— Sí, soy yo —cierro la puerta y voy a la cocina
Mi abuela está en la cocina acompañada de Esme, nuestra ama de llaves, por así decirlo, Esme es una persona muy amable y lo más importante le ha caído muy bien a mi abuela. Es una mujer muy bien recomendada, tuve que explicarle que algunas veces me llamaban Mark Bale y que podían llegar documentos a ese nombre, pensé que se iba a asombrar, pero no fue así, antes de que viniera el señor Thomas le explico y le precavió de esta situación.
— ¿Qué están preparando? Huele delicioso.
— Hijo —se da la vuelta y me mira—. Estoy haciendo waffles
— Tus famosos waffles, qué delicia —me acerco—. Puedo comer una
— No —me golpea la mano—. Espera a que lo lleve a la mesa
— Abuela...
— Primero ve a bañarte, que estás todo sudado —me indica—. Luego podrás comer lo que quieras
— Está bien, está bien —levanto las manos—. Por cierto ¿Emma?—pregunto
— Aún no ha despertado
— Iré a despertarla —sonrió
— Hijo, ella, ¿Qué prefiere? —me pregunta—. ¿Prefiere que, abuela?
— ¿Qué es lo que le gusta? Café, té, jugo o es alérgica a algo.
— Ehh... —trato de pensar en algo
La pregunta de mi abuela me ha dejado sorprendido, la verdad es que esas cosas yo no sé. Estoy tratando de pensar y recordar si alguna vez ella me ha dicho algo, pero no lo recuerdo, sé que Emma toma café en la oficina como muchos, supongo que le gusta.
— Toma café
— Okey, pero ¿Cómo? Negro, sin cafeína, con leche
— Abuela —la interrumpo—. No necesitas hacer eso
— Yo se lo dije —dice Esme—. Pero no me hizo caso
— Tú aún estás delicada
— No, yo ya estoy bien, además esto para mí no es nada. Le estoy enseñando a Esme algunos truquitos —sonríe.
Al menos desvié las preguntas de mi abuela sobre los gustos de Emma, sé que mi abuela lo quiere hacer de corazón y quiere ayudarnos, pero no es necesario, necesita aún recuperarse.
— Solo no exageres, por favor
— Está bien, hijo —sonríe
Me doy la vuelta y camino, dejo las cartas y las revistas en una de las mesitas, si quiero desayunar tranquilo tengo que alistarme ya, no puedo llegar tarde, aún no puedo.
Abro la puerta y veo que Emma aún está en la cama dormida cubierta solo con una sabana. Con mucho cuidado voy hacia el baño y abro la regadera, me daré un baño rápido.
Diez minutos
Ya estoy listo, hoy me pondré un polo color crema, unos pantalones negros y unos tennis negros, que de lejos parecen zapatos, tal vez debería ir más formal, pero creo que no es necesario aún. Salgo del baño y veo a Emma sentada en la cama, cubriendo su desnudez con la sabana.
— Buenos días, honey —bosteza y se frota la cara
— Buenos días, hermosa
— ¿Qué hora son? —me mira y noto que aún está con sueño
— Son las 7:30
— 7: 30 —me mira asustada—. Llegaré tarde a la oficina —me dice preocupada
Emma se levanta y enrolla la sabana a su cuerpo, cubriendo totalmente su desnudez.
— Espera —la detengo—. No te apures, puedes llegar tarde hoy. Si le das un beso a tu jefe puede que lo acepte —digo en tono seductor.
— ¿Un beso? —me sonríe
— Si
Emma me besa apasionadamente, la sujeto de la cintura y muy despacio bajo la mano —sonrió—. Emma se da cuenta de mis intenciones y se separa.
— Señor Miller, tiene usted una mano muy larga
— Puede que si —me acerco a ella y le atraigo hacia mí, volviendo a besarla.
— Hace rato desperté y no estabas en la cama
— Salí a correr, sabes que se me hizo costumbre correr en las mañanas
— Lo sé y me hubiera gustado acompañarte.
— No tuve corazón para despertarte, además necesitabas descansar después de anoche
— Izan —me dice sonrojada—. Espero que tu abuela no nos haya escuchado
— Esperemos porque ayer tus gritos...
— Izan —me da un pequeño golpe—. No digas eso
— Por cierto, mi abuela nos está esperando a desayunar
— ¿Qué? Pero porque no me lo has dicho antes, no puedo salir así, necesito arreglarme
Emma se va rápidamente al baño —me rio—. Por más que quiera apurarse sé que tardar al menos media hora en arreglarse, así que tengo un poco de tiempo para revisar algunos correos.
Salgo de la habitación y escucho a Esme y mi abuela riéndose de alguna cosa, me siento frente a la laptop y empiezo a revisar los correos que me han llegado, pero en medio de ellos hay uno que capta mi atención, este correo es de Liam y lo único que me dice es que lo llame —eso es extraño—. Saco mi teléfono y empiezo a llamarlo.
📞Llamada telefónica 📞
— Izan —susurra
— Liam, recibí tu correo electrónico.
— Espera...
— ¿Qué sucede? —me paro
— Hermana, no puedo escucharte, espera que tenga mejor señal
— Espero me expliques por qué me estás hablando así
Siento la presencia de alguien, me doy la vuelta y veo a mi abuela acercarse. Le hago una señal de que estoy hablando y que después voy, será mejor que salga a la terraza, ahí nadie me molestara. Camino, abro la puerta corrediza, lo cierro y me siento en una de las sillas.
— Izan, ¿Sigues ahí?
— Sí, sigo aquí —hablo enojado—. Ahora explícame por qué me pides que te llame y me hablas así
— Lo siento, es que estas semanas han sido caóticos, un idiota en la oficina filtro unos datos y a raíz de eso han hecho una investigación cibernética, por eso no pude comunicarme contigo como antes y mandarte mensajes más claros
— Entonces créate otra cuenta y mándame correos por tu teléfono, no uses la red del Buffet —digo enojado
— No se me había ocurrido
— Se nota
— Bueno, bueno... después lo haré, pero lo importante que quiero decirte es que necesito verte, tengo información muy importante y no te lo puedo decir por teléfono, ni correo
— ¿Quieres que nos veamos? —digo aguantando mi enojo
— Si
— Te veo en la cafetería en media hora
— No, ahora no puedo, ahora no estoy en Nueva York. Llegaré a la ciudad en la tarde.
— Entonces...
— Te parece vernos a las seis
— Está bien, a las seis, pero si la información que me das no es importante te costará caro.
— Te juro que es una información muy valiosa —me dice muy convencido.
— Eso espero, por tu bien eso espero —le lanzo una sutil amenaza.
— Sí... Eh... está bien hermana —habla normal—. Yo lo compraré... Adiós
— Idiota —grito
📞Fin de la llamada Telefónica 📞
Liam es un completo idiota —aprieto los dientes—. Espero de verdad que la información que me dé sea buena y no como las anteriores, información estúpida que no me ayuda nada —ruedo los ojos—. Me levanto y vuelvo a entrar, escucho ruido y veo ya la mesa puesta.
— Hijo, siéntate —me pide—. Ya está listo el desayuno
— Gracias abuela —sonrió y me siento
— Puedes llamar a Emma, por favor —me pide
— Ya vendrá, se está arreglando
— ¿Quieres fruta o chocolate en los waffles?
— Te mentiría si diría fruta
— Lo sabía, te conozco —me dice poniendo frente a mí un par de wafles cubierto con chocolate
— Gracias abuela
Escuchamos ruidos y veo que es Emma que viene rápidamente y apenada a la mesa, tengo que admitir que se ve linda, con vestido corto, floral y el cabello suelto, alborotado.
— Buenos días, Zoe —saluda—. Buenos días, Esme
— Buenos días, querida Emma, siéntate —le pide mi abuela
— Zoe por favor siéntate, yo termino de servirles —dice Emma apenada
— No, no te preocupes, desayuna —me mira—. Desayunen o llegarán tarde
— Es verdad y yo aún no he alistado nada —dice Emma preocupada y se sienta a mi lado derecho
— Cariño —le tomo la mano—. No te preocupes, te necesito en la oficina en la tarde
— Pero Carl, el estar pendiente de mi llegada
— Yo me invento algo —le aseguro
Mi abuela pone frente a Emma unos waffles y una taza de café humeante. Ella los ve y sonríe
— Espero te gusten los waffles, si quieres te pongo fruta o crema
— No, está perfecto, solo me pondré un poco de fruta —dice y levanta un poco de frutilla picada
— ¿No quieres un poco de plátano?
— No —dice y pone cara de asco—No me gusta el sabor del plátano
La escucho y me sorprendo, ese pequeño dato no sabía de hecho, ahora que lo pienso nunca la vi comer plátano.
— ¿Que cosas te gusta desayunar? —pregunta mi abuela y al fin se sienta con su taza de té.
— Mayormente, desayuno, fruta claro, sin plátano, cereal, con yogurt o algún batido de fruta, con leche de almendra, casi no tomo café en la mañana.
— ¿Leche de almendra? —le pregunta
— Sí, es mi preferida
— Yo no soy tan fanática de esa leche, pero no te preocupes, lo compraremos
— No se moleste, yo pasare y lo compraré
— Por cierto, hay algo importante que tienes que atender antes de ir a la oficina.
— ¿Que cosas?
— Llegaron los recibos de pagos, los que nos indicaron y que tenemos que cambiar
— Ya llegaron ¿Dónde están? —me pregunta mientras bebe de su café.
— Lo dejé en una de las mesas, además de algunas revistas
— Los revisaré —me asegura
Los tres empezamos a hablar de diferentes cosas, mi abuela no para de hacerle un cuestionario a Emma más que nada le está preguntando que es lo que le gusta y que no, sé que mi abuela por más que le diga que no se moleste en hacer las cosas, no me hará caso y las hará.
Quince minutos después
Estoy de camino a la oficina en mi camioneta, me retrase un poco, pero no importa, soy el jefe y puedo llegar tarde —sonrió—. Aunque sé que Carl me tratara de regañar por mi atraso, pero no me importa, pronto me cobraré todas las humillaciones que me está haciendo. Tal vez cuando menos se lo espere apareceré con un automóvil último modelo y dejaré atrás mi camioneta. Por más que tenga ahora nuevos autos jamás dejaré de decir que el mejor auto que tuve fue y es esta camioneta... Mi teléfono suena y me saca de mis pensamientos, como estoy manejando, lo conecto a manos libres y me pongo uno de los audífonos
📞Llamada telefónica 📞
— Hola
— Honey
— Mi amor —es Emma—. ¿Qué paso?
— Necesito que le pidas al abogado que me pase esos documentos, te mande la lista con los documentos.
— Está bien, cuando llegue a la oficina le diré que te los mande
— Sí, porque son importantes para cambiar esos datos en los recibos.
— Si necesitas algo más avísame
— Está bien mi amor, Te amo
— Igual, adiós
📞Fin de la llamada telefónica 📞
Hoy espero tener un día tranquilo y hacer las cosas sin que me molesten, tengo un posible proyecto en mano y si todo va como lo tengo planeado, será la construcción más grande de Nueva York —sonrió.
Mientras tanto en el Pent House
Veo a Emma sentada en el sofá de la sala, revisando algunas cartas que al parecer son los recibos del que hablo mi nieto.
— Emma, cariño, quieres que te ayude en algo —me siento a su lado
— No, tranquila, solo estoy revisando los recibos mientras espero que Izan me llame y me mande los documentos que le pedí —me sonríe
— Al menos levantaré las revistas para que no te molesten —digo y levanto las revisas para dejarlos en la mesa
Miro una de ellos y le doy una leída rápida a los pequeños títulos, pero uno en especial me llama la atención, mejor dicho el nombre que está escrito es el que me llama la atención, dejo las demás revistas en la mesa y veo la revista que me ha llamado la atención.
Leo detalladamente la revista y confirmo que leí bien, si leí bien el nombre.
— Tabatha Lougthy —susurro asombrada
— Zoe dijiste algo —me dice Emma mirándome dulcemente
— Solo estaba leyendo en voz alta, una costumbre que a veces lo tengo. Justo estaba leyendo estos nombres, tienen unos apellidos muy curiosos
— ¿Quiénes?
— Estos —le indico los nombres
— Ahh... están hablando de Edmond Williams y Tabatha Lougthy
— ¿Quiénes son? —pregunto
— Deja que vea un momento —me dice y le doy la revista
Emma mira bien la portada para luego buscar donde está el artículo, veo como empieza a leerlo y se sorprende por algo que ha leído.
— Ella tiene un apellido algo curioso
— Sí, De hecho, escucharás hablar mucho de ellos, son una de las parejas más queridas del medio.
— ¿Pareja? —pregunto curiosa
— Sí, supongo que habrán puesto una foto de ellos —toma la revista y la revisa—. Mira, son ellos —me muestra—. Él es Edmond Williams y ella es su esposa Tabatha Lougthy
— ¿Su esposa? —pregunto sorprendida
— Sí, están casados hace no mucho, creo. Son una hermosa pareja —me dice y suspira—. Los llaman "La Pareja Perfecta"
— ¿Los conoces en persona?
— Conocerlos... conocerlos así en persona no, pero Edmond Williams es un gran hombre de negocios y ha tenido muchos aciertos en diferentes inversiones y ella —me señala a Tabi—. Tiene una empresa de publicidad que poco a poco está creciendo, es un amor de persona
— Está muy diferente —susurro y veo de más cerca la foto
— Sabes, un día me encontré con ella en una tienda y fue un amor conmigo, hablamos muy poco, pero el poco tiempo que hablamos me pareció una persona muy amable y considerada.
— Me dijiste que los llaman "Pareja Perfecta" ¿Por qué?
— Sí, así los han denominado muchos de la prensa, mayormente la prensa romántica y no lo negaré que yo también caí en llamarlos así —se ríe sutilmente—. Por las fotos y publicaciones que ponen, se notan que están muy enamorados. Toda su historia de amor, de como se conocieron y se enamoraron, es de ensueños —suspira.
— ¿Es un buen muchacho? ¿Un buen hombre? —pregunto
— Sí, es un hombre hecho y derecho.
Sigo sorprendida y aún no puedo creer lo que he leído, me siento tan desubicada que quiero que me expliquen qué está pasando. Jamás creí que esto iba a pasar —respiro profundamente—. Tengo que calmarme y descubrir poco a poco quien es el hombre que se casó con Tabi. Todos mis sueños y pensamientos que tenía antes de venir han cambado y muchos para mal, incluso diría que estoy algo decepcionada.
— ¿Cómo es él? Se ve que es un empresario
— Sí, es hijo del arquitecto Edward Williams, antes de casarse con Tabi era uno de los solteros codiciados —se ríe—. Sabes cuando anunciaron su matrimonio pensaron que lo hicieron por conveniencia, incluso se llegó a decir que en menos de seis meses se iban a divorciar, pero no paso, ellos de verdad se enamoraron.
— Entonces es un empresario... —susurro—. Y ¿Ellos tienen hijos?
— No, aún no tienen hijos y eso que los han presionado mucho.
— ¿Cómo? No entiendo
— La prensa, siempre les preguntan sobre los hijos y ellos han respondido que aún no es tiempo y la verdad es que les entiendo —se ríe sutilmente.
Escuchamos el sonido de un teléfono y por la expresión de Emma es de ella, lo contesta y se va dejándome sola. Yo aprovecho y empiezo a leer la revista —sonrió.
Minutos después
Estoy leyendo el artículo y cada vez estoy más sorprendida con lo que estoy leyendo, Tabi se ve tan feliz y contenta en las fotografías que me llena de alegría, pero también siento un poco de tristeza. ¿Quiero saber qué paso? Necesito que me expliquen.
Emma regresa con unos documentos en la mano y yo le presto atención dejando de lado la revista. Se acerca donde estoy y levanta su cartera que lo había dejado antes.
— Zoe —se acerca—. Izan ya me mando los documentos que necesito, nos vemos en unas horas —me dice y se acerca para despedirse
— Está bien, Emma. Que te vaya bien —le acompaño a la puerta y antes que se vaya le doy acaricio sutilmente la mejilla.
— Adiós
— Adiós —la despido
Cierro la puerta y regreso al sofá, levanto la revista y termino de leer el artículo que le han hecho. Por lo poco que pude leer de ellos puedo notar y ver que ambos son felices ¿Pero dónde quedo la historia de Izan y Tabi? Ahora entiendo por qué Izan no me ha querido decir nada sobre Tabi y que eso un tema complicado de entender y explicar —suspiro tristemente—. Ahora, entiendo la tristeza que notaba cada vez que le hablaba, debió ser un duro para ambos... pero sigo sin entender qué paso —dejo la revista en el sofá—. Necesito saber qué paso, así que saco mi teléfono que Izan me dio, realmente no entiendo este teléfono —lo prendo y trato de desbloquearlo, pero no puedo—. Por más que quise que no me lo dé me lo diera, me lo dio.
— Esme —la llamo
— Sí, señora Zoe —aparece
— Hazme un favor, puedes buscar en esa cosa que dicen Internet un nombre —le doy mi teléfono
— ¿Qué quiere que busque? —saca su teléfono—. Dígame y se lo busco
— Gracias —dejo mi teléfono encima de la revista—. Busca por favor Tabatha Lougthy
— ¿Tabatha Lougthy? ¿Cómo se escribe Lougthy?
— Mira, aquí está el nombre y el apellido —levanto la revista y le muestro el nombre que hay en la portada de la revista.
— Okey, creo que ya lo tengo... Hay muchos resultados —me indica y me muestra—. ¿Qué quiere en específico?
— Busca si tiene algún número de contacto o algo así
— Deje que revise
Veo que Esme está concentrada en su teléfono, espero que encuentre algún número o algo donde comunicarme, yo tengo un número de teléfono, pero es un número muy antiguo y la última vez que la llame sonó ocupado.
— No encuentro un número de teléfono como tal, pero encontré la página de su empresa que es de publicidad
— Pero es de ella —la miro susceptible.
— Supongo que si, ¿Es ella? —me da su teléfono y me muestra unas fotografías
— Sí, es ella —me alegro y sonrió al ver
Las fotografías que me muestra puedo ver a una Tabi muy seria, muy empoderada, segura, muy profesional, pero sin perder su belleza, de hecho ahora está más hermosa.
Flashback
Subo con cuidado las escaleras de la casa donde está Tabi, una de las empleadas de la casa me está acompañando a su habitación. Según ella, Tabi está muy deprimida y por eso no ha ido a la escuela casi una semana. Toco la puerta de su habitación y no escucho nada.
— Si quiere puede entrar, no tiene seguro su habitación
— Gracias —sonrió.
Vuelvo a tocar la puerta de la habitación, pero no me responde Tabi, así que abro la puerta muy lentamente. Lo que veo me alarma mucho, veo todo desordenado, comida sin ser tocada y en la cama esta Tabi echa un ovillo.
— Tabi, mi niña —me acerco
— Luz —se da la vuelta y la veo
Tabi tiene los ojos rojos, unas ojeras muy visibles, pero sobre todo veo que perdió esa luz de alegría en los ojos.
— Mi niña que paso —me acerco a la cama y la abrazo
Tabi no dice nada y empieza a llorar desconsoladamente, que escucharla me rompe el corazón. ¿Qué le paso a mi niña?
— Tabi, cariño... ¿Qué paso? —no la dejo de abrazar—. Cuéntame, estoy aquí para ti
— No sirvo para nada... solo decepciono a las personas
— Mi amor —le levanto la cara—. No digas eso
— Es la verdad —se levanta de golpe y se aleja
— Todo en mí está mal... —me mira y trata de controlar su llanto
— Tabi, ven —tomo su mano y hago que nos volvamos a sentar en la cama—. Paso algo cuando viajaste a Nueva York, ¿Cuéntame? Tenme confianza —le animo a que me cuente qué le paso.
— Mi familia y yo fuimos a un evento de beneficencia, ese tipo de eventos donde todo es aburrido
— Lo sé, entiendo a qué clase de fiestas te refieres.
— En un momento de la fiesta, el maestro de ceremonia detuvo a la orquesta y pidió a todos se entren a la pista del baile, mi madre me obligo a ir, yo hubiera preferido quedarme en la mesa.
— ¿No estabas con tus amigos?
— Dirás mis enemigos, dejaron de ser mis amigos porque corrió un estúpido rumor que es mejor no recordarlo. En fin, el maestro de ceremonia anuncio una dinámica muy estúpida en la cual me incluyeron sin saberlo —baja la mirada y se seca las lágrimas.
— ¿Qué dinámica era? —pregunto sutilmente
— La dinámica era una subasta, en el cual llamaban a la chica y los jóvenes podían decir un precio por ellas para poder bailar —me mira con tristeza—. Cuando me llamaron y subí todos se callaron, la verdad eso a mí no me importo porque ya me lo esperaba, pero lo que no me esperaba era lo que mi madre me dijo.
— Tabi...
— Baje del escenario rápidamente y mi madre me sujeto del brazo fuertemente, llevándome a un lugar donde nadie nos podía ver ni escuchar —me mira y derrama unas lágrimas
— No llores Tabi —le seco unas lágrimas
— Yo estoy acostumbrada a las palabras de mi madre —se levanta de la cama y se para frente al espejo—. Pero lo que me dijo... —se mira al espejo—. Yo soy un desastre, no sirvo para nada —cierra los ojos y sin que me lo esperara tira todos los maquillajes, perfumes que tiene—. Para qué me sirve esto, si no sé utilizarlo, si no me sirve para nada, yo no tengo la belleza de mi madre... soy un desastre
— Tabi, mi niña ven —la sujeto del brazo para alejarla de los pedazos de cristal
— Auch!! —me dice y le miro sorprendida
— Tabi, ¿Qué te duele?
— No es nada, mi madre me sujeto muy fuerte del brazo —se sube la chompa y veo que tiene un moretón en el brazo
— Tabi, mi hermosa Tabi —le sujeto y le abrazo
No necesito que me diga nada más, con lo poco que me dijo entiendo la depresión de Tabi, será mejor que me quede con ella.
Fin del flashback
Pase días en la casa de Tabi al pendiente de ella, fueron días complicados donde Tabi voto todo y rompió muchas cosas. Pero poco a poco y con tiempo, Tabi recupero su fortaleza y su autoestima, ya no es la misma niña que siempre trataba de complacer a su madre e insegura.
Le devuelvo el teléfono y ella vuelve a concentrarse en su teléfono
— En la página solo veo el número empresaria, correos y la dirección de la empresa de publicidad
— Puedes dictarme el número de teléfono que encontraste para que pueda llamar
— Claro, se lo anoto en su teléfono —me pide mi teléfono
— Por favor —le doy mi teléfono
Esme sujeta los dos teléfonos y hace algo que no entiendo, no tarda mucho y me da mi teléfono con el número en la pantalla.
— Ya está anotado, puede llamar
— Gracias —digo
Miro el teléfono y no sé cómo llamar en este teléfono, Izan me ha enseñado, pero yo sigo sin entender este teléfono moderno —me enojo.
— ¿Quiere que le ayude?
— Por favor, llámalos tú que no entiendo este teléfono
Esme toma mi teléfono y llama, pone el teléfono en su oreja y esperamos unos minutos a que alguien conteste.
— Me suena como ocupado —me mira
— ¿Ocupado?
— Nadie contesta —me dice y mira su teléfono
— Vuelve a intentar por favor —le pido
— Ya lo hice dos veces más y no, sigue sonando ocupado
— Qué pena —digo triste—. Espe mañana puedes volver a ayudarme por favor.
— Claro señora Zoe, mañana cuando me diga lo volvemos a intentar
— Muchas gracias —sonrió.
Espero que mañana podamos comunicarnos y espero de verdad que pueda contactarme con Tabi, quiero volver a ver a mi tierna Tabi.
❀~✿ ❀~✿ ❀~✿ ❀~✿
Horas después
He salido de la oficina sin decir a nadie, hoy me he concentrado revisando detalladamente un proyecto que tengo en manos, todo tiene que estar perfecto tanto en el diseño como en lo económico, por suerte Emma se ocupara de eso.
Miro mi teléfono y veo que he llegado al lugar donde me ha dicho Liam que nos veamos, el lugar es una simple cafetería —ruedo los ojos—. Abro la puerta de la cafetería y veo a Liam concentrado en su teléfono
— Liam —golpeo la mesa asustándolo—. Llegue, no me hagas perder el tiempo y dime que es eso importante, que tenías que hablar conmigo.
— Izan, que gusto volver a verte —deja el teléfono a un lado—. Toma un café conmigo
— Uno que no sea cargado —digo serio
— Está bien
Liam hace una señal y en cuestión de segundos aparece una chica y me sirve una taza de café no tan cargado.
— Izan, como te he dicho, se me hará más difícil, al menos por unas semanas pasarme información como antes, te mandaré mensajes por esta cuenta —me da un papelito con un nuevo correo
— Okey, pero solo me llamaste para eso
— No —sonríe de lado—. Ya te habrás enterado de que Edmond ahora es el gerente general de la constructora
— Si —respiro profundamente aguantando mi enojo—. Todo el mundo está hablando de eso, yo solo diré que el cargo le quedara muy grande
— ¿Por qué lo dices?
— Porque será así, Edmond no tiene la suficiente capacidad para ser gerente general de una empresa como la constructora, solo es un niño mimado que jugara a ser jefe.
— En fin, hoy Matteo mando el nuevo contrato a la constructora y en cuestión de horas Edmond lo firmo
— Tienes alguna idea de lo que podría poner —pregunto
— No, pero trataré de ver si puedo conseguírtela. Es difícil pero no imposible
— Una rata como lograra tenerlo en sus manos —susurro
— ¿Qué dijiste? —me mira feo
— No me hagas caso —le quito importancia y bebo el horroroso café
— Por otro lado, dos cosas muy importantes, la primera, el señor Lougthy y su consuegro, están por comprar un jet privado
— ¿Cómo? —pregunto sorprendido
— Sí, un compañero mío, está haciendo las gestiones y los papeleos. Sé que el jet que están queriendo comprar es muy caro y por eso decidieron comprar entre los dos
— Mmm, interesante... una duda, eso estará incluido como activo en qué empresa
— No lo sé, supongo en las dos
— No supongas, porque conociendo a George Lougthy alguna jugada hará
— Piensas que querrá invadir impuestos —me dice algo sorprendido
— Estoy seguro y te recomiendo que sigas al pendiente con ese tema
— Lo haré —sonríe—. Por otro lado, mientras estaba revisando unos papeles con una compañera, Matteo entro a nuestra oficina y le dio un documento para archivar
— ¿Sabes qué decir ese documento?
— Por supuesto que si, le di una leída
— Y ¿Qué decía? —pregunto curioso
— En estas semanas Edmond mandará hacer una auditoria interna y según vi será por unas dos semanas más o menos.
— Una auditoria interna —sonrió—. Sabes que siempre se cometen errores
— Lo sé y estaré más al pendiente de esos documentos porque mi compañera es la que se encargara de estar pendiente del auditor y los documentos que envié.
— Tenías razón, alegraste mi día —lo acepto
— Soy tu mejor informante
— Ahora explícame que estupideces hiciste para que te tengan en la mira
— Yo no fui, fue otro...
Liam empieza a explicarme lo ocurrido con su compañero y la verdad es que yo no le estoy prestando atención, ahora estoy pensando en mis siguientes movimientos. El nombramiento de Edmond como gerente general hace que mis siguientes movimientos sean más pronto de lo que quería. Tengo que moverme bien porque un paso en falso el que saldría perjudicado soy yo y eso no puede pasar. El único que tiene que salir ganador en este juego soy yo y nadie más que YO.
Reviso algunos datos en la computadora, necesito comparar algunos datos sobre un proyecto. A primera vista pensé que los datos estaban incorrectos, pero no, mañana volveré a llamar a la empresa para que me corroboren los datos.
— Tabi —abren la puerta con cuidado Ainara—. ¿Estás ocupada?
— Ocupada, ocupada, no, solo estoy revisando unos datos, pero puedo atender las dos cosas. Dime que paso
— Los técnicos están terminando de cambiar los cables arruinados y revisar las conexiones de todas las oficinas —me indica
— Espero que para mañana estén reinstaladas las líneas
— Yo también, si no mañana llamo a la empresa y presiono para que arreglen las líneas. —me dice sería
Alguien llama a la puerta y le hace una señal a Ainara, ella me mira y se levanta para ir a hablar con esa persona. Mi teléfono empieza a sonar, levanto el teléfono y veo el nombre de Edmond —sonrió
📞Llamada telefónica 📞
— Hola
— Mi amor
— Edmond —sonrió
— Llame varias veces a tu oficina y no contestaste
— Sí, tenemos un problema con las líneas, pero ya lo están solucionando
— Espero lo solucionen pronto
— Yo también —respiro profundamente
— Mi amor, te llamaba para invitarte a cenar
— ¿A cenar? —doy media vuelta en la silla mirando hacia la ventana.
— Sí, quiero festejar este primer día junto a ti —escucho que ríe sutilmente
— Pues será un honor cenar con el Gerente General de la constructora Williams
— Paso por ti en media hora, la reserva es a las siete
— Perfecto, estaré lista en media hora
— Te amo
— Te amo
📞Fin de la llamada telefónica 📞
Vuelvo a girar la silla y me llevo un susto al ver a Ainara frente a mí con una sonrisa, ¿En qué momento entro de vuelta a mi oficina?
— Ainara, me asustaste
— Lo siento —me mira sonriendo—. Por tu cara, además que escuche un poco de tu llamada, sé que estabas hablando con Edmond
— Sí, me invito a cenar para festejar su nuevo acenso
— Estoy tan feliz por ustedes, por cierto —me mira y sonríe—. Volviste a salir en una revista —me muestra la revista
— Lo sé, esa revista fue la que más me gusto porque sacaron un hermoso artículo y lo resumieron bien la fiesta —dejo de ver a Ainara y empiezo a cerrar los programas que tengo abiertos en la laptop para después pagarlo.
— ¿A qué hora se verán con Edmond?
— De hecho, en unos minutos —me levanto de la silla—. Edmond me vendrá a buscar y tengo que retocarme un poco —guardo unas carpetas
— Deja que te ayude —se levanta Ainara
Mi outfit de hoy solo es un vestido de crepe liso con mangas 3/4 rematada por volantes color azul marino, combinado con un collar y unos tacones del mismo color.
— ¿Acaso no estoy bien? —pregunto
— Estás hermosa, solo arréglate el maquillaje
— Si —abro mi cartera y saco mi kit rápido de maquillaje
— Te dejo Tabi, iré a ver como lo de las líneas
— Cualquier cosa me avisas
Veo a Ainara salir de mi oficina, con mucho cuidado me miro en mi pequeño espejo y me empiezo a retocar mi maquillaje, no quiero tardarme mucho.
❀~✿ ❀~✿ ❀~✿ ❀~✿
Bajo de la camioneta con ayuda de Roy y veo a mi hermoso esposo esperándome mirando su teléfono —me rió—. Me acerco y se da cuenta sonriendo al verme.
— Mi amor, llegaste —se acerca y me da un sutil beso
— Lo siento había tráfico
— Yo lo siento por no haber ido a recogerte —me toma de las manos—. Pero se me presento algo en la oficina
— No hay problema —sonrió
— Mejor entremos, o nos cancelarán la reserva —me guiña el ojo
— Vamos —tomo la mano de Edmond
Entramos al restaurante y rápidamente nos acercamos al Hostess, Edmond le da el nombre de la reserva y rápidamente nos lleva a nuestra mesa y una vez ahí nos sentamos dejando nuestros abrigos detrás de la silla.
El restaurante que escogió Edmond es uno de sus preferidos, además es uno de los restaurantes más exclusivos de Nueva York.
— Aquí tienen la carta —nos los entrega
— Gracias
— ¿Qué deseas pedir? —me pregunta Edmond
— Voy a pedir el Crumble de Salmón —cierro la carta y le entrego
— Para mí el Roulades de pollo —cierra la carta y se lo entrega—. Y una botella de vino blanco
— Enseguida —sonríe sutilmente y se va
Tomo la mano de Edmond por encima de la mesa y sonrió, Edmond también me mira y sonríe.
— ¿Qué tal tu primer día como el nuevo gerente General de la constructora?
— Fue impensable —sonríe—. Ni bien llegue todos me empezaron a felicitar y en el transcurso del día algunas personas me llamaron también para felicitarme
— Estoy tan feliz por ti —sonrió
— Estoy cumpliendo una de mis metas. Sabes al llegar a la oficina lo primero que me sorprendió fue ver en la puerta de mi oficina el cartel que decía: "GERENTE GENERAL"
Aparece un camarero con la botella de vino, con mucha delicadeza lo abre y nos sirve.
— Gracias —decimos al unísono
— Mi amor, sígueme contando como estuvo tu día —digo dejando la copa de vino a un costado
— Pase casi todo el día firmando diferentes documentos relacionados con este cambio, pero lo que más me llamo la atención fue que mi Padre hizo algunos cambios sin que me diera cuenta.
— Tu Padre lo tenía todo fríamente calculado
— Sí, lo tenía todo calculado porque sin que me dé cuenta me preparo y me dio muchas de sus funciones, para que él pueda irse sin ninguna preocupación y enfocarse en la presidencia de la cámara de Construcción.
— Es verdad, tu Padre sigue con esos planes
— Sí, ahora más que nunca quiere enfocarse en ganar la presidente y ahora que me dejo el cargo de Gerente General tendrá más tiempo para enfocarse en ello.
— Dejo el cargo a la persona correcta
— Tabi mi amor —me vuelve a tomar la mano—. Lo más seguro es que algunas cosas cambien, ahora que tengo todas las responsabilidades de mi Padre me faltara tiempo —respira profundamente—. Muy probable tengamos que cambiar la fecha de algunos viajes que teníamos planeado, sobre todo lo de nuestras vacaciones —me dice muy apenado
Desde que escuche a mi suegro darle la gerencia a Edmond sabía que las cosas iban a cambiar y algunos de nuestros planes iban a ser cancelados, no es que esté muy feliz de ellos, pero era algo que lo sabía y lo comprendo.
— Mi amor, sé que las cosas van a cambiar y sobre todo las cosas que teníamos planeadas, pero si las hablamos y llegamos a un acuerdo podemos cambiar las cosas y no cancelarlos todos.
— Y lo haremos —sonríe—. En estas semanas revisaré y concordaré fechas con muchas personas. Lo que si me recomendaron es hacer una auditoria a la empresa
— ¿Y lo harás?
— Sí, lo haré además de una reorganización de puestos. Tengo semanas complicadas
El mesero nos interrumpe porque nuestra comida acaba de llegar. Con mucho cuidado dejan la comida frente a nosotros, tengo que admitir que se ve muy bien la comida, esperemos que esté muy bueno.
Media hora después
Estamos esperando el postre, la comida estaba deliciosa, aunque no me gusto mucho la salsa, estaba un poco ácida, en fin. Ahora que estamos tranquilos
— Edmond, mi amor —tomo sus manos por encima las manos—. Estás cumpliendo una de tus metas y estoy más que segura que lo lograras, tú serás el mejor Gerente General de la Constructora, tu inteligencia y tu perseverancia harán que llegues muy alto.
— Mi amor... —lo interrumpo
— Quiero darte este presente —saco una caja de color negro y se lo doy
— Tabi, esto no es necesario —lo recibe extrañado—. No debiste darme nada —lo abre y se sorprende
El regalo que le di a Edmond es un bolígrafo Scriveiner Deep Crimson Red Rollerball, lacado rojo con acabado chapado en cromo con recambios de tinta Schmidt además de que hice grabar el nombre de Edmond, no es un regalo muy pomposo, pero al menos para mí es uno muy significativo.
— Tabi, mi amor esto... —me dice abriéndolo y sacándolo
— Edmond, como te dije antes, tú eres la persona idónea para ocupar ese cargo, tú harás que la constructora esté en otro nivel —sonrió—. Quiero que cada proyecto o contratos sea grande o pequeño, lo firmes con ese bolígrafo y estoy segura de que esos proyectos y contratos serán los más grandes y tu mejor legado que dejaras en la constructora.
— Mi amor, esto... es lo mejor que me podían haber regalado, este será mi amuleto de la buena suerte —sonríe.
— Te amo
— Te amo
Somos interrumpidos una vez más porque esta vez nos traen nuestros postres —soltamos nuestras manos y yo sonrió mirando a Edmond—. Estoy tan feliz de ver a Edmond tan ilusionado y sonriente, se que el tiene la capacidad y profesionalismo para asumir ese cargo y los retos que van con ello y yo estaré a su lado apoyándole.
🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆
Holis volví con un nuevo capitulo de Infieles. Espero que les haya gustado y hayan disfrutado del capitulo
Les tengo una sorpresa , en el Instagram podrán ver el reportaje completo que leyó la abuela de Izan Zoe. Espero les guste...
Mi Instagram: Lovebooks_wattpad
Muchas gracias por leer, comentar y votar. Su apoyo hace que siga con mis locas ideas... TKM
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top