◌ ◌ ◌╰── - ̗̀ Capitulo 31 ̖́- ──╯◌ ◌ ◌

Abro la puerta de mi oficina, dejo mis cosas en mi escritorio, abro y prendo mi laptop, lista para empezar un día de trabajo productivo —sonrió—. Escucho como la puerta de mi oficina es abierta y Ainara sin decir nada entra con una sonrisa en la cara.

— ¿En qué puedo ayudarte Ainara? —la miro sonriente

— Veo que hoy estas de muy buen animo

— No te lo negare, hoy estoy muy feliz

— No me digas.... Si —se sienta frente a mí y sonríe más—. Te reconciliaste con Edmond —me dice alegremente y da pequeños aplausos

No puedo negarlo, en estos momentos soy tan obvia que todos se debieron dar cuenta que mi felicidad es por mi reconciliación con mi amado esposo.

— Si, Edmond y yo nos reconciliamos —afirmo

— Al fin —levanta sus manos y mira al techo

— Ainara —la regaño

— ¿Qué? —me mira—. Tengo que agradecer a los santos porque al fin vuelvo a tener a mi amiga, feliz y radiante.

— No exageres —ruedo los ojos

— Tabi, esta semana estabas insoportable —me recuerda—. Tu humor era el peor e incomodaste a muchos de nuestro personal.

— Ya, ya —le interrumpo—. Está bien, entendí lo que me quieres decir —suspiro—. Tu sabes que tuve una semana horrenda y traté de que no afectara, pero se me hizo imposible

— Lo sé por eso te soporte —me dice riéndose—. Pero esa sonrisa tuya tiene algo más que no me quieres decir

Aprieto los labios al escuchar eso, trato de hacerme a las locas, pero sé que no funcionara, m empiezo a sonrojar y termino de reírme. Ainara se sorprende y se tapa la boca, se acaba de dar cuenta

— Noooo.... dime que no tuvieron sexo de reconciliación —me dice aún más sorprendida

— Soy una tumba, no diré nada

— Si, eso paso —me dice sonriente—. Usaron la treta más común por las parejas

— Y tu bien que sabes eso —le recuerdo

— No lo negare, siempre funciona —me dice sonriente

Cuando Edmond llego al flat, cenamos juntos y pasamos toda la noche entre gemidos, orgasmos y placer puro. No sé cómo pudimos salir de las sabanas el día de hoy.

— Tabi hermosa —se levanta Ainara—. Te dejo, tengo que ir a hacer algunas cosas, por cierto, te deje la lista de las posibles contrataciones.

— Las revisare y te daré mi opinión, nos urge contratar al menos cuatro personas más, estamos muy saturados de trabajo y necesitamos nuevo personal.

Este último mes nuestra empresa ha crecido y más clientes nos han contratado para hacer diferentes publicidades. Por ese motivo Ainara termino haciendo diferentes cosas en los diferentes departamentos, cosa que tiene que cambiar, en una semana nos reuniremos con un experto y nos ayudara a reorganizar muchas cosas en la empresa.

— Lo sé —suspira cansada—. Espero que contratemos a los mejores

— Lo haremos

Ainara deja otras carpetas frente a mí, me sonríe y se va de mi oficina. Yo las tomo y empiezo a revisar primero las ultimas que me dejo, la mayoría son revisión de guiones para publicidad y los modelos seleccionados, al mirar las fotos veo a una modelo rubia muy parecida a Samantha —me pongo seria—. Tan solo en ver esta foto mi mente empieza a recordar la última platica "amistosa" que tuve con ella

Flashback

Salgo de la oficina de Edmond con mucho cuidado, tengo que caminar lento y cuidar de que mi falda no se suba a causa de alguna ráfaga de viento —me sonrojo—. La secretaria de Edmond me mira y se sonroja, por su mirada sé que ella se dio cuenta que es lo que paso en la oficina de Edmond, espero que solo ella se haya dado cuenta.

Cerca de donde estoy escucho la voz irritante de Samantha —me detengo y la busco con la mirada—. La veo, ella está caminando hacia mí con una chica, que al parecer es la secretaria de ella —la compadezco.

Me paro frente a ella y hago que se detenga, ella me mira y se sorprende, sin darle tiempo a que reaccione la tomo del brazo, abro la puerta de una oficina y la empujo para que entre.

— ¡¿Qué te pasa?! Tabi —me dice frotándose el brazo

— Samantha no exageres —digo y cierro la puerta

— Yo exagerando —me grita enojada—. Me lastimaste el brazo, mira —me muestra su brazo que no tiene nada

— No me importa —ruedo los ojos y me pongo seria.

— Para que me trajiste aquí, tu y yo no tenemos nada de qué hablar —trata de irse, pero no se lo permito, me interpongo

— Claro que, si tenemos que hablar, en especial de algo muy importante —camino hacia adelante y Samantha retrocede unos pasos sin dejar de mirarme—. QUIERO QUE TE ALEJES DE MI ESPOSO —digo de manera amenazante y seria.

— Disculpa —me dice haciéndose la sorprendida y llevándose una mano al pecho—. Ya te volviste loca —me dice riéndose y no me toma enserio.

— Se muy bien lo que trataste de hacer unos minutos atrás, no creas que no me di cuenta de tus horrorosas intenciones hacia mi ESPOSO

— No sé de qué me hablas —se hace a las locas e indignada

— Claro que lo sabes, no te hagas a las tontas que no te queda —trato de no gritarle

Samantha no me dice nada solo me mira de una forma amenazante, pero a la vez con un gran odio.

— Samantha —llamo su atención—. Te conozco muy bien y se las artimañas que usas —camino y la vuelvo a ver—. Entraste a la oficina de MI ESPOSO con alguna tonta escusa —rio bajito—. Al entrar a su oficina empezaste con tu actuación de "no sé cómo solucionarlo" —hago comillas con los dedos—. Mientras él estaba distraído arreglando lo que supuestamente arruinaste, tú bajaste el escote de tu vestido —la veo aguantándose su enojo—. Te soltaste el cabello o lo arreglaste y cuando creíste verte provocadora te acercaste muy lentamente, esperando que Edmond te haga caso —digo más seria.

Por la cara de Samantha veo que acerté, yo vi muchas veces como ella se acercaba a los chicos y cuando pasaba eso, ella siempre utilizaba esa técnica para poder conseguir que el chico le haga caso. Incluso vi que trato de hacer lo mismo con Mattteo, pero no pudo.

— Lo que dices son calumnias, yo jamás hice eso en la universidad, mucho menos ahora —me dice seria

— Samantha no lo niegues, tu sabes que es así

— Yo soy una persona con dignidad y jamás me rebajaría a hacer esas cosas —me dice enojada—. Yo respeto a mi esposo —me mira—. No como otras —m mira de pies a cabeza—. Que ni respetan, ni aman a sus esposos

Esperen, esperen escuche bien lo que acaba de decir Samantha —aguanto mi enojo—. Ella está dándome a entender que yo no amo a mi esposo....

— Pero si me molestan yo también les molesto y en tu caso puedo decir algunas cosas interesantes sobre ti —me mira seria—. No se.... como por ejemplo que a tu flat entraban personas extrañas en especial un chico....

¡Mierda! Sé a qué chico se está refiriendo, Samantha acaba de recordarme que vio muchas veces y conoce a Izan. Si alguna vez usa esa información puedo mentir y decir que es Matteo.... si, si habla diré eso, Matteo será mi perfecta escusa —no me agrada la idea, pero es lo que hay.

— ¿Y crees que te creerán? —la interrumpo riéndome—. El chico del que hablas era Matteo y él puede corroborarlo sin ninguna pena.

— Como siempre, tu hermanito adorado es tu tapadera, pero también es tu verdugo

— Mis problemas familias no están en este momento en discusión así que no te responderé —la miro seria—. Solo quiero que te alejes de MI ESPOSO —vuelvo a repetirlo.

Samantha me mira y empieza a reírse muy bajito, ella piensa que con sus tonterías me está intimidando, pero no es así. Ella es de cuidado, pero yo soy mas

— ¿Sabes? —me dice irónicamente—. No sé porque estas tan segura que Edmond jamás te engañaría, él es hombre y la carne es débil

— Samantha no eras la primera, ni la última en querer seducir a Edmond, pero por más que trates no podrás

Y es verdad, muchas mujeres se han acercado y se acercan a Edmond para tratar de seducirlo, pero él no les hace caso, se pone muy incómodo cuando sucede estas cosas.

— Las cosas pueden cambiar y lo que crees que es tuyo puede desaparecer de la noche a la mañana—me dice de forma amenazante

— La que debería temer eres tú —me acerca a ella y la señalo tocándole un poco el hombro con el dedo—. Imagínate si este altercado llega a los oídos de tu esposo o peor aún al abogado de la ex esposa de Albert —la miro sonriente

Al decir esas palabras abre los ojos de par en par y hace puños sus manos, creo que acabo de darle donde más duele. Si es verdad lo que escuche de la ex esposa de Albert, Samantha estaría en un grave problema y seria el fin de su matrimonio.

— No serias capaz.... —me dice preocupada pero aun enojada.

— Claro que sí, si sigues acercándote a MI ESPOSO Y TRATAS DE SEDUCIRLO, lo hare —digo firme

— Me confirmas cada vez que tú eres igual que yo —me dice enojadísima—. Solo te casaste por el dinero y el prestigio, pero tienes algo que yo no....

— ¡¡Cállate!! —grito—. Tú y yo no somos iguales, yo si amo a mi esposo y soy feliz en mi matrimonio, en cambio tu solo aparentas felicidad, pero por dentro eres una persona muy infeliz que terminara amargada

Samantha trata de hablar, pero se abstienen, solo me mira con cara de odio y aguanta su enojo. Yo ya no puedo con ella, mejor término de una buena vez esta estúpida conversación.

— Samantha te diré una vez más, ALEJATE DE MI ESPOSO y si no lo haces tente a las consecuencias —la miro fijamente por unos segundos para luego darme la vuelta y salir de la oficina.

Al abrir la puerta muchos de los empleados en especial las secretarias se hacen a los desentendidos, sé muy bien que todos estaban en la puerta tratando de escuchar m pelea con Samantha —ruedo los ojos—. Espero que Samantha haya entendido porque si no es así cumpliré con mi amenaza.

Fin del Flashback

Cambio de foto y sigo viendo los modelos seleccionados para las próximas campañas publicitarias y por los guiones que he leído, los elegidos son los correctos. Mi teléfono vibra y veo que es un mensaje de Instagram
—me sorprendo—. Abro la aplicación y veo que es un mensaje privado de Edmond —sonrió.

Mensaje

➡️ ¡Buenos días, amor!

➡️ El día de hoy es imposible dejar de pensar en ti

➡️ Traté de concentrarme, pero no pude

Termino de leer eso y me quedo sorprendida, Edmond volvió al gimnasio —sigo sin creerlo—. Hace semanas que no iba al gimnasio por cuestiones del trabajo, pero hoy al tener el día libre aprovecho a ir al gimnasio. Amplio la foto y me deleito con la hermosa figura de Edmond —me muerdo labio—. Toda la noche pude deleitarme de ese hermoso cuerpo, él es mío solo mío.... abro la bandeja de mensaje y le envió un mensaje respondiéndole

Mensaje

⬅️ Yo también no dejo de pensar en ti

⬅️ Y más con ese incentivo 🔥🔥

No pasa ni dos minutos y tengo la respuesta de Edmond —sonrió—. Al parecer está tomando un descanso.

➡️ Sabes que soy todo tuyo 😈🤓

➡️ Tabi, mi amor te invito a almorzar

➡️ ¿Qué opinas?

⬅️ Me encanta la idea 😁😁

⬅️ Hace tiempo que no salimos a almorzar juntos

➡️ Te recojo a las 12:00

⬅️ Necesitas que llame para hacer la reserva

➡️ No, yo llamare para hacer la reserva

⬅️ Perfecto

Termino de mandar el mensaje y salgo de la aplicación, si quiero salir a las 12:00 tengo que terminar de revisar estas carpetas. Quiero tener un almuerzo ameno y no ser molestada por cosas del trabajo.

Horas después

He terminado todos los pendientes que tenía y he adelanto un poco más —sonrió—. Tendré un poco más de tiempo para estar con Edmond —miro mi reloj—. Tengo al menos veinte minutos para darme unos pequeños retoques. Me levanto de mi silla y voy al baño, solo necesito maquillarme de vuelta y arreglarme un poco mi cabello. Mi outfit también me acompaña, hoy decidí usar una blusa con mangas largas de negro y blanco, unos pantalones negros ajustados y unos botines de color negro, como hoy pronosticaron frio decidí usar mi abrigo color beige —sonrió al verme al espejo. 

Salgo de mi oficina y le hago una señal a Ainara, ella me mira y sonríe, al salir veo el auto de Edmond, se baja la ventana del lado del copiloto y en segundos veo a mi esposo con una sonrisa. Rápidamente subo al auto y sin esperar nada me acerco a darle un beso muy apasionado —nos separamos

— Te extrañe —digo mientras me pongo el cinturón de seguridad

— Igual yo —me sonríe—. ¿Estás lista?

— Si, podemos irnos

Edmond mira por el retrovisor y entra al tráfico, mientras Edmond conduce yo le empiezo a contar algunas cosas triviales, Edmond de vez en vez me sonríe sin dejar de ver el tráfico. Si nos hubiéramos tardado unos minutos más estaríamos en medio de un embotellamiento aun peor del que estamos.

~✿ ❀~✿ ❀~✿ ❀~

Edmond me ha traído a almorzar a uno de los restaurantes más prestigiosos de Nueva York, el Gramery Tavern, según me dijo Edmond uno de sus socios le recomendó mucho este restaurante, según ese socio este lugar es tranquilo, perfecto para un almuerzo o cena en pareja sin ser molestados o interrumpidos.

Ahora estamos en medio del almuerzo Edmond se ha pedido un filete de pescado en salsa de Jamaica mientras que yo he decidido comer Pasta con salsa de espinaca y setas, la verdad es que ambos platos están muy deliciosos.

— ¿Te gusta el lugar? —me pregunta Edmond

— Si mucho, es hermoso —sonrió mientras doy vueltas el tenedor en la pasta

— Antes que lo olvide, Nick me llamo —me dice muy feliz mientras se limpia los labios con la servilleta

— Y ahora que ha hecho —digo irónicamente

— Aunque no me creas no hizo nada
—se ríe—. Solo me llamo para felicitarme por el premio que gane y me dijo que muy pronto nos volveríamos a ver

— De seguro vio la imagen que subí a Instagram de la revista donde apareces —tomo un poco del vino blanco que pedimos

— Es lo más seguro, pero le entiendo, está más concentrado en sus próximos eventos y su entrenador le está exigiendo el doble

— Si quiere ser el mejor tiene que ser así

— Lo se

Termínanos de comer ahora estamos esperando nuestros postres, Edmond y yo hemos pedido unas tartas Vianner, ambos no somos fanáticos del chocolate, pero hoy se nos antojó.

— Edmond mientras viene el postre iré al tocador, necesito retocar mi maquillaje —digo mientras me levanto y tomo mi cartera

— Esta bien, no tardes —se para y me sonríe.

Camino hacia el área de los tocadores para mi suerte no hay fila ni nada, entro y en efecto solo hay una chica retocándose también, saco mi maquillaje y empiezo a retocar mi maquillaje. No he tardado ni diez minutos para mi suerte —salgo del tocador—. De seguro ya llego nuestros postres, escucho una pequeña voz cercana a mí diciendo mi sobrenombre —me extraño—. Esta voz que escucho se me hace muy conocida —me detengo y me doy vuelta.

— Tabi.... —se acerca una hermosa chica rubia—. Esperen yo a ella creo que la conozco

— Heeee.... Si —trato de acordarme, pero no sé quién puede ser—. Que mala memoria tengo

La chica rubia se para frente a mí y me mira de pies a cabeza aun con la sonrisa, trato de recordar donde la he visto pero nada, no me acuerdo quien es.

— Tabi.... No me reconoces —me dice riéndose—. Soy Mia, Mia Phillips

— Mia —digo sorprendida, ahora la recuerdo—. No lo puedo creer —la abrazo

Como no pude reconocerla, ella fue mi compañera de habitación por unos meses en la universidad, además ella me ayudo en escoger mi outfit navideño hace muchos años atrás, fue mi primera navidad que pase con la familia de Edmond.

— Perdón si no te reconocí —me disculpo—. Hace mucho tiempo que no sé nada de ti además cambiaste el color de tu pelo, cambiaste mucho —la miro de pies a cabeza

— Si, muchas cosas cambiaron —me dice riéndose

Un hombre de la edad de Edmond le hace una seña y ella le responde con otra, yo al ver eso me quedo sorprendida.... ¿Sera que él es su novio? —sonrió sutilmente

— Él es tu....

— Mi esposo, me case —me dice muy feliz—. Te acuerdas que había un chico Ingles que vino de intercambio por dos semestres

— No me digas que es el —digo sorprendida

— Si, cuando regreso a Inglaterra no perdimos contacto y al año en una locura mía deje todo y me fui a Inglaterra para estar con el

— Por eso no sabíamos nada de ti —digo aun sorprendida

— Si y que por distraída perdí mi teléfono con todos mis contactos

— Disculpen —nos dice una chica muy dulce

Mia da unos pasos hacia atrás y yo hacia adelante, no nos dimos cuenta que estábamos estorbando el paso a las personas

— ¿Y tú? —me pregunta—. Sigues con ese chico.... ¿Edward?

— Edmond —corrijo riéndome—. Si, de echo me case con el

— Lo sabía, sabía que iban a terminar juntos....

El esposo de Mia sale muy rápido acompañado de otro señor, dice el nombre de Mia y ella le hace una señal de "En un minuto voy"

— Tabi, lo siento, pero.... —me dice apenada

— Tranquila, lo se...—saco de mi cartera una de mis tarjetas comerciales donde están mis datos y se lo doy—. Llámame

— Por supuesto —guarda la tarjeta—. Adiós Tabi, fue un gusto volver a verte —se despide y se va muy rápidamente siguiendo a su esposo y el señor que esta con él.

Aunque no quiero aceptarlo, pero muchas veces que he acompañado a Edmond a un almuerzo o cena de negocios me paso lo mismo, me fui de manera brusca mientras hablaba con algún conocido o amigo mío, algunos lo entienden, pero otros simplemente se enojan —suspiro—. Camino de vuelta a mi mesa, me siento y veo que aún no nos han traído el postre, Edmond se da cuenta de mi presencia y guarda su teléfono.

— ¿Algún problema? —pregunto al ver la cara seria de Edmond

— No, nada malo.... Solo tonterías de mi padre

— Quieres que vayas a la oficina —digo con sarcasmo

— Si, pero no lo hare —me toma de la mano—. Hoy es mi día libre y quiero pasarlo con mi linda esposa y descansar unas horas en el flat no sé, viendo una película —me dice y sonríe

— Tengo la perfecta película que podemos ver en la noche —sonrió

Edmond toma mi mano y me da un sutil beso en el dorso de la mano, yo solo lo miro y sonrió como tonta
—suspiro—. Adoro que haga eso

— ¡¡No creerás a quien me encontré!!

— ¿A quién? —me pregunta intrigado

— A una compañera de edificio —sonrío—. Se llama Mia

— ¿Mia? —me dice extrañado

— No la conoces porque ella se fue semanas después, pero fue una gran amiga de echo ella me ayudó a arreglarme el día que fui a pasar navidad contigo

— ¿Nuestra primera Navidad? —me pregunta sonrientemente

— Si, ella me ayudo con el peinado y maquillaje

— Ese día estabas despampanante, eras un pequeño diablo rojo navideño

— Edmond —digo fingiendo enojo, pero a la vez riéndome.

— Fue una navidad mágica —me dice

— Una de las mejores que he vivido —sonrío y suspiro—. Cuando me llame la invitare al flat, que venga con su esposo a cenar ¿Estarías de acuerdo? —lo miro

— Claro mi amor, solo trata que la fecha no coincida con un día pesado o que tengamos muchas reuniones.

— Por supuesto, yo lo concordare

Mientras esperamos tomo un poco de vino que aún tengo en mi copa, levanto la mirada por inercia y abro los ojos de par en par al ver a una persona, el vino baja por mi garganta de una manera brusca y con mi asombro de hace unos segundos provoca que empiece a toser —dejo la copa en la mesa.

— Tabi mi amor —Edmond me dice preocupado tratando de pararse, pero le hago una señal de estoy bien sin dejar de toser

— Estoy bien —digo mientras tomo un poco de agua—. Solo fue el vino, que me pico la garganta —miento y trato de que mis nervios me ganen.

No puedo creer que Izan este aquí, ¿Qué hace el en este lugar? —me pongo nerviosa y miro sonrientemente a Edmond—. Edmond me toma mi mano una vez más y me da su vaso de agua por si lo necesito

— ¿Segura que estas bien? —me pregunta—. Puedo pedir que te traigan más agua —mira a los lados, pero muevo la mano y hago que me vuelva a poner atención.

— Edmond, mi amor estoy bien —le aseguro

Para mi suerte se me pasa la tos y el camarero trae nuestros postres, lo pone frente a nosotros y ambos empezamos a disfrutar del riquísimo postre. Edmond me cuenta algunas cosas de su mañana, pero yo no le estoy prestando atención.

Disimuladamente veo sobre encima mis hombros a Izan, él está acompañado con la que creo que es su novia o eso es lo que me dio a entender. La chica es muy hermosa, no la he visto muy bien, pero desde mi lugar logro percibir que es muy hermosa y que ella está enamorada de Izan —me pongo seria—. No la culpo, Izan es un buen partido además de guapo y sexy.

Me auto obligo a dejar de estar más atenta a Izan con su pareja y poner más atención a Edmond —cierro los ojos por unos segundos—. Pero no lo estoy logrando.... ¿Para qué habrá venido Izan a este restaurante y con ella?  

Estoy como loco arreglándome rápidamente, mi maldita alarma no funciono y me dormí una hora más
—busco alguna camisa—. Hoy precisamente tenía que llegar a la oficina más temprano porque tenía una reunión con el señor Harrison, hoy es mi último día para responderle. Escucho mi teléfono sonar y rápidamente corro, lo busco y lo encuentro en medio de las almohadas de mi cama, miro el número y no lo reconozco, con mucha curiosidad contesto

📞Llamada telefónica 📞

— Hola

— Buenos días Izan, te habla el señor Harrison

— Señor Harrison —hablo preocupado—. Lo siento mucho tuve un...

— En diez minutos llego a tu flat

— Señor...

— Adiós

📞Fin de la llamada telefónica📞

¡¡Mierda!! Corro hacia mi habitación y empiezo a cambiarme, no puedo creer que el señor Harrison venga a mi flat, el necesita con suma urgencia mi respuesta. Me miro en el espejo y creo que estoy presentable, me he puesto una camisa blanca con un saco plomo y unos jeans azules, no creo verme mal.

Salgo de mi habitación y empiezo a levantar algunas ropas mías en el piso, también levanto la caja de la pizza que me comí ayer, no quiero aceptarlo, pero soy un poco desordenado, necesito contratar a alguien que me ayude con la limpieza de mi flat, ahora si me lo puedo permitir.

Diez minutos después

El timbre de mi flat suena —debe ser el señor Harrison—. Dejo de acomodar las cosas y me paro para observar mi pequeña sala —al menos esta más limpio que hace diez minutos atrás—. Camino y muy rápidamente abro la puerta, frente a mi está el señor Harrison acompañado de un hombre que supongo debe ser su chofer.

— Buenos días Izan

— Buenos días señor Harrison, pase —digo y me hago aun lado

El señor Harrison entra a mi flat y empieza a mirarlo muy atentamente, miro al chofer y el m hace una señal de que él se quedara afuera —cierro la puerta—. Camino y me acerco al señor Harrison

— Puede tomar asiento —digo señalando el sillón

— Muchas gracias —se sienta

Yo rápidamente traigo una silla y me siento frente a él, el no deja de mirar mi flat y por su expresión sé que está sorprendido.

— Lo siento mucho señor por no llegar a nuestra reunión, tuve un imprevisto

— ¿Este es tu flat? —me pregunta

— Si

— Es muy.... Acogedor —me dice tratando de sonar dulce pero no le funciona.

— Señor....

— Sabes —me interrumpe—. Yo antes de ser lo que soy vivía en lugares así
—me dice con algo de nostalgia y tristeza—. Incluso viví en un departamento aún más pequeño que este lugar con mi esposa por casi dos años.

Me quedo sorprendido por lo que el señor Harrison acaba de decirme, yo la verdad es que jamás me lo hubiera imaginado que él había vivido en departamentos más pequeños que este, sé que el forjo la constructora desde cero y que la hizo lo que hoy es a base de mucho esfuerzo. Yo respeto mucho al señor Harrison, es uno de mis modelos a seguir.

— Basta de recuerdos —se pone serio—. Izan tomaste una decisión —me mira fijamente

— Señor Harrison —resoplo para controlar mis nervios—. Le di muchas vueltas al asunto, pensé mucho en los pros y en los contras, pero sobre todo en sus sabias palabras.

— Izan —me interrumpe—. La decisión que tomes yo lo respetare y seguiré apoyándote. Tú tienes todo mi apoyo en la empresa y las cosas no cambiaran, tomes la decisión que tomes.

— Muchas gracias señor.... —me callo unos segundos—. Señor Harrison la decisión que tome es una de las decisiones más importantes que he tomado en mi vida y como le dije lo pensé mucho y lo que me llevo a decidirme fue la confianza que usted me deposito.... Señor Harrison —me levanto de mi silla, levanto la carpeta y la pongo frente a el—. Acepto

Veo como el señor Harrison empieza a sonreír, toma la carpeta y lo abre, mira mi firma y con un dedo la pasa para cerciorarse que lo firme con tinta

— Izan —me mira—. No sabes la felicidad y la tranquilidad que me das al haber aceptado esta propuesta

— Señor Harrison....

— Dime Thomas —sonríe

— Thomas...yo soy el que está muy agradecido, usted me acaba de cambiar la vida

— No es así, tú me acabas de dar la calma que tanto necesito —me toma del hombro—. Ahora tenemos que empezar con tu transformación y eso tomara tiempo —me da dos palmadas en la espalda y se sienta de vuelta

— Sí señor, sé que será complicado

— Lo primero —me mira—. ¿Hablaste con Emma? —me pregunta de frente

— Aun no, pero ya tengo listo el anillo

— Izan —me mira seriamente—. No quiero que mis palabras anteriores te lleven a tomar una decisión precipitada por eso quiero que me seas sincero

— Sí señor, digo Thomas

— ¿Tú estás enamorado de Emma?
—me pregunta

Sé que lo que voy a decir es de una persona muy cobarde y que estoy mintiendo al señor Thomas, pero si quiero seguir con mi plan tengo que atenerme a las consecuencias, no puedo cambiar ahora que estoy tan cerca de estar a la altura de Matteo y Edmond, muy pronto las cosas cambiaran.

— Sí señor, en este poco tiempo que le he conocido me ha cautivado y me he enamorado —finjo sonreír.

— Emma es una dulce chica y creo que ella es la indicada para ti, aunque no lo parezca ella es muy fuerte y será un gran apoyo en los momentos más difíciles —sonríe—. Juntos sé que harán crecer la empresa

— Y así lo haremos —digo confiado

Si me tengo que desvelar y dejar mi vida en esta constructora lo hare, quiero y lograre poner a la constructora en el lugar que merece.

— Izan ¿Puedo ver el anillo?

— Claro —digo y voy a sacarlo de uno de mis cajones

Dos días después de la reunión con el señor Thomas fui a una joyería y compré el primer anillo de compromiso que vi.

Flashback

Entro a la joyería y una dulce chica al verme me sonríe, yo me acerco y empiezo a ver los diferentes anillos que hay a la muestra.

— Señor, ¿Está buscando alguna cosa en específico? —me dice dulcemente

— Sí, estoy buscando anillos de compromiso

— Tenemos muchos modelos y diseños —me dice

La chica saca una llave de su pantalón y se agacha, abre una caja y de allí saca muchos anillos de compromisos, desde sencillos hasta con diamantes pequeños.

— Tenemos estos diseños, usted puede escoger el que más le guste —me indica

— Necesito tu ayuda —la miro con algo de coqueteo—. ¿Qué anillo tu escogerías?

— Eso depende de cuánto quiere gastar —me sonríe de manera coqueta

— La verdad es que preferiría algo sencillo

Veo que la chica cambia su expresión y me mira de otra forma —ruedo los ojos—. Mejor me invento algo para que me ayude y me deje de ver así.

— Quiero que sea sencillo porque será una prueba —digo serio—. Si ella no se enoja o hace un berrinche sobre lo sencillo del anillo me confirmara que ella es la mujer de mi vida y que no le importa mi dinero

— ¡¡Hoooo!! Ahora lo entiendo

— Necesito estar seguro

— En ese caso yo escogería este —me señala un anillo sencillo pero elegante

— Me gusta, me lo llevare

— Puede pagar en caja —me dice y me giña un ojo

Yo pensé que la primera vez que quiera comprar un anillo de compromiso seria para Tabi —sonrío con tristeza—. Pero estoy comprándolo para otra mujer que no es Tabi, camino hacia la caja y pago el precio, me dan la caja y la guardo. Ahora a esperar el mejor momento para pedírselo.

Fin del Flashback

El señor Thomas abre la caja y se queda sorprendido al ver el anillo de compromiso que compre para Emma, él lo saca y lo ve más detalladamente

— ¿Hay algún problema? —pregunto intrigado y sin entender su expresión en la cara

— Izan, ¿Con este anillo le pedirás matrimonio?

Me muestra el anillo que he comprado, el que escogió la chica es un anillo de oro, con pequeños pero pequeños diamantes, es un anillo sencillo pero bonito.

— Si, me pareció el más cercano al estilo de Emma —miento.

— Izan —guarda el anillo en la caja—. Este no es un anillo que puede usar la esposa del próximo gerente general de la constructora Greenson

— Comprare otro

— No, no, no, no —me indica—. Yo mandare hacer los correctos para ustedes, tanto de compromiso como el de matrimonio

— No puedo permitir eso.... —trato de que no lo haga, pero me es imposible él ya ha hablado con una joyería

— Listo en unos días estarán los anillos —guarda su teléfono

— No sé cómo agradecerle

— Siendo el mejor de todos —se sienta otra vez en mi sofá y me vuelve a mirar seriamente—. Izan, necesito que adelantes el viaje a Inglaterra

— Pero señor aún faltan semanas

— Lo sé, pero es urgente que viajen una semana antes. Te presentare a algunas personas importantes y que te ayudaran a ser el gran hombre de negocios que todos tienen que temer

— Prometo que no le defraudare

— Lo sé además aprovecharemos para arreglar las cosas legales y ahora que lo estaba pensado sería muy bueno que tú y Emma se casen en Inglaterra

— ¿Disculpe? —pregunto sorprendido—. No le entendí lo último que dijo

— Sé que sonó como una orden, pero creo que será lo mejor

— Tengo que hablar con Emma primero

— Claro, habla con ella y luego me dices la decisión que tomaron. Por cierto, Emma tiene el día libre cuando ella lo quiera —me guiña un ojo

— Esta bien señor y muchas gracias.

— Antes que me olvide ten —me entrega una tarjeta de crédito platino—. Desde ahora puedes disponer del dinero de esta cuenta

Lo tomo y lo primeo que noto es mi nombre en letras negras con relieve
—lo toco con los dedos—. Jamás había visto una tarjeta de crédito de este color —levanto la vista—. El señor Thomas ya está en mi puerta, me hace una señal y se va.

Salgo de mi letargo y corro para tratar de alcanzarlo —abro la puerta—. Pero es tarde, Thomas se ha ido. No puedo creer lo que me acaba de pasar, mi vida está empezando a cambiar de una forma muy abrupta, sé que tengo que hacer muchos sacrificios y lastimar a muchas personas, pero si quiero lograr mi objetivo tengo que hacerlo —entro a mi flat—. Lo primero que tengo que hacer es pedirle matrimonio a Emma —suspiro—. Tengo una idea, hoy estrenare esta tarjeta y le llevare a un hermoso y caro restaurante, antes de terminar el postre le pediré matrimonio. Tomo mi teléfono y le llamo, escucho dos tonos y contesta

📞Llamada telefónica📞

— Hola, Izan

— Emma hermosa

— ¿Dónde estás? El señor Harrison ya se fue y muy enojado

— Tranquila, yo ya le llamé y le pedí disculpas

— Me preocupe mucho, ¿Qué te paso?

— Mi alarma no sonó y me quede dormido

— Creo que te regalare un despertador....

— Emma —la interrumpo—. Quiero invitarte a almorzar

— No sé si podre Izan, tengo cosas pendientes

— Hermosa, el señor Harrison te dio el día libre así que no tendrás problemas

— Enserio, me estás hablando enserio

— Si, así que ve a tu casa y ponte hermosa que iremos a almorzar a un hermoso lugar

— Izan ¿Por qué estas comportándote así?

— Porque quiero consentir a mi novia —miento

— Esta bien aprovechare la benevolencia del señor Harrison —me dice riéndose

— En una hora te mando la dirección y la hora de la reserva

— Okey... adiós mi amor

— Adiós hermosa

📞Fin de la llamada telefónica📞

Ahora tengo que buscar un hermoso restaurante —busco en google—. Rápidamente encuentro uno, no está lejos del centro y por las imágenes es muy hermoso. Busco el número y los llamó, espero haya aun mesas disponibles.

~✿ ❀~✿ ❀~✿ ❀~

Estoy frente al Gramery Tavern esperando a Emma, para nuestra suerte aun había mesas disponibles. Un taxi se estaciona y de este sale Emma —sonrío sutilmente al verla—. Estoy muy sorprendida al verle, esta vestida con un vestido celeste o azul —no tengo idea el color exacto—. Y unas botas altas color negro, hoy Emma está muy hermosa. Emma se acerca a mí y se quita las gafas de sol cuando me ve.

— Hola —me sonríe y me da un sutil beso—. ¿Llegue tarde? —me pregunta

— No, llegaste a tiempo —sonrío—. Entremos —tomo la mano de Emma y ambos entramos

Al entrar una chica me mira, ella debe ser la encargada de ver si tienes o no reserva, me acerco y ella me sonríe

— Buenas tardes, bienvenidos al restaurante Gramery Tavern ¿Tienen reserva?

— Buenas tardes, si tengo una reserva a nombre de Izan Miller

— Denme un minuto

La chica empieza a revisar el cuaderno de reserva, yo miro a Emma y ella que estaba viendo el lugar me mira con una sonrisa, está emocionada y lo noto.

— Señor Miller, puede pasar por aquí —me pide y nosotros la seguimos

Emma y yo vemos el interior del restaurante, realmente es muy hermoso, Emma se detiene y pide a unas mujeres que le den paso, no sé porque se ponen a hablar en medio del pasillo —ruedo los ojos. A lo lejos veo el bar, antes de hacer esto necesito tomar al menos una copa de lo que sea.

— Adelántate, iré al sanitario —miento

— Esta bien —se acerca y me da un sutil beso en los labios

Emma se va con la chica mientras yo me dirijo al bar. Me siento en la barra y el barman me mira y me saluda.

— Buenas tardes ¿Qué le sirvo?

— Dame un whisky en las rocas doble —resoplo

— Enseguida

No puedo creer que esté haciendo esto, me comprometeré con una mujer que no amo, pero me ayuda a llegar a mi objetivo —ponen mi bebida frente a mí—. Perdón Emma por esto, pero eres un daño colateral —bebo mi bebida de un solo trago y lo pongo en la barra—. Prometo que tratare de no hacerte sufrir el tiempo que estemos casados pero la mujer que siempre amare es Tabi —le hago una señal y me vuelve a servir otra copa—. Tengo que concentrarme y hacer lo que tengo que hacer para lograr mi objetivo, no puedo flaquear y más ahora —respiro profundamente—. Soy fuerte y esto solo es un negocio, un paso más para lograr mi único objetivo, Tabi.

Me paro y pago con una buena propina al barman, camino hacia nuestra mesa, me paro en la entrada a las mesas y busco con la mirada a Emma, pero lo que jamás creí que sucedería sucede, a un costado veo a Tabi junto con el estúpido de Edmond —los miro seriamente—. Por unos pocos segundos Tabi y yo conectamos nuestras miradas, al verla siento como mi mundo se detiene y por unos segundos solo estamos nosotros dos. Mi momento de imaginación es interrumpida por la voz de Emma, ella me hace una señal indicándome nuestra mesa.

Camino hacia donde esta Emma, trato de no mirar a Tabi, pero se me está haciendo imposible.... ¿Acaso ambos no estaban separados? —me siento frente a Emma

— Ya nos dejaron la carta, ¿Qué es lo que quieres pedir? —me dice Emma mientras mira la carta

— Déjame ver —trato de sonar lo más calmadamente

— Yo pediré una Pasta con setas —me dice

— Yo quiero la langosta con pimientos —digo y cierro la carta—. Emma dame unos minutos, necesito hacer una llamada

— Esta bien, cuando venga el camarero le diré la orden

Me levanto rápidamente y me voy hacia el área de los baños, saco mi teléfono y llamo a Samantha, esa embustera me engaño. Suena, suena y no me atiende —gruño—. Sera mejor que deje un mensaje de Voz

🔊Mensaje de Voz🔊

— Samantha tu famoso plan no funciono —digo enojado, pero a la vez sarcástico—. Lo que hayas echo no funciono porque ambos siguen juntos —grito—. No sé cómo confíe en una persona como tú, incapaz de hacer su parte —me rio—. No vuelvas a llamarme o buscarme, yo solo hare mis cosas, por cierto, si se te escapa algo de mí o quieres hablar y contar cosas mías la pagaras muy caro, yo también se algunas cositas que, si hablo tu perfecta vida cambiaria así que nunca nos conocimos, ni nos hablamos.... Adiós para siempre

Cuelgo y guardo mi teléfono, vuelvo a mi lugar y Emma no deja de mirarme sonrientemente, sé que ella está muy emocionada por venir a un restaurante como este y la verdad es que yo también, tengo mucha curiosidad de saber cómo es la comida.

Diez minutos después

Este almuerzo está siendo un infierno, no estoy disfrutando nada, ver a Tabi muy cerca de Edmond me causa un gran enojo, el estúpido de Edmond no deja de tocarla y sonreírle —aguanto mi enojo—. No puedo pedirle matrimonio en este lugar, no frente a Tabi porque sé que ella me vio, no puedo hacerlo.

— Izan, tú qué opinas —me habla Emma

— ¿Opino? —la miro sin entender

— Si, sobre los nuevos cambios que quiere hacer Carl en la empresa

— El no podrá hacer nada —digo mientras como la langosta—. Él no tiene el poder de hacer eso

— Pero él es el hijo del señor Harrison

— Lo dijiste tú, su hijo no el dueño
—digo y me rio

Vuelvo a mirar hacia la mesa donde están ellos, pero no están —Mierda—. Miro hacia la puerta de salida y veo a Tabi con la mano entrelazada de Edmond. ellos se están yendo —aguanto las ganas de ir detrás de ellos—. Respiro profundamente y vuelvo a concentrarme en Emma, ahora que se fueron creo que podre pedirle matrimonio a Emma

— Izan ¿Podemos pedir algún postre? —me pregunta

— Claro, pide lo que quieras

— Mmmm... quiero una tarta de chocolate ¿y tú?

— Lo mismo

Emma hace el pedido mientras yo trato de buscar el mejor momento para pedirle matrimonio, rápidamente traen los postres y los dejan frente a nosotros. Emma me mira y empieza a comer, creo que es ahora o nunca —busco la caja donde está el anillo.

Escuchamos un fuerte estruendo y ambos buscamos con la mirada el origen, la mesa que está un poco alejada de nosotros es de donde proviene el gran ruido, dos hombres que parecen ser ejecutivos están peleándose mientras los camareros tratan de sacar a uno de ellos, pero es algo imposible, el no para de gritar

— Me estafaste —grita—. Quiero mi inversión de vuelta —grita el hombre con terno plomo

— ¿Qué inversión? Tú lo perdiste todo en la bolsa —responde el hombre otro hombre

— Tú me dijiste que era un negocio seguro por eso invertí todo el dinero de la empresa

— Yo te presente el negocio y tu decidiste invertir todo, yo no soy tu niñera para decirte que hacer —le dice y se ríe

— Eres un —trata de abalanzase para golpearlo, pero los camareros no lo permiten

El encargado de todo el restaurante aparece con dos guardias y empieza a hablar con el hombre de terno plomo. El sigue con ganas de abalanzarse al otro, pero esta vez el guardia de seguridad no lo deja.

— No me iré sin antes darle su merecido a este estafador —grita y todos lo miramos.

No puedo aguantar más esa pelea, arruinaron mi oportunidad para pedirle matrimonio a Emma, será mejor irnos porque esta pelea es para largo además veo que Emma está muy incómoda.

— Sera mejor que nos vayamos —digo tirando mi servilleta

— Si, tienes razón —me dice incomoda

Llamo a un camarero y le doy mi tarjeta de crédito, el me pide una serie de cosas y yo los hago. Me da mi recibo. Emma se para y me toma del brazo, salimos del restaurante y empezamos a caminar por las calles de Nueva York, ahora tendré que esperar un mejor momento para pedirle matrimonio —resoplo—. Espero hacerlo hoy porque necesito planear muchas cosas con Emma, claro si ella acepta mi propuesta de matrimonio. 












🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆

Holis... ¿Como están? Les traigo un nuevo cap. de Infieles y esta vez es algo largo 🤭🤭🤭🤭

¿Que le parecio?

No se olviden de seguirme en Instagram: LoveBooks_wattpad.

Ahi subo algunas cositas que se que les gustara

No se olviden de votar, comentar y compartir

L@s quiero J💜

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top