◌ ◌ ◌╰── - ̗̀ Capítulo 21 ̖́- ──╯◌ ◌ ◌

Empiezo a buscar a Edmond con la mirada, algunas personas que recién han llegado me felicitan y me detienen por unos segundos, yo solo sonrió y les doy las "gracias" por haber venido.  A lo lejos puedo ver a Edmond, me acerco y me llevo una muy mala sorpresa.... Esto debe de ser una broma de muy mal gusto —aprieto los dientes.

Desde donde estoy puedo ver muy bien a Edmond en la mesa del señor Albert hablando con él y la estúpida de Samantha que con su mirada está devorando a Edmond además no para de sonreír más falsamente —una ira incontrolable empieza a apoderarse de mi—. Samantha cada que habla Edmond se ríe como tonta y se acerca disimuladamente a mi esposo —aprieto los dientes y las manos controlando mi enojo—. Ella está coqueteando con mi esposo a la vista de todos y sin ningún descaro.... ¡¡Ahhhhh!!

— Hoooo ahora entiendo porque estas así de estresada —me dice mi Madre parándose a mi lado con una copa de champagne en la mano. 

— Madre...

— Yo te dije desde un inicio que estas cosas podían pasar —hace que le vea—. Tu esposo es una mina de oro y lo demostró dándote ese hermoso regalo.... Además, que es hijo único

— De que está hablando madre

— Yo te aconseje desde siempre que aseguraras tu vida con él, teniendo un hijo.... Así está clase de mujeres no se acercarían a él y mucho menos le coquetearían

— ¿Qué? —le miro sin entenderle

— Mira a ese grupo de chicas —me señala a un grupo de quinceañeras seguro hijas de algunos socios que invitaron—. Ellas desde que vieron a Edmond no dejaron de mirarlo y suspirar por él.

— Esta muy mal —susurro más para mi

— Escúchame Tabatha —me mira muy seria—. Un hijo siempre asegura un matrimonio y más en esta sociedad, un hijo es un fuerte vínculo entre dos personas muy difícil de romper.

Ya estaba tardando en insinuarme ese tema, mi madre y sus estúpidas ideas donde cree que los hijos salvan matrimonio. Si ella lo habla es porque hizo lo mismo —rio sarcásticamente—. No me sorprende en nada sus palabras porque yo sé bien que mis padres solo tuvieron hijos para el qué dirán
—ruedo los ojos—. Y que alguien continúe con el legado de la familia Lougthy, familia de abogados.

— Madre, Edmond y yo hemos decidido aún no tener hijos, no sé porque siguen insistiendo....

— Si insistimos es por tu bien, no queremos tener a una hija divorciada —me dice enojada

— Madre no estoy dispuesta a escucharla —trato de irme, pero ella me vuelve a sujetar del brazo

— Mira —me vuelve a enseñar a muchas mujeres que no conozco—. Ellas también están coqueteando con tu esposo en frente tuyo y puedo apostar que alguna de ellas podrá lograr su cometido.

— Pues que lo hagan, no conseguirán nada

— Eres tan inocente —me dice sarcásticamente—. Despierta de tu sueño estúpido y haz las cosas bien
—me dice aún más enojada—. No nos decepciones más

Decepciones, para ellos solo soy una decepción y todo lo que hago es incorrecto.... La palabra "Decepción" es la palabra que más me dicen. Veo como se acerca mi Padre con una cara muy seria.

— Padre

— Hija —me dice muy seriamente.

— Si me disculpan —me doy la vuelta y voy en busca de Edmond.

Mientras me acerco puedo ver como Edmond y el señor Albert se levantan de su lugar y se van a otro quedando solo Samantha en la mesa, está es mi oportunidad para ponerle las cosas en claro. Me acerco, recorro la silla y me siento a su lado fingiendo una sonrisa.

— Sawi perdón Samantha —sonrió—. Veo que ustedes tres estaban muy animados y alegres —me sirvo un poco de ron con hielo.  

— Tabatha —me mira con una sonrisa falsa—. La verdad es que sí, Edmond es una persona muy agradable y muy interesante —suspira—. Por cierto, Feliz cumpleaños....

— Gracias, muchas gracias por tus felicitaciones.

— Vi el hermoso regalo que te hizo Edmond y solo diré que el si sabe que regalar, un auto último modelo ¡¡wow!!, nadie se esperaba ese regalo creo.

— Ni yo, él es el mejor esposo del mundo, además me regalo este hermoso brazalete —le presumo.

— Hoooo —se sorprende—. Es muy hermoso —me dice con un tono de celos.

— Si, lo mando a grabar nuestras iniciales

— Que suerte tienen algunas —dice entre dientes algo enojada.

— Disculpa de dijiste

— Nada, solo dije que está muy hermoso

— Gracias —sonrió falsamente—. Por cierto ¿Dónde están?

— Albert y él se fueron a hablar sobre negocios e inversiones en la constructora y me dejaron a mi solita.

— No creo que tarden mucho así que le esperare

Veo un camarero pasar con dos copas de champagne, lo tengo y levanto dos copas poniendo cada uno frente a nosotros, Sawi me sonríe y empieza a tomarlo poco a poco.

Albert y Edmond aún no han regresado así que tengo más tiempo para ponerle incomoda a Sawi y mostrarle que se le estúpido juego que trata de jugar. Un pequeño bullicio llama nuestra atención, una pareja está peleando y gritando muy disimuladamente o eso es lo que creen. Por las palabras de la mujer el hombre estaba cayendo ante las insinuaciones de una de las chicas que se había acercado a él.

— Sabes, tú tienes mucha suerte —bebo un poco de mi copa de champagne.

— ¿Suerte en qué? —me dice extrañada.

— En que no tienes que preocuparte ya sabes sobre alguna mujer que quiera coquetear con tu esposo o acercarse con segundas intenciones.

— Disculpa —me dice ofendida

— A cualquier lugar que vamos siempre hay mujeres que se insinúan, ese es el pecado de casarse con un hombre muy guapo y sexy

— Albert también es guapo y sexy —me dice no tan convencida—. Y muchas mujeres se acercan a él también, es la cruz que tenemos que llevar las mujeres casadas —me dice enojada

— Sabes Edmond es muy selectivo y correcto, jamás se fijaría en mujeres casadas, o mujeres que se tratan de acercarse demasiado a él, mucho menos en mujeres que usan trucos sucios para llamar su atención.

Samantha se da cuenta de mi indirecta y se enoja aún más, no le puedo decir sus cuatro verdades porque hay personas importantes para Edmond además no se vería bien un escándalo mío con la esposa de Alberth, socio de la empresa de mi esposo.  

— Tu esposo es un hombre muy bien parecido y es comprensible que se acerquen a él, pero supongo que tú lo conquistaste así también, usando trucos

— Yo no necesite esos trucos baratos, nosotros nos enamoramos porque así estaba destinado.

Veo a otro nuevo camarero pasar y lo detengo, tomo dos copas más está vez es ron y creo que está hago fuerte, pongo otra vez una copa frente a Sawi y la otro lo sujeto.

— Brindemos por nuestros esposos
—levanto la copa—. "Por mi esposo joven y tu esposo mayor"

— Por ellos —dice Sawi con mucha molestia y tomándose todo de golpe

Aun Edmond y el señor Albert han ha parecido, si estoy unos minutos más cerca de Samantha le diré sus verdades o peor aún le sacare sus extensiones rubias

— Sabes hasta ahora no entiendo la relación que tenían Izan y tu —bebe un poco más de su copa.

— ¿Perdón que nombre dijiste? —trato de controlar mi sorpresa.

— Izan, el chico que entraba a tu departamento en las noches y se iba al día siguiente —sonríe—. Por cierto, dile a Matteo que las mentiras son muy malas.

No, no puedo creer lo que estoy escuchando, no puedo creer que Samantha sacara el tema de Izan ahora.... ella sabe muchas cosas de Izan y estoy segura que en esa época me vio muchas veces con él o peor aún nos ha seguido cuando estábamos juntos en la época de la universidad, de ella espero todo, Samantha es una mujer de cuidado.

— Izan solo era un amigo de la universidad y el jamás entro a mi flat —trato de sonar muy seria y convincente

— Tabí, dejemos de mentir —me mira muy burlonamente—. Yo lo vi muchas veces entrar a tu flat, incluso me lo topé algunas veces.

— Pues te estás equivocando además Matteo jamás mentiría —miento

— ¿Cómo lo conociste? —me sigue insistiendo sin importarle lo que le acabo de decir.

Por la forma tan brusca de su pregunta y su ahora más atención a mí me doy cuenta que esa pregunta lo ha hecho para poder sacarme informacion y la respuesta que le dé querrá usarla para su beneficio, como si yo no conociera ese truco.

— A Izan lo conocí en la universidad más específico en la cafetería, ambos estábamos esperando nuestra orden y ya.

— ¿Por qué siento que me estas mintiendo?

— Si no me quieres creer no lo hagas
—me encojo de hombros—. Es tu problema.

— Y sabes algo de él, ¿Aún mantienen comunicación? —bebe otro trago de su copa.

— No, desde que se fue no supe más de el —bebo de mi copa.

— Él se desapareció de la noche a la mañana y tu entraste en una fuerte depresión.

¡¡¡¡Mierda!!!! Sawi al parecer estuvo pendiente de mis pasos y nunca me dejo de observar, ella siempre estaba al tanto de los chismes de la universidad y puedo apostar que su fijación en mi fue para saber cuándo Matteo venia. No negare que tuve días malos y días buenos en esas fechas, la partida de Izan si me afecto, sentí por mucho tiempo como si una parte mía se hubiera ido para siempre.

— Pues tu deducción fue errónea
—sonrió—. Si estuve con depresión, pero no fue por él, simplemente fue que en esa época pase un fuerte problema familiar —miento.

— Pues no pareció eso, de echo pensé que era por Izan "Tu amigo", incluso muchas de las chicas pensaban que tu depresión si estaba relacionado con "su desaparición"

— Sabes ahora que estamos recordando cosas, me acorde de algo —cambio de tema rápidamente.

— ¿De qué?

— De la pelea que tuviste con una de las chicas de tu año, si mal no recuerdo ella te acuso de haberte metido con su novio o ¿Era su prometido?

— Eso es falso —me dice enojada y poniendo de forma torpe la copa en la mesa—. Ella siempre estuvo celosa de mí e inventaba esas cosas porque buscaba atención de todos además su novio ya estaba harto de ella y sus celos.  

— Creo que estas muy equivocada....  Si mal no recuerdo ella te llego a amenaza con darte una paliza o algo similar —le digo y bebo un poco de mi bebida.

— Pues tu memoria te está fallando, esa chica de la que estás hablando jamás me amenazo y nada por el estilo, solo fue un mal entendido.

— Sabes una cosa —le miro seria—. Yo hiciera lo mismo o actuaria igual que ella si veo que alguna mujer trata de seducir a mi esposo —digo muy seria y sin dejar de mirarle de la misma forma—. ¿Tú qué opinas? ¿Hicieras lo mismo?

— Es bueno saber eso —me dice aun con una sonrisa—. Yo igual hiciera eso —finge una sonrisa—. Por eso siempre estoy a su lado y no lo dejo solo.

— Debe ser muy aburrido siempre estarle acompañándolo y escuchar reuniones de negocios que mayormente son tediosos.

— La verdad es que no, al acompañar a Albert he conocido diversos lugares, pero además conozco a muchas personas muy pero muy interesantes, que también son muy bien parecidos
—me dice sonriendo.

Se que Sawi lo ha dicho por Edmond
—respiro profundamente—. Sawi no ha entendido mis indirectas, o mejor dicho lo entendió, pero no le importa. No voy a dejar que ella se acerque más a Edmond. Tan solo escuchar su voz me está provocando una migraña —trato de calmar mi enojo—. A lo lejos veo como Albert y Edmond aparecen riéndose con unas caras muy felices, las cosas que han hablado al parecer salieron bien o llegaron a un buen trato.

— Mi amor —se acerca Edmon y yo me paro.

— Te estaba esperando —entrelazo mis manos en su cuello y le doy un sutil beso

— Espero que no me hayas esperado mucho, solo fuimos a hablar sobre algunos negocios

— Muy buenos negocios —dice Albert muy feliz.

— Albert es lo que estoy imaginando
—se para y se acerca a Albert muy emocionada.

Albert le atrae a él y le sujeta de la cintura, ella le mira muy feliz y empieza a usar sus encantos además de darle unos besos apasionados.

— Si —le da un beso aún más apasionado Albert a Sawi.

— Mi amor eres el mejor.... Te quiero mucho —se emociona más.

— Pero eso si.... los papeles y la escritura estarán a mi nombre.

— Albert —hace un pechero y se está empezando a enojar.

— Mi amor, es más seguro que este a mi nombre —dice Albert y le acaricia la mejilla, pero Sawi se hace a un lado.

Sawi y Albert empiezan una pequeña discusión, Edmond y yo solo los miramos disimuladamente, Sawi se está empezando a enojar más al parecer no le gusto el argumento que le dio Albert. Detrás de ellos aparece mi madre con una sonrisa, mira a los dos que han dejado de pelear al sentir su presencia.

— Discúlpenme —los mira a los dos—. Chicos —nos mira—. La cena será servida en unos minutos —sonríe—. Albert espero que estés disfrutando de la fiesta y tal vez más después podamos acordar una reunión.

— Una excelente fiesta, Samantha y yo la estamos pasando muy bien y espero que después podamos concordar la fecha de nuestra reunión

— De eso no lo dudes, cuando tengas tiempo en tu agenda nos reunirnos y hablaremos de negocios.

Edmond y yo aprovechamos esos minutos y nos vamos a la mesa donde ya está mi Padre, Sophie con Matteo, al lado derecho de Sophie están sus padres, mis suegros no están en nuestra mesa ya que ellos decidieron acompañar a Albert. Edmond me ayuda con mi silla y me siento mirando hacia mi Padre que está más interesado en hablar con el Padre de Sophie, Jhon.

— Tabí.... hermosa muchas gracias por recomendarnos esa tienda —sonríe—. Pudimos encontrar las cosas que nos faltaban

— Muchas gracias Tabí, me salvaste
—sonríe Sophie y Matteo le toma la mano y le da un beso en el dorso de la mano.

— Sabia que les iba a gustar y que encontrarían todo lo que necesitaban en esa tienda —digo muy feliz de haberle ayudado a Sophie.

Esa tienda la encontré por casualidad mientras buscaba cosas para el flat, la tienda no tiene cosas exclusivas, pero si cosas muy hermosas hechas a mano o personalizadas como, por ejemplo, adornos para interiores de las casas o departamentos, además de diferentes objetos antiguos.

— ¿Qué necesitaban? —pregunta Matteo

— Cosas de mujeres mi amor —le da un beso muy tierno—. Luego te las enseñare, lo prometo

— Te encantaran, son muy hermosas
—dice la suegra de Matteo.

Nuestra platica es interrumpida por los meseros que empiezan a servir la cena, desde ya veo que mi madre escogió uno de los platos preferidos de Matteo
—como lo supuse—. Mi madre a mandado a preparar Salmon a la plancha con salsa de queso azul, acompañado con algunas verduras.

— Espero les guste, este es uno de los platos preferidos de Tabatha y Matteo —dice muy feliz mi Madre.

— El queso azul es el mejor acompañamiento para este platillo
—opina mi hermano muy feliz.

Veo como todos empiezan a comer, yo miro el plato y me empieza a dar pequeñas nauseas —trato de que no se me note—. Por culpa de Matteo odio el queso azul, de hecho, yo le tengo asco a ese queso en específico, tan solo verlo me está poniendo mal. Edmond me aprieta la mano y me mira algo preocupado

— ¿Estas bien? —me pregunta muy bajito casi susurrando.

— Se me quito el apetito —respiro profundamente y dejo los cubiertos a un lado del plato.

— ¿Es por el queso azul verdad?

— Si, sabes que lo odio —aguanto mis nauseas.

— Deja que haga algo

Edmond empieza a hacer no sé qué cosas en su plato, mientras que yo solo me dedico a tomar el vino blanco y tratar de eliminar mis nauseas, Sophie me mira algo rara y para evitar esas miradas decido comer un poco de las verduras. Cuando menos lo espero veo como Edmond cambia nuestros platos sin que se den cuenta.

— Mejor —me sonríe

— Mucho mejor, gracias —sonrió sin dejar de verlo.

El plato que me ha dado Edmond no existe ningún rastro de la salsa de queso azul, la salsa ha desaparecido del pescado para mi suerte, ahora no imaginar que hay esa salsa podré comer al menos algo.

— Querida Sophie ¿ya todo está listo para la boda? —pregunta mi Madre.

— Si, todo está listo

— No puedo creer que mi hija pronto se casara —dice muy emocionada Jeannette  

— Mamá —dice Sophie emocionada

— Estoy bien, estoy bien —dice mientras se seca algunas lágrimas.

— ¿Y harán alguna reunión o algo así antes de la boda? —pregunta muy sutilmente el senador John.  

Todos sabemos a lo que se está refiriéndose el padre de Sophie, en la despedida de soltero —me rio—. Lo dijo de una manera tan sutil, pero a la vez muy graciosa.

— Si te refieres a la despedida de soltera, si, si haremos algo —dice muy feliz Sophie—. ¿Verdad Tabi? —me mira muy emocionada.

— Si, haremos una pequeña reunión solo de mujeres.... y estas invitadas
—miro a mi madre y Jeanette

— Reunión que no creo que vayamos con ustedes —lo dice Jeanneth mirando a mi madre—. Pero gracias por la invitación.

Se a lo que se refiere Jeanneth y al parecer todos también porque se empiezan a reír menos mi madre que me mira muy fijamente y enojada, al parecer no le gusto el comentario.

— Tienen que estar presentes porque sin la madre de la novia no sería lo mismo, además no es lo que están pensando —miro a todos en la mesa—. Solo será una pequeña reunión en algún bar privado y tomar unos tragos y ya —les aseguro.

Por suerte antes de está reunión sorpresa pude hablar con Sophie y le plantee dos opciones, una de ellas era hace una fiesta sin invitar a nuestras madres, pero ella lo desecho inmediatamente porque desde hace mucho tiempo ella se imaginaba su despedida de soltera alado de su madre. Sophie sabe que su matrimonio es muy importante para su madre y ella quiere que participe en todo.

— Y tu mi amor ¿Harán alguna cosa con los chicos? —pregunta Sophie y todos los miran atentos a su respuesta de Matteo.

— No lo sé, aun no me han dicho nada los chicos, pero lo más seguro es que jugaremos unas partidas de FIFA con los chicos en el flat de uno de ellos
—dice muy tranquilamente Matteo

— No sé porque, pero no te creo —dice con una sonrisa cómplice Sophie a Matteo

— Siendo ustedes iría a un bar y estaría tomando unos buenos tragos toda la noche —dice riéndose John sorprendiendo a todos por sus palabras.

— Papá.... —dice riéndose Sophie y asombrada.

— Hija tu padre hizo eso, esa fue su despedida de soltero —se ríe Jeanneth

— Todos hicimos eso —dice mi Padre con una sonrisa que más parece seriedad—. Tomar unos tragos durante toda la noche y despedirnos de nuestra libertad.

— Papá, jamás pensé que tu hubieras echo eso —dice sorprendido mi hermano.

— No sé por qué, pero no puedo sacarme de la mente que la despedida de soltero de Matteo será un "Que paso ayer" —dice riéndose Sophie.

Todos la escuchamos y empezamos a reírnos, puedo ver como Matteo se ríe hasta derramar algunas lágrimas igual que Edmond, para mi suerte yo no me ahogue con el agua que estaba bebiendo.

— Creo que viste demasiado esa película —digo muy bajito solo para que Sophie me escuche

— Si, llega a ser, aunque similar el plan de los chicos, espero no terminar en las vegas y sin memoria

— Al día siguiente de la despedida de soltero, Matteo terminando como Doug en la azotea de un hotel todo quemado —digo entre risas—. Seria épico

— Edmond serias Phil encarnado, el único cuerdo de los tres —dice Sophie sin dejar de reírse

— Jason y Ryan serian Alan y Stuart, en especial Jason es igual a Stuart.... terminaría casado en las vegas con una desconocida —dice Matteo muerto de risa

Matteo acaba de nombrar a una persona no muy grata para mí, Ryan, el mejor amigo de Matteo, ambos se conocen desde la secundaria. En primer año de universidad me tope con él, me invito a tomar un café y yo acepte, no vi nada raro, salir con él, tiempo después me invito a cenar, una cena que debí haber rechazado.

Flashback

Ryan está esperando que nos traigan nuestros postres, la verdad es que estoy muy incómoda.... es diferente estar los dos solos en una cafetería que en un restaurante donde la mayoría de las personas son parejas además no sé porque trata de tomar mis manos a cada momento.... me estoy arrepintiendo de haber aceptado su invitación.

— Tabí —logra tomar mi mano

— Dime —estoy muy nerviosa e incomoda

— Desde hace mucho tiempo nos conocemos, ¿Verdad?

— Si, desde que mi hermano y tu estaban en la secundaria ¿Por qué? ¿Qué está pasando Ryan? —lo miro sin entender lo que me quiere decir.

— Tabí, desde hace mucho tiempo —me mira y me sonríe—. Te he dejado de verte como la hermanita de mi mejor amigo y te he empezado a ver como la hermosa mujer que eres y te has convertido.

— ¿Qué? —digo sorprendida y con miedo—. Ryan tus palabras me.... 

— Tabí —me hace callar—. Me gustas mucho y quiero que ambos empecemos una relación amorosa, quiero que seamos novios.

— Disculpa —retiro mi mano, estoy sorprendida por sus palabras.

— Tabí, sé que a ti también te gusto, lo he visto y notado desde hace mucho tiempo.

— Estas muy mal y confundiendo cosas —digo muy enojada e incómoda.

— Tabí desde siempre supe que yo te gustaba y lo confirmé muchas veces cuando íbamos de vacaciones con nuestras familias —me mira—. Te acuerdas que tu no querías alegarte de nosotros y siempre querías acompañarnos a todos lados

— Claro, porque quería estar alado de mi hermano —digo—. Y seguir sus pasos.

— Tabí, no me engañas siempre estuviste enamorada de mí y ahora que te estoy dando una oportunidad no la estas aprovechando —me dice algo molesto.

— Disculpa —me paro enojada—. Estas muy equivocado en todo lo que acabas de decir, tu solo eres y siempre te veré como el mejor amigo de mi hermano y nada más.

— Tabí deja de ser necia y acepta tus emociones —bebe un poco de su copa de vino—. Yo conozco a tu familia y sé que ellos estarían muy felices que yo sea su yerno.

— Disculpa, pero eres un completo idiota —tomo mi cartera—. Adiós —me doy la vuelta y empiezo a salir del restaurante.

No puedo creer lo que acaba de pasar, me esperaba eso de muchos chicos que conozco, pero no de Ryan, el mejor amigo de mi hermano.

Fin del Flashback

Meses después de ese mal momento me enteré por Matteo que Ryan se había comprometido con la hija de uno de sus socios de su padre, el compromiso y el matrimonio fue planeado por la familia de Ryan para poder salvar la empresa de muchas deudas.

Mi padre tenía la intención de comprar la deuda de la empresa de Ryan y así poder ser el socio mayoritario, pero al enterarse del matrimonio con la hija de ese socio lo dejo porque el suegro de Ryan pago todas las deudas de la empresa como regalo. Actualmente Ryan sigue casado, pero todo el mundo sabe que él le es infiel y que tiene muchas amantes, incluso hace poco Matteo le ayudo a salir de un gran problema con una de sus amantes, que al parecer lo trataba de chantajear con un supuesto embarazo.

— Si apareces a la hora de la ceremonia con tu cara totalmente roja no me caso contigo —le dice Sophie en un tono gracioso.

— Es mejor que le digas a tu maquillista que traiga mucho pero mucho maquillaje para que al menos parezca bronceado —digo mirando a Sophie sin dejar de reír.

— Tenlo por seguro

— Suegro ¿Usted que hizo en su despedida de soltero? —pregunta Matteo son dejar de reír.

— Mis amigos organizaron un viaje a las vegas y pues pasamos toda la noche apostando y bebiendo —sonríe—. Que buenos recuerdos.

— Y tu Edmond ¿Qué hiciste?
—pregunta John y luego bebe un poco de su copa de champagne.

— Pues algo tan loco no, se lo aseguro —se ríe Edmond—. Pero si fuimos a un bar y la pasamos toda la noche bebiendo y escuchando muy buena música.

Escucho eso y me rio internamente porque lo que dijo Edmond es una completa mentira. Meses después de casarnos Edmond me conto lo que realmente había pasado en su despedida de soltero.

En su despedida de soltero hubo de todo, alcohol, comida frita, música, apuestas y bailarinas exóticas, Edmond tuvo la tradicional despedida de soltero solo que el no llego tan lejos con las bailarinas, según Matteo el cómo mi "hermano protector" no permitió que eso pasara.

— Eso yo lo puedo corroborar —dice Matteo mintiendo.

— Mi amor —toma la mano de Matteo, Sophie—. Solo te pido algo, procura no quemarte toda la cara por el sol —dice con una sonrisa—. No quiero que después me digan que me case con un tomate —se ríe.

— Lo prometo —toma la mano de Sophie y le da un beso en el dorso de la mano.

La cena continua, seguimos hablando sobre diferentes cosas, pero el tema más hablando sigue siendo el casamiento de Sophie y Matteo, que está muy próximo y todos incluyéndome a mi estamos muy pero muy nerviosos, porque su boda será la boda del año.

Media hora después

De la nada veo como mis Padres se levantan y caminan hasta el frente, ahí mi madre levanta el micrófono y me hace una señal, de un costado empieza a salir dos camareros trayendo lo que al parecer ser es mi pastel de cumpleaños.
Tomo la mano de Edmond y ambos vamos hacia donde están mis padres, detrás de nosotros vienen también los demás invitados. Me acerco a mi Padre y el aprovecha para darme un beso falso en la mejilla, yo solo finjo sonreír y me pongo en medio de los dos.

— Muchas gracias a todos por venir a esta pequeña celebración en honor a mi hermosa hija.... Tabí, que cumple un año más de vida —dice "muy amorosamente"

Todos empiezan a aplaudir, mi hermano camina hacia nosotros y se para detrás de mí, ese momento es aprovechado por el fotógrafo y nos saca algunas fotografías, espero que no me etiqueten o me quieran dar copias de estás fotos, yo no quiero tenerlas.

— Hija —me mira—. No tengo palabras para expresar lo feliz que me hace estar a tu lado y verte crecer rodeada de amor y de felicidad —miente mi madre tan bien.

Mi Madre en un acto sorpresivo me abraza y yo trato de seguir fingiendo felicidad. Las palabras que mi madre acaba de decir solo son palabras, que no tienen ningún sentimiento y valor para mí, yo ya estoy acostumbrada a sus palabras frías y vacías —suspiro—. Mi Padre le pide el micrófono, el me mira fingiendo emoción y toma mi mano derecha.

— Mi hermosa hija, mi pequeña princesa —me dice mientras acaricia mi mejilla—. Soy el hombre más afortunado por tener a una hija como tú, siempre vas a ser mi niña, mi princesa, la niña de mis ojos.... aun estando casada —mira a Edmond con una sonrisa y todos se ríen—. En este día solamente queremos que recuerdes que tu madre y yo te amamos y puedes contar con nosotros siempre, esperamos que la pases rodeada de gente que te ama y que disfrutes este día tan especial ¡¡Muchas Felicidades!! —me da un beso en la mejilla.

Miro al frente y muchas personas están lagrimeando, de seguro muchos de ellos de verdad creyeron sus palabras, yo también creería cada una de esas palabras, pero como los conozco tan bien sé que esas palabras tan lindas son tan vacías a la vez, estoy 100% segura que lo han escrito otras personas, tal vez algún asistente de mi padre.

— Disculpen, Disculpen —mi hermano se acerca y toma el micrófono—. Yo también quiero decir algunas palabras —me mira con una sonrisa—. ¡¡Hermanita!! Mi adorada hermanita, siempre los dos hemos estado juntos, eres una de las personas imprescindibles en mi vida y solo quiero decirte que siempre estaré ahí para ti si me necesitas —me sonríe muy tiernamente—. ¡¡Feliz cumpleaños!! hermanita querida, eres lo mejor de mi vida —me abraza muy fuerte y escucho como muchos están suspirando como estúpidos.

En estos momentos solo quiero que este teatro se termine, necesito salir de aquí ya no quiero estar ni un segundo más con estas personas que solo mienten y fingen cosas que no sienten.

Uno de los camareros empieza a prender la pequeña vela que está en el centro del pastel y todos empiezan a cantar la famosa canción de cumpleaños, yo solo me paro y sonrió lo más falsamente que puedo.

Happy Birthday to you, Happy Birthday to you, happy Birthday Tabatha, happy Birthday to you
—terminan de cantar y todos aplauden. 

Algunos amigos se me acercan y me vuelven a dar sus felicitaciones, mientras los demás vuelven a sus lugares. Está muestra de cariño fingida hace que me empiece otra vez una fuerte migraña, Edmond se acerca a mi y me da un beso muy tierno, es la única persona en está sala que se que me ama de verdad.

— ¿Estas bien? —me pregunta algo preocupado.

— Si, no te preocupes —miento y tomo una de las copas de champagne que tiene uno de los camareros.

— No tomes mucho —me quita la copa y se lo toma todo

— Oye —finjo enojarme—. Era mío

— Lo era —me dice riéndose—. ¿Vamos? —me pregunta

— Adelántate, iré un minuto a mi antigua habitación, necesito arreglar un poco mi maquillaje y mi peinado —miento, la verdad solo quiero estar unos minutos sola y tomar una aspirina que calme mi migraña.

— Está bien pero no tardes, si no me lo comeré tu pastel.

— Tratare y tú también trata de comerte mi rebanada de pastel —le advirtió y doy un sutil beso en sus hermosos labios.

Edmond se va a nuestra mesa mientras yo voy a mi antigua habitación, necesito refrescarme un poco, tomar una aspirina y volver al circo que monto mi familia.

En menos de cinco minutos llego a mi habitación y al abrir la puerta me llevo una gran sorpresa, en la cama hay una caja con un peluche en el centro y unas rosas de color blanco, rosa y amarillo —sonrió al verlo.

Con algo de miedo y asombro me acerco, tomo el peluche en las manos y lo abrazo muy fuerte, un perfume algo dulzón siento en el oso, pero lo más raro es que ese olor de ese perfume me da la sensación que lo conozco, que en algún momento he sentido ese mismo perfume, pero no me acuerdo en donde o quien lo usa. A lado de este regalo hay una pequeña nota, lo abro y saco el pequeño papel:

"Hoy es un día muy especial para ti, hoy cumples un año más de vida, mi querida Tabí. El mundo es más hermoso desde que existes tú, nunca olvides de sonreír y ser feliz...... ¡¡ Feliz cumpleaños hermosa!! Te amo mucho"

Termino de leer la pequeña nota y estoy sorprendida, ¿Quién puede haber mandado este regalo?, ¿Quién ha podido entrar a mi habitación sin ser visto o vista? Esto ya me está preocupando porque desde que tengo memoria alguien siempre anónimamente me manda regalos, ¿Quisiera saber quién es esa persona? En medio de las rosas encuentro una pequeña caja roja, la abro y me sorprendo al ver una hermosa pulsera de oro y oro blanco, en medio hay una pequeña placa con mi nombre tallado.... ¿Por qué está pulsera se me hace muy conocida si es la primera vez que la he visto?

Todo esto me está provocando que mi dolor de cabeza sea más fuerte —me aprieto un poco el puente de la nariz y cierro los ojos esperando que se me pase un poco el dolor—. Será mejor que baje a la cocina y pida una aspirina. Dejo el peluche y la caja con el regalo en un costado donde están los demás regalos, después preguntare a los guardias si vieron quien me dejo este pequeño regalo en mi anterior habitación.

Ya en la cocina me acerco a Alice, la ama de llaves de mi familia, ella ha trabajado con mi familia desde que tengo ocho años, aunque parezca tonto ella nos conoce muy bien a mi hermano y a mí —sonrió con tristeza-. Un tiempo la consideraba más que una ama de llaves, ella en un tiempo fue mii confidente y amiga, pero me distancie de ella desde que me traiciono y le conto algo muy personal de Izan y yo a mi madre —me aguanto las ganas de llorar al recordar ese día fatídico.  

— Niña Tab..... Tabatha, ¿Necesita algo? —me mira con una sonrisa cálida

— Solo necesito una aspirina, mejor que sean dos antes que.... —digo seria, pero ella me interrumpe.

— Se te convierta en migraña, deja que lo busque...... creo que el botiquín lo deje por aquí ya que uno de los camareros se cortó la mano —me dice mientras busca en las gavetas

— Alice aquí está —dice una chica que no conozco

Alice toma el botiquín y lo abre, me da dos aspirinas y la otra chica un vaso con agua, muy rápidamente tomo el agua y la aspirina, espero que el efecto sea rápido y me quite este infernal dolor de cabeza.

— Muchas gracias

— De nada Tabí, perdón Tabatha y Feliz cumpleaños mi niña —me sonríe y trata de acercarse, pero me alejo.

— Gracias —digo aún más seriamente

— ¿Quieres algo más o necesitas otra cosa?

— Solo un poco más de agua, por favor
Alice me sirve un vaso más de agua y yo me la bebo solo que está vez más lentamente, porque por alguna razón me estoy empezando a sentir rara.

— Espero que tu madre no te haya......

— Es mi madre y sabes que siempre buscara el momento de hacerme sentir mal, pero ya estoy acostumbrada a sus tratos y palabras., en general estoy acostumbrada a este circo.

— Espero disfrutes de tu fiesta

— Gracias, tratare —me levanto y un fuerte mareo me ataca provocando que me vuelva a sentar en la silla de manera torpe.

— Tabatha, ¿Estas bien? —me dice muy preocupada Alice acercándose a mí.

— Si, si solo fue un pequeño mareo
—digo con los ojos cerrados y trato que la sensación de mareo se me pase.

— Llama a Edmond —le susurra a alguien Alice

— No, ya se me pasara —digo y me paro

Pero al pararme otra vez la sensación de mareo me ataca solo que está vez pierdo totalmente el sentido de la orientación además de que me siento muy confundida, mis fuerzas desaparecen y me dejo caer atrás perdiendo la conciencia o parte de ella.

Habitación de Tabí (Casa de sus Padres)

— Tabí, Tabí —escucho mi nombre y unos pequeños golpes en la mejilla

Poco a poco empiezo a reaccionar y abrir los ojos, frente a mi veo a un preocupado Edmond y aun costado de él está parada una persona desconocida

— ¿Dónde estoy? —pregunto confundida

— Tabí, mi amor —me toma de las manos Edmond—. Estas en la casa de tus padres, en tu habitación.

— ¿Qué paso? —me acomodo en la cama.

La persona que nunca lo he visto se me acerca a mi y me empieza a mirar fijamente, ¿Por qué está haciendo eso?

— Señora Williams, sin darse cuenta mezclo alcohol con aspirina —me dice muy serio y una mirada de reprocho.
Mierda, como no me di cuenta, no me percate que mezcle alcohol con medicamento —me tapo los ojos con el brazo derecho—. Es un error estúpido y tonto.

— ¿Cómo no te diste cuenta? —me dice muy calmadamente Edmond—. Nos asustaste

— Perdón, no me di cuenta —digo avergonzada

— Solo necesita reposo y dormir al menos unas ocho o diez horas para que se pase el efecto, si se siente muy mal o los mareos persisten llámenme.

— Está bien doctor, gracias —dice más tranquilo.

Edmond le da la mano y el hombre que al final resulto ser doctor sale de la habitación, Edmond con mucha delicadeza me da un beso en el torso de la mano.

— Lo siento, no me di cuenta

— Tranquila mi amor, fue un error muy peligroso, pero sé que no te diste cuenta.... será mejor que descanses y mañana te sentirás mejor y regresaremos a nuestro Flat.

— No quiero quedarme aquí, por favor regresemos al flat —digo mientras hago un puchero

— Mi amor....

— Por favor, por favor —suplico.

No quiero estar ni un segundo más en está casa y mucho menos en está habitación que jamás fue mía, quiero estar en mi flat con la única compañía que me importa, Edmond.

— Tabí

— Por favor, no quiero estar aquí.... No estoy cómoda en está casa.

Edmond resopla y se pasa la mano por el cabello despeinándose un poco, se ve más sexy con el cabello despeinado.

— Está bien, vayamos a nuestro Flat
—me sonríe y se acerca a darme un tierno beso

— Te amo

— Te amo, mañana mandare a que vengan por tus regalos

— Está bien

Edmond me sigue mirando dándome su hermosa sonrisa, con mucho cuidado le acaricio la mejilla y sonrió, lo único que alegra este día es ver a Edmond y su hermosa sonrisa.

❀~✿ ❀~✿ ❀~✿ ❀~✿

Me despierto con algo de pesadez, abro muy lentamente mis ojos y me doy cuenta que estamos en el flat, mientras veníamos aquí me debí quedar dormida y Edmond me trajo aquí. Aun siento un poco de mareo, pero no tan fuerte, solo un poco.... miro aun lado y me doy cuenta que Edmond está a mi lado durmiendo, me vuelvo a acomodar en la cama, pero está vez me acerco a Edmond, él se da cuenta y despierta.

— Descansa, mi bella esposa —susurra con la voz dormilona

— Buenas noches, te amo

Edmond se apega más a mí y me abraza con su mano derecha, estar en los brazos de Edmond me hacen sentir segura, una seguridad que hace mucho tiempo no sentí. Poco a poco el sueño me vence y me dejo llevar por morfeo al país de los sueños donde todo es felicidad.












🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆🔅🔆

Hola a todos, regrese 😸😸😸😸 se que tarde en actualizar y pido disculpas por mi tardanza, tuve problemas con mi compu pero ya lo tengo de vuelta.

Espero que les haya gustando, no se olviden de votar, comentar mucho y compartir.

Los quiero mucho J💜

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top