◌ ◌ ◌╰── - ̗̀ Capítulo 12 ̖́- ──╯◌ ◌ ◌
Estos días he estado pensando la manera de verme con Tabí sin que el idiota de su hermano nos descubra, el muy desgraciado puso a un hombre a vigilar a Tabí las 24 horas —aprieto mi mano formando un puño—. Como lo se…. pues ella me mando la foto del hombre que le persigue, a veces Matteo es un completo idiota y exagerado.
— Izan —Emma entra a mi oficina con un folder.
— Dime —dejo de lado mis lentes de descanso y la miro.
— En dos días vendrán los inversionistas a inspeccionar el terreno donde se llevará a cabo el proyecto y el señor Harrison me pidió que tú vayas con los de la delegación y que no te olvides de hablar con el ingeniero a cargo de la obra y subsanen algunos problemas que encontró.
— ¿Yo? —pregunto sin entender—. ¿Pero el arquitecto en jefe no es Mails?
— Él te puso a cargo del proyecto como arquitecto en jefe —me dice sonriendo.
Me quedo en shock al escuchar esa gran noticia, no pensé que las cosas iban a darse así de rápido. Tengo que aprovechar esta oportunidad y demostrar toda mi capacidad —sonrió de felicidad.
— Como te enteraste —digo aun procesando la noticia.
— El señor Harris dejo está nota para ti, no pude aguantarme y la leí perdón
—me dice algo apenada mientras me entrega la carta.
— Esto es la mejor noticia que pudo haberme pasado —digo mientras abro la nota.
Leo la nota donde dice que efectivamente me han dado el puesto de arquitecto en jefe y que yo tengo que viajar a mostrarles los planos del proyecto a los inversionistas y subsane los problemas que el ingeniero encontró…. Esperen, una idea se me acaba de ocurrí —sonrió de par en par.
— Emma tengo una idea para que la presentación del proyecto sea más dinámica y los inversionistas estén más seguros que su inversión está en las mejores manos.
— ¿Cuál? —se sienta frente a mí y no cambia su expresión de extrañeza.
— Hacer un video promocional, donde mostremos las proyecciones del proyecto y como será cada fase hasta la fase final.
— Pero eso ya se puede hacer con un programa de echo siempre lo hacen.
— Lo sé, pero quiero probar con una empresa de publicidad más profesional.
— Mmmmm —lo piensa—. No sería una mala de presentarles una promoción más profesional…. pero quien puede hacer ese trabajo en menos de dos días —me dice preocupada—. No creo que alguien lo haga en poco tiempo además de una manera profesional y sin fallas.
— Yo sé quién puede hacerlo —sonrió y me levanto—. Yo conozco a una empresa —tomo mi chaqueta.
— ¿A dónde vas? —se levanta
— Ha hablar con esa persona que puede hacer el video —digo y salgo corriendo.
Busco el número de Tabí y la llamo, pero no me contesta —subo a mi auto y empiezo a conducir hacia su oficina—. Vuelvo a marcarle y nada —golpeo el tablero—. Tabí no me contestara, al parecer será mejor que le llame de algún número privado u otro número.
Conduzco unas cuadras y veo un teléfono público —creo que será la mejor opción—. Estaciono y bajo del auto lo más rápido posible, marco el número de Tabí —espero que me conteste—. Escucho cuatro tonos y nada, pero en el quinto tono tengo suerte y me contesta Tabí
📞Llamada telefónica📞
— Hola, buenas tardes
— Hola Tabí mi amor
— ¿Izan? —me pregunta extrañada
— Si
— De que numero me estas llamando
— De un teléfono público, no quiero que tengas problemas con el estúpido de Matteo.
— Estás loco —me dice riéndose un poco.
— Por ti mi amor…. —cierro los ojos y me imagino besándola
— Por favor no digas esas cosas
— Está bien…. —sonrió—. Tabí, te llamaba para proponerte una forma de vernos sin que nadie se dé cuenta
— ¿Qué? —me pregunta extrañada
— Necesito los servicios de tu empresa de publicidad.
— Sigo sin entenderte.
— Necesito que hagas una publicidad sobre el nuevo proyecto que estamos realizando, tiene que ser para dentro de dos días.
— ¿Dos días? —me dice aún más sorprendida.
— Tranquila, te mandare las imágenes ya echas, tu solo lo pondrás música o esas cosas que haces en los videos.
— Izan —susurra—. Sigo sin entenderte
— Solo necesito que hagas un video de promoción y ya, uno que muestre las fases del proyecto. como esos videos que me gusta ver en internet.
— Ya te entendí, pero eso en que nos ayudara….
— En que tienes que viajar —la interrumpo—. Inventa algo y ven a la ciudad donde haremos el proyecto, solo serán dos días.
— Izan estás loco o que....
— No, solo son medidas desesperadas para verte…. La secretaria de la empresa te mandará el contrato tu solo fírmalo y ya, en ese contrato no estará mi nombre.
— Es arriesgado
— Pero es nuestra única manera de vernos
— Está bien
— Tengo un montón de besos, abrazos y caricias en pausa, para cuando pueda volver a verte —susurro lo más sexy que puedo y escucho como Tabí ahoga una risa.
— Te mandare todos los datos con la secretaria, tu solo inventa algo y ya
— Espero que funcione
— Y yo
— Adiós
— Adiós
📞Fin de la llamada📞
Ahora tengo que hacer la reservación del hotel y mandarle todos los datos para que la secretaria le envié a Tabí, sé que no es ético, pero necesito verla, volver a tenerla en mis brazos…. Más ahora que mis planes están en marcha.
Vuelvo a mi auto y noto que tengo un papel en el vidrio, me acerco y noto que es una multa de transito…. —Es enserio—. No tarde ni diez minutos ¡¡Haaaa!! —abro la puerta y entro, guardando la estúpida multa—. Meto la llave y mi auto no funciona, intento una vez más y nada —vuelvo a golpear el tablero del auto—. Muy pronto todo esto cambiara y me desharé de está chatarra —vuelvo a intentarlo y está vez funciona—. Mientras conduzco llamo a uno de los hoteles que existe en ese lugar y hago la reserva para dos días.
Se que no podemos quedarnos más porque si no desconfiaran, por lo menos tendré para mí a Tabí por dos días, luego volveré a buscar nuevas formas de vernos y si es verdad lo que escuche en la radio, Matteo estará más concentrado en la preparación de su Boda —rio sarcásticamente—. Pobre de la mujer que se casará con él, descubrirá que Matteo es la persona más falsa y mentirosa del mundo.
Diez minutos después
Llego a la empresa y le doy todos los datos a la secretaria, ella no entiende nada, jamás nadie ha hecho una cosa así para presentar un proyecto y más al inicio, lo que sí es más común es hacerlo al finalizar el proyecto y con el sector de publicidad que maneja la empresa.
— Esto aprobó el señor
— No, pero queremos probar cosas nuevas.
— Espero les funcione.
— Yo sé que será así —sonrió.
— Izan —escucho que me llaman
— Emma dime —la veo caminar hacia mi.
— Pudiste conseguir a la empresa.
— Si —digo y tomo la mano de Emma de manera sutil—. Me avisas cualquier cosa —le digo a la secretaria y ella hace un gesto de está bien.
Emma y yo nos alejamos, caminamos hacia el ascensor. Emma aprieta el botón y el ascensor se abre, solo entramos los dos. Emma se acerca y me da un beso muy apasionado…. Por decisión de Emma hemos decidido ocultar lo nuestro y hacer creer a todos que solo somos colegas y amigos, muy buenos amigos.
A mí la verdad no me importa ya que a Emma solo la quiero como una amiga y si finjo estar con ella es por “dar celos a Tabí” además de que me ayuda mucho en la constructora, siempre me cubre cuando tengo que salir de improviso.
— Tenemos que celebrar tu ascenso
—me sonríe
— Si, pero no creo que lo podamos hacer
— ¿Por qué?
— Mañana….
— Izan salgamos hoy, celebremos tu ascenso solo unas horas —me insiste.
La verdad es que Emma tiene razón, necesito salir a distraerme, celebrar mi ascenso y que estoy cada vez más cerca de mi meta.
— Esta bien —sonrió—. Está bien.
— Perfecto —me mira sonriente—. Te parece ir a cenar a algún lugar y luego ir a algún club.
— Emma solo dijimos unas horas.
— Entonces vamos a un club directo?
No puedo responderle ya que el ascensor se abre y ambos salimos, Emma me hace una señal de después hablamos y se va a su escritorio supongo a terminar algún proyecto atrasado. Yo regreso a mi escritorio y empiezo a realizar unos planos de unos clientes y que tengo que entregar en unos días, es mejor que termine más antes ya que me iré con Tabí o eso espero.
Una hora después
Por suerte termino los planos que tenía pendiente entregar en toda la semana, así que no tendré ningún problema en irme unos días con Tabí. ¿Será que mi secretaria ya le mando toda la información? Será mejor que la llame —busco mi teléfono—. Pero el teléfono suena antes que yo busque el numero de la secretaria
📞Llamada telefónica📞
— Señor Miller
— Dime
— Ya llamé a la empresa y ya le mandé el contrato.
— Perfecto, muchas gracias —sonrió—. ¿Ya firmaron?.
— No o se aun, pero supongo que lo harán en los próximos minutos.
— Muchas gracias, ni bien llegue el contrato mándalo a mi oficina.
— Está bien señor Miller
📞Fin de la llamada📞
Espero que Tabí haya aceptado, escucho el sonido de un mensaje, rápidamente desbloqueo mi teléfono y noto que es un mensaje de Tabí
—sonrió.
Mensaje de texto
— Acabo de firmar el contrato, ya tengo todo planeado para decirle a Edmond. Mañana a las dos de la tarde nos veremos en el lugar que me dijiste.
Vuelvo a leer el mensaje y una sonrisa boba no sale de mi cara. Mi plan está funcionando y mañana me podré ver con Tabí. Busco las imágenes ya pre hechas que tenemos y le mando a su correo, claro le mande usando el correo de la constructora —sonrió.
— Izan mi amor —entra Emma sin tocar
— Dime
— Como sé que te ibas a decidir a donde ir a festejar tu ascenso, decidí yo —se acerca.
Esa idea no la sacare de la mente de Emma así que tendré que salir con ella hoy, saben ahora tengo más ganas de ir, porque en unas cuantas horas volveré a tener en mis brazos a Tabí.
— Y donde decidiste que iremos está noche —Emma se sienta en mis piernas
— Iremos al Club Marquee —me da un beso fugaz.
— Nunca había escuchado de ese Club
— Es muy bueno, pasan muy buena música.
— Pero te recuerdo que solo iremos unas horas.
— Me conformo con festejar dos horas
— Será mejor que nos vayamos y nos alistemos además tengo que alistar mi maleta
— Es verdad —me dice y mira su reloj—. En una hora salimos, pero como tú tienes que ir a alistar tu maleta vete, yo te cubro —me dice y yo sonrió
— Eres la mejor —Le doy un beso y ella me sigue.
Nos besamos así tan pasionalmente por unos buenos segundos hasta que escuchamos que tocan la puerta. Emma rápidamente se levanta y se sienta en una de las sillas
— Adelante —digo.
— Señor Miller —entra la secretaria y se sorprende al ver a Emma—. Aquí está el contrato —me entrega el documento.
— Muchas gracias, lo firmare y lo mandare a archivos.
Emma me mira sin entender y la secretaria sale rápidamente no sin antes de vernos a los dos de una forma un poco rara.
— ¿Contrato? —me mira sin entender
— Si —digo mientras firmo—. El contrato con la empresa de publicidad —me paro y tomo mis cosas.
— Ya te iras —me mira.
— Si llevare este documento a archivos y me iré —me acerco y le doy un beso fugaz.
— A las 10: en el club Marquee —me dice y me devuelve el beso.
— Allí estaré —le guiño un ojo y salgo de mi oficina y me voy a la sección de Archivos
Como siempre la chica encargada me ve y me sonríe, no negare es hermosa pero no es mi tipo, alguna vez trate de invitarle, pero no me hacía caso, tal vez ahora que sabe que me ascendieron me está haciendo caso —me rio sarcásticamente.
— Edmond felicidades por tu ascenso
— Gracias
— Espero que si haces alguna fiesta me invites.
— Tal vez cuando llegue de mi viaje
—firmo el libro donde se anotan los datos y me voy.
En definitiva, ahora me hace caso porque sabe que me ascendieron. Hasta ahora no puedo creerlo —sonrió—. Está oportunidad no lo dejare escapar.
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Estoy en mi Flat ya preparé mi maleta o bueno una parte, no soy muy bueno para esto. Solo tengo una hora para alistarme e irme a festejar con Emma, solo estaré dos horas o una hora y me regresare, tengo que llegar temprano a Boston, así aprovechare más tiempo para estar con Tabí —sonrió tontamente—. Entro al baño a darme una ducha rápida, tengo poco tiempo para arreglarme, no es que tarde mucho en arreglarme, pero el tráfico de New York es lo malo, si no me apuro, sufriré el congestionamiento de la hora pico y eso a cualquiera lo deja con mal humor y no quiero estar así.
Salgo del baño con una toalla enredada en mi cintura y empiezo a buscarla vestimenta que escogí para mí, no quiero estar muy elegante pero tampoco muy desarreglado así que escogí la mejor opción —sonrió—. Una camisa color verde militar, unos jeans negros rotos con unas zapatillas blancas, me miro en el espejo ya vestido y me gusta lo que escogí, no están clamoroso ni tan sencillo, creo que está bien. No entiendo como otros van demasiado producidos, como el estúpido esposo de Tabí —ruedo los ojos—. El solo quiere llamar la atención, si supiera que vestido así solo da pena.
Me termino de arreglar, me pongo mi reloj, busco mi billetera y reviso si tengo efectivo, por suerte si tengo no quiero tener que ir a un cajero y sacar, exponiendo mi contraseña o mis datos personales en un cajero automático no muy seguro.
Me fijo mi hora y veo que tengo media hora para poder salir, tomo mi teléfono y salgo de mi departamento, afuera ya en la calle le hago señas a un taxi que para mi suerte para.
Le doy la dirección del bar que me mando Emma, espero que ella no haya llegado aún, no me gustaría encontrármela sola. No sería muy caballeroso de mi parte.
Minutos después
Estoy mirando las calles de New York, viendo a las personas caminar. El taxi se para supongo por luz rojo y veo a una pareja de chicos no más de 20 años, caminando felices, lo que me llama la atención es ver la polera de la chica, es de la banda Marron 5 —sonrió—. Ese pequeño momento me hace recordar uno de los mejore momentos que pase antes de dejar a Tabí.
Flashback
Estoy yendo al flat de Tabí que tiene en la universidad, este es nuestro primer año de ambos, a mí me aceptaron en la universidad de Boston y nos tuvimos que separar, pero cada fin de semana yo vengo a verla. Está vez estoy más desesperado de verla porque Tabí tuvo una fuerte discusión con su familia y al parecer Matteo fabrico pruebas de que yo engaño a Tabí cosa que es mentira. Su familia no me acepta y jamás me aceptara.
Me pude escabullir y nadie me ha visto, toco la puerta, escucho como alguien se acerca y yo me hago a un lado. Conociendo a Tabí como la conozco sé que al verme no me querrá abrir. Escucho como desasegura y abre la puerta, es mi oportunidad.
— Si —dice con una voz apagada
Me acerco a ella y en un movimiento muy rápido, he entrado a su departamento cerrando la puerta detrás de mí. Lo primero que puedo ver es a Tabí con los ojos hinchados y rojos de tanto llorar, solo lleva una camisa del último concierto de Marron 5 que fuimos y música triste de fondo, Tabi siempre pone música triste cuando está mal, si pones atención a la música que escucha te darás cuenta del humor que está.
— ¿Qué haces aquí Izan? ¡¡ Vete!! —se aleja de mi tacto.
— Tabí —trato de acercarme, pero se aleja más.
— ¡¡Vete!! Y déjame sola —empieza a llorar.
— Tabí no es lo que parece, tu estúpido hermano saco esas fotos para....
— No seas mentiroso —me intetrumpe Tabí y saca de un cajón lo que creo que son las fotos—. Dime acaso son trucadas —me las tira en la cara
Recojo las fotos del suelo y me llevo una gran sorpresa, las fotos si son reales, pero fueron sacadas de contexto.
— Tabí ella es mi compañera de curso —digo—. El día que nos tomaron está foto ella y yo estábamos haciendo un trabajo practico y tuvimos que quedarnos toda la noche haciéndolo ya que nos equivocamos.
— Izan no mientas, tu recién estas en primer año y aun les están enseñando.
— Tabí no miento —insisto.
Y es verdad, uno de los docentes nos pidió que hagamos un modelo a escala, esos que hacen los niños, a nosotros nos tocó una iglesia. Según el docente nos ayudara a tener mejor motricidad, cosa que no creo.
— Mientes, tú siempre, mientes —Tabi se sienta en el sofá y empieza a llorar.
En este momento no saben cómo quisiera tener a Matteo en frente y darle unos buenos golpes, no sé porque se mete tanto en nuestra relación, porque no se ocupa de su vida.
— Tabí
— No —me mira muy triste—. Toda mi familia se unió para burlarse, quede como una estúpida, ingenua que nadie….
— No lo digas —me enojo.
— Mi madre no perdió la oportunidad de humillarme y mostrarme que nadie me….
— Tabí —me arrodillo frente a ella—. Mírame, mírame —le pido—. Ella es una compañera de curso, si quieres llámala y pregúntale, si tengo algo con ella te lo corrobora
— Izan tu pudiste decir que mienta
— Tabí, nos conocemos desde hace dos años y dime cuando en esos dos años te engañe —digo ofendido.
— Nunca pero....
— Caíste en el juego de tu hermano y tu Padre para separarnos.
— Mi madre tenía razón soy una estúpida —empieza a llorar más
En estos momentos me dan unas ganas de haber detenido a Tabí y que no hubiera ido con su familia, cada vez que va con su familia siempre llega así. Nunca entendí el trato que le dan a Tabí, ella es su hija, pero muchas veces actúan como que…. —alejo ese pensamiento.
— Tabí, tú no eres eso y lo sabes —me siento a su lado y la tomo de la cara—. Tu eres la mejor chica que conozco, no dejes que tu familia te menosprecie y te haga sentir mal. No les prestes atención a sus tonterías que solo lo hacen para molestarte
— Es mi familia y la quiero, pero no creo que soporte más sus malos tratos
— Ven aquí Tabí —me siento a su lado y la abrazo—. Solo piensa en ti y no en tu familia.
Tabí me abraza muy fuertemente y empieza a llorar. Es mejor que saque todo su dolor que fueron causados por su familia.
— Ven —la paro y limpio sus lágrimas—. Ve a lavarte la cara, tus ojos están muy rojos.
Tabí me sonríe muy tiernamente y empieza a caminar a su baño, pero yo la detengo sujetándola la mano, ella me mira y yo me abalanzo para besarla, Tabí salta un poco y enreda sus piernas a mi cintura, sin dejar de besarnos yo la llevo a su habitación.
Dejo en la cama a Tabi y ella me mira con una sonrisa juguetona. Creo que el mundo está a nuestro favor porque hasta la canción que está sonando está acompañando nuestro momento. Me acerco a Tabí con mucho cuidado, no quiero aplastarle, Tabí me empieza a besar más apasionadamente, dejo de besarla y empiezo a besarle el cuello provocando que Tabí se excite y se encorve, bajo poco a poco dejando un camino de besos, Tabí solo ahoga ruidos de placer.
Tabí se remueve y hace que me detenga, me paro sin entender su accionar. Tabí se arrodilla en la cama y baja sus manos para tomar los pliegues de su polera, en un acto muy atrevido Tabí aprovecha la canción y poco a poco sube su polera, yo solo puedo verle asombrado y embelesado, Tabi me deja ver que no lleva sujetador y eso me pone más caliente…. Sube y sube….
Fin del Flashback
La voz del taxista me saca de mis pensamientos, yo lo veo sin entender nada, miro a un costado y noto el nombre del Bar. Acabamos de llegar…. Con un demonio porque tenía que hablarme justo ahora.
— ¿Disculpe que me dijo?
— Son 25 dólares
— Oh, lo siento —digo y le pago lo que me dijo.
Bajo del taxi y busco con la mirada a Emma, para mi suerte ella aún no ha llegado. Puedo ver que en la entrada hay una fila un poco larga, están esperando su turno para entrar al club, creo que tendremos que esperar como media hora para entrar —suspiro fastidiado.
Un taxi se detiene frente a mí y de este baja Emma, yo me quedo sorprendido al verla…. Emma esta hermosa, muy hermosa —no lo voy a negar—. Está usando un vestido negro corto y ajustado que expone su hermosa figura trabajada, lleva una pequeña cartera a juego a su vestido, esta vez trae el cabello suelto perfectamente ondulado, ahora que lo pienso muy pocas veces la he visto con el cabello rizado u ondulado y diré que le queda muy hermoso, me gusta verla así, hace resaltar más su belleza.
Muchos chicos que están a mi alrededor la ven y se quedan embelesados con su belleza y muchos otros con la boca abierta, no es para menos —sonrió de lado.
— Mi amor —se me acerca y me da un beso—. Perdón por tardarme.
Mientras nos besamos pongo mi brazo en su cintura demostrando que ella viene conmigo y que no está sola. Se que en este momento soy la envidia de muchos.
— Tranquila yo acabo de llegar.... pero creo que tendremos que esperar —digo y le muestro la fila que cada vez crece más.
— No te preocupes de eso porque estamos en la lista para entrar —sonríe.
— Enserio —digo super sorprendido.
— Si, el novio de una de mis amigas es el gerente y me ayudo a poner nuestros nombres en la lista.
— Entonces que esperamos —digo contento.
Emma entrelaza su mano con la mía y ambos caminamos hacia la entrada. Emma se acerca al guardia de seguridad o, mejor dicho, el encargado de dejar entrar a las personas, ella le entrega su carnet y el guardia de seguridad con el carnet de Emma revisa la lista y encuentra su nombre o mejor dicho nuestros nombres. El guardia de seguridad se hace a un lado y nos deja entrar, veo a un costado y noto muchas miradas de enojo y escucho hasta algunas reclamaciones de parte de los que están haciendo fila y llevan horas esperando su turno de entrar.
Entramos y yo me quedo sorprendido al ver lo bien estructurado y diseñado que está el bar. A un costado está el bar y algunas mesas con dos asientos, en la parte del centro hay dos sofás largos. Por encima a los costados hay plataformas que se accede subiendo por gradas donde las personas pueden bailar. Muchas personas ya están bailando, sentados, bebiendo, etc. el sonido de la música es retumbante pero soportable, es un lugar agradable, me gusta. Emma y yo nos acercamos a la barra ya que hay dos lugares disponibles juntos.
— ¿Que van a tomar? —nos pregunta el barman.
— Mmmm creo que empezare por un Martini —dice Emma.
— A mí me das un Old Fashioned.
El barman asiente con la cabeza y se acerca a otros para escuchar sus pedidos mientras hace los nuestros y alguno que otros malabares impresionantes.
— ¿Te gusta? —me pregunta sonriente Emma mientras me muestra el club.
— Si —digo mientras veo algunas cosas que me dieron ideas para proyectos futuros de clubs.
— Lo sabía —Emma se acerca y me empieza a besar.
Yo le sigo el beso, pero no por mucho ya que el barman nos interrumpe poniendo nuestras bebidas frente a nosotros, saco mi billetera y le pago, Emma me hace una seña y ambos con nuestras bebidas nos vamos a unas mesas con sillas.
Mientras caminamos hacia ahí algunas chicas me miran, me sonríen, algunas me guiñan un ojo…. en resumen, me están coqueteando —me rio bajito—. Yo solo las veo de costado y les sonrió de lado.
Lo que si no me está gustando para nada es que mientras caminamos muchos hombres la ven de pies a cabeza y estoy muy seguro que si la dejo un rato sola algún idiota se le acercara, Emma esta tan hermosa que a opaco a muchas mujeres de este club. Ya sentados en los sofás, Emma levanta su copa y me mira con una sonrisa.
— Por el nuevo arquitecto en jefe
— Por el nuevo arquitecto en jefe, yo
—repito y ambos tomamos un gran sorbo de nuestras bebidas.
Hasta ahora no me creo mi ascenso y lo sigo procesando, no pensé que todo iba a realizarse tan fácil. Ahora mis planes están cada vez más cerca de realizarse….
Horas después
La música y el ambiente ha empezado a mejorar. Todos o mejor dicho muchos están en la pista de baile incluido yo
—rio bajito—. Emma me rogo tanto en bailar un poco así que no pude negarme. Emma es una gran bailarina, sus movimientos son muy atrayentes…. yo solo trato de seguirle porque yo soy de bailar poco, no se bailar muy bien.
Escuchamos un grito de todos cuando cambian la canción y empieza a sonar otra, pongo un poco de atención y me doy cuenta que una de las últimas canciones de Black Eyed Peas con colaboración de Maluma, está canción la he escuchado mucho por eso la reconozco. Emma da unos saltitos y empieza a bailar más apegada a mí ya que más personas entraron a la pista a bailar.
Emma empieza a contonear sus caderas y levanta las manos, yo me acerco más a ella y trato de bailar lo mejor que puedo, Emma me mira y se ríe, se acerca y me roba un beso. Una chica de su lado empieza a saltar y Emma la copia. No negare la canción es pegajosa y tanto que la he escuchado me la sé, de memoria así que empiezo a cantarla.
— Ella tiene un culo grande pero natural, Ella dice que lo heredó de su mamá y yo se lo creo porque por lo que veo, rompe la disco con ese meneo
—canto mientras veo como Emma mueve sus caderas en pequeños círculos coincidiendo con el ritmo de la música.
Mientras bailamos veo como muchos de los hombres tratan de acercarse a Emma, pero ella está más concentrada en sentir la música y bailar a ritmo. Una chica choca con ella y ella se da la vuelta, se disculpa con Emma yo me acerco, pero ya todo está solucionado, Emma vuelve a bailar, pero se pega a mi y empieza a bailar, pongo mis manos en sus caderas y empezamos a bailar más pagadamente.
Emma empieza a hacer movimientos muy provocativos y empiezo a excitarme —gruño—. No soy de palo así que aprovecho está situación para besarla en el cuello mientras seguimos bailan claro sin dejar de sujetar sus caderas —espero que nadie se haya dado cuenta—. Emma al fin se da la vuelta y me empieza a besar muy apasionadamente, yo solo la atraigo más hacia mí y sigo mi beso. Emma se aleja de mí y toma mis manos, ella contonea sus caderas hacia abajo, yo trato de copiar su forma de bailar, pero me sale muy mal y todos se me ríen. Creo que ya bailé suficiente además necesito un baño tengo un pequeño problema que tengo que solucionar. Me acerco a la oreja de Emma.
— Iré al baño —susurro—. Sigue bailando.
— Está bien —me roba un beso y sigue bailando con un grupo de chicas que recién conoció y se hicieron buenas amigas —ruedo los ojos y sonrió bajito.
Mientras voy al baño noto a lo lejos a una persona creo conocida mía, que esta con una cara de aburrimiento. Curioso me acerco más y me llevo la sorpresa que esa persona es un gran amigo....
— ¿Liam? Liam Davis —me acerco a ese hombre.
— Si ¿Qué quiere? —me pregunta enojado y me mira mal
— Como no te acuerdas de tus amigos de universidad, compañeros de habitación…. —digo elevando la voz ya que está sonando más fuerte la música.
Me mira de pies a cabeza, al parecer no me reconoce —es que cambie un poco y rebaje un poco de peso—. Hago una señal con las manos que solo conocemos —espero no haya olvidado este saludo secreto.
— ¡¡No!! No…. Izan Miller —me mira sorprendido—. Si eres tú….
— Si —digo y ambos nos damos un saludo fraternal.
Hace mucho que no veo a mis amigos de habitación, con ellos hice muchas locuras y fuimos a fiestas tan épicas que solo nosotros lo tenemos en el recuerdo.
— No puedo creerlo, yo pensé que ya no iba a volver a verte —sonríe—. Te fuiste y nunca más supimos de ti, ni un Email, ni un mensaje de Texto o alguna solicitud de amistad en alguna red social.
— Perdí el contacto de todos ustedes y más me enfoqué en terminar mi carrera
— ¿Que estas tomando? Deja que te invite otra bebida
— Dale, estoy tomando un Old Fashioned.
Liam hace una seña y un chico que creo que es un mesero se acerca a nosotros y toma nuestro pedido.
— Cuéntame ¿Cuándo volviste? —me pregunta mientras termina su bebida que creo que es Whisky Sour.
— Casi dos años —respondo.
— Y no nos llamaste —me dice fingiendo enojo.
— Como te dije perdí todos mis números de contactos, pero dime ¿Porque estas con ese humor?
—cambio el tema de conversación.
— Que te digo.... —suspira cansadamente—. Cosas en el trabajo.... pero, por cierto —sonríe—. escuche que le diste una gran paliza a Matteo Lougthy.... Felicidades
— Gracias —digo involuntariamente.
Esperen, esperen…. Liam como sabe que tuve una pelea con Matteo —abro mis ojos de par en par y lo miro sorprendido.
— ¿Cómo sabes que...?
— Yo trabajo ahí Izan —me interrumpe—. Soy uno de los abogados del buffet Lougthy.
— ¿Que? —me quedo sorprendido.
— Sí y te diré algo…. muchos te agradecemos la paliza que le diste a Matteo Lougthy —sonríe—. Solo que no logro entender el, por qué —me mira y entrecierra los ojos.
— Solo te diré que tengo asuntos personales con ese idiota —digo algo enojado.
— Quien no lo tiene
— Tu tam...
— Yo lo detesto —me interrumpe—. Él es un aprovechado, niño de papi —gruñe enojado—. Él se aprovecha del trabajo de otros y si el caso se vuelve importante, te lo quita y se lo da a uno de los más altos y reconocidos abogados, a ti te da otro caso insignificante nada relevante.
— No te puedo creer —me sorprendo aún más.
— Y su padre es peor, los dos son un asco de personas, no tienen escrúpulos ni moral.
— Si no lo supiera —ruedo los ojos.
— Quisiera destruirlos.... —aprieta su mano volviéndolo un puño.
Trato de decir algo, pero somos interrumpidos por el mesero que trae nuestras bebidas que le habíamos pedido. Sabía que muchos de sus empleados de Matteo lo odiaban, con el tiempo Matteo se ha hecho odiar con muchas personas, jamás pensé tener tan buena suerte. Tengo que aprovechar esta nueva oportunidad que tengo para destruir a la familia Lougthy, claro menos Tabí, mi Tabí.
— Todos en esa familia son unos interesados —me dice y toma un buen trago de su bebida.
— ¿Todos? —pregunto mordiéndome la lengua para no decir menos Tabí.
La única normal en esa familia es Tabí, la única que no ha sido salpicada con lo malo de esa familia es Tabí.
— Si, ninguno se salva…. Por ejemplo, la hija menor de George Lougthy, la hermana de Matteo se casó con el único hijo de la familia Williams.
— ¿Qué? —finjo sorpresa—. Eso yo no sabía —miento.
— Si…. días antes que se casaran, George Lougthy y Edward Williams se reunieron y firmaron un contrato.
— ¿Contrato?
— Si, se rumorea que fue un acuerdo entre los dos en caso de divorcio o algo así.
— Un acuerdo prematrimonial supongo
— No, ellos no firmaron eso —me dice y yo me sorprendo aún más.
— Para resumirte, los dos hicieron un trato millonario —me hace una señal para que me acerque más a el—. El bufete de abogados Lougthy lleva todos los casos y realiza los contratos de la constructora Williams, todos los contratos legales lo maneja el buffet.
Me quedo más sorprendido, jamás lo hubiera pensado…. Bueno si la idea se me paso, pero escucharlo de alguien que trabaja ahí me dejo más que sorprendido.
— Pero esos dos parecen muy enamorados.
— Jajajaja —se ríe—. Eso te hacen creer, pero estoy seguro que la hija supo muy bien con quien casarse…. Es igual a su madre de interesada.
Al escuchar eso me dan unas ganas de golpearlo y decirle que nunca más en us vida compare a Tabí con esa mujer que dice llamarse su madre. La Madre de Tabí es una persona sin sentimientos y sin escrúpulos igual que su esposo.
— Liam —digo con la voz elevada.
— Dime —deja en la mesa su bebida
— Quiero destruir a la familia Lougthy y quiero que me ayudes…. —lo miro esperando su respuesta.
Si acepta sería una gran ayuda, así supiera que contratos y con qué empresas están haciéndolo. Digamos que tuviera informacion de primera mano y me adelantaría a ellos. Liam me ve asombrado y vuelve a tomar de su bebida, se limpia un poco la boca y deja su copa en la mesa.
— Te ayudare —me responde muy seguro y yo no dejo de sonreír.
Tomo mi bebida y la levanto, el hace lo mismo y ambos con sonrisas de alegría brindamos. Ya está empezando mi venganza y muy pronto veré a Matteo y su Padre rogándome……
Emma se acerca dónde estoy y se sienta a mi lado, Liam se sorprende al verla y la come con los ojos cosa que me molesta.
— Izan me pides una bebida.
— Toma la mía —le paso mi copa—. Está un poco fuerte.
— ¿Izan? —me pregunta Liam
— Liam te presento a mi novia, Emma —los presento—. Emma, mi amigo y compañero de cuarto en la universidad Liam.
— Un placer —dice Emma.
— El placer es mío hermosa dama.
Estos años que ha pasado no ha cambiado nada a Liam, sigue siento osado y atrevido, por su carácter tuvo muchos problemas con muchas chicas y muchas veces tuvo peleas con los novios de algunas. Yo tuve que meterme en algunos…. Emma se ríe de una forma que jamás la había escuchado, me fijo bien y noto que ya está algo pasada de copas —me sorprendo—. ¿En qué momento tomo tanto? De seguro su bebida estaba algo fuerte, me fijo mi reloj y veo que ya es tarde si quiero llegar temprano a Boston tengo que irme.
— Emma nos vamos —susurro y ella me mira sin entender.
— No quedémonos un poco más.
— Tengo que conducir tres horas mañana —susurro y veo como hace un pequeño puchero—. Liam amigo te dejo mi tarjeta, cuando regrese de Boston nos reuniremos para hablar —digo y le extiendo mi tarjeta donde están mi número de teléfono y correo electrónico.
— Claro amigo, está es mi tarjeta —me entrega la suya.
Me paro y tomo la mano de Emma, ella se despide de Liam que no aprovecha de verle de pies a cabeza. Emma se cuelga a mi cuello y no deja de besarme mientras salimos a fuera.
— No quiero irme aun me la estaba pasando muy bien —protesta.
— No ya estás un poco borracha.
— Yo me quedare —trata de entrar, pero la detengo.
— No, no te dejare sola….
No puedo mandarla sola a su flat en un taxi, le puede pasar algo así que no hay de otra, Emma tendrá que venir a mi Flat. Hago una señal y un taxi se detiene, con algo de dificultad Emma entra y yo le doy la dirección de mi Flat al taxista.
Media hora después
En poco tiempo llegamos a mi Flat, le pago su tarifa y con mucho cuidado bajo a Emma, ella solo se apega más y no deja de reírse. La bebida que le dio se le subió muy rápido a la cabeza o tal vez alguien le dio otra bebida y al mezclarlo se le subió más rápido.
Con algo de dificultad llegamos a mi departamento, Emma no deja de darme besos en la mejilla, cuello y en la boca. Voy a preparar un buen café, un café cargado de ser posible. Abro la puerta y decido cargar a Emma, dando una patada hacia atrás para que se cierre la puerta. Pongo a Emma en mi sofá.
— Noo —gruñe mientras se aferra más a mi cuello.
— Emma estas un poco pasada de copas, te preparare un café.
— No quero café….
— Emma —me separo de ella.
Voy a mi cocina y empiezo a preparar el café. Por suerte tengo café instantáneo así que solo necesito poner a calentar el agua. De rato en rato me asomo y me fijo a Emma. Fue una buena idea salir hoy, sin querer conseguí un gran aliado para mi venganza.
En menos de lo que pensé el agua ya está hervida, preparo el café para Emma y voy donde ella, me llevo una sorpresa que no está…. Preocupado me acerco y noto que Emma está dormida —paso mi mano por mi cabello—. Dejo de lado el café y con mucho cuidado levanto a Emma y la llevo a mi habitación —estará más cómoda—. La dejo en la cama y la tapo con una cobija y regreso a la sala. Para no desperdiciar me tomo el café y me echo en el sofá. Ni bien apoyo mi cabeza en la almohada que me traje me empiezo a dar sueño. Mañana será un día magnifico, podre estar unos días a solas con Tabí….
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Espero que les haya gustado. Muchas Gracias a todos por leer, votar y comentar, me ayudan a no desmotivarme
Tengo una preguntita: ¿Matteo a que es alergico?
La primera persona que conteste bien le hare una dedicatoria en el Cap. 14
😁😁😁😁😁
Las quiero J💜
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