Los dedos largos de Taehyung toman con delicadeza su mejilla y Jungkook siente que se le escapa todo el aire del cuerpo.

Quiere ser fuerte y alejarse, retroceder hasta la puerta que ya han cerrado y huir lo más lejos que pudiese y donde Kim Taehyung nunca pudiese acercarse de nuevo. Sin embargo, se queda quieto, sintiendo el toque suave del mayor sobre su mejilla mientras sus alientos se entremezclan brevemente, demasiado cerca como para no abrumarse por la colonia de Tae.

¿Por qué no puede ser más fuerte? ¿Por qué no puede decir que no?

Están tan cerca que tiene el impulso estúpido de cerrar los ojos y esperar que Taehyung le bese, que le dé siquiera aquel premio de consolación como lo hizo por tanto tiempo. Quiere echarle las manos al cuello y decirle que no importa, que haga con él lo que quiera siempre y cuando haga algo.

No le importa, que le use y luego le deje porque entonces Jungkook podrá tener la certeza de que supo lo que era ser tocado y amado por Kim Taehyung, de haber rozado sus cuerpos así fuese durante un diminuto soplo de tiempo en sus vidas y sin que sus corazones hubieran llegado a tocarse.

Pero tan sólo espera, sus ojos fijos en el rostro de Taehyung, quien parece detallar con cuidado el suyo, sus ojos acariciando sus labios, sus mejillas y sus ojos. Haciéndole sentir por un breve instante como si fuese una joya digna de ser apreciada por los ojos críticos y puro del mayor, quien ya había sido testigo de personas hermosas en el pasado.

Personas que nunca se compararían con él.

.- Cuando te dije que quería disculparme... lo decía en serio – es Taehyung quien rompe el silencio cuando su mano suelta su rostro y en cambio, se cierra con la misma suavidad sobre su muñeca, jalándole hacia la cama más cercana – He querido disculparme desde hace mucho tiempo, pero...

Jungkook se muerde el labio inferior cuando le ve pasarse la lengua por los labios en aquel gesto tan típico de Taehyung cuando está pensando en qué decir o hacer. Conoce de memoria la mayoría de sus tics y sabe reconocer en él casi todos sus estados de ánimo o aquello que le llamaba la atención en algún lugar o persona.

Luego de tanto tiempo viéndole, Jungkook podía dibujar a ciegas un mapa de Taehyung.

.- Así que por favor, Kookie – Taehyung baja la mirada a sus manos, entrelazando sus dedos mientras lleva sus manos hasta su regazo – Perdóname, por favor.

No, no quiero... jódete.

.- ¿P-por qué? – pregunta con la voz algo estrangulada, él también baja la mirada a sus manos entrelazadas, la piel de canela contrasta con la suya y la imagen de sus manos juntas se le hacen tan bonita que quiere tomar una foto de ello - ¿Por qué te estás disculpando conmigo?

.- Porque sé que he sido un tonto contigo...

La fuerza con la que muerde su labio se intensifica mientras ahora alza la vista, fijándose en el perfil tan perfecto de Taehyung. No encuentra las palabras para decirle que no ha sido solo eso, sino que ha roto su corazón tantas veces que Jungkook está ya seguro de que nunca encontrará todas las piezas para  reconstruirlo.

¿Cómo decirle que gran parte de sus trozos se los llevo en las suelas de sus zapatos?

.- No me había dado cuenta de cómo me estaba comportando hasta que Jimin me lo dijo y eso me hace sentir aún peor – habla entonces el mayor, quien sigue sin levantar la mirada de sus manos que ahora aprieta con algo de fuerza – Sé que no soy la mejor persona del mundo, JK...

Y dale con tu JK, estúpido.

.- Pero no miento cuando digo que te quiero, Kookie – continúa el mayor, ahora provocando en él un sonrojo sutil que se instala en su rostro al tiempo que su corazón se acelera – Y no debí dejarte solo cuando dije que haría cosas contigo, tampoco debí ignorarte y... sé que lo de la fiesta no estuvo nada bien.

Jungkook contiene la respiración, tan sólo aguardando a lo que Taehyung tiene que decir sobre aquel momento en su relación. Aquel instante en que estuvo entre sus piernas y en el que Jungkook había estado dispuesto a dejarse llevar y entregarle todo, absolutamente todo, sin importarle el mañana.

.- Estabas mucho más borracho que yo y se supone que debía cuidarte – la voz de Taehyung se hace más suave y Jungkook tiene que acercarse para poder escucharle con claridad, siente el cuerpo del mayor temblar ligeramente – Me aproveché de ti, Jungkook... y eso está mal por encima de cualquier cosa.

Me aproveché de ti... Jungkook lo sabía, lo había sabido desde el momento en que todo terminó, pero no dejaba de doler el darse cuenta de ello. Porque no entendí qué había pasado, ¿cómo había pasado de sentirse en una nube de deseo a luego estar en el abismo de la indiferencia más atroz?

.- ¿Por qué? – es lo que pregunta cuando ve que Taehyung no dirá nada más y porque es algo que necesita saber - ¿Por qué me besaste esa noche?

El silencio que se extiende entre los dos le molesta, pero se da cuenta con facilidad que no depende ya de él. Si quiere escuchar la verdad, debe ser capaz de soportar ese silencio y Jungkook siente que no puede seguir adelante sin saberlo, que no puede decir que Taehyung está muerto para él si sigue volviendo en su mente a ese momento.

Aquel instante en el que casi fue de Kim Taehyung.

.- Porque estaba enojado – dijo al fin el mayor y esta vez, levanta su rostro para mirarle directamente y que sean sus ojos los que hablen por él – Estaba enojado contigo y con alguien más... pero más que nada, conmigo.

.- ¿Enojado conmigo...?

.- Jungkook, tú lo tienes todo – es la respuesta escueta de Taehyung, quien no deja de mirarle ni separa sus manos – Eres atractivo, dulce, inteligente... puedes tener a tus pies a quien quieras, sean mujeres o no.

Aquella frase le resulta irónica, pero Jungkook no le dice nada sobre cómo la única persona a la que quería estaba precisamente a su lado y no a sus pies.

Taehyung le dedica entonces una sonrisa, tan suave como tímida: .- Me refiero con eso a que estaba enojado porque yo no soy nada de eso y porque... porque alguien en quien yo confiaba rompió todo lo que le entregué sólo para demostrarme que yo no era nada.

Hay una especie de velo oscuro en lo que el mayor le está diciendo y Jungkook sólo es capaz de guardar silencio mientras se debate en sí debe abrazarle o seguir como están. Porque siente que su corazón no puede resistir una vez más de rendirse ante Taehyung, pero al mismo tiempo es el primero en pedirle que lo haga.

Siempre tan débil por Taehyung.

.- Tú me preguntaste esa noche por mi novio... yo ya no tenía novio, Kook – le dice al fin el mayor, su lengua volviendo a repasar sus labios con ansiedad – Esa persona en la que confiaba se metió en la cama de mi novio, Kookie. No una vez ni dos... sino muchas y... y era alguien en quien yo confiaba, ¿de acuerdo? Le entregué mi corazón a mi novio y a esa persona para que ambos lo destruyeran. ¿Entiendes eso?

Oh, claro que lo entendía... lo entendía tan bien.

.- No podía apoyarme en Jimin, ¿sabes? – la voz de Taehyung cobró algo de fuerza, casi como si necesitase decir eso en voz alta por primera vez – A él también le habían herido. Y entonces esa persona vino a mí para decirme que las cosas pasaron porque yo no había sido suficiente, Jungkook... porque yo nunca soy suficiente.

Su corazón parece detenerse un milisegundo producto del dolor que se transmite en la voz de Taehyung y Jungkook siente que es como verse al espejo, que lo que está escuchando de parte del mayor es todo lo que él se ha dicho una y otra vez en su cabeza por todos esos años en los que le ha visto de lejos.

Porque Taehyung era el villano de su cuento y ahora entendía que en el del mayor, había también un villano ya.

.- He tratado de seguir adelante, ¿vale? – sus ojos vuelven a bajar a sus manos y una sonrisa mucho más sincera se posa en sus labios – He salido y... disfrutado, pero supongo que todavía estaba muy enojado y sólo quería desquitarme por todo lo que me habían hecho, así que terminé haciendo lo mismo.

.- Hyung...

El mayor sacude su cabeza, deteniéndole para que le deje terminar: .- Por eso lo siento, Jungkookie. Porque pensé que podía estar contigo sin tener que preocuparme de nada y eso es imposible... sé que no sientes nada por mí y...

¿Qué...?

.- Y no quiero que nuestra amistad se dañe... - Taehyung aprieta sus manos y las levanta, mostrándole sus dedos entrelazados mientras le sonríe – No quiero perderte por mis actos estúpidos, quiero volver a tener a mi Kookie de siempre y que me tengas a mí. ¿Podrías... perdonarme?

Su corazón acaba de ser pisoteado nuevamente por esas palabras, cada una clavándose en él como si fuesen afilados puñales que no dejan sanar las heridas que ya tenía encima. Los ojos brillantes, la sonrisa tensa y sus manos entrelazadas... la imagen entera de Taehyung a su lado, tan sólo esperando por su perdón para volver a ser los mismos de siempre.

El amigo incondicional que en silencio sufrirá por él.

El amigo del que se despide con un beso en los labios y a quien abraza en las noches de frío.

El amigo de siempre... el fiel JK.

¿Puede hacer eso? ¿Puede volver a ello sin morirse lentamente porque lo tiene a su lado sin poder tocarle? Aquello suena tan cruel como lo ha sido en el pasado. Porque Taehyung seguirá perteneciéndole a otros y por más que él se muera de celos y dolor, nunca podrá decir nada... porque no es nada.

Y a pesar de todo eso, de saberlo y haberlo vivido; Jungkook asiente con una sonrisa.

Le perdona, le perdona todo.

Porque es mejor tenerlo como siempre lo ha tenido a no tenerlo nunca más. 

Holiiiiiiiiiiiiiiii.... 

¿Cómo andan? Yo por aquí, trayéndoles este capítulo que aunque es sencillito, espero les sea un poco más explicativo de cómo piensa Taehyung y cómo las cosas se irán encaminando de nuevo y así mismo, también vislumbramos un poco de qué es lo que ha pasado y ha alterado tanto las relaciones entre los miembros de BTS. 

¿Qué les pareció? ¿Qué opinan? ¿Confían en Tae? ¿Le creen? 

Ah, quiero saberlo todo. :3 

Y sin más por el momento, tengo que dormir y mañana terminar el capítulo de intermedios. (Tengo muchas ganas de contarles de algunos nuevos proyectos que estoy preparando). 

Les adoro.