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Rosalina en público:
Mario (toca el asiento a la par suya) : Te guardé el lugar.
Rosalina (sonriendo) : Gracias, Mario.
Ella se sienta a la par de Mario y le toma la mano bajo la mesa mientras conversan con sus amigos. Una ve que llega la comida, le suelta la mano y todo sigue con normalidad. La madre de los destellos mantiene una actitud seria y calmada, aunque un poco más amigable que cuando no está con Mario.
Rosalina en casa con los destellos:
Mario (toca la silla a la par suya) : Ya vamos a almorzar.
Rosalina : Mmmm ... creo que tengo una mejor idea ¿y si te sientas en mis piernas?
Mario : Hum ... claro, no veo porque no.
Mario se levanta del asiento y deja que Rosalina se siente. Acto seguido separa sus piernas y deja que Mario se siente en medio de estas, recostando su cabeza sobre su busto. Ella lo rodea con sus brazos y planta un beso sobre su cabeza.
Rosalina : Y ... ¿Qué tal, cariño?
Mario (suspira) : Tenías razón, es una mejor idea.
Rosalina suelta una risilla y toma una cucharada de la comida de Mario, dándole de comer. Él solo ríe y toma la cuchara de manos de su pareja. Rosalina pasa el resto del almuerzo con un humor más juguetón, siempre teniendo al menos una mano sobre el torso de Mario mientras ambos se turnaban para comer y darle de comer a los destellos.
Rosalina en casa y sola con Mario:
Mario (tocando el espacio a la par de él en el sofá) : ¡Ven! Ahora que los destellos están dormidos ya podemos ver esta película.
Rosalina : Claro, solo déjame acomodarme en mi asiento favorito primero.
Rosalina procede a sentarse sobre el regazo de Mario, tomándolo por sorpresa. Sin voltear a verlo, ella comienza a mover su trasero ligeramente de adelante hacia atrás y hacia los lados, y luego de unos segundos se queda quieta y mueve su rostro ligeramente hacia el lado para voltear a ver a Mario.
Rosalina (sonriendo de manera sensual) : ¡Listo! Ya estoy cómoda, mi amor ¿y tú?
Mario (medio ido) : ¿Y~yo? ... eh ... (mira hacia abajo) pues ... cómodo, por decirlo así.
Rosalina soltó una suave risilla, tras lo que subió sus piernas al sofá y se colocó de lado, rodeando el cuello de Mario con sus brazos y recostándose sobre el sofá al lado de él. Estiró sus piernas sobre el descansabrazos, pegó el rostro de Mario a su busto mientras lo abrazaba, y se quedó sentada sobre sus piernas.
Rosalina : ¡Listo! Ahora podrás ver la película sin mucho problema.
Ella entonces tomó las manos de Mario y las colocó sobre su cintura, tras lo que tomó el control remoto, pues él estaba terminando de procesar que tenía a Rosalina sentada en sus piernas y abrazada a él como si fuera una almohada.
Mario (pensando) : 'Quién diría que Rosy podía ser tan atrevida. A este paso creo que igual no terminamos de ver la película esta noche.'
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