Hasta ahora la fiesta esta transcurriendo con normalidad, las personas se siguen acercando a ellos para felicitar a la reina, ella hasta ahora se muestra como una persona muy pacífica y amable, no han dejado a Tae ni un solo segundo.
Tae les cuenta cómo es que le ha ido en su trabajo este año, ellos solo ríen y la reina le hace cariños a Tae.
Vuelven a sonar las trompetas. Los reyes y Tae vuelven a su posición original.

—Presentando a su alteza, el principe Min YoonGi.

Las puertas se abren y hacen una corta reverencia, el principe es alto –no tanto como su padre– de cabello negro, ojos a azules y gatunos, piel pálida , viste un traje rosa pastel, guantes blancos, su mirada es muy penetrante, entra y saluda a los presentes. Cuando llega a los tronos mira a Tae con molestia.

—Yoongi — Habla el rey, el príncipe se voltea. —Saluda a tu primo.

Juro que en ese mismo instante casi me caigo, ¿Primos? ¿El príncipe y Tae? Ahora entiendo porqué tantos mimos por parte de los reyes a Tae.

El principe se vuelve hacía Tae y se pone en frente suyo.

—Gusto en verte, V

—Tiempo sin verte, Suga. — La molestia en las palabras de ambos es más que notoria, el rey los sigue mirando, ambos se dan un rápido e incómodo abrazo.

El principe se pone en medio de sus padres, y sonríe indicando que sigan. Tae parece realmente incómodo, pero solo respira. Aún estoy sorprendido, no puedo creer que Tae y el príncipe sean primos, pero necesito calmarme, no puedo mostrarme sorprendido, mejor le pregunto después.

Los músicos empiezan con "Las cuatro estaciones" de Vivaldi, todos se levantan para comenzar el baile. El rey toma a la reina de la mano y ellos son los encargados de hacerse lucir en la pista.
El príncipe se acerca y le extiende la mano a una chica bastante linda, ella acepta, yo solo estoy mirando a los demás como se divierten, tal vez siempre lo recuerdo pero al ver a los reyes recuerdo a mis padres, no puedo evitar sentirme triste, los extraño demasiado, no puedo evitar pensar en ellos.

—¿En qué piensas? — Se acerca Tae.

—En mis padres, los reyes me recuerdan a ellos. — Sonrío. —Por cierto, ¿Por qué no me dijiste que tus tíos eran los reyes?

Él solo se ríe, parece que realmente se divirtió con mi comentario.

—Pensé que era obvio, cuando viste la foto creí que habías reconocido a la reina, ella es hermana de mi papá. — Sonríe.

Por el ruido de la música no puedo escuchar muy bien a Tae, así que hablaré con él después.
Cuando volteo para seguir vigilando, el olor a rosas llega de nuevo a mi nariz, pero esta vez es más fuerte. Estornudo.

-—¿Quién huele así?

—¿Oler cómo? Hay muchos alfas aquí.

—Ese olor, a rosas. — Tae me voltea a ver.

—Jimin, no hay rosas, no sé porque dices que huele a rosas.

En ese momento juro que el principe Yoongi nos quedó mirando, principalmente a mi, sé que no puedo juzgar a alguien por el solo hecho de haberlo visto una vez, pero siento que el príncipe es algo especial.
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Finalmente la fiesta llega a su fin y nos retiramos, estoy exhausto realmente lo único que quiero es llegar a dormir. Apenas cruzo la puerta de mi habitación y me quito el uniforme, estoy tan candado que ni siquiera doblo el uniforme. Me acuesto en la cama. Respiro hondo y Tae entra.

—Jimin, perdón que te moleste — Se queda en la puerta.

—¿Qué paso? — No me levanto, no tengo nada de fuerza.

—Mañana irás a las fronteras con los demás. — Cómo si me hubieran hechado un balde de agua fría, me levanto.

-¿Qué pasó? — Estoy asustado.

—El rey quiere que mates al capitan de las embarcaciones de Miranda, irás a la comarca 7 norte.

—¿Por qué? — Espero que nada malo esté pasando.

—Amenzan con entrar al territorio de Eugene, los detendrás, irás con Namjoon.

Asiento, tal vez me vea asustado y realmente me siento asustado, no puedo ni siquiera en pensar en qué haré, pero no dejaré que nadie entre aquí, no voy a dejar que nadie lastime a mi familia.

...

Ya en la mañana, lo primero que hago es comer mis hierbas anti-olor, no quiero que el capitán de Eugene detecte que soy omega, veo la pequeña foto de mis padres y la aprieto con fuerza, no puedo faltar a una promesa, la voy a cumplir.

Al llegar al castillo, su majestad nos recibe.

—Jimin, seguramente ya te habrá comentado Tae lo que está pasando en la frontera. — Asiento.

—Si señor, no se preocupe, haré que se detengan. — Hago una pequeña reverencia con la cabeza.

—Namjoon es uno de los mejores soldados, y es el coronel, así que te acompañará, quiero que asesines al comandante.

Llevo mi mano a mi pecho y me inco en una rodilla.

—Se lo prometo majestad, el comandante de Miranda morirá.

Aunque no lo vea sé que sonríe, ansío el día en que esta guerra acabe y que yo pueda regresar a casa.

Se escuchan las puertas abrirse, me levanto y volteo a mirar quién es el responsable.
Un chico alto, musculoso, del mismo uniforme que Tae, de cara algo redonda, con pequeños hoyuelos marcados, tez más o menos morena y cabello corto castaño.

—Él es el coronel Kim Namjoon, es mi mejor amigo y mi hermano, un excelente soldado, te acompañara a las fronteras.

El chico sonríe dejando ver por completo sus hoyuelos.

—Hola, tú debes ser Jimin. — Sonríe y extiende la mano hacía mi.

—Hola, si, soy yo. — Odio que todos sean más altos que yo.

El rey interviene.

—Por favor maten a ese bastardo. — Asentimos y salimos de ahí, no puedo morir por dos simples razones: la primera es que prometí a las personas que quiero regresar, mis padres necesitan sentirse orgullosos de mi, y la segunda es que no puedo morir sin antes haberme despedido de Tae, necesito verlo una vez más antes de morir, necesito que sepa lo que siento, necesito que sepa que soy omega.

Mare 👑