Randy se encontraba en la cocina de su casa preparando parte de la comida de su reunión mensual con sus amigos, siendo que le tocaba ser el anfitrión a él y a Nomi de aquella pequeña reunión, que era una tradición desde hace un par de años de su grupo.

Siendo él anfitrión, le tocaba preparar el plato fuerte mientras que lo que era los aperitivos y pequeños complementos los traerían los demás.

Apenas estaba colocando el salmón en el horno y revisando la olla con la crema de calabacín para asegurar que estuviera bien de condimentos, cuando unas manos se deslizan en su cintura un poco abultada.

—Hoy te estas luciendo con la cena de esta noche — escucha la grave voz de su esposo, sacándole una agradable sonrisa.

—Bueno, es una ocasión especial para todos, y es de las pocas veces que podemos reunirnos porque lo tenemos bien asegurados en nuestros calendarios — le dice mientras saboreaba la crema, sin hacer nada para quietar al pelirrojo de su abrazo — creo que le falta un poco de sal, ¿o tú que dices? — al decir aquello le acerca una cuchara con la crema y la acerca a los labios del contrario que lo disfruta con gusto.

—Yo creo que está bien, ha de ser tu gusto alterado, y si no es el caso, un par de saleros nunca están de más — expresa mientras le daba un beso en la mejilla.

—Te creeré — expresa mientras apagaba la flama y se quitaba el delantal agradeciendo el espacio que le dio el más alto, antes de dejarlo en la encimera para poder darle un pequeño beso en los labios.

—Je — da una pequeña risa, lo que desconcertó un poco al de pelo morado.

—¿Qué ocurre? — cuestiona la reacción.

—Tú barba me hace cosquilla — revela sin miramientos antes de darle otro beso de pico en los labios.

—Y yo que pensé que te gustaba — se queja un poco al sentirse ofendido del comentario.

—Claro que me gusta — esta vez en vez de darle los beso en los labios se los dio en la barbilla entre risas — te queda más que bien.

—Eres un mentiroso descarado — le dice, "enfadado" pero en realidad estaba más que divertido por todo.

Era finales del verano dando partida al otoño, de forma que él calor no era un gran problema para estar en el patio de la casa, y tampoco para que fuera impedimento de tener la piscina llena de agua para refrescarse y divertirse.

La mesa de madera tenía una presentación tipo Buffet, con un mantel blanco con bordados rojos, en la cual se encontraba con todos los alimentos preparados tanto por los anfitriones como de los invitados. El salmón al horno en el centro, la ensalada de fruta a la izquierda, la crema de calabacín a la derecha, el pure de papa cerca, un plato de cupcakes de chocolate, y una ensalada para equilibrar.

Todos comían a su ritmo, y los platos iban y venían de un lado a otro, al igual que las bebidas, los refrescos, el agua natural y la limonada mantenía las manos ocupadas, mientras las charlas casuales estaban en su apogeo.

—Entonces la pequeña Mia extendió las alas y Jhony imitando a su melliza hace aparecer las suyas también, y como los pequeños demonios que son iniciaron a volar dentro de la casa, lo bueno es que tenemos techos altos por este de aquí — dice señalando al moreno con su vaso de refresco, quien solo se ríe ante la acusación.

—Que puedo decir, me gusta estirar las alas de vez en cuando, y parece que nuestros pequeños también — se defiende Ten ante el comentario de su esposo.

—Tanto, que al parecer tu genética yokai hizo lo suyo y con solo cinco años esos pequeños ya te imitan y literalmente aprendieron a volar — se "queja" con molestia, pero son estar realmente enojado, solo cansando por la nueva travesura de sus mellizos, antes de dar un largo suspiro — al menos lo hicieron antes del trabajó, por lo que pudimos resolverlo a tiempo.

—Bueno, eso da sabor a nuestra vida "normal" — sigue bromeando con la última parte al hacer comillas con los dedos, pero su sonrisa por un momento se desvaneció cuando ve como sus hijos unos pequeños pelirrojos de piel morena hacían la transformación hibrida mostrando una serie de plumas rojizas con blanco y puntas negras, revelando la transformación de la que estaban hablando Howard de su anécdota, antes de iniciar a elevarse — y creo que esa es mi señal para evitar que ese par se metan en más problemas.

—Si que tienes mucha diversión en casa — comenta Randy divertido por la historia de su mejor amigo sobre lo que paso la semana pasada y que hasta ahora se entera.

Sus agendas ocupadas sí que hacía que estar en comunicación se complicara, cada uno con sus trabajos y negocios independientes, como padres de familia de niños que tenían habilidades por un lado de sus progenitores. De forma que hacer esas reuniones les permitía estar al día, así como un descansó.

Por eso los juegos de mesas, las parrilladas, las noches de piscina, las festividades, permitían esa convivencia. Algo que podían admirar en aquel momento, en la que todo el grupo estaba en unión, pasándola bien y tranquilos en el patio trasero con piscina de Randy.

—Ni que lo digas, pero no puedo negar que eso ayuda a evitar la monotonía — agrega mientras ve como sus "aves" revoloteaban en el cielo a un vuelo bajo usando la cubierta de la casa, y agradecido por los árboles que les daban privacidad.

—No es tan malo, significa que hicimos y estamos haciendo un buen trabajo — expresa recordando sus victorias de su juventud.

—Bueno, muy pronto el resto tendrán de nuevo que cubrir tus turnos, muy pronto — expresa señalando su vientre que evidenciaba lo que todos ahí sabían.

—Cierto, lo que significa que la pequeña Haru podrá tener compañía casi de su edad — agrega Nomirandy que se unió a su charla mientras portaba su toalla a un costado suyo, pero era más que evidente que aún estaba mojado cuando abrazo a su original.

—¡Cuidado! me mojas — se pone a la "defensiva" pero no lo aleja realmente.

—Tú que abriste la piscina, aténtate a las consecuencias — se defiende sin moverse del abrazo.

—Y un resfriado no está ante ellas — entra para defender a su pareja el pelirrojo al mover — además, tu hija está pidiendo a gritos tú atención, tú esposo y abuelo no están siendo suficiente.

Al expresarlo se pueden ver como una serie de listones se veían cerca del chapoteadero que contaba la piscina, en la que Finja y Plop Plop intentaban controlar a una pequeña bebé de un año, que mostraba sus dos coletas verdes en la que no se negaba su genética.

—Qué puedo decir, tiene tanta vitalidad como yo — expresa, ya que veía como estaba el puchero de su pequeña, más no lagrimas — de todas formas, les daré una mano, no quiero que escale, sus rabietas no son linda — admite volviendo al agua, no sin antes tomar unos vasos de limonada.

—Solo se rinde ante esa pequeña — declara Nomi, antes de abrazar por la cintura al pelimorado, que solo ríe suavemente ante el gesto y centrar su atención no solo a su esposo sino a su hijo pelirrojo de ojos azules que se encontraba juagando con los hijos de Howard al permitir que los tomen de los brazos para saltar y dar una marometa en el aire, antes de repetir la acción — Kay cada vez mejora en sus acrobacias.

—Vivió toda su vida observándonos, es de esperar que quiera mejorar — dice mientras sonríe al ver como el niño de siete años sonreía y reía de verdadera alegría.

—Dirás a ti, tú eres el que hace más acrobacias de todos nosotros — indica mientras le daba pequeños besos a la marca de reclamo que se encontraba evidente en su cuello.

—Bueno, tienen estilo y son eficientes en cuanto a distracción — expresa mientras se daba la vuelta para mirar a su pareja con afecto.

—Distracción tus ojos — expresa mientras le daba pequeños besos en los labios.

—Bua, ustedes dos son tan empalagosos, que si no tomaran sus inhibidores de feromonas este lugar estaría más que perfumado — se queja el otro ante la exhibición de afecto frente a sus ojos.

—¿Y tú y Ten no? — se defiende Randy con una sonrisa burlona — que me acuerde tú y Ten siempre se encuentran acurrucados a cada oportunidad desde la escuela secundaria — trae a colación aquel hecho, siendo algo que incluso hoy en día era algo que mantenía ellos dos.

—No tanto como ustedes dos, y por eso mismo mejor me retiro que en cualquier momento me dará un ataque diabético por tanto dulce que derraman — dice para ir a la mesa por algo de comida.

Con eso, dejan a la pareja con su propia privacidad aun si el resto estaba presente, poco importaba no era algo nuevo que demostraran su afecto entre ellos frente al resto, menos cuando cada uno estaba en lo suyo.

Es así que viéndose a los ojos sonríen el uno al otro y se dan otro beso, al sentir la satisfacción del momento de paz.

—Siempre estaré feliz de haber roto esa regla, pues me a permitido estar contigo y poder vivir esto — declara Nomi tras el beso, algo que era constante y con en esos buenos momentos.

—Y yo estoy feliz por eso — admite como siempre, mientras le da un beso en la mejilla como su forma de reafirma y agradecimiento por ello.

La noche ya estaba en su mejor punto, y los niños se encontraban ya acostados en una habitación designada para ellos cuando aquellos eventos mensuales se extendían hasta altas horas de la noche.

Por lo que permitía que los adultos pudieran darse un respiro y poder hablar más tranquilo y con menos preocupaciones del momento, en la que los infantes no se matasen entre ellos. Por lo que podía beber un poco de alcohol, o al menos aquellos que podía o les gustase.

—Y ¿ya pensaron en nombre para él bebé? — pregunta Ying-yue mientras disfrutaba su vaso se soju con gusto, observando a la pareja frente suyo que la miraban con sorpresa.

Aquella pregunta los tomo por un momento desprevenido, en un momento estaban hablando sobre su última misión contra algunos Robots de McFist que perdieron el control, y al siguiente ella lanzaba una bola curva en la conversación.

—Bueno, en el último ultrasonido ya nos dijeron el sexo se este pequeño — revela Randy mientras frotaba levemente su vientre, mientras una sonrisa se asomaba en su rostro cuando recordaba el momento de la revelación.

—¿Y es? — ahora era Yu-hang quien siguió la línea de conversación que abrió su hermana.

—Es un niño — revela de inmediato Nomi, sin rodeos ni más, no era tanto su estilo en ese punto de su existencia.

—Y después de debatirlo mucho — cuando los demás vieron como la pareja iniciaron a completar la frase del otro, su atención se enfocó por completo en ellos, para descubrir el nombre del nuevo miembro del grupo en camino.

—Decidimos por Daniel — termina el pelirrojo.

—Es un buen nombre — dice la melliza mientras se recostaba en la silla.

—Sera un niño que recibirá mucho amor — agrega Finja.

—Esperemos que Kay no sea un hermano celoso — a ahora era Ten quien comentaba — las peleas entre hermanos son complicadas, si nuestra experiencia sirve de algo — con ese comentario Howard asiente recordando las peleas entre sus hijos o las que él tenía con su hermana mayor.

—No lo creo, está muy emocionado por ser hermano mayor — admite Randy al recordar la sonrisa de verdadera alegría y felicidad que mostro su hijo cuando le dieron la noticia.

—Por la familia y amigos — brinda Nomi con su refresco en mano.

—Por la familia y amigos — lo secuentuan los demás con sus respectivas bebidas.

Y así es como termina su día, con la risa y ánimo de todos, ver como su futuro se mostraba brillante con una futura llegada de un nuevo miembro y agradeciendo lo que tiene por su buen trabajo pasado.

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Hi, este es mi primer One Shot por parte del premio por participar en la dinámica Capítulo por Número a ShuriKenAkabane, quien aporto la idea base para este escrito, bueno, ¿Que opinan? ¿Les gusto?

Y un Bonus de imágenes de internet familiares.

Pues gracias por leer, Con esto me despido.

Adiós XD