Narrador omnisciente

Jennifer se encontraba sola en su casa pues decidió faltar a la escuela ya que no quería ver los volantes de Bruce por todos lados, Charlie estaba en su trabajo, este prometió no llegar tarde a casa esta vez

Jennifer seguía bastante asustada por aquella silueta y no le gustaba estar sola pero el echo de que fuera de día la calmaba un poco, la chica estaba tomando un café mientras veía televisión, tenía dos opciones, ver dibujos animados o ver las noticias donde pasaban los progresos de los niños desaparecidos y como ya sabrán no había ningún progreso y también uno de los niños era Bruce así que optó por ver dibujos animados, estos no le desagradaban pero tampoco le gustaban.

Jennifer escucho como tocaron la puerta y se levantó para abrir, antes de abrir se fijo por el hoyo de la puerta y puedo ver aquella bandana azul que tanto le gustaba así que abrió

-¿Te mando Finn? - fue lo primero que pregunto Jennifer

Robin se hizo el ofendido haciendo que Jennifer riera un poco

-Me mando mi conciencia, ¿te sirve?.

Jennifer asintió divertida y dejó que Robin pasara a la casa, la castaña se dirigió al sillón de su sala de nuevo haciendo que Robin la siguiera

-¿Por qué no fuiste a la escuela? Te esperamos en la entrada.

-No me dieron ganas, ya sabes, con todo esto se está volviendo opcional para mi ir a la escuela

Robin asintió lentamente mientras veía con atención la casa

-¿Dibujos animados? ¿En serio? -dijo Robin en tono de burla

-Si, ¿algún problema? - Jennifer "reto" a Robin haciendo que este levantará las manos en forma de inocente

-Solo decía, no pensé que los dibujos animados fueran mucho de tu agrado.

-Ese es tu problema, no piensas- dijo Jennifer en un tono burlesco

Robin abrió la boca en forma de "O" haciéndose el ofendido, tomó un cojín del sillón y se lo lanzó a Jennifer golpeando a esta en toda la cara, Jennifer lo miró sorprendida y a la vez divertida, volvió a tomar el cojín que Robin le lanzó anteriormente y se lo aventó con todas sus fuerzas a Robin pegándole en el abdomen, esto había comenzado una guerra, los cojines volaban de un lugar a otro, las risas se escuchaban en toda la casa, por primera vez desde la desaparición de Bruce Jennifer se estaba riendo, se estaba divirtiendo, está había olvidado todas sus preocupaciones y todo gracias a Robin Arellano, el chico que la espiaba en sus peleas simplemente para ver si tenía competencia.

-Esta bien, esta bien, tu ganas- dijo Jennifer alzando las manos

Robin festejo su victoria mientras que Jennifer juntaba los cojines del piso, Robin dejó de hacer su baile de l victoria para ayudar a Jennifer a recoger todo, minutos después ya estaba todo como nuevo, solo había un vaso roto en el piso que rompió por accidente Robin, Jennifer no diría nada sobre que fue el, simplemente se inventaria algo.

-Le gane a Jennifer Jones, ahora si soy invencible- Robin se tiro en el sillón cansado

-Que no se te suba el ego, Arellano- Jennifer copio la acción que hizo Robin

Ambos se quedaron en silencio, pero no era ese típico silenció incómodo, mínimo no para Jennifer, a ella le gustaba sentirse acompañada.

-¿Creerías que estoy loca si te digo que vi una silueta anoche por la ventana de la cocina después de resivir una llamada muy extraña? - soltó Jennifer de la nada

-Depende, ¿viste una silueta anoche por la ventana de la cocina después de resivir una llamada muy extraña? - repitió Robin sentándose en el sillón

-Si..

-¿Que decía la llamada?

-cuando conteste el teléfono dijieron mi nombre, "Jennifer Jones" después de eso pregunté que si con quien hablaba y me dijeron "Pronto lo sabrás" la llamada se corto, sentí una sensación como si alguien me vigilará, cuando voltee a la ventana de mi cocina pude ver una silueta que se escondía- Jennifer recordaba todo haciendo que le dieran escalofríos

-¿Le dijiste a Charlie? - Robin volteo a la ventana de la cocina la cual estaba abierta

-No...

Robin asintió, se levantó del sillón y fue hacia la cocina, cerró la ventana con seguro y puso la cortina para que no vieran nada, este regreso y se sentó al lado de Jennifer

-Escuchame, ¿cuanto falta para que regrese Charlie?

-Unas horas, ¿por qué?.

-Me quedare aquí contigo hasta que regrese Charlie, no dejaré que nada te pasa ¿esta bien? No mientras yo esté aquí.

Jennifer miro atentamente a Robin, después sonrió y asintió lentamente

-Perfecto, ¿tienes palomitas? Me dio hambre- Robin se volvió a ir a la cocina

Jennifer rio, a la chica en serio le gustaba la compañía, si fuera por ella dejaría que Robin estuviera acompañándola en todo momento, Jennifer se levantó del sillón y fue a ayudar a Robin, toda la tarde se la pasaron viendo la televisión, jugando, hablando, comiendo, riendo, la tarde fue completamente perfecta para ambos

Los dos adolescentes estaban sentados en el piso mientras jugaban un juego de mesa cuando escucharon como se abrió la puerta

-Jenni, llegue- Charlie pudo ver a su hermana y a Robin en el piso - oh, hola Robin.

-Hola Charlie.

-No esperaba verte aquí.

-Yo no esperaba estar aquí- dijo Robin algo nervioso

Jennifer se dio cuenta de eso y se rio en voz baja

-¿Te quedas a cenar?.

-No gracias, no puedo esperar a que sea mas tarde para irme, ya saben, la noche me asusta- Robin tomo su mochila

Charlie asintió un poco confundido Y Jennifer simplemente intentaba no reírse

Robin abrió la puerta y iba a salir pero Jennifer lo detuvo para entregarle algo que casi olvidaba

-¿Te da miedo la noche? - Susurro Jennifer en tono burlesco

-La noche no, tu hermano si.

Jennifer negó divertida

-Gracias por.. ¿Cuidarme?

-No hay de que, yo la mejor niñera.

Jennifer rodeo los ojos, Robin simplemente veia con atención la cara de Jennifer, le gustaba mucho la forma en la que sus ojos se achinaban al sonreír

-Bueno, ahora si me tengo que ir.

Jennifer asintió y dejó que Robin se fuera, al verlo alejarse cerró la puerta.

-¿Soy yo o le doy miedo a Robin?- pregunto Charlie desde la cocina

-¿A Robin Arellano? No nunca -dijo Jennifer con un tono sarcástico en su voz

Charlie asintió divertido y se puso a lavar los platos

-Jenni, ¿Me podrías traer el vaso que esta en tu cuarto?

Jennifer asintió y subió las escaleras, entró a su habitación y tomó el vaso, de reojo pudo ver como su ventana estaba abierta así que la cerró, esta pudo ver como uan camioneta negra estaba justo enfrente de su casa, esta misma camioneta arrancó en la misma dirección a la cual se dirigió Robin, Jennifer sintió un mal presentimiento y está vez decidió hacerle caso, soltó el vaso haciendo que callera al piso, bajo la escaleras corriendo y abrió la puerta rápidamente para después correr en busca de Robin

-¿Jennifer? -preguntó Charlie al escuchar como la puerta se abrió

Charlie se dio cuenta que esta había salido corriendo así que la siguió

Jennifer seguía corriendo en busca de Robin, dio vuelta en una calle y pudo ver a la misma camioneta negra arrancar por esa calle, también pudo ver aquellos globos negros que menciono Gwen, Jennifer se acercó al lugar donde estaban los globos y vio la bandana de Robin tirada en el suelo con un poco de sangre encima, cuando vio eso sintió como su corazón se partió lentamente.

-No, no, no...-Jennifer se arrodilló en el piso mientras las lágrimas salían de sus ojos

Charlie llegó y pudo ver a su hermana tirada, este corrió hacia ella y la reviso de cuerpo completo, después de eso pudo ver que Jennifer tenía la bandana de Robin en sus manos y pudo entender todo, Charlie abrazo a su hermana, este soltó algunas lágrimas pues no le gustaba ver a Jennifer así, también se sentía mal por los niños, por Bruce y por Robin

Las sirenas de la policía se escuchaban acercarse...

Oh Jennifer, ¿tuviste un deja vu?

Nota de la autora:

[💌] No me odien, a mi también me dolió, pero oigan, todavia no llega a su final, todavía faltan cositas...

¿A Robin le da miedo la noche? No creo KAIAJAIIA

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