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─ ¡MAMÁ, NO PODEMOS IRNOS SIN JANE! ─ espetó el pequeño Elm tan preocupado por el estado de su mejor amiga.

─ Cariño, no hay tiempo para eso, lo siento tanto ─ la señora Laurent miraba con tristeza a su hijo, el niño se encontraba llorando, nadie podía calmarlo; Él solo quería a Janelle Morrison, quería saber cual era su estado, si se encontraba bien o no.

─ No podemos dejar a Jane ni a Harry ─ todo su rostro estaba empapado de pequeñas lágrimas ─ Ellos nos necesitan, yo necesito a Janelle, solo quiero estar con ella ─ el pobre niño lloraba, lloraba tanto que sus mejillas estaban de un tono rojizo.

─ Elm, tenemos que irnos, papá nos está esperando en el auto ─ el niño solo se encontraba negando con la cabeza mientras miraba a su madre ─ Por mas que quiera saber como se encuentran los Morrison no puedo hacer nada ─ lo miraba con una pequeña sonrisa que transmitía tristeza, Elena realmente ansiaba saber como se encontraba esa familia ─ Se que Jane es importante para ti, para mi también lo es, pero ahora hay que irnos, yo se que te vas a reencontrar con Janelle, en esta o en otra vida ─ la madre intentaba tranquilizar al niño, lo estaba logrando.

Lo que decía la mujer era verdad, siempre se iban a reencontrar, ellos eran almas gemelas que estaban destinados a estar juntos, en esta vida o en otra.

Finalmente el niño aceptó subirse al auto.

Todo era una catástrofe, carros chocando contra algunas casas, gente pidiendo auxilio y gritos desgarradores, quien iba a imaginar que eso solo sucedió en tan pocos minutos.

Nadie sabía lo que sucedía, no sabían que eso iba acabar con el mundo, con la humanidad.

La familia siguió conduciendo por dos horas, hasta que tuvieron que detenerse, se encontraban atrapados en la carretera, inmediatamente los ojos de los padres obtuvieron un brillo de esperanza que al momento se les fue, no eran más que personas que estaban asustadas, no había ni un soldado.

─ Quédense aquí, ya vuelvo, por nada del mundo salgan del auto, no sabemos qué puede suceder ─ habló Alastair, el padre de Elm.

Lo que no sabían era que en ese lugar iban a encontrar a las personas que los guiaran a un grupo, ese grupo fue el inicio de un gran camino que les esperaba por adelanté.

Mientras tanto la dulce janelle se encontraba deambulando en el bosque con sus pequeños ojos llenos de lágrimas, se preguntarán ¿Qué sucedió antes con janelle? lo que sucedió fue que la pequeña niña encontró a sus padres y su hermano llenos de sangre, las paredes y las escaleras con sangre, un acto muy terrorífico para una niña asustadiza, le habían arrebatado absolutamente todo, ya no tenía a sus padres ni a su pequeño hermano, ni hablar de Elm, ella no sabía nada de él, eso es lo que le asustaba, lo que la aterraba cada noche, su peor miedo era quedarse sola.

Alguien la había atrapado, ella solo intentaba escapar, usaba todas sus fuerzas, pero aun así era imposible soltarse de su agarre.

El hombre le iba hacer daño, ella seguía intentando escapar. Una flecha atravesó su cráneo, el cuerpo se hundió de espaldas contra la tierra.

La pregunta era ¿Quien lanzó la flecha?

Frente a la niña se encontraban dos hombres, uno con una ballesta, cabello desordenado, y el otro tenía el cabello corto y en su rostro había una sonrisa arrogante. Daryl y Merle, si, esos eran sus nombres, aquellos hombres decidieron llevarse a la niña.

La pequeña janelle en todo el camino estaba recitando el salmo 19: 1 - 16, caminaban por todo el bosque intentando encontrar algo, janelle solo los seguía, ya habían pasado 3 días desde que la encontraron.

Jane tenía mucha sed, habían caminado mucho que el cansancio le ganaba.

Algo le llamó la atención a la niña, era una caravana, ella le avisó a sus acompañantes, decidieron que janelle fuera la que vea lo que sucedía ahí, en el campamento ella logró visualizar a una mujer, un niño y un hombre con una pistola en su cinturón.

Finalmente decidieron ir al campamento, los tres se dirigían hacia ese punto.

Janelle agarró al niño que se encontraba con su madre, le puso un cuchillo en el cuello, el niño temblaba.

Merle estaba hablando con los demás, tratando de llegar a un acuerdo, mientras tanto el niño seguía temblando del miedo, jane todavia lo tenia con el cuchillo en el cuello.

Todo sucedió muy rápido, en el pequeño círculo que habían formado entró una pequeña familia muy conocida para janelle, jane se quedó en shock, perdió las fuerzas y eso logró que el niño que tenía en brazos se soltara y vuelva con su madre. La familia empezó a preguntar del porque había mucha bulla.

─ ¿Elm? ─ finalmente janelle salió del pequeño trance que estaba hace un momento, no lo creia, tenia frente a sus ojos al niño que la salvó de la soledad, a su mejor amigo, inmediatamente todas las miradas de fueron para la niña.

Elm reconocía esa dulce voz, la voz mas hermosa que había escuchado en su vida, él tampoco lo creía, él pensaba que nunca más iba a ver a jane, pero la tenía al frente de sus ojos.

La conexión de ambos fue muy rápida, no se lo esperaban, se tenían al frente de cada uno, después de una eternidad, o así lo sentían ellos, se encontraron, al fin estaban juntos

─ ¡Jane! ─ Elm tenía una gran sonrisa en su rostro, estaba tan feliz, pero tenía un gran curiosidad ¿Porque venía con esos hombres y no con sus padres? No le tomó importancia a ese detalle, en este momento todo estaba nublado para él, él solo miraba a Janelle, no habia nada mas que ella, solo se fijaba en la niña y en nada mas.

Finalmente los dos niños corrieron hasta donde estaban, se dieron un fuerte abrazo. El abrazo demostraba lo mucho que se hacían falta, lo mucho que se extrañaron, era un abrazo muy sincero, uno lleno de sentimientos inexplicables, la felicidad en sus rostros era inexplicable, si uno quería describir lo que sintieron en ese momento le tomaría toda su vida explicar los sentimientos encontrados en ese instante, pero jane no aguanto mas y se puso a llorar, lloro todo lo que guardaba dentro de ella, lloró por sus padres, por su hermano y por lo que estaba sucediendo, estaba muy asustada.

Como era de esperarse todas las miradas se dirigían a los dos niños, fue un momento muy lindo, ese momento hizo que todos se olvidaran de lo sucedido hace un rato, sonreían, sonreían por los niños, no esperaban que pasara algo así.

─ Estoy asustada, no se que esta pasando ─ lloriqueo en el hombro de su amigo empapando todo su suéter ─ quiero que esto acabe, solo quiero volver a casa y jugar contigo como lo hacíamos todos lo viernes.

─ Yo tambien quiero que esto acabe, pero tranquila ya va a pasar y todo volverá a ser como antes.

Oh pequeño y dulce Elm, una alma muy inocente que pensaba que todo iba acabar en un instante, estaba tan equivocado...

─ Estoy tan feliz de verte Jan ─ los dos niños se encontraban abrazados, no se separaban como hace una hora, se encontraban juntos desde que la niña entró al grupo.

Una pequeña silueta los observaba de lejos, tenía curiosidad por los dos pequeños, él quería acercarse y hablar con ellos, alguien se le acercaba, era su madre, Lori Grimes, ella miraba a su hijo con curiosidad, sabía que él quería acercarse a los dos niños, pero también sabia que eso le asustaba.

─ ¿Por qué no te acercas? se ve que son buenos niños ─ intentaba convencer a su hijo que se acerque y hable con ellos, pero el niño no quería, tenía miedo a que no les agrade.

─ ¿Y si no les agrado? ─ se encontraba asustado por la situación, pero más por la niña, obviamente iba estar asustado de la persona que le puso un cuchillo en el cuello ─ Quiero agradarles para que sean mis amigos y poder jugar con ellos.

─ Se que lo lograras, corre ve con ellos.

El pequeño Grimes le hizo caso a su madre y fue tras ellos, tenía las esperanzas de caerles bien y formar un pequeño grupo de tres amigos.

Se acercaba con lentitud mientras veía como Elm y Janelle conversaban de cuanto se habían extrañado, Grimes quería tener una amistad como la de ellos; Se estaba arrepintiendo, quería volver donde estaba su madre, pero tomó valor y se puso frente a ellos. Carl se quedó helado, no dijo ni una palabra ni hizo ningún movimiento, los dos niños lo miraban sin decir nada, a Carl le sudaban las manos, estaba tan nervioso, hasta que decidió hablar.

─ Hola ─ susurró ─ Me llamo Carl, Carl Grimes.

Todo se quedó en silencio, nadie dijo nada, hasta que finalmente Elm habló.

─ Hola, yo soy Elm, Elm Laurent ─ se presentaba mientras le daba una pequeña sonrisa, a pesar de estar en el mismo grupo antes de la llegada de Janelle nunca habían hablado ─ ya nos conocíamos pero nunca me presente, asi que un gusto en conocerte Carl. Ella es Jan, bueno asi le digo yo, su nombre es Janelle Morrison ─ Elm y Carl miraban a Janelle, ella solo le dio un asentimiento de cabeza.

─ Puedes sentarte con nosotros, si quieres ─ Elm estaba muy feliz de conocer a gente nueva, siempre le gustó conocer gente, en cambio a Janelle no, ella nunca estuvo rodeada de mucha gente, solo era la familia de Elm y sus padres. Carl asintió y se sentó a un lado de Elm ─ ¿Has visto Harry Potter? ─ Grimes negó con la cabeza ─ Debes de verla, es buena, aunque ahora no creo que sea posible verla, pero cuando todo esto acabe te prometo que te voy a llevar a mi casa para ver las películas, también tengo los libros, en realidad prefiero los libros antes que las películas, pero no niego que la película es super buena, te va a encantar ─ El niño estaba tan entusiasmado, su pobre alma no sabía lo que le esperaba.

Janelle solo los miraba mientras conversaban, no estimulaba ninguna palabra, estaba feliz por ver a su amigo sonreír, en ese momento no se acordó de sus padres, solo eran Carl, Elm y Janelle.

─ ¿No hablas tanto? ─ Carl estimulaba la pregunta mientras dirigía su mirada hacia Janelle

Ella no dijo nada, solo se escondió tras el hombro de Elm.

─ Jane no habla tanto con personas que no conoce, pero cuando tenga confianza no va a parar de hablar, te lo aseguro ─ Elm trataba de entablar una conversación con Carl para poder tener una amistad.

Solo eran unos niños metidos en un apocalipsis, unas pobres almas que tenían todo un camino por adelante, lamentablemente estaban atrapados en un lugar donde toda su vida se iba a destruir.

Quien diría que los planes que le esperaban a los niños eran completamente diferentes a lo que ellos planearon.

─ Hola niños.

Los niños seguían juntos, estaban conversando hasta que escucharon una voz, era Elena, ella los miraba con una pequeña sonrisa, inmediatamente las miradas de los niños se dirigían a ella

─ Hola mamá, ¿pasó algo?

─ No, tranquilo, solo quería conversar un rato con Janelle ─ Elm le dirigió una mirada dudosa y miró a Janelle, ella solo asintió con la cabeza ─ Bueno, pueden seguir conversando, yo me llevo a Jane, en un momento se la traigo de vuelta.

La niña se paró y le siguió a Elena, caminaron hasta estar un poco apartadas de los demás, la mujer le indico que tomara asiento.

─ ¿Como estas cielo? ¿te encuentras bien? ─ Janelle estaba un poco confusa, no sabía cómo estaba realmente en parte estaba feliz por encontrarse con Elm, pero no sabía cómo sentirse al respecto con lo sucedido con sus padres. La mujer notó que Janelle estaba muy pensativa así que decidió no forzarla ─ Esta bien si no lo quieres decir, cuando quieras hablar sabes que estoy ahí para escucharte.

Elena se estaba levantando de donde estaba, pero algo la detuvo, fue el llanto de Janelle, el llanto se podía describir como uno de sufrimiento, de cansancio, de un dolor guardado por mucho tiempo.

─ Mi padres murieron ─ su mirada se dirija al suelo, no sabia dónde mirar ─ Harry también. Quiero que esto acabe, quiero ver a mis papás y a mi hermano, solo quiero despedirme de ellos.

Elena solo miraba con detenimiento, no podía creerlo, la familia Morrison desapareció por completo, solo quedaba Janelle, o eso creían.

─ N-no quiero estar aquí El... Solo quiero ir a casa, ir a casa con ustedee─ el llanto no era tan fuerte pero igual se le encogía el corazón a Elena, esta enojada, no, esto no podia estar pasando, ¿El mundo es tan cruel como para dejar a una niña huérfana? Eso se preguntaba, miles de preguntas rondaban por su cabeza ─ Ahora estoy un poco mejor ya que los he encontrado y me siento feliz por eso.

─ Ven aquí Jane ─ la niña se paró y quedó frente a la mujer ─ si sientes alguna incomodidad o algo que te moleste me avisas y créeme que yo haré algo al respecto, cuando te sientas triste me puedes avisar, ¿esta bien? Sabes que en la familia te tenemos un gran cariño, asi que no dudes en contarme algo ─ la miraba con los ojos llorosos, finalmente la mayor la abrazó, la abrazó con muchas fuerzas.

Lo único que ella quería era proteger a Janelle y a Elm, queria meterlos en una caja de cristal y guardarlos para que el mundo en dónde estaban no los lastimen, ella iba a cumplir con la promesa de ponerse siempre adelante de ellos para protegerlos, pase lo que pase ella lo iba a cumplir.

─ Author's note

Holaa ¿Cómo están?¿Ya comieron? ¿Ya tomaron agua?

Primer capítulo de In another life!!! Estuve como dos semanas escribiendo el capitulo ya que no me convencia, pero aquí lo tienen, espero que les guste 💗

Lo siento si el capítulo es muy corto, hice lo que pude ☹️

Respecto con las actualizaciones no tengo una fecha fija ya que tengo una vida fuera de la plataforma y este año quiero concentrarme en mi misma (no hice nada en este año jaja 😹)

(2380 palabras)

- reescrito el 11/11/22