07 ▎Reglas rotas.

ㅡ ¡KyungSoo ven aquí!

El más bajo reía sin control, corriendo lejos de las garras del pelirrojo, sus piernas comenzando a entumecerse por la sobre-carga. Bien era sabido que no era una persona atlética, y estar poniendo a prueba su aptitud física contra alguien que se ejercitaba todos los santos días... podía resultar en un gran desastre.

Pero no le importaba, sólo quería jugar.

ㅡ ¡En tus sueños me atraparás, Park! ㅡ Giró un poco su cabeza, llevándose un susto enorme al ver a ChanYeol estirando su brazo para alcanzarlo, y realmente temió por su vida ㅡ. ¡Mierda!

Ambos chicos correteaban por el amplio campus de su universidad, pareciendo niños de 5 años, pero en el fondo sabían que sólo estaban prolongando el estallido de una bomba atómica.

ㅡ ¡Esto no tiene sentido KyungSoo, ya detente!

El azabache le mostró el dedo del medio.

ㅡ ¡No quiero!

ㅡ ¡No seas un niño tonto Soo, sólo quiero hablar!

ㅡ ¡Te dije que no!

KyungSoo ya respiraba por la boca, y sentía un dolor en su parte abdominal, como pequeños pinchazos atacarlo cada vez que respiraba. Dolía como el infierno.

Vio que estaban cerca del bachillerato, y en unos minutos ya estaban dentro de él. KyungSoo lo conocía como si se tratase de los lunares de su cuerpo, y sabía de cada rincón en el cual poder escabullirse. ChanYeol tenía una gran desventaja en ese sentido, de no ser porque corría más que el propio corre caminos, que terminó por alcanzarlo.

Sus piernas largas no eran ninguna broma.

KyungSoo pronto sintió unas familiares manos apretar las costuras de su ropa, cerrándose en puños. La fuerza ejercida produjo que fuese lanzado hacia atrás, chocando contra un trabajado pecho sudoroso. Miró lentamente hacia atrás, encontrándose con el rostro de ChanYeol irradiando furia, mientras intentaba recuperar el aliento.

Estaba jodido.

No fue necesario procesar la información, no cuando su espalda impactó contra los casilleros cercanos, el sonido del metal abollado causando un gran estruendo por los pasillos vacíos del lugar.

ㅡ ¿Por qué debes complicarlo todo? ㅡ Jadeó al sentir sus manos recorrer la longitud de su cintura, mientras su rodilla lo acorralaba, apretando bajo su entrepierna. Estaba completamente inmovilizado, como un dulce cordero que cayó en la trampa del cazador.

Pero en su caso, él nunca sería como un lindo corderito inocente, porque esas características no iban con él.

ㅡ Te odio tanto, te detesto como no tienes idea, Park ChanYeol. ㅡ Lo miró desafiante, relamiendo de manera inconsciente su labio inferior ㅡ. ¿Por qué no vas a cogerte a Seulgi? Capaz con una vagina lo disfrutas más.

ChanYeol golpeó el casillero a un lado de él, apartándose un poco.

ㅡ ¿De qué demonios hablas? Nunca me la follé ni nada parecido, ¿podría entender eso tu bonita cabecita?

ㅡ Pero ella dijo-

ㅡ ¿Crees en las palabras de una tipa que me besó a la fuerza, y no en mí? ㅡ Escupió sin contenerse, mirándolo afligido ㅡ. Si vas a guiarte por cosas así, mejor escucha las dos versiones y sacas tus conclusiones, ¿no?

KyungSoo lo miró sin comprender, con una agitación naciendo desde el centro de su pecho que no le dejaba pensar.

El ambiente tenso rápidamente se transformó en uno íntimo, con ambos mirándose a profundidad, buscando en sus ojos una respuesta que sabían que de sus labios nunca saldría.

Tal vez por miedo, o un impedimento que ponía una barrera entre sus corazones.

Sin pensarlo dos veces, KyungSoo se lanzó a besar sus labios, saboreando en ellos pequeñas gotas salinas que habían caído de su piel. ChanYeol no dudo en corresponderle, cargándolo entre sus brazos sin esforzarse, apretando con necesidad sus muslos, y mordisqueando con impaciencia sus voluptuosos labios. Se mezclaron sus acaloradas respiraciones, y le restaron importancia al sudor en sus cuerpos.

KyungSoo gimió, sintiendo su parte baja lubricar sin control, y con una creciente erección molestando entre sus pantalones. Su omega chillaba por las atrayentes feromonas de su alfa, quejándose por su "distancia". Sólo quería que se enterrara en él, y le hiciera tocar el cielo como hicieron tantas veces, juntos.

ㅡ V-Vamos a la... a la oficina del Director. ㅡ ChanYeol a penas logró escuchar su voz, tan desesperado por saciar su deseo de empalarlo cuanto antes. Sentía que se volvería loco si no se metía entre sus piernas ㅡ. Siempre quise hacerlo ahí.

KyungSoo tuvo que apartarlo, por más que esa simple acción le doliera peor que cuando sacaba un 0,1 menos que a su 10 perfecto en sus exámenes, guiándolos a ambos hasta la oficina principal del bachillerato Hanguk, y una de la más importantes del establecimiento.

Tener sexo sobre su respetada y honorable academia lo prendía a mil. Hacerlo en un lugar que no debía era su fetiche más morboso.

ChanYeol gimoteaba con gran dolor, su pene parecía estallar, punzando de una forma deliciosa para que su liberación llegara pronto. Si no se apuraba, sus bolas morirían por la cantidas de semen que estaban almacenando.

ㅡ Kyun... KyungSoo, vamos, apresúrate.

El más bajo hacía su mejor intento por encajar las llaves en la cerradura, con sus manos temblando. No podía concentrarse si tenía a un alfa restregando su erección por la extensión de su culo, por encima de la ropa. Esa era la gota que rebalsaba el vaso.

ㅡ C-Chan, espera. No me dejas-

Sintió la llave entrar finalmente, y con rapidez dio las dos vueltas para abrirla, pasando a la habitación con gran apresuro. ChanYeol se detuvo para cerrar la puerta, y poner el cerrojo a la misma. No quería ninguna clase de interrupción.

KyungSoo cayó encima del escritorio, gimiendo sonoramente cuando ChanYeol le hizo elevar su trasero, masajeándolo y dándole cachetadas con rudeza. Sentía que se vendría pronto, pero las ansias de sentir su pene en su interior lo hacían detener su precoz orgasmo.

ㅡ P-Por favor, alfa...

ChanYeol se quitó por completo la ropa, lanzándola lejos, también aprovechó para desnudar al más bajo, bajando desesperado sus pantalones negros, y abriendo su culo de par en par para ver su entrada contraerse y abrirse con necesidad, el líquido lubricante cayendo a borbotones de su ano. Su gran miembro ya erecto palpitaba por la gran vista, ansioso de enterrarse hasta el fondo en aquel tembloroso chico.

ㅡ ¿Por favor qué, omega?

ㅡ ¡Métela ya, idiota! ¡Cóge...! ¡Oh Dios! ㅡ KyungSoo quedó casi inconsciente cuando fue sorprsivamente penetrado por su enorme miembro, viendo las estrellas en segundos. No pudo contener su orgasmo, gritando cuando ChanYeol comenzó a moverse sin piedad en su interior, dando constantes embestidas que le arrancaban fuertes gemidos. Estaba hecho un total desastre.

Sintió una gran sacudida recorriendo su cuerpo, las manos del pelirrojo apresando sus brazos por detrás de su espalda, siguiendo con su rápido váiven y maltratando sin piedad su culo, detrozando la poca cordura que quedaba en KyungSoo.

En ese instante, supo que no había un pene que pudiera compararse al tamaño de ChanYeol.

ㅡ ¡Ahí, ahí alfa! ¡Más profundo! ㅡ KyungSoo abrió más sus piernas, recibiendo gustoso al más alto, mordiendo con fuerza sus labios, gimoteando sin poder controlarse.

ㅡ ¿Te gusta, omega? ㅡ ChanYeol pegó su pelvis hasta chocar con sus antes blanquecinos glúteos, que ahora habían tomado un color rojizo por los reiterados golpes dados por su entrepierna. Al sentir que KyungSoo contraía de nuevo sus paredes, supo que se había vuelto a correr. Había tocado su punto dulce ㅡ. Dí mi nombre, KyungSoo.

El más bajo tenía sus ojos fuera de orbita, intentando respirar luego de haberse corrido dos veces, todo un récord para él, que solía aguantar por lo menos una ronda sin correrse. Intentó focalizar su vista desenfocada, parpadeando varias veces. Sentía que iba a morirse de tantos orgasmos.

ㅡ ChanYeol, mi ChanYeol...

Sintió un delicioso jadeo chocar contra su oreja, un duro pecho caer sobre su espalda, sin detener sus embestidas, y luego, unos traviesos labios lamer y morder sin preocuparse por el dolor causado. Si no podía morder más a bajo, ChanYeol se conformaría con ello. Sabía que si se acercaba un poco más a su cuello, lo marcaría sin importarle nada, por lo que se estaba conteniendo enormemente.

ㅡ P-Pronto me vendré, Soosie.

KyungSoo se intentó acomodar sobre el escritorio, tirando las cosas que seguían estorbando, y preparándose para recibir el caliente semen de su alfa. Ya lo habían hecho varias veces sin condón, porque KyungSoo tomaba sus pastillas anticonceptivas regularmente, y aquel día era el seguro. Así evitaban un sorpresivo embarazo.

ㅡ V-Vamos Chan, lléname por completo. Quiero sentirte hasta el fondo...

El más alto comenzó a gemir cada vez más fuerte, jadeando sin control. Tiró su cabeza hacia atrás, su rostro contrayéndose en una mueca tensa al sentir el clímax asomarse, gotas de sudor cayendo por su piel ardiente. Y dio una última penetración al sentirse preso de un estruendoso orgasmo, un gemido gutural abandonando su garganta al expulsar su semen dentro de KyungSoo, apretando con fuerza su cadera.

Su pecho subía y bajaba, el nudo comenzaba a formarse, y KyungSoo tomó una bocanada de aire, sintiendo todo su cuerpo arder y sofocarlo. Su rostro afiebrado era la clara prueba de ello. ChanYeol cayó rendido sobre su espalda, aún en su interior, y repartió dulces besos por la tersa piel que tenía a su alcance, abrazando y amándolo por completo.

Poseyendo con gran deseo su cuerpo, impregnando en él su aroma, y sus más profundas necesidades... Porque su corazón, que era su añoranza más preciada, no podía ser suya.

gracias por leer! ♡

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