Maratón 2/5
Misión regalo de cumpleaños clandestino
Alma
Me mantuve un rato más en la velada jugando una partida con mi abuelo, porque ni siquiera la tentadora propuesta de ultimo minuto de Donnovan iba a dejar que fallara a mi promesa de estrenar ese lujoso juego de ajedrez, además era mi cumpleaños en un día como hoy nací a este cruel mundo así que por lo menos me daría el lujo de hacer algo que yo plenamente quisiera.
Aunque toda la jugada me mantuve dividida en dos por tal decisión, ya que ansiaba de igual manera correr escaleras arriba y ver lo que Donnovan había planeado para mi regalo, pero las ganas de pasar con el abuelo eran más por lo que estuve jugando un par de partidas más hasta que di por hecho que fue una cuota más que necesaria que pase con el abuelo, además que vi pasar a Donnovan por el pasillo como muestra de que ya era hora de dejar la fiesta y comenzar otra más privada.
Mire al abuelo que comenzaba a verse cansado así que por el bien de "ambos" decidí detener el juego en media de la partida.
-Pero que haces debemos terminar el juego!- protesto mi abuelo al ver que detuve nuestros relojes.
-Debes descansar te ves exhausto y eso le hace daño a tu imagen de semental inmortal- bromee - además yo también debo descansar tengo una jaqueca horrible que siento que te voy a dejar ganar y eso no es para bueno para mi racha invicta- dije mientras estiraba los brazos.
-tienes buena racha porque te he dejado ganar por ser tu cumpleaños-
-Estas diciendo que Piero D'Angelo se esta apiadando de mi por ser mi cumpleaños, eso en verdad me ofende, eres un mentiroso que me dijo que confiaba en mis capacidades- exclame fingiendo estar dolida a lo que él se carcajeo.
-Tu nieta tiene razón debes descansar para que tu racha de buena salud no termine- agregó su enfermera haciendo presencia en la habitación y a ambos nos ceso el lapso de diversión al recodar su salud - además que es hora de su medicamento-
-ves yo te lo dije de buena manera- puntualice con una sonrisa.
-bueno pero ni siquiera se te ocurra hacer trampa debemos terminar esta partida- me advirtió con una mirada severa
- me continuas ofendiendo nonno- dije levantándome para despedirme.
- eres lo más preciado que tengo en esta vida Alma, espero que si me llega a pasar algo no se apague esa extraña luz de alegría que tienes en el interior y de la que solo yo soy el afortunado de verla- dijo tomando mis manos y apretándolas con las suyas con firmeza lo mire a los ojos y sabía que no estaba bromeando por el tono de su voz, por lo que asentí convencida.
-lo prometo- dije besando sus manos frías- pero no pretendas aguarme mi cumpleaños con esos temas que tu ancianito vas para largo- el embozo una sonrisa melancólica, nos despedimos cariñosamente y lo vi salir de la habitación acompañado de su enfermera y su escolta.
Suspire al notar su ausencia, pero sin pensarlo dos veces emprendí el recorrido a toda prisa hacia mi habitación, tampoco era que la presencia de la cumpleañera fuera importante en estos momentos de la noche en el cual ya no era la celebración del cumpleaños era un centro de negociación con alcohol de por medio, por lo que mi ausencia apenas lo notarían pocos y que a mi me importara la lista se reducía a Elodie la cual me tope en las escaleras hacia mi habitación.
- oye te andaba buscando donde estabas?- preguntó con un ligero tono de estado de ebriedad
-estaba jugando con el abuelo - me excuse por lo que ella entorno los ojos mirándome para ver si mentía y yo me mostré rígida.
- bien bien pensé que estabas de pecadora con el escolta guapo que se te acerco a decirte cositas al oído-
A eso voy pero me estas dificultando la tarea.
-Ok ya estas muy ebria y estas en la etapa de divagación así que ve a buscar a Dania para que te lleve a tu casa- ordene y me miro ofendida.
- de hecho la ando buscando pero no la encuentro, tengo que darle su "recompensa" - articulo lo ultimo acompañándolo con una mueca maliciosa que me dejo claro a lo que se refería.
-pues que esperas ve a atacar tigresa-
Que yo iré a por mi alto y sexy regalo disfrazado de escolta, también.
-a eso voy a eso voy pero primero debo encontrar ese maldito culo- maldijo ella
- yo iré a calmar mi jaqueca durmiendo, te deseo suerte- me despedí abruptamente al ver a Smeraldo la cual le hice una señal para que se la llevara a la ebria rubia a mi lado.
Seguí con mi trayecto a mi habitación que de ante mano aclare a los escoltas que expresamente nadie debía de interrumpirme en mi "sueño reparador" y entre triunfante a mi habitación con una copa en mano para verme un poco más interesante.
- te vales de tu empleo para hacer actividades extracurriculares ¿no?-lance en cuanto cerré con pestillo la puerta de la habitación que estaba en completa oscuridad, esperando que cierto escolta saliera de entre las sombras de sus escondite pero no paso nada- Don?- llamé extrañada sin hallar respuesta alguna de su parte.
Comencé a pensar las causas que lo habían inducido a hacer esta broma de tan mal gusto que cuando decidí comenzar a cabrearme por ello, escuche se produjo un diminuto sonido de algo chocando contra la ventana que daba al balcón con vista al jardín y me acerque a ver que lo había provocado.
Encontrándome por supuesto con lo que menos me hubiera pasado por la cabeza, Donnovan en el jardín lanzado pequeñas piedras a mi ventana, hice mi mejor cara de disgusto al verlo sonreír de oreja a oreja al ver mi aparición y lo siguiente que pasó fue que mi móvil comenzó a sonar con su numero de teléfono iluminando la pantalla de llamada entrante y descolgué para ver cual era su defensa.
- Apuesto todo mi sueldo de un mes ha que ya estas cabreada?- exclamo mientras me miraba divertido.
-Al parecer vas a ganar algo por primera vez en tu vida o que?- exclame en tono sarcástico lo que hizo que su sonrisa se ensanchara al notar mi evidente tono de cabreo.
-vamos fue una simple bromita-
- una simple bromita que te puede constar la vida- advertí - me vuelves a ver la cara de estúpida y vas a ver-
- no te veo la cara de estúpida porque la única cara que tienes en este momento es las ansias que tienes de ver mi regalo-
- Claro trata de calmarme luego de haberme cabreado te reto-
Su semblante pareció apagarse un poco y pensé que había echo efecto para que calmara su animo de broma, pero lo pensé fue todo lo contrario a lo que paso.
- Bueno ya baja de ahí- dijo con tono cansado provocando que mi enojo volviera a resurgir.
- Que parte que verme la cara de estúpida te va a costar la vida, el trabajo, hasta tu reputación y puede ser que hasta tu misma alma -amenace pero no pareció importarle mucho mis amenazas.
-Ya bájate de ahí si de verdad quieres tu regalo- ordenó cruzando los brazos sin despegar el móvil de su oreja al igual que no aparto su vista de la mía.
-Bien dame un momento tendré que crear una excusa para salir de aquí sin levantar sospechas-explique mientras me apretaba el puente la nariz con las dedos ideando una buena excusa.
- No te pedí que pidieras permiso a cada persona del lugar para poder salir solo baja por aquí-
- Disculpa?- exclamé absorta de su petición.
- Ya me escuchaste y no pretendo repetir- sentenció- tuve un día extremadamente cansado así que si no quieres venir, bien, por lo menos tenía la intención de cumplir como buen amante-
Me entorno los ojos para apreciar mejor mi reacción pero siempre con una aire retador en su mirada y como vio que no me inmute si quiera en un parpadeo dispuso irse.
- bien- alcance a decir causando que se volteara en mi dirección de nuevo
- bien que?- pregunto confundido.
- que pases buenas noches, espero que fantasees como pudiste haberme cogido- exclame decidida, ningún hombre iba a estarme condicionando a su antojo solo por conocer mi interior, estaba apunto de colgar cuando agregó:
- ten por seguro que te atraparé, no te vas a morir- pero aun así la seguridad en su voz para hacerme cambiar de opinión no me impidió colgar la llamada y me miro asombrado quitando el móvil de su oreja, quería marcharme e irme a echar maldiciones a mi almohada, pero mis pies no cedieron al contrario, me quede clavada al piso hasta decidieron moverse pero en la dirección del limite del balcón.
Tanto como Donnovan y yo estábamos asombrados por el hecho, pero al parecer una descarga de adrenalina se había adueñado de todo mi ser y comencé a quitarme los zapatos de tacón, lanzándoselos para ver que tan acertados eran sus reflejos y si que lo era porque los atrapo en cuanto estuvieron en su rango de alcance, pero unos jodidos zapatos no pesaban lo mismo que yo, pero de igual manera procedí a tomarme el liquido de la copa que tenia en la mano para llenarme de valor para poder descender desde el balcón hasta donde estaba Donnovan.
No era que le tuviera fobia a las alturas ni nada por el estilo, pero cualquier persona con una ligera pizca sentido común sabría que era algo demasiado arriesgado, aventarse de un balcón que por lo menos era la altura de Donnovan multiplicado por 5 y sin la verdadera certeza de que en verdad él me atraparía y no quedaría como un huevo estrellado en el jardín de mi propia casa a la vez que lo aplastaba a el con mi peso que se duplicaba a debido a la fuerza de gravedad.
Si soy una jodida Einstein mafiosa lo sé
A pesar de todo eso emprendí ya libre de los fastidiosos tacones a desplazarme del balcón poniendo los pies debajo de una esquina de este, sentía la brisa sacudir mi cabello pero debía concentrarme más en el siguiente lugar que mi pie pisaría.
Que era la esquina que se formaba entre la esquina del balcón y la de la pared contigua a este, me sujete del borde del balcón con las manos para bajar más mi cuerpo ya que mi propósito era llegar al balcón que estaba como a 3 metros de donde me encontraba, pude apoyar las puntas de mis pies a la delgada cornisa que sobresalía de la pared.
- no te preocupes es una buena vista- exclamo francamente Donnovan a mis espaldas luego de un tiempo cuando ya estaba cerca de llegar al balcón quería mirarlo y enviarle una mirada de odio pero me encontraba algo ocupada tratando de no morir, así que deje que me siguiera viendo las pataletas gracias a el viento que hacia que mi holgado vestido revelara mi delgada ropa interior - pero si no te apresuras creo que comenzare solo-
Su insistencia irritante fue el último impulso para poder saltar rápidamente al balcón en la misión regalo de cumpleaños clandestino, que esperara que valiera todo el esfuerzo de acrobacia que había hecho esta noche y que me faltaba por hacer.
En cuanto puse los pies en algo estable, sin peligro de resbalar y morir, procedí a dar una profunda calada para llenar mis pulmones de aire y tratar de relajarme lo suficiente para lo que venía, porque desde esta altura era un poco menos mortal aventarse, además que si quería bajar un poco más era imposible ya que el resto de las paredes del edificio eran lisas no había de la mínima irregularidad o detalle del que pudiera apoyarme y no iba a ingeniármelas de Spiderman.
-estas seguro que me atraparas?- pregunte volteando a ver a mis espaldas para asegurarme que no hubiera algún fisgón en la habitación que pudiera ver la estupidez que iba a hacer por un buen polvo cumpleañero, pero dicha habitación estaba en completa oscuridad y sin rastro de algún individuo, por lo que centre la vista en la pequeña figura de Donnovan en el jardín.
- sino lo hiciera sería un mal escolta no lo crees- aseguró con arrogancia y rodee los ojos me apoye en el barandal de mármol para ponerme de pie sobre el mismo y sentí lo frio que estaba, trate de concentrarme en la figura de Donnovan y no la abismal distancia que nos separaba- me voy a hacer ...-
No pudo terminar de renegar mi vacilación ya que me lance sin pensar sintiendo un vacío en el estomago al sentir el deceso de latitud y cerré los ojos esperando no morir solo por una buena cogida.
==============================================================================
Nota de escritora: Se me paso un poquis la mano en escribir pero gracias por leer, alguien más sintió vértigo al leer la escena porque a yo sí, pero dejémonos de boberías y solo quiero decirles que ahora prometo por la belleza del Don que ahora si se viene lo intenso 7w7.
bye.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top