63. El gran baile
Era el momento de acudir en la noche al gran baile de graduación de sus amigos. El lugar en donde se llevó a cabo el espectáculo de Naudur fue acondicionado como un bello salón sede del evento.
Comenzaron los preparativos muy temprano, se sentía el ambiente agitado en la escuela, algunas personas yendo de aquí para allá llevando adornos u otras cosas a todos lados. Era algo increíble.
Las muchachas habían comprado unos bellos vestidos para acudir a aquel evento, dedicaron la mañana a ordenar sus cuartos para poder empacar dentro de dos días.
Comenzaron a pasar las horas y las horas, el atardecer llegó y las chicas empezaron a prepararse. Kimiosea usó un vestido rosa muy elegante, Nereida uno azul oscuro con blanco, Esmeralda uno amarillo y Shinzo uno color verde, no querían lucir muy ostentosas, guardarían sus mejores peinados para la boda de Nereida, al siguiente día.
Cuando se encontraron listas salieron de los dormitorios, los chicos ya estaban esperándolas puntualmente.
Caminaron hacia el lugar de encuentro, al llegar admiraron la elegancia con la que habían decorado el área. Al fondo había un pódium con unas plataformas detrás, delante del pódium estaban acomodadas bastantes filas de sillas; las muchachas se acomodaron en los asientos y se despidieron de sus amigos, ya que ellos tendrían que ir con sus compañeros de clase.
No pasó mucho cuando llegó la profesora Donur, la señora Nerzo y un montón de profesores desconocidos, al único que reconocieron fue al profesor Dahen, que se encontraba muy serio en su silla.
La señorita Donur ocupó el pódium y ofreció unas cuantas palabras, después, cada uno de los profesores expresaron sus más sinceros deseos de éxito a sus alumnos, fue entonces cuando la señora Nerzo pasó al pódium y comenzó a decir nombres, en el momento en el que dijo: «Iniesto Ápoca» Nereida le aplaudió lo más fuerte que pudo, el chico se levantó e hizo una gran reverencia ante la mujer y tomó su diploma, caminó después hacia las plataformas que había detrás; lo mismo sucedió cuando la señora Nerzo dijo «Dimitri Oblioka», Shinzo sintió algo en su interior que se revolvía al verlo levantarse y mantenerse de pie y orgulloso en esa plataforma.
Cuando terminó la ceremonia, comenzó el gran baile, Nereida e Iniesto no tardaron en unirse a las primeras parejas al centro de la pista, después siguieron Kimiosea y Naudur; Esmeralda fue invitada por un chico del grupo de sus amigos y Shinzo los miraba a todos desde una esquina.
—¿Por qué tan sola, señorita? —se escuchó una voz en el oído de Shinzo que volteó aterrada.
—Me espantaste, tonto —rió la chica al darse cuenta de que era Dimitri.
—¿Quieres bailar?
—Realmente no, pero sería agradable charlar —dijo Shinzo sonriendo.
—¿Charlar?
—No recuerdo una sola vez en la que no hayamos discutido mientras charlábamos —recordó la chica contenta.
—Bien, salgamos un momento —expresó Dimitri al paso que comenzaba a caminar hacia la salida, la muchacha lo siguió y avanzaron por el bosque.
—Felicidades por graduarte, ha de ser magnífico —congratuló Shinzo.
—Pues sí, es bastante bueno —afirmó el chico.
—¿Vendrán tus padres más tarde? —preguntó la muchacha y Dimitri sólo se giró a otro lado.
—No y... Realmente jamás van a nada. Iniesto se queja de que su padre no le atiende y su madre es sobre protectora, pero a veces desearía que al menos uno de mis padres me tomara en serio —confesó el chico.
—No lo sabía, lo siento. Mi familia tampoco es muy normal, mi tía era la siguiente en la línea de sucesión de Yosai. Ella murió de una enfermedad muy grave, jamás tuvo hijos, era casi como mi madre. La corona me pertenecía, pero la corte no lo reconoció y se la cedió a otra familia injustamente. Después nos desterraron como si fuéramos unos bandidos —relató la chica dejando al muchacho perplejo
—¿Quieres decir que estoy frente a una princesa? —preguntó Dimitri sonriendo.
—Algo así, pero ya no tiene importancia, no podíamos hacer nada contra ellos, fue una lástima —dijo la chica—. Pero ya hay que olvidarnos de ello, ¿de acuerdo?
—Es perfecto, aunque debo confesar que siento que me veo más apuesto cuando hablo de algo triste, ¿te parece? —bromeó el chico—. Mi ángel interno sale a la luz.
—No seas tonto —rió la muchacha dándole un ligero golpecillo en el brazo—. Te extrañaré.
—¿De verdad?
—Pues sí, somos amigos, será raro pasear y no toparse con un creído sobre un caballo —dijo sonriente la muchacha.
—Yo también te extrañaré, no todos los días encuentras chicas tan fuertes como tú —expresó Dimitri mirando las estrellas.
—¿Fuerte? —interrogó la chica.
—Sí, intensa. Tu personalidad, tu voz, tu mirada...
—¿Mi mirada? —rió Shinzo.
—Lo es, no puedes culparme por ello —continuó el muchacho—. De hecho, siempre me recordaste a una muñeca, por eso te decía así, no era para molestarte... Bueno, a veces era para molestarte —dijo mientras se reía recordando.
—Sólo disfrutabas molestándome —comentó sonriente Shinzo.
—Sí, pero realmente me gustabas —confesó el chico, su amiga lo volteó a ver y él hizo una cara parecida a la de un niño travieso, a la que no se pudo resistir la muchacha.
—¿Y ya no te gusto? —preguntó ella.
—Sí, pero por ti ocultaría mil verdades de mí ser y mil mentiras del ayer —recitó el chico causando risa en la muchacha.
—¿Es de un libro de Dahen, no? —cuestionó y el chico asintió contento—. Es una manera poética de decir que me mentirías
—No lo había visto de esa forma —expresó Dimitri mientras sonreía —. Bien, entonces que te parece: «En el mar de sentimientos, flota mi corazón...»
—«...Inconsolable hasta la muerte, pues de ti no tiene razón.» —completó Shinzo—. Ese poema nos lo hizo leer como un millón de veces.
—¿Un intento más? —preguntó Dimitri sonriente y la chica asintió.
—«Suaves mis deseos, intensa mi emoción. Sacrificio demandado, por tener tu corazón. Hilarantes pensamientos, por mi mente hoy han cruzado. Pues es dura la ambición, de no haberte besado.» —recitó el chico dejando a la muchacha sorprendida.
—Vaya, ese es difícil. Nunca nos lo dejó para leer.... ¿De quién es? —preguntó Shinzo.
—De alguien muy enamorado, llamado Dimitri Oblioka —respondió el chico y acto seguido le plantó un dulce beso—. Golpéame rápido para no sentir tanto dolor —pidió el chico después de besar a Shinzo
—No te voy a golpear —rió la chica abrazándolo.
—¿No? —preguntó sorprendido el muchacho.
—Creo que, tú siempre me gustaste también —confesó Shinzo causando una sonrisa en Dimitri.
—Esa es una gran noticia —dijo el chico mientras le daba otro beso.
Así se fue poco a poco haciendo más tarde, los chicos entraron después al baile. Cuando comenzaron a girar tomados de las manos todas sus amigas se quedaron estupefactas, era la primera vez que no veían a Shinzo y a Dimitri peleando o sin hablarse para nada, fue una velada inolvidable.
Regresaron lo más temprano que pudieron, pues al siguiente día sería la boda de su amiga. Shinzo pasó una de las noches más increíbles de toda su vida, se durmió pensando en Dimitri y lo mismo le pasó a él, todo el cielo nocturno parecía conspirar para que la muchacha y el muchacho se fueran enamorando más y más por cada estrella que miraban.
¡Recuerda acompañar tu lectura con la playlist oficial y seguir las últimas noticias en las redes sociales! ¡Gracias por todos sus comentarios!
-Sweethazelnut.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top