Cuando Jungkook llegó a su salón para hacer sus exámenes uno de los Alfas mayores lo interceptó en el camino hacia su asiento.

─ ¡Agh! ¿Es una marca de Omega? ─ Preguntó con desagrado. Se tapó la nariz. ─ Realmente hueles a Omega. ¿Le diste su merecido a ese Omega por intentar marcarte? Tranquilo, en pocos días se irá, pero te quedará una cicatriz.

Jungkook mordió su labio inferior con fuerza, no sabía que tan rápidamente tendría ganas de golpear a alguien, pero no era algo que quisiera hacer en un día de exámenes. Él sabía que Hoseok daría todo de él mismo para sacar las mejores notas, así que él debía concentrarse en eso. Lo sabía... pero hacerlo era otra cosa.

─ No, no se irá porque yo acepte la marca. ─ Le dijo sumamente molesto. ─ Yo le pedí marcarme, ¿No sabe que antes se hacía así? ─ Ahora otros Alfas en el lugar lo miraban extraño también.

─ ¿Te dejaste marcar de un Omega? ¿Qué tan poco Alfa eres? ─ El Alfa mayor comenzó a reír y otros Alfas le acompañaron.

─ Soy más Alfa que usted, ¿Le da tanto miedo que su Omega lo marque? ¿Acaso no ama a su Omega? Pues yo si amo al mío y pienso que él también tiene derecho. ─ Le dijo.

─ ¿Qué no es tu Omega el defectuoso? ─ Preguntó el Alfa. ─ Con razón esa mordida es tan chiquita y ridícula.

Jungkook cerró sus puños para controlar la necesidad de convertirse en lobo y retar al tipo, era un instinto de Alfa hacer aquello, pero no era ni el momento ni el lugar.

─ Es perfecta. ─ Se limitó a decir y luego tomó asiento. ─ Metase en sus propios asuntos viejo.

─ ¿Viejo? ─ Preguntó el Alfa asombrado.

─ Sí, viejo. ─ Le dijo Jungkook encogiendo los hombros.

El catedrático llegó al aula por lo que el Alfa mayor se sentó en su asiento refunfuñando porque lo habían llamado viejo. Jungkook suspiró intentando calmarse, él había hecho lo correcto por Hoseok, dejarse marcar. Llevó su mano a su marca y acarició la piel sensible mientras cerraba los ojos unos segundos.

Se sentía bien... se sentía cálido.

Sonrió e intentó volver a concentrarse para sus exámenes. Se apresuró para poder ir al encuentro de Hoseok, sabía que el Omega iría con sus amigos un rato probablemente, pero cuando lo llamara él estaría listo para ir a su encuentro. Todos en el salón se impresionaron cuando se levantó a entregar su último examen, incluso el catedrático.

─ Revisé el último avance que me enviaste, Jungkook. ─ Le dijo haciendo que éste se volteara antes de salir del salón.

Jungkook se regresó hasta la oficinita del catedrático.

─ Está lista para entregar. ─ Le dijo. ─ La licitación. Debo decir que me sorprendí con la parte del proyecto que está dirigido a un pequeño hospital que tiene tiempo apoyando a los Omegas defectuosos.

Jungkook asintió.

─ Ahí atienden a Hoseok, en realidad, es el único lugar en toda la ciudad. ─ Comentó Jungkook recibiendo el documento revisado con el sello de su catedrático.

─ Espero que te den el dinero para el proyecto, ¿Ahora trabajarás en las leyes? ─ Jungkook asintió. ─ Es la parte más rápida, creo que terminarás tu tesis mucho antes de que acaben las clases. Tal vez deberías considerar hacer un examen de suficiencia.

Jungkook se quedó mirando al catedrático, ¿Un examen de suficiencia?

─ Te has adelantado en los estudios para poder acabar tu tesis antes, por lo que ya has cubierto casi todo el material de la maestría. Pide el examen de suficiencia, así no deber cursar y sólo entregar tu tesis al final. ─ El catedrático sonrió mientras Jungkook asentía enérgicamente, eso apresuraría el proceso que estaba llevando para poder conseguir todo lo que Hoseok necesitaría.

─ Muchas gracias. ─ Dijo haciendo una inclinación y luego caminó emocionado hacia la salida.

─ Espero el próximo avance, ya la propuesta de leyes. ─ Jungkook asintió desde la puerta, notó que todos en el aula lo observaban, incluyendo al anciano que lo había criticado por su marca y por primera vez se sintió orgulloso de sus logros. No podía esperar para contarle a su pequeño Omega.

Comenzó a caminar por el pasillo de la universidad, no podía creer cómo pasaba el tiempo, si le hubieran dicho hace cuatro meses que volvería a la universidad de propia voluntad y que estaría trabajando tan duro para poder proponer leyes al congreso nacional, honestamente, se hubiera reído, pero amaba tanto a Hoseok. Incluso, él realmente no le iba tanto al área política, pensó que se quedaría en el área empresarial.

Suspiró mirando su trabajo, tal vez debería entregarle la licitación a Jin, ya habían planeado esto y Jin tenía más experiencia manejando esa área, sólo necesitaba el apoyo de la universidad para que no fuera una simple licitación personal y ahora ya la tenía. Literalmente el proyecto de ayuda a los Omegas defectuosos que incluía campañas y adecuación de un hospital digno para ellos, era un proyecto de la universidad más prestigiosa, contenía el sello de la universidad, sus catedráticos lo apoyaban.

Realmente esperaba que eso fuera suficiente...

Llamó a Jin y éste tardó una hora en llegar por el documento. Ambos se dieron la mano emocionados por aquello.

─ ¿Sabes Jungkook? Al principio creí que serías de esos Alfas que prometen cosas a sus Omegas sólo para hacerlos sentir bien, pero ahora. ─ Señaló la marca de Hoseok. ─ Veo cuán en serio vas. Me siento muy bien por haberte conocido.

Jungkook sintió sus mejillas sonrojar un poco, no esperaba que nadie alabara lo que hacía, tenía que admitir que después de ver los rostros de todos esos Alfas mayores criticandolo internamente, era bueno que un Alfa cómo Jin le dieron todos esos consejos y le ayudara a sentirse más seguro con Hoseok.

─ ¿Quieres tomar algo antes de irte? ─ Lo invitó Jungkook pero Jin negó con la cabeza.

─ Si me voy ahora lograré llegar a tiempo a la oficina de licitaciones. ─Le explicó. ─ Entre más rápido entre nuestra licitación mejor será.

Jungkook asintió enérgicamente y muy emocionado.

─ A demás también quiero leerlo y estudiarla un poco más antes de entregarla. ─ Agregó Jin.

Ambos se despidieron con un abrazo amistoso, era la primera vez que tenían aquel gesto, pero Jin estaba emocionado por Tae y Jimin, mientras que Jungkook estaba emocionado por Hoseok. Sï, tal vez ambos tenían incentivos distintos pero eso no significaba que las cosas no funcionarían.

Jin se fue y Jungkook cruzó los dedos deseando que todo saliera bien, en la noche llamaría a Jin para saber que tal había salido todo. Claro la licitación podría tomar varios días en caso de aprobarse, pero habían cosas que podían acelerar el proceso, Jin sabía muy bien de ello y haría todo lo posible.

Jungkook se regresó, iba pensando si debería ir a esperar al cuarto o ir a la cafetería, pero un sentimiento de angustia hizo que se quedara de pie pensativo. Comenzó a sentir mucho miedo y angustia, no sabía qué sucedía pero sabía que no era normal. Sacó su celular y marcó a Hoseok, pero ya que este no contestaba decidió ir él hacia donde su Omega y sus amigos se reunían constantemente.

Hoseok llevó su mano a un árbol sosteniéndose mientras respiraba profundo, los demás notaron su actitud y su aroma a temor, muy fuerte que había liberado sin poder controlarse.

─ Hoseok, ¿Estás bien? ─ Fue Kai quien se atrevió a preguntar.

Él no podía creerlo, no quería creerlo pero los martilleos estaban allí, suaves y constantes, tal como los había sentido aquella primera vez. Dos cachorros, Hoseok estaba seguro. Estaba tan ocupado pensando en ello y entrando en pánico que ni siquiera escuchaba.

Hasta que Kai tomó su orejita. Hoseok levantó el rostro mirando al Alfa, sus lágrimas ya caían por sus mejillas.

─ ¿Estás bien? ─ Preguntó el Alfa soltando la oreja.

El pelirrojo negó con la cabeza, quería a su Alfa, pero también tenía miedo de éste. ¿Por qué? Por que él no quería abortar a sus cachorros, pero estaba seguro, si su cuerpo no había podido con uno, mucho menos con dos.

Jungkook no tardó en llegar corriendo, todos los amigos lo voltearon a ver y Hoseok sintió su cuerpo temblar. El Alfa dió un gruñido de advertencia que provocó que todos se alejaran de su Omega y luego corrió a su lado.

Lo tomó de la cintura y lo atrajo a su cuerpo.

─ ¿Que sucede? ─ Preguntó, pensó de todo, incluso que sus amigos lo hubieran tratado mal.

Pero Hoseok se acercó a su oído y susurró con voz temblorosa.

─ Escucho... dos... martilleos extraños.

Dos martilleos extraños...

Las palabras empezaron a girar y resonar en la cabeza de Jungkook. Todos los miraban asustados por no saber qué sucedía.

─ Tenemos... que irnos. ─ Les dijo Jungkook a los demás y ellos sólo los observaron irse, sintiéndose demasiado confundidos.

El camino hacia la habitación fue silencioso, sólo escuchaba los suaves sollozos de su pequeño pelirrojo y sentía cómo a veces éste lo abrazaba con más fuerza.

Maldita sea...

¿Por qué ahora?

Se preguntó Jungkook, él se culpaba por completo, no debió dejar embarazado a Hoseok, no ahora. ¿Por qué tenía que ser un Alfa tan tonto? Se preguntaba, él no quería sufrir a su pequeño. La orejas de Hoseok estaban agachadas, era más que obvio que se sentía mal.

Entraron a la habitación, y Hoseok corrió a sentarse en la cama, movía sus manos de forma nerviosa, y por veces cerraba sus ojos intentando pensar.

─ Hoseok... ─ Lo llamó arrodillándose frente a él en la cama.

─ No quiero abortar... ─ Dijo Hoseok llevando su mano a su boca para intentar acallar los sollozos que siguieron sus palabras, pero fue en vano.

Su Alfa llevó su mano a su mejilla y acarició. Él sabía lo que Jungkook diría, diría que no era una opción, que él no podía morir... Sabía que su Alfa no podía apoyarlo en esto, por eso cuando escuchó las palabras de la boca de Jungkook se quedó como congelado.

─ ¿Hoseok? No tienes que abortar. ─ Repidió Jungkook. ─ Yo... bueno Jin ya se llevó la licitación.

Hoseok miró a Jungkook a los ojos, eran serios y profundos, el Alfa no le estaba mintiendo. Sus orejas se levantaron lentamente.

─ ¿Es en serio? ─ Preguntó el Omega. ─ Jungkook...

Se lanzó hacia adelante y juntó sus labios con los del Alfa dándole un beso necesitado, intentaba transmitir todo lo que sentía, pero realmente Jungkook podía sentirlo a través del vínculo.

Ambos se separaron y se miraron a los ojos.

─Aún así... no será fácil. ─ Dijo Jungkook acariciando su cabello. ─ Hubiera querido esperar a que todo estuviera en orden y no tener que ir haciendo el camino... pero por tí haré el camino ahora.

─ Tiene que haber una forma en la que pueda ayudarte. ─ Le dijo el pelirrojo.

─ No me ocultes nada. ─ Le pidió Jungkook. ─ Siempre dime todo lo que sientes, así podremos estar en esto juntos.

Hoseok se sentó bien en la cama y llevó sus manos a su abdomen bajo.

─ ¿Escucharon cachorritos? ─ Preguntó y luego se rió porque sabía que sus pequeños sólo tenían horas de haber aparecido, era imposible que lo escucharan. Pero es que el simplemente no podía evitarlo. ─ Voy a cuidarlos mucho para que nazcan bien y seamos una familia muy pronto.

Jungkook se emocionó escuchando aquello, pero también sintió el peso caer sobre sus hombros, ahora todo iba a cambiar otra vez. Sabía que no podía evitar que Hoseok sufriera, pero si él no quería abortar... él tenía que apoyarlo y por eso agradeció haber avanzado tanto en tan poco tiempo y poder darle la opción a su Omega.

Incluso ya estaba pensando en comenzar a invertir en el hospital antes de que se aprobara la licitación, sería arriesgado pero no sabía cuánto tiempo Hoseok podría con la carga sin ayuda médica correcta.

Esa tarde todos se sintieron nerviosos al recibir la noticia, incluyendo a Jin que, aunque traía buenas noticias sobre el proyecto, no se esperaba aquello. Realmente nadie se lo esperaba. Taehyung pasó horas regañandolo por haber metido la pata, él Omega estaba tan enojado que creyó que si lo hubiera tenido de frente, éste lo hubiera golpeado. Esperaba que pudieran lograrlo esta vez.

Jungkook entendió que si había alguien más que sintiera la carga de ayudar a Hoseok, era Taehyung, él era el único médico que lo ayudaría. Después de hacer todas la llamadas Jungkook se giró para ver a su Omega, se sorprendió de que Hoseok se encontraba dormido.

Al parecer se había quedado dormido sentado y luego simplemente se lanzó hacia atrás,¿Qué tan cansado estaba?

Yoongi y Namjoon no tardaron en llegar a la habitación y, mientras Hoseok dormía, Jungkook les contó exactamente lo que había pasado. Taehyung le había explicado que Hoseok tendría que ir al hospital, ahora que se encontraba estable, sería más fácil así que cuando empezaran los síntomas. Por lo que él y Hoseok tendrían que separarse un poco, Jungkook debía trabajar en ello para lograr que todo saliera bien.

Namjoon y Yoongi asintieron cuando éste les pidió acompañar a Hoseok en el hospital cuando él no estuviera. Luego los tres junto con Jin prepararon todo para el día siguiente.

Cuando Hoseok despertó al día siguiente su nombre se escuchaba en cada rincón de aquel país, todos conocían su historia, la cual se encontraba en todos los periódicos y en todas las redes sociales. Incluso había sido leída en varios noticieros. Absolutamente todos los encabezados y primeras planas decían el nombre que le habían dado a su historia:

Imperfecto

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