—De acuerdo, ¿y ahora qué? —inquirió Kaminari.

Los cuatro poderosos jóvenes iban a comenzar su aventura para salvar a Mepika Ungüebo de las manos del malévolo Meago Lapaja.

Entre la buenorra arquera, el decidido caballero, el ilusionista morenazo y la loli gruñona iban a conseguir pasarse el juego.

O al menos esa era la intención.

—Hay que dejar el huevo en su sitio —confirmó Shouto inexpresivamente mientras observaba la bolita que tenía en mano.

—¿No será mejor que la guarde Kacchan…? —aconsejó Izuku—. Digo, él tiene una mochila bastante grande.

—¡Mochila, mochila!

—¿Qué mierda…? —murmuró Katsuki al oír una voz detrás de él.

—¿Q-Qué ha sido eso…? —agregó Midoriya algo sorprendido y estando alerta por si había alguien más entre ellos.

—Bakugou, tu mochila habla —sentenció Todoroki para luego acercarse por detrás y quitársela fácilmente.

—¡DEVUÉLVEME ESO, MIERDA! —se quejó al sentirse robado y sin poder hacer nada para impedirlo.

—¡Genial, veamos qué tiene dentro! —exclamó Denki con una sonrisa—. ¡Seguro que hay algo que puede ayudarnos!

Así fue como Todoroki y Kaminari se alejaron un poco para rebuscar dentro de la mochila de Bakugou mientras que este era retenido por Midoriya.

—¡SUÉLTAME, DEKU! —gritó al sentir las cálidas y grandes manos de su amigo de la infancia.

"Ah… Kacchan es pequeñito, suave y no tiene fuerza…"

—¡Hay un mapa! —avisó el rubio morenazo con una sonrisa y sacando dicho objeto.

—¡Exacto!

De nuevo una voz desconocida llamó la atención de todos los chicos.

—¡Soy yo, el mapa! —exclamó el trozo de papel mientras flotaba y se acercaba hacia Katsuki—. ¡Pero solo Koman Mikaka puede leerme! —finalizó cayendo en manos de la loli amargada.

—¡Y yo que pensaba que Bakugou era el menos útil…! —agregó Kaminari tentando a la muerte.

—Cuando regresemos de esta puta mierda... —empezó Katsuki— TE MATARÉ.

—¡N-No te tengo miedo! —sentenció el rubio con una sonrisa señalando, algo nervioso, a la pequeña niña.

—Solo si regresamos —murmuró Todoroki con tranquilidad mientras señalaba detrás suyo.

Todos dirigieron su mirada hacia donde había estado Shouto (porque básicamente había comenzado a correr en dirección opuesta), y pudieron ver cómo una tribu de niños pequeños con lanzas y subidos a motos se dirigían hacia ellos mientras gritaban.

—Midoriya, ¿esto significa peligro…? —inquirió Kaminari aterrado al notar que tenían que salir rápidamente de ahí.

—Kaminari-kun, ¡corre! —sentenció partiendo carrera también; eran demasiados enemigos.

Todoroki ya se había largado hacía un rato y a gran velocidad mientras sus pechos de balanceaban de un lado a otro.

"Sí que son pesados…"

Por otro lado, Kaminari estaba huyendo como si le fuese la vida en ello. Su velocidad era tal que en pocos segundos alcanzó a Shouto.

—¡Vaya, sí que soy rápido! —exclamó admirando su gran velocidad.

"Es porque eres negro." Pensó Todoroki mientras seguía corriendo tranquilamente.

"Aunque… creo que me estoy olvidando de algo…"

[...]

—¡K-Kacchan! ¡¿Qué estás haciendo?! —gritó Izuku al darse cuenta que Katsuki se había detenido y estaba encarando a los niños con lanzas en moto.

—¡VENID, MIERDA! ¡VENID SI TENÉIS HUEVOS! —exclamaba la loli mientras miraba con el ceño fruncido a los enemigos con una sonrisa y abría sus brazos en posición ofensiva.

—¡K-Kacchan! —siguió con gran preocupación al ver cómo su amiguito de la infancia era atravesado fácilmente por una lanza.

—¡PUTO JUEGO DE MIERDA, PUTOS TODOS…

Justo en ese instante se desvaneció en cuadraditos y volvió a caer del cielo.

—¡Tenemos que irnos! —declaró Izuku recibiendo a Katsuki en brazos al estilo princesa y comenzando a correr hacia donde Kaminari y Todoroki habían huido.

—¡NO TOQUES AHÍ, MIERDA! —volvió a quejarse Bakugou al sentir las manos del Deku en su trasero y en sus pechos planos.

—¡P-Perdón!

[...]

—Supongo que ya estamos a salvo —comentó Denki estirándose alegremente.

Habían llegado a la punta de un precipicio y se hallaban sentados con gran tranquilidad. Porque no podía pasar nada malo en un precipicio, ¿no?

—¡C-Chicos! —la agitada voz de Izuku llamó la atención de ambos—. ¡Ya vienen! —siguió dejando ver cómo unos enanos en moto les perseguían.

—Oh —murmuró Shouto al ver a Katsuki en brazos de Izuku—. Ya recordé —prosiguió sacando su bonito arco de flechas y comenzando a disparar.

Sin querer (queriendo) una flecha dio a parar en la cabeza de Midoriya, desapareciendo en cuadraditos y dejando a Bakugou en el suelo, al cual nuevamente volvieron a atravesar con una lanza y se desvaneció para caer del cielo junto a Izuku.

—¡¿Qué demonios haces, Todoroki?! —regañó Denki aterrorizado al ver lo que aquella arquera había provocado.

—Fallé, perdón —comentó con serenidad—. Supongo que solo podemos saltar —agregó girándose en dirección al precipicio.

—¡¿Estás demente?! —exclamó Kaminari cada vez más preocupado.

—Nos vemos —aplicó con un brillo en sus ojos para arrojarse en seguida al vacío.

Al cabo de unos segundos, Todoroki cayó del cielo… en la misma punta del precipicio, exactamente al lado de Denki.

—Vaya —comentó mientras contemplaba cómo todos los enemigos les acorralaban.

"Esto no estaba en mis planes."

—¡C-Chicos! ¡A Kacchan solo le queda una vida! —explicó Midoriya agitado mientras seguía cargando al histérico Bakugou y se juntaba con sus otros dos "aliados".

—¡Ah, como yo! —exclamó Kaminari con alegría.

—¡¿Q-Qué vamos a hacer?! —siguió Izuku mirando a los múltiples enemigos.

Los niñitos subidos en motos y con lanzas les tenían acorralados contra el precipicio.

—Este juego es una puta mierda —comentó Katsuki con ira.

—Creo que... ¿tenemos que luchar? —agregó Kaminari con dudas.

Pero justo en ese momento los niños atravesaron a Shouto con una lanza en la frente y a Izuku con otra lanza en la cabeza.

—Oye, retrasado —comentó Bakugou al ver lo que había sucedido.

—¿Sí…? —inquirió Denki comenzando a sudar.

—¿En qué dificultad pusiste este estúpido juego?

—Pues… ¡Obviamente en "Insane Ultra Hard"!

En unos pocos segundos Todoroki y Midoriya volvieron a caer del cielo.

—Me queda una vida —aclaró Shouto como si le importase lo más mínimo.

—A mí también… —siguió Izuku.

—¡Genial, los cuatro tenemos solo una! —añadió Kaminari—. ¡Moriremos juntos!

—Me cago en todos vuestros putos muertos.

Esas fueron sus últimas palabras.

Después de aquello, los niños motoristas atravesaron a los cuatro jóvenes con lanzas y desaparecieron.

GAME OVER

[...]

—¿Dónde… estamos? —se preguntó Midoriya mientras frotaba su nuca por cierto dolor y abría los ojos para ver una sala oscura.

—¡¿Seguimos vivos?! —preguntó Denki con gran ilusión.

—Me duele el culo —comentó Shouto extrañado, pero luego se dio cuenta de que era porque estaba sentado en la cara de Katsuki.

—YXJOTJEBXJSMAJFDJTO —trató Bakugou de quejarse.

—¡Muy buenas, jóvenes! —una voz misteriosa les comenzó a hablar.

—¡¿Estamos vivos?! —interrumpió el rubio alegre.

—No —respondió nuevamente aquella voz—. Estáis muertos.

—Ah, mierda.

—Es la primera vez que un grupo que juega a este videojuego no consigue pasárselo. No puedo creer que hayáis muerto en tan solo cuatro capítulos. Sois realmente patéticos, siento vergüenza ajena —prosiguió la misteriosa voz—. Por eso he decidido hacer como si todo esto no hubiese pasado. Os reviviré y regresareis al juego nuevamente con tres vidas cada uno. Esta vez la dificultad está en fácil.

—¡¿Y por qué no simplemente nos dejas volver a casa?! —siguió reclamando Kaminari.

—¡Jajaja! Es que sino, no mola —aplicó con alegría—. ¡Y no os matéis entre vosotros! —finalizó mirando a Todoroki.

—¿Qué? —inquirió Shouto inexpresivamente al sentir las miradas en él.

Esta vez, sí que sí, iban a intentar pasarse el juego.

[...]