El momento en que se dan cuenta que están verdaderamente enamorados de ti.

Jinho

Esos días había estado algo ocupado debido a que tenía planeado grabar un cover a lo que lo habías acompañado durante gran parte del proceso incluso cuando llegó el día de grabación cuando también estabas ahí en el estudio apoyándolo. Todos los sentimientos se le revolverían cuando, al finalizar la grabación, lo primero que escuchara fueran tus aplausos desde la esquina donde te habías sentado.

El verte ahí sentada aplaudiendo con una gran sonrisa en tus ojos hizo que su corazón se pusiera a latir como loco tanto que tuvo que llevar su mano a su pecho para controlarse. En ese momento se daría cuenta de que quería verte ahí a su lado en todos sus momentos importantes, apoyándolo y observándolo con ese brillo en los ojos por el orgullo.

HUI

Estaban en las preparaciones para el nuevo álbum del grupo pero antes del comeback la agencia había pedido una canción extra que fue a parar como responsabilidad del líder. Por esta razón los chicos notaron como Hui se encerró en el estudio para trabajar en este proyecto solo que no volvió a salir de ahí en casi un día. Preocupados, te llamaron ya que sabían que serías la única que podría sacarlo de ahí, sin tardarte mucho llegaste a la agencia cargando unas bolsas con comida para él.

En el momento en que entraste en el estudio sin tocar la puerta, Hui estaba listo para girarse y encarar con un grito a cualquiera de los chicos que hubiese ido a fastidiarlo con que saliera, pero al verte ahí de pie con una bolsa en una mano y en la otra lo único que pudo hacer fue bajar la cabeza con los brazos abiertos esperando que te acercaras a él para luego abrazarte dejando su rostro sobre tu abdomen. No sabía cómo pero con tan solo tu presencia habías logrado bajar sus niveles de estrés casi al piso, quizás si estaba un poco enamorado de ti.

Hongseok

Había aprovechado su día libre para proponerte pasarlo juntos paseando y tal vez también yendo al cine, sin embargo la madre naturaleza le hizo una mala jugada enviando una lluvia torrencial ese día obligándolos a ambos a mantener sus planes bajo techo pero esto no lo desanimó pues de inmediato propuso ver una película en tú casa, principalmente para no ser fastidiado por los demás, y así lo hicieron.

Ambos se encontraban en el sofá, ya habían visto algunas películas y estaba oscureciendo, el cansancio comenzó a cobrar factura en ti logrando que te quedaras dormida sobre el hombro de Hongseok. Este, en vez de sentirse incomodo por la posición en la que quedó, aprovechó la cercanía para observar cada detalle de tu rostro sin la vergüenza de que te
fueras a dar cuenta. Sentía algo muy extraño en el interior pues experimentaba las tan afamadas mariposas que no sentía desde el primer día en que te conoció, ¿será que algo había cambiado? O ¿será que en su interior se habrá dado cuenta de algo?

Shinwon

Ese día lo habías ido a visitar a su práctica debido a que tenías bastante tiempo que no veías a los chicos y ellos disfrutaban también tu presencia, podía verse la felicidad en el rostro de tu novio viendo cómo te llevabas tan bien con todos su amigos. Entonces llegó un momento cuando, cansada te fuiste a sentar en el suelo frente a Shinwon quien extrañamente solo se quedó observándote fijo.

“¿Sabes? Últimamente me siento muy enamorado de ti”

Soltaría estas palabras con una sonrisa en su rostro haciéndote reír levemente por su espontaneidad justo antes de recibir un gran abrazo de su parte.

Yeo One

Estaban en medio de una elaborada cena preparada por ambos siguiendo al pie de la letra un tutorial de Youtube, mantenían una conversación sobre la película que habían visto el día anterior solo que te diste cuenta que la mirada de Yeo se mantenía fija en tu plato con unos trozos restantes de carne y cabía decir que él había terminado la suya. Riendo por lo bajo tomaste un pedazo con los palillos acercándolo a su boca para que lo comiera.

“Ahh~ Te amo tanto”

Cabe decir que esta era la primera vez que alguno de los dos decía estas palabras. 

Yan An

Ustedes llevaban algunos años siendo novios, incluso se conocieron cuando ambos vivían en China. Tenía muy en claro lo mucho que se amaban mutuamente, uno no se muda a otro país por cualquier persona, sin embargo esto no quitaba el hecho de que cada día se enamorara más de ti por razones muy diversas.

En ese tiempo había estado bastante ocupado debido a que recién volvía de unas cuantas actividades que tenía en su país natal lo que hizo que se le acumulara el trabajo en Corea haciéndolo pasar más tiempo en la agencia. Ese día te había dicho que llegaría muy tarde por lo que no quería que lo esperaras despierta, sin embargo cuando llegó la primera imagen que vio fue a ti dormida en el sofá con el control remoto en la mano y el televisor encendido. Nunca había sentido que alguien se preocupaba tanto por él.

Yuto

Si algo odiaba Yuto era que algo le impidiera poder cumplir con sus actividades por lo que estaría de un humor de perros al enfermarse antes de un concierto que tendrían en Seúl siendo enviado a casa a descansar por órdenes del mánager y por supuesto que los chicos terminaron contándote a ti. Unas horas después llegaste a los dormitorios de sorpresa viendo a tu novio con una expresión de que quería matar a alguien o matarse a sí mismo, solo que tú ni te inmutaste y pasaste a su lado con la misma sonrisa con la que llegaste.

“Te traje medicina, dulces y algunos juegos”

No lo viste, pero una pequeña sonrisa apareció su rostro sintiendo su corazón cálido, no por la fiebre, viendo cómo cuidabas de él.

Kino

Kino había tenido mucho trabajo ese día por lo que al llegar a casa lo único que hizo fue dirigirse a su habitación y caer rendido en su cama. El primer pensamiento que cruzó por su mente en la mañana cuando despertó fue el hecho de que no había hablado en lo absoluto contigo el día anterior aún cuando había prometido siquiera llamarte. Con la culpa apretando su corazón buscó su celular para escribirte, pero encontrándose con la sorpresa de que había al menos 10 mensajes provenientes de ti recordándole descansar y comer bien ya que sabías que si no te había escrito debía estar demasiado ocupado.

Conmovido apretaría el aparato contra su pecho dejándose caer de espalda en la cama con una gran sonrisa asomándose en sus labios. No  podía creer la suerte que tenía de tenerte a su lado.

Wooseok

Su día había ido de la peor manera posible, había tenido que mostrar las opciones de canciones que se había tardado tanto en hacer pero con un leve vistazo las rechazaron todas poniéndolo otra vez en el principio. Estaba de observarle y no hablarle.

Cuando llegó a casa de inmediato te diste cuenta de su enfado ya que incluso entró tirando la puerta de un golpe, sin embargo quisiste tratar de consolarlo y calmarlo haciendo que comenzara a subir el tono y que ambos terminaran discutiendo, o mejor dicho, Wooseok gritaba y tú trababas de hablar, hasta que llegó un punto en que te gritó que te fueras y lo
dejaras solo. Solo que no lo hiciste, solo te quedaste mirando cómo se sentaba en el sofá.

“ ¿Por qué no te vas?”

“Porque solo estás estresado y cuando comenzamos a salir prometimos estar en las buenas y en las malas. No te voy a abandonar así como así”

Al escuchar estas palabras algunas lágrimas se acumularon en los ojos de Wooseok, a lo que no dudaste en acercarte viendo como se volvía tan pequeño al ser envuelto por tus brazos cuando su llanto comenzó. Sabía que había escogido bien a la persona con quien quería pasar el resto de su vida.