Vengadores - La hija de Tony, Prt 1.
Imagina ser una niña cuya familia de bajos recursos escogió "dejar" cerca del centro de Manhattan, sin imaginar que serías encontrada por la asistente de la señorita Pepper Potts, quien a su vez te presento con el grande y único Tony Stark, con la intención de quizás cuidar de ti.
Pepper te crió como a una hija y cada que podía te llevaba a la casa de Tony a que "aprendieras de su trabajo" pero realmente el multimillonario le pedía que te trajera. Tony jamás lo admitiría pero tu compañía le brindaba algo de alegría; incluso cuando tenías 6 años le dijiste 'papá' por accidente, pero él dejó que le siguieras diciendo así solo por "cortesía."
En 2012, cuando tenías 20 años, tuviste la oportunidad de ir con Iron Man a Alemania para detener al "criminal de guerra" Loki y así conocer al resto de Vengadores: el Capitán América, la Viuda Negra, Ojo de Halcón, Thor, y el doctor Bruce Banner "Hulk." Estaba de más decir que estabas "fangirleando" en ese momento, pero te esforzaste por reprimir toda tu emoción para no hacer el momento incómodo.
Desde la derrota de Loki formaste parte del equipo, por lo que los acompañaste a desmantelar todas las bases de Hydra en el mundo, incluyendo a la base central del barón Strucker en Sokovia.
Y allí...
...allí todo cambió...
...
– ¡Hay un alterado en el campo! –dijiste por el intercomunicador a los demás Vengadores– ¡el hijo de su puta madre acaba de golpearme! –dijiste en voz alta y fuerte para que, si aquel chico guapo siguiera cerca, pudiera escucharte.
– ¡Lenguaje! –el Cap fue el primero en reprenderte por las fuertes palabras.
– ¡No me voy a disculpar! –recriminaste.
– ¡Concéntrense!, ¿cómo es él? –preguntó Bartón por el intercomunicador.
– Alto, caucásico, veloz... –enumerabas mientras ibas por la nieve sigilosamente procurando no ser notada– y cuando digo "veloz" me refiero a que podría evadir una bala si le dispararas... –te detuviste enseguida cuando escuchaste el sonido de una flecha cuando pasa muy cerca de ti. Te agachaste inmediatamente y miraste a tu alrededor hasta encontrarte con Clint dándote una mirada de disculpa– ¿qué te pasa, maldita copia de 'Katniss'?
– No te apuntaba a ti, le apuntaba al velocista hijo de puta –te respondió Barton usando el mismo "apodo" que tú le pusiste al chico.
– ¡Ah, gracias, ahora que me lo explicaste me siento mucho mejor! –dijiste con sarcasmo y sorna antes de que un destello azul se llevara por delante a Barton y lo mandara al piso.
Cuando el arquero levantó la vista, el chico peliblanco reguló su velocidad y se le acercó diciéndole -¿acaso no lo viste venir?- y siguió de largo cual correcaminos.
– Idiota –dijo Barton adolorido en el suelo.
– El chico habló lo suficientemente alto como para que tú pudieras escuchar su voz cuando pasó junto a Barton, no estabas tan lejos después de todo, por lo que pudiste distinguir su acento– su acento es sexy –dijiste por el intercomunicador encogiéndote de un hombro para molestar a Bartón.
– ¿DISCULPA? –saltó indignado tu padre adoptivo– eres apenas una niña de 25 años, ¡no puedes hablar de muchachos hasta que cumplas 50!, ¡el único hombre que te debería parecer sexy, soy yo!
– ¡Tony, eso se escuchó muy mal! –dijo Steve por el intercomunicador con un tono incómodo.
– ¿En serio todos vamos a ignorar el hecho de que hace 10 minutos el Cap me dijo "lenguaje"? –preguntaste por el intercomunicador mientras acababas con unos soldados de Hydra enviándolos en tus portales hacía Hulk.
– ¡Ya sé! –respondió Steve por el intercomunicador y luego de unos minutos añadió– retiro mis palabras.
No sabes quienes fueron tus padres biológicos pero presentías que debían ser mutantes o seres alterados como aquel velocista, ya que naciste con la habilidad de crear portales en el espacio tiempo o entre dimensiones; es un tipo de magia, según un "experto," pero jamás se ha manifestado de otra forma que no sean portales. Gracias a tu poder, Fury te consideró a ti primero que a Tony para la iniciativa Vengadores.
...
Resumen: pasó el tiempo, el loco de tu padre adoptivo creó a Ultron, Ultron resultó ser malo, "los gemelos maravilla" se unieron a Ultron para vengar su pasado y a sus padres, pero no pasó mucho tiempo para que ellos mismos se dieran cuenta de que secundaban a un "robo-psicópata," por lo que decidieron unirse al bando de "los justos y los buenos" y detener a Ultron en Sokovia.
"Qué alguien me recuerde porqué nos tenemos que cambiar juntos -pensabas- ¡okey!, 'Melisandre' y yo cambiándonos en la torre para ir a la batalla, puedo lidiar con eso; pero, ¿tenía que venir el hermano también con nosotras?, ¡claro que tenía que venir!, digo, ¡ni que fuera incómodo!; él y ella son hermanos, se conocen de toda la vida, compartieron el útero, ¡tienen historia!, ¿pero y yo con ellos?, ¡yo no tengo nada que ver con ninguno de ellos!, así que, de verdad me van a decir que este tipo no pensó que sería incómodo para mí el cambiarme... ¡guao, tiene los abdominales bien marcados!, cómo los de Steve... ¡puta madre, me está mirando!, ¡me vio viéndolo!, ¡mierda!"
Sacaste la chaqueta de tu traje (que imaginaste sería lo único que te pondrías) y sentiste que se te acercaba para decir cerca de ti -¿disfrutando la vista?- y siguió de largo para sacar otra chaqueta roja para su hermana.
"Voy a mandar a este imbécil a la cima del Taj Mahal en India, a ver como se baja, y entonces le preguntaré -¿no viste eso venir, Pietro?"
...
Resumen parte 2: en Sokovia el equipo descubrió que Ultron planeaba "extinguir" a la humanidad con un artefacto hecho de vibranio; los Vengadores lucharon contra él con todo lo que tenían pero al final tuvieron que sacrificar una parte de la ciudad.
La orden fue 'que todos los civiles subieran a las naves de rescate', y en eso te encontrabas tú; ayudabas a todos a subir, mientras que el tiempo para que el "núcleo de energía" llegara al máximo iba disminuyendo minuto tras minuto; esto te hacía sentir ansiosa y angustiada, el tiempo pasaba y no veías a nadie de tu equipo regresando para estar a salvo; ni a Widow, ni al Cap, ni a Hawkeye... por Thor, Warmachine y Tony no estabas TAN preocupada, ya que sabías que ellos podían volar. Honestamente te sentías preocupada incluso por los Maximoff, esos dos podían ser unos completos granos en el zapato pero tampoco querías que murieran.
Viste a Natasha y a Clint bajar de un auto, seguramente robado, y Barton fue el único que bajó.
– ¿Qué pasó?, ¿y ella? –preguntaste siguiendo a Barton hacia el transporte preguntándole por Natasha, quien arrancó el auto otra vez y se fue.
– Se fue a buscar a Hulk –respondió el arquero, quitándose el carcaj y los guantes especiales para entonces sentarse cuando...
– ¡Costel! –preguntó una mujer desde atrás de ellos que parecía muy asustada– ¡veníamos del mercado!, ¡Costel!
Supusiste que se trataba de su hijo así que empezaste a buscar a tu alrededor a algún niño, pero no diste con ninguno dentro del transporte, fue entonces que volteaste hacia afuera, hacia unas escaleras escondidas detrás de unos escombros... ¡y ahí justo tenía que estar el desgraciado niño!, digo, el pequeño.
– Yo iré –dijiste resignada.
– No, iré yo –y antes de que dijeras algo más el testarudo pero decidido Hawkeye se acercó corriendo al niño para salvarlo.
Fue entonces cuando el sonido de disparos se hizo presente para todos, volteaste hacia arriba al techo transparente de la nave y viste un quinjet que disparaba justo hacia Barton y el niño.
Ni siquiera lo pensaste cuando lanzaste uno de tus portales en dirección a ellos para enviarlos de regreso al transporte. Barton se dio la vuelta protegiendo al niño de las balas y...
...
Pasaron solo 10 segundos para que la capa de tierra que levantaron las balas se disipara y dejara ver un auto cubriendo el lugar dónde minutos antes estuvieron Barton y el niño, pero no te preocupaste ya que sabías que tu portal los había succionado, pues pudiste sentir como tu magia absorbía algo, lo que no lograbas entender es como ese auto llegó allí.
Al instante Ojo de halcón asomó la cabeza desde atrás del auto con un semblante totalmente confundido, no se explicaba qué acababa de pasar; justo al igual que tú al verlos a ambos aun en aquel lugar estando 100% segura de que tu portal desapareció con algo dentro de él.
– Pero, ¿qué cara...? –tu duda fue interrumpida por los gritos de la gente detrás de ti; volteaste enseguida para ver justo a tiempo como tu portal desaparecía dentro del transporte aéreo luego de dejar lo que sea que haya absorbido.
Te acercaste rápido a esa zona y pudiste ver al "ratón Speedy Sokoviano" tendido en el suelo y mirando a su alrededor sin entender qué carajo había pasado.
– El peliblanco empezó a tocarse el cuerpo y luego alzó la vista con un semblante de puro asombro– ¡no me morí! –exclamó y dejó caer la cabeza hacia atrás con alivio.
– ¡Qué curioso! –dijiste adoptando una pose despreocupada poniéndote de pie frente a él– puse una trampa para un halcón y calló el hijo de 'Cruella de Vil'. Las vueltas que da la vida –dijiste haciendo una mirada reflexiva.
Ahora el auto tenía sentido: Pietro corrió a salvar a Barton, puso el auto como escudo para él y el niño, y cuando el portal lo tocó lo absorbió a él antes de que las balas lo tocasen... bueno, casi todas las balas.
Pietro trató de levantarse pero dio un fuerte gemido al menor movimiento e instintivamente llevó sus manos a su costado derecho. De inmediato tu semblante cambio a uno de preocupación, te acercaste de prisa y te agachaste examinando su costado y en cuanto viste la sangre brotar como cascada mientras se escurría de entre sus dedos entraste en pánico.
– No puede ser, ¡está muriendo!, ¡este pendejo se está muriendo!, ¡ayuda! –gracias a los gritos de desesperación un médico llegó rápido a la escena y tú te apartaste de inmediato para dejarlo trabajar.
Hawkeye llegó corriendo hacia ti también, y luego de ver que estuvieras bien, bajó la mirada hacia el médico para ver al velocista con una herida de bala en un costado, fue entonces que asimiló todo con un largo "ooh", luego miró hacia ti y tú le asentiste con la cabeza afirmándole que fue Pietro quien los salvó a él y al niño.
– Barton vio su oportunidad y agachándose a un lado del desteñido solo le dijo– gracias.
– Apuesto a que eso sí no lo viste venir –dijo Pietro sacando una media sonrisa divertida que cambió casi de inmediato por una mueca adolorida. Tú solo rodaste los ojos por el chiste que ya se estaba convirtiendo en una costumbre del velocista.
Barton se levantó del suelo estando feliz de que el "mocoso veloz" estuviese bien, aunque nunca lo admitirá en voz alta, claro.
– ¿Y el niño? –le preguntaste a Barton antes de que él se buscara un asiento ahora sí.
– Allá –te apuntó al lugar exacto dónde estaban él y su madre.
Todo parecía ir bien, incluso pudiste ver a Steve parado justo en frente del transporte vigilando el área por si habían más civiles o más robots asesinos, pero de un segundo a otro, toda la ciudad cayó en picada causando que el Capitán saltara dentro del transporte y que todas las personas empezaran a gritar desesperadas.
– ¡Wanda! –exclamó Pietro abriendo los ojos como nunca antes– ¡no, Wanda! –trató de levantarse importándole muy poco el agujero en su costado, que debía doler como el infierno, para volver a la ciudad que caía a su destrucción por Wanda; pero ya era demasiado tarde, la ciudad se destruiría en cuanto cayera o Stark y Thor destruirían el núcleo volando el pedazo de tierra en el aire.
– ¡Es posible que esté en otro transporte, no lo sabemos! –dijiste tratando de calmarlo, el Cap y Clint también tuvieron que venir a frenarlo antes de que se lastimara más la herida.
– ¡No lo está, yo debía ir por ella! –dijo Pietro dejando que el dolor interno de, posiblemente, haber perdido a su hermanita lo consumiera– ¡yo debía ir por ella cuando ya no hubieran más personas!, yo debía ir por ella... yo debía ir por ella... –Pietro no dejaba de repetirlo mientras lloraba y se retorcía tendido en el piso. Esa fue la primera vez que viste algo de humanidad en Pietro Maximoff.
...
El doctor le inyectó un calmante a Pietro que lo hizo dormir por el resto del viaje mientras él vendaba la herida de bala. Mientras veías al chico de pelo blanco dormido en el pequeño espacio detrás de dónde estaban sentados tú, Clint y el Capitán, no pudiste evitar pensar en lo afortunada que eras de tener una familia. Pepper te crió haciéndote entender desde muy pequeña que eras adoptada, pero siempre procurando que vieras lo importante que eres para ella y para Tony, la pieza que los une a ambos como familia, su hija, aun siendo adoptada o no.
Clint, que estaba sentado junto a ti, se dio cuenta de que mirabas hacia el peliblanco inconsciente con una mirada triste y lejana. Acercó su pulgar a tu mejilla para limpiar la lágrima que se resbalaba por ella infraganti, eso fue lo que te llevó de vuelta a la realidad.
– ¿Estás bien? –te preguntó Clint con preocupación en su semblante.
– ¿Wanda en serio está muerta? –preguntaste decaída.
– Clint suspiró con pesadez– no lo sé. Puede ser un... 50/50, ¿sabes?, pudo haberse cansado de esperar a Pietro y subir a uno de los transportes, o uno de los nuestros, Stark, Thor o Rhodey pudo haber regresado por ella y llevado al transbordador, no lo sabemos.
– Y si no es así, entonces está muerta y Pietro perdió a sus padres, a su hogar y a su hermana por culpa nuestra –dijiste con ánimos de derrota mientras más lágrimas resbalaban de tu mejilla.
– Oye –dijo acomodándose en el asiento para quedar frente a ti– Wanda vino aquí por su voluntad. Todos conocíamos el riesgo, sabíamos que había una posibilidad de que no todos volviéramos de esta misión, ella lo aceptó. Si algo le pasó, si es que algo le pasó, no es nuestra culpa, ni de ella, ni de nadie.
En serio intentabas convencerte a ti misma de eso, pero en cuanto llegaron al transbordador y no vieron ninguna señal de Wanda, el sentimiento de culpa, preocupación y ansiedad se instalaron en tu pecho por segunda vez.
No lograste sentirte mejor sino hasta que tu padre apareció por las puertas de la sala común de la nave, en dónde tu esperabas con prisa cualquier noticia que llegara, ya fuera del estado de Pietro, la ubicación de Wanda y los demás del equipo, o cualquier otra noticia que consideraran importante como para decírtela.
Saltaste a los brazos de Tony en cuanto lo viste aparecer por la puerta, estaba sano y salvo y eso fue lo que te dio algo de paz. Lloraste un poco sobre su hombro hasta que él te separó para limpiar tus lágrimas y decirte que te sentaras. El atardecer empezó a caer a lo lejos y temiste la llegada de la noche por primera vez en tu vida, tu padre no se separó de ti ni un segundo... hasta la llamada por el intercomunicador de la nave de Steve.
– 'Victory' –llamó Steve por tu nombre de súper héroe– si estás escuchando esto, preséntate a cubierta de inmediato –solo miraste a Tony por un instante antes de que los dos se levantaran de prisa y fueran prácticamente corriendo a cubierta. Cuando llegaste allí, sentiste que la ansiedad y la culpa disminuían dejando un sentimiento de alivio y gozo al ver a Wanda Maximoff, sana y salva, junto con la visión detrás de ella.
No sabías de dónde te salió el gesto, pero fuiste hasta Wanda y la abrazaste feliz de que estuviera bien.
– ¿Pietro...? –pero antes de que ella formulara la pregunta la interrumpiste.
– Él está bien –le contestaste– detuvo una bala, pero... –te detuviste cuando viste la cara de susto de Wanda– ¡pero estará bien, en serio!, solo fue un rozón.
– ¿Puedo verlo? –preguntó Wanda aun preocupada.
– Podemos preguntar cómo está –le contestaste– ven, te llevaré a la enfermería.
...
Pero el chico no despertó sino hasta el día siguiente por la madrugada, cuando ya faltaba poco para llegar a Estados Unidos. Vio a Wanda y casi no pudo creerlo. Wanda despertó de golpe cuando sintió que alguien movía la silla en la que se había quedado dormida esperando a que Pietro despertara. En cuanto abrió los ojos y lo vio despierto lo primero que hizo fue lanzarse a sus brazos.
Veías la conmovedora escena muy silenciosa desde la puerta de la enfermería, dónde sabías que no serías notada. Retrocediste y saliste por el pasillo, ese momento era solo de los hermanos Maximoff.
– ¿Ya estás mejor? –preguntó tu padre apareciendo al final del corredor de enfermería.
– Sí –respondiste con una pequeña sonrisa. Tu padre, Thor y Rhodey también estaban en la nave y a salvo, solo faltaba Bruce, pero sabías que Natasha lo encontraría tarde o temprano.
– ¿Ya estás contenta?, ¿sí? –preguntó Tony abrazándote otra vez para estar seguro.
– Sí –reafirmaste devolviéndole el abrazo, pero Tony los separó para mirarte a los ojos y decirte "seriamente"...
– ¡Qué bien qué estés de humor!, porque quiero hablarte de muchachos –dijo dándote su 'mirada seria'.
– No –respondiste tú inmediatamente mientras retrocedías.
– Sí –afirmó Tony mientras se acercaba a ti.
– ¡Tú y yo no hablaremos de muchachos, jamás!
– ¡Aún no se me olvida el comentario que hiciste hacia Maximoff! –exclamó apuntando hacia la enfermería.
– ¡Lo dije solo para molestar a Barton! –te defendiste indignada.
– ¡Aun así vamos a hablar de él! –exclamó Tony y puso su dedo frente a ti regañándote como solo un papá lo haría– ¡no quiero que te le acerques!
– ¿Qué? –dijiste confundida.
– Ni que él se acerque a ti. No lo apruebo –sentenció.
– ¿Sabes qué?, ¡ya es suficientemente incómodo hablar de esto con mamá, no pienso hablarlo contigo también! – dijiste y te fuiste de ahí dándole la espalda.
– ¡No me des la espalda, jovencita!, ¡vuelve aquí ahora mismo! –exclamaba Tony mientras iba detrás de ti...
.
.
.
Parte 2, siguiente.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top