Título: Supermercado.
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Hoy, toda tu familia se había puesto de acuerdo para salir, y obviamente tú también querías salir pero tu madre decidió darte una lista de compras para la casa.

Ahora te encontrabas metiendo al carrito del supermercado las últimas cosas por comprar.

-A ver... Azúcar, aceite, arroz, manzanas, lechuga,... Solo falta una cosa y listo.

Arrastraste el carrito hasta el pasillo de dulces y galletas. Empezaste a revisar los estantes y buscaste tus galletas favoritas. Las encontraste en el último estante hasta arriba, intentaste alcanzarlas, saltaste, te apoyaste, y te hubieras subido al estante de no ser por una señora mayor que te miraba raro del otro lado del mismo pasillo.

Bufaste frustrada y agarraste tu carrito lista para irte a pagar. Sentiste a alguien agarrándote el brazo y volteaste a ver. Un hombre castaño, con barba, de unos veintitantos años, alto, tenía en su mano un paquete de galletas, casualmente, tus favoritas.

-Disculpa pero te vi intentando alcanzar éstas galletas y decidí alcanzarlas por ti.

Te dio el paquete y tú lo tomaste sonrojada.

-Gra-gracias...

Susurraste sonrojada, a lo que él te sonrió.

Las pusiste en tu carrito y te despediste de él con la mano. Pagaste y te fuiste con tus bolsas en la mano. No traías auto pero no quedaba tan lejos, además de poder encontrar un taxi en cualquier esquina.

Caminaste un rato, era de noche y todo callado. Tenías la mirada baja, ibas pensando en ese hombre el cual se te había hecho guapo, sonreíste ante el recuerdo de su encuentro.

Doblaste una esquina y había poca luz, un auto color rojo convertible se estacionó a tu lado, dos hombres salieron de él posicionándose uno detrás y otro adelante tuyo.

-Pero que tenemos aquí... Te ves bien lindura.

-Si la vieras por detrás, está uff...

Te removiste incómoda. Tenías miedo y esos dos tipos de seguro estaban pensando mil y un formas de poder hacerte suya. Volteaste a ver a los lados buscando ayuda pero ¿quien estaría afuera a éstas horas de la noche?

-Por favor, dejenme ir...

Susurraste asustada, ellos solo rieron y empezaban a acercarse más a ti.

-Ella dijo que la dejen ir.

Volteaste a ver al dueño de esa voz, el mismo hombre del supermercado estaba parado ahí y firme.

-¿Así? ¿tú y cuántos más nos detendrán?

Los hombres se rieron. Tu seguías viéndolo asustada.

-Bien, tomaron su decisión.

De sus manos salieron garras de metal, bien afiladas y largas. Los tipos lo vieron nerviosos, tú solo te asustaste más.

-Alejáte.

Te ordenó, le hiciste caso sin dejar de ver sus garras.

Los tipos se armaron de valor e intentaron enfrentarse a él, pero les incrustó sus garras en sus pechos dejando salir mucha sangre. Gritaste al ver eso, tus bolsas cayeron al suelo y tapaste tus ojos con tus manos intentando no llorar.

El hombre había terminado con esos tipos y fue a tu lado escondiendo sus garras ahora cubiertas de sangre.

-Hey, tranquila...

Susurró intentando calmarte.

-¿M-me harás daño? ¿vas a matarme?

Lo viste a los ojos asustada. El sonrió triste.

-No puedo lastimarte, y mucho menos matarte.

Acarició tu mejilla, tu suspiraste aliviada.

-¿Que es eso?

Hiciste referencia a sus garras. El hizo una mueca que hizo que rieras un poco.

-Es una larga historia.

-Te invito a cenar y me la cuentas.

Sonreíste seguido de él, asintió y te ayudo con tus bolsas para caminar derecho a tu casa.

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¡Uno de Logan! ¡yei! 🎉🎊

Imagina dedicado a: adelaidajeonghan

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Las quiere muchísimo, su escritora 😘