Sinopsis: Vacaciones

Advertencia: Incesto 

Palabras: 2051

Capitulo dedicado a: TaniaCNCOwner

Camine con pereza por el pasillo del avión, iríamos de vacaciones a las Islas Caimán ya que mi tía Noemi nos había invitado a toda la familia a pasar unas lindas vacaciones de verano, y así poder reencontrarnos todos y ponernos al día. Me acomode junto a mi madre la cual ya se encontraba leyendo cómodamente, a nuestro lado se encontraba mi tía Noemi la cual miraba su celular, supongo hablando con el resto de nuestra familia la cual iría en un vuelo distinto. Un cuerpo fornido me obstaculizo la vista, al instante reconocí que era mi primo Zabdiel el cual se encontraba de espaldas acomodando una mochila en el maletero, al terminar se sentó junto a su madre y se giró percatándose de mi mirada, me dedico una dulce sonrisa a lo que yo se la devolví e inmediatamente baje la mirada a mis manos.

De pequeños Zabdiel y yo eramos muy unidos, tanto que llego a provocarme esas típicas mariposas en el estomago y fue mi primer flechazo, luego con el paso del tiempo y al cumplir los doce dejamos de vernos constantemente y finalmente eran nulas las veces que nos veíamos. La ultima vez que lo vi eramos unos chiquillos de dieciséis y casi no nos dirigimos la palabra, ahora era un hombre de casi veinte años y debo admitir que se había desarrollado bastante bien, tenia un buen cuerpo que se veía bastante ejercitado. La voz del piloto anunciando que abrocháramos nuestros cinturones y que ya despegaríamos me saco de mis pensamientos.

Finalmente aterrizamos y nos encontramos con el resto de la familia en el aeropuerto, nos dividimos en grupos de cuatro y cada uno abordo un taxi para así llegar al hotel en el que nos hospedaríamos toda la familia.

Al llegar al hotel los adultos fueron a registrarse en la recepción, los niños corrían y gritaban por todos lados y yo me limite a sonreír ante su felicidad. Camine un poco por el hotel admirándolo, no era muy grande pero se veía bastante lujoso y cuidado, ¿que esperaba? estaba en las Islas Caimán.

-No esta nada mal, ¿verdad?-No necesitaba girarme para saber de quien se trataba, su marcado acento boricua lo delataba.

-Me parece bastante bien de hecho-Me gire mirándolo, metió sus manos a los bolsillos de su short y me sonrió tiernamente.

-A ti todo te parece bastante bien desde siempre-Ríe y se acerca un poco mas-Hace mucho no te veía, has cambiado demasiado-Dijo recorriendo mi cuerpo con su mirada provocando que sintiera una corriente eléctrica por este.  

-Bah, tu no te quedas atrás-Le di unos golpecitos en  el brazo sacandole una sonrisa.

-¡Chicos! Vamos a las habitaciones a desempacar que dentro de una hora vamos a la playa-Dijo mi tía Noemi interrumpiendo nuestra platica.

Ambos nos encaminamos a los ascensores junto a mi madre y mi tía, todos bajamos en el mismo piso pero teníamos cinco habitaciones de distancia, mi madre y yo entramos a la habitación y soltamos un gran suspiro, el aire acondicionado estaba perfecto y la habitación impecable.

-Ay que apresurarnos que no tenemos mucho para desempacar y arreglarnos.

Una vez que terminamos de instalarnos en la habitación nos colocamos nuestros bañadores y la ropa encima. Nos encaminamos hacia la recepción para encontrarnos con nuestra familia. Una vez todos reunidos salimos y comenzamos a caminar, el hotel no estaba lejos de la playa así que la caminata no fue de tanta distancia.

Nos acomodamos en algunas sombrillas de ahí, me quite la ropa quedando en bikini, al girar la cabeza mire a Zabdiel el cual se estaba sacando la camisa, su abdomen estaba definido... ¡Todo él estaba definido! Al percatarse de mi mirada se giro hacia mi y sonrió guiñándome un ojo, instantáneamente mis mejillas se ruborizaron. Camine hacia el mar con algunas de mis primas menores siguiéndome, luego propusieron jugar voleibol y todos los primos nos pusimos a jugar

...

Al llegar a la habitación me di una ducha rápida y caí rendida en la cama, lo ultimo que escuche fue a mamá entrando a la ducha y después de eso todo se torno oscuro y caí en un sueño profundo.

Por la mañana mamá dejo un beso en mi cabeza y me informo que saldría a desayunar con el resto, en verdad me hubiera encantado acompañarlos pero mi cuerpo no respondía, estaba pegado a la cama como si esta fuera un imán y yo un pequeño centavo.

Mas tarde unos toques en la puerta me despertaron gruñí por lo bajo y me levante de mala gana para abrir, detrás de la puerta se encontraba Zabdiel recargado en el marco, llevaba una camisa blanca de tirantes pegada al cuerpo la cual provocaba que sus músculos se marcaran, trague saliva y por fin preste atención a su rostro.

-¿Estas bien? No nos has acompañado en casi todo el día y ya casi se pone el sol-Parpadeé confundida, ¿tanto había dormido? 

-Lo siento mucho-Sonreí de lado y rasque mi nuca-Supongo que anoche me agotaron los niños-Reí mirándolo.

-¿Entonces has estado durmiendo todo el día?

-Si, ¿Quieres entrar?

-No puedo, tu mamá me mando para decirte que nos acompañaras a cenar, si quieres te espero a que te arregles-Bufe y asentí para luego entre cerrar la puerta. Me acerque a la maleta y saque un vestido de vuelo corto, me lo coloque junto a una zapatillas y para finalizar me cepille el cabello, me acerque a la puerta y me percate de que hubo un movimiento rápido, al abrir Zabdiel tenia las manos dentro de sus bolsillos y movía el pie nerviosamente. Estoy segura de que me espió mientras me vestía.

...

Al día siguiente por la noche nuevamente todos habíamos salido a dar un pequeño paseo, pero comencé a tener una ligera migraña y decidí regresar al hotel antes de que empeorara. Zabdiel se había ofrecido a acompañarme y mi madre estuvo de acuerdo ya que no me encontraba muy bien y no quería que me sucediera nada de regreso.

-¿Te sientes un poco mejor después de tomar la aspirina?-Pregunto mientras cruzábamos las puertas del hotel.

-Si, un poco-Respondí ofreciéndole una ligera sonrisa.

-Gracias a Dios-Suspiro aliviado-Vamos, te acompaño a tu habitación

-No es necesario, puedes volver con los demás no deben de estar muy lejos

-Primero me aseguro de que llegues bien a tu habitación, vamos-Asentí rendida y nos encaminamos al ascensor- ¿Puedo entrar rápido al baño? Mi madre tiene la tarjeta de la habitación y me la he olvidado-Pregunto una vez que se abrieron las puertas del ascensor.

-Claro-Nos acercamos a la habitación y la abrí rápidamente permitiendo que Zabdiel entrara al baño, por otro lado yo me tire a la cama y cerré los ojos descansando un poco. El sueño comenzaba a apoderarse de mi cuando de pronto la cama se hundió a mi lado provocando que me sobresaltara, era Zabdiel recostado sobre su costado izquierdo mirando hacia mi.

Su mano acaricio mi mejilla tiernamente, luego se deslizo hacia mi mandíbula y comenzó a descender por mi cuello hasta mi pecho dejándola justo encima de mi corazón el cual latía con rapidez.

-¿Soy yo o alguien esta nerviosa?- Sonrió con malicia y su mano continuo descendiendo por mis pechos hasta mi abdomen y siguió su recorrido hasta la orilla de mi vestido el cual subió un poco dejando ver mis bragas.

Separe mis piernas dándole mas acceso, su dedo índice se deslizo por toda mi zona aun sobre la tela. Solté un jadeo como respuesta, su cuerpo se acerco un poco mas al mio dejando nuestros rostros a centímetros, su mirada se clavo en la mía y su rostro se acerco al mio rosando nuestros labios, entre abrí los míos ansiosamente esperando por su boca que tanto deseaba y así  hizo, sus labios atacaron los míos en un beso salvaje mordisqueando levemente mi labio pidiendo permiso para dar paso a su lengua la cual acepte con gusto.

Por otro lado su mano removió mi braga comenzando a trazar círculos en mi clítoris sacándome un jadeo de placer, se alejo para tomar una bocanada de aire mientras su mano aun trabajaba en mi botón de nervios, gemí removiendo mi cadera pidiendo por mas, necesitaba mas.

-Follame Zab, por favor-Rogué arrancándole una sonrisa egocéntrica

-¿Puedes repetirlo que no escuche?- Gruñí ante su petición y saque su mano de un empujón para luego subirme a horcajadas encima de él.

-No juegues conmigo primito- Saque su camisa admirando su tonificado abdomen, sin pensármelo demasiado pose mi mano sobre este y lo acaricie.

-Solo quería que repitieras lo mucho que deseas mi polla llenándote primita-Mordió su labio haciendo que me mojara mas de lo que ya estaba, me arrodille aun con mis piernas a sus costado y saque mi vestido sin cuidado alguno, desabroche mi sostén rápidamente  quedando completamente desnuda ante él a excepción de la braga, me senté sobre su bulto y me moví de adelante hacía atrás frotándonos sobre nuestra ropa interior.

Sus manos fueron hacia mi cadera ayudándome con los movimientos y así obteniendo mayor fricción y por supuesto mayor placer.-Joder, esta duro-Mordí mi labio al sentir su creciente erección aun dentro del bóxer

Rápidamente me coloco debajo de él arrancando mi braga y su bóxer en un acto desesperado por liberar su polla. Sus labios viajaron directo a uno de mis pezones el cual lamió, chupo y mordisqueo a su gusto.

-Joder, para tus juegos y follame hasta romper la maldita cama-Sonrió sobre mi pecho y subió a la altura de mi rostro.

-Como ordenes-Tomo su polla entre sus manos-¿Tienes condones?-Negué con la cabeza.

-Pero estoy tomando las pastillas-Al terminar la oración alineo su verga en mi entrada e hizo un brusco movimiento hacia adelante penetrándome sin pudor alguno- ¡Santa mierda!- Lloriquee de placer y arquee levemente la espalda sintiendo como se enterraba hasta el fondo en mi estrecho coño.

Sus caderas se impulsaban bruscamente sobre las mías provocando embistes bruscos, enrede mis piernas alrededor de su cadera sintiendo la penetración mucho mas profunda, su polla había encontrado mi punto dulce y yo me sentía en el jodido paraíso, pero como si me odiara salio de mi y me  giro rápidamente palmeando mi trasero. Nuevamente su polla se perdió entre mis pliegues llegando hasta el fondo nuevamente

-Eres una jodida Diosa-Gimió embistiendo con fuerza y rapidez provocando el estruendoso sonido de nuestras pieles al chocar, era el sonido mas excitante que había escuchado en mi vida

Una ola de calor invadió todo mi cuerpo dando paso a un nudo formándose en mi vientre, mis paredes se contrajeron al rededor de su polla dando la señal de que estaba cerca. Sus movimientos se volvieron un poco mas lentos, sujeto mi cadera con firmeza y comenzó a hacer movimientos circulares con su cadera, el nudo en mi vientre comenzaba a aflojarse mientras Zabdiel solo hacia movimientos delirantes. Incline mi cuerpo reposando mi pecho en la cama y aferrándome a las sabanas, a este punto ya era un lió de gemidos. Zabdiel salió de mi abruptamente dejándome completamente vacía y desconcertada, me dio media vuelta quedando frente a frente y antes de poder protestar se enterró nuevamente en mí arrancándome un fuerte gemido, sujeto mis piernas y las coloco sobre sus hombros, este hombre solo trataba de atravesar mi útero. 

-Voy a llegar- Gruño moviendo violentamente sus caderas, mis manos se aferraron a las sabanas y mi orgasmo llego violentamente en varios espasmos, instantes luego sentí su cálido semen llenándome y sus movimientos volverse mas lentos. Se tumbo a mi lado, ambos tratando de regular nuestra respiración.

-Eres un jodido Dios en la cama- Exclame acostándome de costado para observar mejor su rostro, el repitió mi acto y ambos quedamos cara a cara.

-Agradezco ese alago-Acarició mi mejilla y se acerco a mi rostro plantándome un tierno beso.

-Espere mucho por este momento-Admití

-También yo-Sonrió-Solo quería que llegaran estas esperadas vacaciones para poder follar el lindo coño de mi primita- Ambos estallamos en carcajadas y nos abrazamos unos minutos, luego nos vestimos y organizamos un poco la habitación. Después de una serie de besos Zabdiel se retiro a su habitación, todo era plan con maña ya que si llevaba encima la tarjeta de su habitación. Me recosté en la cama y suspire, sin duda alguna estas fueron las mejores vacaciones.

¡Epa! Bueno, espero les guste, si es así deja tu voto y un lindo comentario jaja. Me estoy esforzando por mejorar estos imaginas para ustedes uwu, así que disculpen la demora en la edición D:

¡Los quiero!