Rossewood 2
Hoy era lunes, lo que significaba que había reunión de personal y que estaba llegando tarde, de nuevo.
- Tarde, tarde, tarde - repetía mientras andaba a paso apresurado por los pasillos.
Estaba por llegar a la puerta cuando alguien pasa a mi lado golpeando mi hombro intencionalmente. Rechine los dientes al sentir el liquido caliente bañar mi blusa.
- ¿Yo cause eso? - fingió inocencia girándose a verme - Lo siento - me sonrió.
Me quede de pie observando al chico con la bandana en la cabeza, no podía creer hasta donde llegaba su maldad.
- Imbécil - murmure empujándolo para apartarlo de mi camino.
- Sera mejor que te quites esa blusa - susurro en mi oído mientras caminábamos.
- Eso quisieras - reí falsamente disimulando la piel de gallina que su mentolado aliento me causaba.
- Es lo que más deseo - lo vi morder su labio inferior y luego reír.
- Aléjate de mi - le respondí molesta mientras entraba a la sala de juntas.
Como ya lo habrán notado, Harry Styles seguía rondando por los pasillos de Rossewood.
No importaba que hiciera, nada parecía molestarle.
En este último mes había intentado de todo para ahuyentarlo pero el parecía no inmutarse. Había cambiado el azúcar que ponía en su café por sal y el simplemente se lo bebió de un solo trago, Cambie su ropa de deporte por un tutu y...¡Demonios! ¡Se veía fabuloso!
- Ahora necesitamos una voluntaria para ser la capitana de las chicas - el Director Styles paseo su mirada por el salón. - Harry se ofreció para ser el de los chicos desde hace un par de días - sonrió
Clave mi mirada en el chico de los rizos incontrolables, el también me miraba y me sonreía con arrogancia...como siempre.
- Yo - solté en medio del silencio, todo el mundo se giro a verme como si me acabara de salir un cuerno en la frente.
- Que sorpresa, Señorita Beckett - Dijo con una gran sonrisa. - Entonces hemos terminado - se puso de pie dando por terminada la reunión.
- ¿Para qué me ofrecí? - le susurre a la profesora a mi lado.
- Para la recaudación de fondos - hizo una pequeña mueca y siguió recogiendo sus cosas.
Me hundí en mi asiento, ¿Como podía ser tan idiota?
La recaudación de fondos se hacia todos los años y era un caos para los dos pobres capitanes. El director Styles decía que promovían el trabajo en equipo y la sana competencia. En realidad solo lograba hacer a los chicos odiarse entre si.
- No creí que ganar sería tan sencillo - Dijo Harry sentándose a mi lado. - Les comunicare a los chicos de ultimo año que prácticamente ya ganamos - sonrió.
- No estés tan seguro de eso, Styles - le respondí molesta - ¿Cual es la actividad de este año? - con mi dedo índice en su frente le di un empujo porque no dejaba de acercarse.
- Lavar autos - se encogió de hombros - Pan comido, dile a tus animadoras que no se ilusionen - guiño un ojo
- ¿Quieres apostar? - cruce los brazos y me puse de pie.
- Esto se pone interesante - me imito y se paro frente a mí. - Habla, Beckett - la sonrisa no abandonaba su rostro.
- Si mi equipo gana te iras de la escuela - asentí y le extendí la mano - Si yo pierdo, yo me iré, ¿Aceptas? - levante una ceja.
- Acepto - su sonrisa se hizo más grande y estrecho la mano que le ofrecía.
- Que gane el mejor - pase por su lado golpeando su hombro.
- La escuela no será la misma sin ti - dijo detrás de mi.
Rodee los ojos y salí al pasillo. Ahora tenía que encontrar la forma de ganar la recaudación.
Los días pasaron lentamente hasta que llego el tan esperado sábado. Toda la semana Harry se había hecho a la tarea de llamarme perdedora, soportar a ese hombre debería de ser un deporte olímpico.
- ¿Están listas? - recorrí con la mirada el grupo de chicas de ultimo año que me acompañaría. Ganar seria difícil.
La mayoría de ellas estaban aquí por obligación, las demás simplemente querían ver al entrenador Styles con la camiseta mojada.
- Mi trabajo depende de esto, niñas - dije en voz alta mientras iba dejando una esponja en la mano de todas. - Si quieren sus nuevos uniformes de animadoras y que yo conserve mi empleo será mejor que lo hagamos bien - aparte un mechón que caía por mi frente y recogí una manguera del suelo.
- ¿No podemos simplemente pedirle dinero a nuestros padres y ya? - respondió una chica al fondo.
- Eso no les dejara la satisfacción que te deja ganar, Emma - suspire sintiéndome derrotada incluso antes de comenzar.
- Miren cuantas bellezas tenemos aquí - silbo Harry a mis espaldas - Oh no te había visto, Beckett, retiro lo dicho - dijo con la misma sonrisa de siempre con las risas de su equipo de fondo
- Vete al diablo - rodee los ojos y hice una seña con la mano para que se reunieran en un circulo.
- Los shippeo - dijo una chica bajita a mi lado. - Shippeo Steckett - rio junto con un par de chicas mas.
- Tu shippeas todo lo que se mueva, Janice - le recrimino una rubia.
- Ni siquiera se dé que hablan - murmure y negué con la cabeza - Quiero que den lo mejor de ustedes, niñas - sonreí por primera vez en el día - Confió en ustedes - lleve mi mano al centro del circulo, gesto que imitaron. - ¡Vamos chicas! - todas aplaudimos y rompimos el circulo.
La primer hora todo había marchado de maravilla, los autos llegaban solos y mi equipo parecía divertirse.
- ¿Disfrutando tu ultimo día como parte del equipo Rossewood? - dijo el rizado a mi lado.
- Se que vamos a ganar - respondí sonriendo al ver llegar el siguiente auto al lugar de las chicas.
- No estés tan segura - señalo a su equipo - Tenemos estrategias - dio un par de pasos atrás y se quito la camiseta ágilmente.
Desvié la mirada a los chicos a unos metros de nosotros que al igual que su capitán se quitaban la camiseta. Estaban jugando sucio.
- ¿Creen que eso los ayudara a ganar? - Luche internamente porque la sonrisa permaneciera en mi rostro
- Cuento con eso - con el pulgar señalo un par de autos detenerse en el lugar de su equipo.
Gruñí en respuesta y camine deprisa a mi estación, no podían ganarnos solo por sus cuerpos atléticos.
- ¿Ya vieron a Robert? - susurro una de mis chicas.
Me interpuse entre ellas y el grupo de playboys a nuestro lado. No podían dejar de lavar autos por ver chicos.
- A trabajar - chasquee mis dedos
- No vamos a ganar si competimos con eso - señalo a los chicos sin camisa que ahora cantaban una canción de Jason Derulo.
Todas le dieron la razón a Janice con un suspiro de derrota y un asentimiento de cabeza.
- No nos vamos a dar por vencidas tan pronto, ¿Llevan puestos sus trajes de baño? - con ambas manos tome el borde de mi blusa y susurrando una maldición me la quite dejando la parte de arriba de mi bikini a la vista - Podemos jugar también - los silbidos de los chicos no se hicieron esperar.
El grupo de chicas frente a mi sonrieron y sin problema alguno se deshicieron de sus blusas.
- ¡Eso es jugar sucio! - grito Harry del otro lado del estacionamiento
Le sonreí fingiendo inocencia y cogí mi esponja, si quería ganar y librarme de Styles había que jugar sucio.
Mire el reloj en mi muñeca, había pasado una hora y todas estábamos exhaustas pero era seguro que ganaríamos. Sople un mechón de cabello que caía sobre mi rostro.
- Iré por un poco de agua, ya vuelvo - limpie con el dorso de mi mano el agua de mi frente
Trote hacia una mesa donde teníamos nuestras botellas de agua, cogí la mía dándole un largo trago.
- ¿Cuál es tu color favorito? - apareció sin aviso a mi lado provocando que diera un salto en mi lugar
- ¿Por qué? - lo mire con el ceño fruncido
- Solo responde - con una toalla seco su largo cabello
- Azul - respondí con desconfianza
- Umh - hizo una mueca con sus finos labios. - Entonces esto no te gustara - sonrió señalando con un gesto de cabeza hacia mi estación.
Con el ceño fruncido mire en la dirección que señalaba, fue como si todo pasara en cámara lenta.
Una de las chicas vaciaba una cubeta de agua sobre el auto en turno pero en lugar de agua era un liquido verde, pintura verde.
Todas las chicas, incluyéndome, guardaron silencio y miraban el desastre en el que se había convertido el auto blanco. Por su lado, Harry y su equipo reían y gritaban cosas que no recuerdo.
- ¿Que...que vamos a hacer? Tenemos que pagarlo - pregunto una de las porristas al borde del llanto - Yo no...no sabía que era pintura - suspiro.
- No te preocupes - susurre y frote su espalda como consuelo - Esperen aquí - camine airadamente en dirección a Harry quien festejaba la broma con un par de chicos
- Es un buen tono de verde - dijo entre risas.
Me detuve detrás de él y toque su hombro, se giro hacia mí con esa sonrisa burlona en el rostro. Levante la mano y la estrelle sonoramente en su mejilla.
En silencio me di media vuelta y regrese con mi equipo.
- Vayan por sus cosas, chicas - sacudí mis manos y suspire - Nos vamos - todas siguieron mis indicaciones y se fueron dejándome con el dueño del auto dañado.
Fue un sábado catastrófico, mas de la mitad del dinero que habíamos recaudado había terminado en manos del dueño del auto, no tenía trabajo gracias a la estúpida apuesta y ahora pasaba los días sola en mi departamento.
- Harry Styles siempre gana - le dije al gato que descansaba sobre mi vientre.
Hoy se cumplía una semana del día de la recaudación y yo seguía con mi trasero pegado al sofá.
- ¿Quien interrumpe mi sufrimiento? - le pregunte a Margarita cuando escuchamos el timbre sonar.
Me puse de pie y seguida de mi peluda amiga camine a la puerta. Al abrirla mis ojos no daban crédito a lo que veían.
- ¿Qué haces aquí? - me cruce de brazos.
- Tienes que volver - extendió hacia mí un ramo de flores. - Tenias razón, la escuela se cae a pedazos sin ti - dio un paso hacia mi acortando la distancia.
- Solo era la consejera - retrocedí, no lo quería cerca.
- Eras más que eso - volvió a dar un paso en mi dirección - Mi trabajo ya no es divertido si no tengo a una sabelotodo que molestar - rodeo mi cintura con su brazo cubierto de tatuajes evitando que retrocediera una vez más.
- ¿Cuántas veces tengo que decirte que te alejes? - le sostuve la mirada, estaba más que molesta.
Sus ojos verdes me miraban fijamente, el arrepentimiento y algo mas brillaban en ellos. Sacudí mi cabeza ahuyentando los pensamientos peligrosos de mi mente.
- Ya nadie le lleva cupcakes a Ada - susurro a centímetros de mi rostro - No hay nadie que rodee los ojos cada vez que me vea pasar, nadie que cambie mi azúcar por sal - Su voz bajo un poco mas hasta que casi no pude escucharlo - Si no regresas y pones todo en su lugar, voy a perder la cordura - suspiro y junto nuestras frentes.
Guardo silencio y cerro sus ojos dejándome admirar sus rizadas pestañas, por un momento pensé que se había dormido hasta que hablo de nuevo.
- Detesto dar clases, odio ser un profesor - susurro con sus ojos aun cerrados - Saber que podía verte y molestarte al día siguiente era lo único que me hacia levantarme de la cama - abrió sus ojos conectándolos con los míos. - Dime que volverás, por favor - suplico en voz baja.
Me tome mi tiempo, admire sus verdosos ojos unos segundos más y respondí.
- Esta bien - susurre - Lo hago por Ada porque a ti te sigo odiando - lentamente una sonrisa se coló en mis labios.
- Y yo a ti - despego nuestras frentes y miro fijamente mis labios - Nos vemos el lunes - carraspeo y se alejo completamente de mi.
- Desgraciadamente - humedecí mis labios nerviosa por su intensa mirada.
- Ni una palabra de esto a nadie - Asentí en respuesta mientras el se dirigía a la salida - Y una última cosa - se giro y me miro desde la puerta - Deberíamos de salir mañana...- sonrió con timidez, algo muy inusual en el - para ponerte al tanto de todo, claro - se corrigió rápidamente.
- A las ocho - mi sonrisa se ensancho por su tímida actitud.
- Pasare por ti - me señalo con su índice - Ponte algo lindo, Beckett - sonrió un poco más confiado.
- Siempre, Styles - le guiñe un ojo al entrenador.
Tendría que acostumbrarme a tener una dosis de Harry Styles diaria.
Holaaaa! Estuvo muy largo! Espero no haberlas aburrido.
Déjenme su amor en los comentarios y en sus votos!
Preguntaaaaaaa random!
A) ir a una alfombra roja con Liam
B) ir a un partido de futbol con Louis
Besos!!!!!!
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