Mamá
Era temprano, no mas de las 8:00 Am cuando mi sueño se vio interrumpido por unas pequeñas manitas que jugaban con mis mejillas como si de plastilina se tratara.
- Melanie - murmure tratando de despertar del todo. - Papi quiere seguir durmiendo. - la rodee con mis brazos y la abrace.
Mi pequeña niña se removió entre mis brazos tratando de liberarse.
- papi - dijo enfadada. - Tendo que id al kinder. - Melanie aun tenia problemas para hablar correctamente y se me hacia lo mas tierno del mundo.
Suspire tratando de ganar tiempo para procesar alguna mentira. Hoy en su Kinder se festejaba el día de las madres y Melanie quería asistir pero teníamos un problema. Su madre nos había dejado el mismo día que ella nació.
Desde que Melanie había comenzado a hablar preguntaba por su madre, siempre le di evasivas pero ella no dejaba el tema. ¿Como decirle a mi hija de 4 años que su madre nos dejo? Alice, la madre de mi bebé quiso abortarla desde que supo de su existencia. Yo me negué obviamente.
- ¿Mami reglesara de su viaje? - me miro con sus ojos verdes muy abiertos.
- No lose, princesa, no lose. - Me incorpore en la cama y sacudí mi cabello.
Cada vez que veía a Melanie a mi mente venían esos cuatro años en los que tuve que arreglármelas como padre soltero. Habían sido años difíciles pero valían la pena.
- ¿Quieres ir a comer un helado? - Sus ojos se iluminaron con el solo mencionar su palabra favorita.
Ambos nos quitamos nuestras pijamas y nos arreglamos para salir. Luego de unos minutos nos encontrábamos en la puerta de nuestra casa.
- Papi, no sabes peinar - Parece que solo para criticarme sabe hablar bien.
- Apenas voy empezando, cariño. - Le sonreí y tome su pequeña mano mientras caminábamos.
Mientras caminábamos Melanie no guardaba silencio ni un segundo, hablaba y hablaba.
- ¿Como es Mamá? - Me pregunto con una gran sonrisa.
Esta niña va a acabar conmigo, decidí darle una descripción algo breve de Alice.
- Tiene el cabello largo y de color marrón. - la pequeña asintió esperando que siguiera.
- ¿Como yo? - Dijo emocionada tocando su coleta.
- Si como tu, pero ella tiene unos grandes ojos de color azul. - Guarde silencio esperando a que Mel ya no preguntara.
- Ya quiedo que vuelva. - sonrió.
Mi corazón se rompía al saber que eso no pasaría.
Compre su helado en silencio, contestaba de vez en cuando las preguntas que mi hija hacia.
- Iremos a un parque a que comas tu helado. - le entregue su helado a Mel y ella solo asintió emocionada.
Mientras caminábamos Melanie llenaba el silencio hablándome de una película de princesas que había visto el día de ayer.
- Y la princesa dijo que si soñabas algo con todas tus fuerzas sucedería, así que pedí que Mami volviera. - dijo dando saltitos a mi lado.
- ¿Porque no vas a jugar un poco? - Tome asiento en una banca que me permitía ver toda el área de juegos.
- Shi - se limpio las manitas en su blusa y se alejo corriendo.
Baje la mirada, este día era demasiado difícil, Melanie nunca había hablado tanto sobre Alice. Creo que era hora de decirle la verdad. Un llanto muy conocido puso mis sentidos en acción. Levante la vista y pude ver a Mel en el suelo.
Me levante y corrí hacia ella, seguro había tropezado. Llegue a donde Melanie pero unas delicadas manos la ayudaron a ponerse de pie antes que yo.
- Tranquila, princesa. - Le susurro la voz de una chica. - Solo es un pequeño raspón - la desconocida beso la herida en la palma de mi hija calmándola por completo.
- Mami, sabia que vendrías- Dijo aun tratando de controlar el llanto.
La castaña miro a todos lados buscando a alguien mas pero solo se encontró conmigo. Le di una mirada llena de suplica que pareció entender.
- Las mamás siempre están cuando las necesitas. - Acaricio delicadamente el cabello de Mel.
- Ve a jugar, Melanie. - la niña asintió y se alejo esta vez con mas cuidado a los juegos.
Me sentía nervioso, ¿Era normal? No todos los días le pedías a una extraña fingir ser la madre de tu hija.
- Soy Harry. - Decidí romper el hielo así.
- ____ - Dijo desconfiada la extraña. - Estoy muy confundida, ¿Que acaba de pasar aquí? - cruzo los brazos sobre su pecho.
- Solo escucha y no salgas corriendo hasta que termine. - Suspire y le conté todo, desde el principio a la chica de ojos cafes frente a mi.
- ¿Quieres que sea la madre de tu hija por un día? - Dijo riendo a carcajadas. - ¿No es mas fácil pedirme una cita? - levanto una de sus cejas.
- Esto no es por mi, ___ - algo cosquilleaba en mi al decir su nombre. - Soy un padre desesperado por cumplir el mas grande deseo de su hija. - pase mis manos por mi largo cabello desesperado.
Ella tenia razón, era la locura mas grande del mundo pero todo valía la pena con tal de ver a Mel feliz.
- Solamente tienes que pasar el día con ella y por la tarde decirle que te vas de viaje otra vez. - Recurrí a mi ultimo recurso. Ojos de cachorro.
- Mami, Papi. - la voz de Melanie nos llamo. Ambos giramos a ver a la niña que nos saludaba desde los columpios.
- ¿Y bien? -Regrese mi atención a la chica.
- Lo haré. - Susurro mirando a Melanie a la distancia - ¿Solo por hoy, no? - Esta vez me miraba a mi.
- Solo por hoy. - afirme.
Las siguientes horas fueron asombrosas, Melanie y ____ tenían una química increíble. Nunca había visto a mi pequeña tan feliz pero no podía evitar sentirme culpable por esta mentira tan grande.
El sol se había ocultado ya y Mel dormía en mis brazos, su madre falsa nos miraba atentamente.
- Es muy impresionante que la criaras solo. - Susurro para no despertarla.
- No tenia otra opción. - sonreí acariciando la espalda de mi hija.
___ se puso de pie y sacudió sus jeans con la mano. Sabia lo que venia.
- Es hora se irme. - dijo la castaña.
- Lose, gracias- le sonreí agradecido.
Me sonrió una ultima vez y comenzó a alejarse.
- ___ - La llame y ella se detuvo a mirarme. - ¿Te gustaría salir algún día? - se formo una sonrisa en su rostro.
- Me encantaría. - me guiño un ojo y siguió su camino.
Una gran sonrisa abarco mi rostro al recordar ese día, mire el anillo de compromiso en la mano de mi prometida y sonreí aun mas. Habia dejado de ser la madre falsa hace mucho tiempo.
Terrible, lo odie pero quería subirles algo! Gracias por sus comentarios, en serio! Todas son un amor. Y por si las dudas, no soy un pedofilo chicas tranquilas!
Besos!
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